Mediocracia - Capítulo II


En este 2005 afloraron algunas de las fragilidades que todavía ponen a prueba nuestro sistema asentado sobre bases democráticas. Un proceso electoral adelantado, con funcionarios distraídos de sus responsabilidades por atender sus personales expectativas; un largo amago de desafuero enderezado contra uno de los aspirantes presidenciales; un pertinaz oleaje de cuestionamientos a la principal autoridad electoral; un esquema de precampañas y campañas innecesariamente largas y oprobiosamente costosas, son apenas algunos de los signos que nos alertan sobre algo crucial: no basta con tener elecciones limpias y con resultados que sólo se dirimen a través de la ley; hace falta trabajar más para tener una política que le cueste menos al ciudadano.

Editorial
(v.pág.4-A de El Informador del 31 de diciembre de 2005).


Chiste para recibir el nuevo año: "Van en un avión Roberto Madrazo, Felipe Calderón Hinojosa y Andrés Manuel López Obrador. El aparato cae a tierra, explota. ¿Quién se salvó?..... México, nuestro país". De acuerdo, ni para dónde hacerse.

Francisco Arvizu Hugues
(v.pág.14-A de El Informador del 31 de diciembre de 2005).


Al votante no lo mueven ni la determinación histórica, ni la rabia, ni el valor; ahí, sólo frente a la papeleta, actúa movido por el cálculo o por la indiferencia. O anula su voto -ya se tomó el trabajo de llegar hasta ahí- en un postrero y banal esfuerzo de rebeldía o lo entrega a quien cree capaz de mejorar o mantener, así sea en pequeña medida, su situación personal y la de su familia.

A los votantes los mueve apenas la mera necesidad de un "cambio" gradual, limitado pero que se refleje en su bolsillo o garantice la estabilidad de sus ingresos. No hay necesidad de heroísmo alguno al cruzar una papeleta y en esa soledad, la de la casilla, poco cuentan las convicciones políticas, menos todavía la membresía en una determinada organización. El votante está solo y tiene un poder en el que, por lo general, no cree demasiado así que puede darse el lujo hasta de una pequeña traición personal; "pensar" primero en él y los suyos y anteponer el interés personal a las convicciones políticas. Los electores, por lo general, no siguen a los héroes, a los líderes que el país necesita sino a los que como las estrellas del cine o la televisión, se venden mejor.

Así, los electores actúan más bien como "compradores" que ante una oferta determinada aquilatan las propiedades del producto decidiendo no tanto por el mejor sino por el que lo parece. Votar es, a fin de cuentas, una acción individual y como en las compras, la decisión se toma influenciados por el último y más memorable estímulo recibido. Persiste además y se profundiza en nuestro país la convicción generalizada de que votando no se hace historia sino que se cumple sólo con un trámite. La degradación de los políticos, de los partidos, de la política misma hace que sea éste un trámite enojoso y casi inútil: "Cualquiera que quede; da lo mismo" suele pensar la gente.

En sistemas como el nuestro, donde el dinero y los medios, principalmente la tv y la radio, se han apropiado de la democracia, terminan ganando las elecciones fantoches, falsos profetas que aseguran que "hoy, hoy" viene el cambio o candidatos que esconden sus pretenciones de restauración del antiguo régimen promoviendo el discurso del miedo. Ganan simplemente porque tienen más plata y tienen más plata porque se han vendido al mejor postor.

Más allá de los índices de aceptación que manitene Vicente Fox (el primer presidente blindado, aún de sus propias pendejadas, de la historia de México), del poder clientelar del PRI, de la ofensiva del EZLN contra el circo electoral, el más poderoso adversario que debe enfrentar López Obrador es el deterioro profundo de la política, la convicción generalizada -y afirmada por las insulsas campañas promovidas por el IFE- de que votar es un trámite inocuo. Hoy que los votos cuentan y se cuentan no existe en el electorado la convicción, la certeza de que cruzando una boleta pueda cambiarse la historia del país.

Epigmenio Ibarra
(v.pág.17 del periódico Público del 30 de diciembre de 2005).


Los políticos deben reconocer que se equivocaron: prestaron demasiada atención a unos cuantos grupos de interés cuando a los mexicanos en el exterior simplemente no les interesa votar en México.

Sergio Sarmiento
(v.periódico a.m. del 29 de diciembre de 2005).


El año 2006 será año de Hidalgo, esperemos que los políticos nos dejen algo. Las elecciones presidenciales y la sucesión acapararán la atención de los ciudadanos. Todo indica que por primera ocasión tendremos tres candidatos con posibilidades de ganar. El candidato del partido del presidente, el candidato del partido más fuerte y el candidato más popular son tres candidatos distintos. La mala noticia para los mexicanos es que de los tres no se hace uno. La buena noticia es que para el país importa poco quién es el presidente. Lo que debemos tratar los ciudadanos, dentro de nuestros ámbitos, es que cada vez dependamos menos de los gobiernos y los partidos y más de nosotros mismos.

Víctor Manuel González Romero, profesor investigador y ex rector general, U. de G.
(v.pág.4-A de El Informador del 28 de diciembre de 2005).


El presidente de la Sección Instructora de la Cámara de Diputados, Horacio Duarte Olivares, dijo que ante el desgaste por los constantes escándalos, fraudes y anhelo del poder, las candidaturas independientes podrían convertirse en una posibilidad que haga recuperar la confianza de la población.

Según está constatado por encuestas y trabajos de investigación de centros especializados, "la oferta de candidaturas es muy pobre, al igual que las propuestas de gobierno". Así entonces, casi adelanta un alto abstencionismo para el 2 de julio de 2006.

Duarte dijo que su partido, de la Revolución Democrática, apoya las candidaturas independientes, ya que se "ensancharía la participación democrática en México", y con ello los ciudadanos se verán más involucrados en los procesos políticos, "ésa sería la ganancia para el país".

Para la nación significaría la posibilidad de que los partidos "se pongan las pilas, ya que tienen el monopolio de la participación ciudadana y hacen y deshacen sin considerar a la población".

Afirmó que el primer impacto positivo recaerá en los partidos políticos, porque deberán ser más cuidadosos en la elección de sus candidatos, pulcros en el manejo de sus asuntos internos y en el uso de los recursos públicos.

Precisó que para el registro de una candidatura independiente se deben reformar artículos al Código Federal de Instituciones y Procedimientos Electorales a fin de dotar al Instituto Federal Electoral de instrumentos para que éstas sean viables y establecer requisitos legales para su registro para especificar a qué tendrían derecho los candidatos, financiamiento o acceso a medios.

(V.pág.2-A de El Informador del 27 de diciembre de 2005).


En el lapso que transcurrirá desde que se parta la rosca de Reyes hasta el registro de candidatos para las elecciones federales y el arranque de las campañas propiamente dichas -echándole, ahora sí, los kilos después del calentamiento que fueron las precampañas, en las que se tiraron unos cuantos cientos de millones de pesos (al fin que no hay mejores cosas en qué gastarlos) a la basura-, podrá platicarse con las autoridades municipales, para establecer, si se deciden, las reglas del juego...

Se trataría, para decirlo sin más preámbulos, de abandonar la práctica arcaica, digna de cavernícolas, de embadurnar de propaganda política todos los espacios visibles.

Es posible que con ese sistema los partidos políticos consigan gastarse hasta el último centavo de los muchos millones de pesos que, sin el menor desparpajo, los organismos electorales ponen en sus manos... La intención de esa "inversión" es, dicen, la promoción del voto. Una democracia sin votantes, más que una grosera paradoja, es una farsa; es una violenta caricatura. Se pretende, además, facilitar la difusión de conceptos, mensajes y principios de doctrina. Sin embargo, la desgraciada realidad es que los "slogan" de campañas se circunscriben a ser frases que pretenden ser intencionadas, pero que, analizadas con rigor, o se limitan a ser bobas o saltan hasta el extremo de la grandilocuencia. En uno y otro caso, tienen un común denominador: que son más insustanciales que un cacahuate vano.

En espectaculares, engomados, carteles, pendones y "tendederos" -por no incluir en ese rubro camisetas, llaveros, cachuchas, mandiles y bolsas para el mandado que se reparten de manera prolija entre los "acarreados" de todos colores y sabores-, se repite hasta la saciedad la misma fórmula: la máscara (que no la vera efigie) del "suspirante", paciente, artificiosamente conseguida por un fotógrafo profesional y cuidadosamente seleccionada por un equipo de diseñadores de imagen, con una expresión que se emperra en parecer amable, que intenta proyectar la imagen de un personaje franco, campechano, honesto y bondadoso, acompañada de una frase que trata de ser "pegadora".

Tales rostros y tales frases se reproducen "ad náuseam". Ni publicistas ni candidatos miden los efectos secundarios -nocivos, contraproducentes- de las sobredosis de propaganda que endilgan al ciudadano. Los primeros cobran un porcentaje por lo que gastan en publicidad; no por los resultados que sus campañas puedan alcanzar. Los segundos, en plena orgía narcisista, son incapaces de entender que llega un momento en que los electores los vomitan. Campañas moderadas, respetuosas de los espacios, de la ciudad y, sobre todo, de la inteligencia de los potenciales electores, serían, evidentemente, menos costosas... y, probablemente, más eficaces.

Jaime García Elías, columnista y conductor radiofónico
(v.pág.5-A de El Informador del 27 de diciembre de 2005).


Como no hay reelección legislativa en nuestro país, a los legisladores les tiene sin cuidado lo que piensen sus electores, o si éstos respaldan alguna política pública promovida por el presidente. Los legisladores hacen lo que les viene en gana: se suben salarios desproporcionados, se protegen entre sí e intercambian la impunidad de sus partidos sin por ello pagar ningún costo, en parte porque su carrera política depende de sus dirigencias partidarias, no de los electores (que casi no pintamos).

José Antonio Crespo, profesor e investigador del Centro de Investigación y Docencia Económica
(v.pág.5-A del periódico El Informador del 27 de diciembre de 2005).


El gran reto para los partidos políticos y sus candidatos será el de mantener una contienda pre-electoral de suficiente altura como para que ello se refleje en la activa participación de los ciudadanos el próximo 2 de julio en las urnas.

Un gran riesgo de este año es que la vulgarización del mensaje político al no estar fundamentado en propuestas realizables sino en agresiones personales, denuestos ideológicos o simplificaciones críticas, acabe hartando al electorado y se concrete una actuación frente a las urnas donde impere la apatía, el cinismo o el hartazgo con el correspondiente incremento del abstencionismo.

Cuando el debate entre candidatos y entre partidos se basa más en elementos espectaculares y contundentes contra el adversario y no en propuestas de gobierno inteligentes y de posible consecución, el pueblo se divierte un rato, caricaturiza con gran sentido del humor el pleito callejero, pero asume una posición cínica o desobligada respecto de su derecho y deber de acudir a votar.

Juan de la Borbolla R., catedrático universitario
(v.pág.4-A de El Informador del 26 de diciembre de 2005).


Una recomendación que la semana pasada, en vísperas de la Navidad, hizo el cardenal arzobispo de Guadalajara, Juan Sandoval Iñiguez...

No por consabida menos sabia, la recomendación viene a la medida, ante la náusea y el desencanto de los ciudadanos: la náusea por el irracional dispendio de recursos económicos que se hace en precampañas y campañas, y por la convicción de que en ese insustancial croar de ranas -"ruidos sin sustancia", los definía el fabulista- el sistema dilapida dinero que podría destinar a las auténticas necesidades de los más desvalidos. Eso, por una parte. Por la otra, se insulta al pueblo por la tónica de todas ellas: la estulticia.

De ahí que parezca adecuado el llamado de Su Eminencia a los políticos: cuando son candidatos, para que detecten los reclamos sociales: servicios (agua, drenaje, aseo, vigilancia policiaca, áreas de recreación, escuelas suficientes y adecuadas, transporte público...), honesta administración de las finanzas públicas, generación de condiciones adecuadas para que quienes pueden hacerlo generen fuentes de trabajo, etc.; y luego, una vez que el voto ciudadano designa gobernantes, honrar el compromiso de intentar, al menos, alcanzar las metas trazadas.

Jaime García Elías, columnista y conductor radiofónico
(v.pág.5-A de El Informador del 26 de diciembre de 2005).


Muy caro fingir la democracia. Con poco optimismo vemos el desempeño de los aspirantes a políticos, sobre todo por su afán de fijarse más en lograr los votos el día de las elecciones, que en preparar planes y programas fundamentados en auténticas ideologías. Se trata de ganar con ideas sustentables no con estrategias de vil mercadotecnia, que es exactamente en lo que hemos caído.

Guillermo Dellamary
(v.pág.8-A del periódico El Informador del 25 de diciembre de 2005).


Hace dos años que el Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo dio a conocer el resultado de estudios cruzados sobre el desarrollo de la democracia en América Latina. Una de sus conclusiones fundamentales fue que las autoridades públicas de la región han perdido su capacidad para conducir los procesos políticos y económicos e incluso para mantener su jurisdicción sobre el territorio. Se acuñó así la expresión "estado ausente", para significar la cesión de prerrogativas constitucionales en favor de poderes fácticos, tanto internos como transnacionales.

Concluimos que, como resultado de un deterioro creciente de las potestades republicanas, la sociedad no está representada en el poder, pero el poder tampoco está encarnado en el estado. Advertimos que la exclusión social de más de la mitad de la población acrecienta las posibilidades del control electoral, a través de la influencia del dinero en la política y del efecto avasallador de los medios electrónicos que reducen al ciudadano a la condición de consumidor de baratijas y subordinan a los actores políticos formales.

El informe asienta que en los países latinoamericanos se ha vuelto evidente la supeditación de los poderes institucionales a influencias externas al estado y entre éstas menciona las que provienen de "la preeminencia de grupos de interés económico y de las limitaciones establecidas por el comportamiento de los mercados y de las decisiones financieras internacionales".

En segundo término, señala el avance del crimen organizado y "la amenaza radical del narcotráfico a la institucionalidad y a la seguridad de la región". Subraya, finalmente, "el predominio de los medios de comunicación sobre la definición de las agendas públicas y la predisposición de la opinión pública a favor o en contra de las iniciativas gubernamentales, así como su posibilidad de erosionar la imagen de figuras públicas mediante la manipulación de las denuncias".

Porfirio Muñoz Ledo
(v.pág.4-A del periódico El Informador del 24 de diciembre de 2005).


Puede López Obrador decir que no gobernará rodeado de corruptos, pero nadie le pregunta qué sucedió con los videoescándalos, con su secretario de finanzas, Gustavo Ponce Meléndez, con su operador René Bejarano o con su delegado Carlos Imaz; en el PAN las denuncias, fundadas o no, sobre los hermanos Bribiesca no han disminuido la popularidad presidencial. Como en muchos otros países de la región, pareciera que el clientelismo, la ideología o la búsqueda de la eficiencia, siguen estando por encima de la transparencia y el rechazo a la corrupción. Y todos nuestros políticos parecen ver, en ese sentido, la paja en el ojo ajeno pero no la viga en el propio.

Jorge Fernández Menéndez
(México Confidencial, 23 de diciembre de 2005).


No me preocupa que Felipe González, el subsecretario de Gobierno de la Secretaría de Gobernación, tenga un arma, especialmente si cuenta con el permiso correspondiente de la Secretaría de la Defensa Nacional. La portación de la pistola es legal en ese caso. Lo inquietante es ver que la primera reacción de González cuando se divulgó la fotografía en que aparece con su arma al cinto haya sido acusar de mentirosos a los medios y argumentar que la imagen era producto de un fotomontaje. Nuestros políticos están demasiado acostumbrados a culpar a los medios y a los complots de todos sus problemas. Bueno sería que empezáramos a tener algunos que asumieran con valor las consecuencias de sus actos.

Sergio Sarmiento
(v.periódico a.m. del 22 de diciembre de 2005).


Los mayores conflictos viales, en Guadalajara y anexas, con su anárquico modelo de crecimiento y con las autoridades miopes (incapaces de ver más allá de sus narices) que históricamente ha padecido, no se resuelven: se recorren unos metros.

Cada automóvil que se incorpora a la circulación en Guadalajara (y se estima que son mil diarios) acorta el plazo para que en la ciudad ocurra, fatalmente, un colapso vial masivo -poco habrá de vivir quien no viva para verlo-... y una cruz en el nefasto historial de cada uno de los gobernantes (tan ineptos como costosos) que ha padecido.

Jaime García Elías, columnista y conductor radiofónico
(v.pág.5-A de El Informador del 21 de diciembre de 2005).


En nuestro Estado, la "declaracionitis" ha sido particularmente variada, por el número desquiciado de suspirantes, aunque no necesariamente rica o interesante. La carrera por alcanzar un puesto de elección popular, lo sabemos, tiene como meta lograr un "hueso" para ser diputado local, diputado federal o hasta gobernador. Y muchos son los suspirantes. Por lo mismo, se escucha y se lee de todo, como aburrida continuación de lo que ya han dicho otros, en otras ocasiones, con otras palabras, para conseguir lo mismo. Sin novedad.

David "Negro" Guerrero
(v.pág.11-B del periódico El Informador del 21 de diciembre de 2005).


La voz suena en los comerciales de radio: "gracias por tu confianza". Es un candidato en campaña, que hasta hace un par de semanas era un alcalde en campaña. Sí, el mismo que incumplió su promesa de gobernar la ciudad durante tres años, pero que siempre jura que él no miente. El mismo que junto con otro alcalde en campaña nos prometió la creación de un Instituto Metropolitano de Planeación y luego arrumbaron el proyecto en el cuarto de los tiliches. El mismo que arrancó, con una enorme polémica de por medio, una magna obra vial en la avenida Lázaro Cárdenas que ahora no es más que un terrenal sin futuro cierto. ¿Confianza? Ganar elecciones no hace confiable a una persona.

Los políticos ya nos demostraron que lo que viene el año próximo será una guerra de lodo, lo que se llaman "campañas negras". Habrá que blindar el estómago para aguantarlos los largos meses en que estarán a duro y dale con sus frases huecas, sus ataques cruzados y sus convocatorias a la nada. Es el circo de la política, ésa a la que le damos miles de millones para que unos cuantos se entretengan a costa nuestra. Los hemos dejado que lleguen hasta ahí, pero también podríamos detenerlos si nos decidimos. Las urnas serán una buena oportunidad.

Víctor E.Wario Romo
(v.pág.4-A del periódico El Informador del 19 de diciembre de 2005).


El hablar de política y de los políticos en México ya me da urticaria, pues es tanta la corrupción, la desvergüenza y la falta de moral en ellos que al querer escribir de qué manera brincan de un puesto a otro, de cómo son cambia chaquetas, pues siendo del PAN, sin vergüenza alguna se cambian al PRD, o siendo del PRI buscan acomodo en el Verde Ecologista o ver cómo se quedan, sin rubor alguno, de lo que no es suyo, han convertido este sexenio en una cloaca, lo cual me produce náuseas y quiero volver el estómago.

Adolfo Martínez López
(v.pág.5-A del periódico El Informador del 19 de diciembre de 2005).


Está visto que pristianos y panistos son casi lo mismo, ¿pero acaso por eso debemos ceder ante los pejelagartianos? Estamos fregados.

Toñimáximus
(v.pág.2 del periódico Público del 18 de diciembre de 2005).


Es responsabilidad de cada partido hacer que sus candidatos sean lo suficientemente interesantes para que a un medio le den ganas de acercarse a él. Si no, qué cómodo. Los partidos, además de que están haciendo el negocio del siglo, no tienen ninguna necesidad ni ninguna urgencia de moverse en términos de discurso, de originalidad ni de nada.

Ahora resulta que toda la prensa va a estar contabilizada por segundos y por caracteres porque si no divide con exactitud sus tiempos, sus movimientos y sus espacios, va a estar atentando contra la democracia.

¿No es ponerle demasiada responsabilidad a los medios de comunicación?

¿No es jugar demasiado con el supuesto poder de los medios cuando hay candidatos, como López Obrador, que están dándole lecciones de comunicación a los expertos en comunicación?

Y luego está este asunto de los partidos pequeños que media humanidad sabe que no van a ganar y que nomás hacen alianzas para quedarse con cierta lana. ¿No es un estorbo perder el tiempo con ellos para algo más que denunciar su desfachatez?

Alvaro Cueva
(v.pág.17 del periódico Público del 18 de diciembre de 2005).


Si los políticos actuales son muy corruptos, están desgastados, predomina su interés personal sobre el social, son así porque muchos de los ciudadanos hemos hecho muy mal nuestra función política, y si nosotros no los revocamos, no nos presentamos como alternativa a ellos, no somos capaces de controlarlos y criticarlos, es que no somos educados. No es porque esos políticos hayan elegido sus propias responsabilidades y limitaciones, sino simplemente porque nosotros no hemos sabido ejercer nuestra función de políticos.

Rafael Gómez Farías
(v.pág.5-A del periódico El Informador del 17 de diciembre de 2005).


Así estuvo el final del periodo ordinario de sesiones. Concluido en medio de la borrasca sucesoria. Aguacero con vientos fuertes. Como comenzó, hace casi tres años. Entonces se configuraban las fuerzas que hoy están encarreradas ya por la sucesión presidencial.

Los temas entonces se apiñaban en el umbral del congreso. Y eran literalmente los mismos que habían quedado pendientes hacía 3 años, hacía 6... hacía 10, cuando en enero de 1995 -empujados por la explosividad de la aparición armada del Ejército Zapatista de Liberación Nacional- toda la clase política representada en los partidos y en el congreso mismo, se ayuntaban en Los Pinos y amalgamaban la primera propuesta de reforma del estado.

Ayer mismo, viernes 16, en San Lázaro barbotaron voces que insisten en que aquellas reformas de gran calibre han sido históricamente relegadas, supeditadas a los vaivenes de la lucha partidista.

Una lucha que no ha superado, evidentemente, la historia inmediata. La perspectiva del corto plazo.

Verbigracia: Cada que se acercan las elecciones, de pronto algunos hablan de que ahí están, que se necesitan.

Y, una y otra vez, refieren que las reformas constitucionales que cambien el modo de andar de la república deben ser asumidas por todos.

Vicente Bello en su columna "Tren Parlamentario"
(v.pág.7-A del periódico El Informador del 17 de diciembre de 2005).


A la salida del estadio se hizo una tremenda apretura. Un hombre que avanzaba penosamente entre la multitud sintió de pronto que el tipo que iba atrás de él empezaba a sobarle la espalda con gran fuerza. "¿Qué hace usted?" -le pregunta con enojo."Discúlpeme, señor -se turba el otro-. Soy masajista; me distraje, y quizá la fuerza de la costumbre me hizo empezar a darle masaje". "Esa explicación no es aceptable -replica el hombre-. Yo soy político ¿y a poco me voy follando al de adelante?"...

Armando Fuentes Aguirre "Catón"
(v.periódico a.m. del 15 de diciembre de 2005).


La próxima semana concluyen los trabajos ordinarios del presente período de sesiones de la 59 Legislatura de la Cámara de Diputados, y como el próximo año será electoral, no cabe esperar ya grandes cosas. Es pues tiempo de balances. Se podrán decir muchas cosas para intentar maquillar el pobre desempeño de este órgano, pero la realidad es que esta legislatura, teniendo todo para constituirse en el instrumento decisivo y legítimo de la transición democrática después de la alternancia del 2000, prefirió enfrascarse en disputas partidistas inútiles y mezquinas en lugar de privilegiar en todo momento los intereses de la nación. Por ello, la 59 Legislatura (junto con la 58) será recordada por su falta de compromiso con las grandes causas del país y su falta de visión de futuro.

César Cansino
(v.pág.4-A del periódico El Informador del 14 de diciembre de 2005).


De los artículos y colaboraciones que hemos podido rescatar en medios impresos (¿Por qué no se habla de esto en la radio y la televisión? ¿Alguien ha oído o visto algo? ¿Por qué López Dóriga nos quiere dar atole con el dedo?) destacamos los realizados por el senador Javier Corral y el periodista Ricardo Alemán. El primero alertó ayer mismo sobre "las televisoras: el nuevo poder contemporáneo de la nación", para anotar líneas adelante que "el poder de Televisa se está convirtiendo, si no es que ya lo es, en un poder ilimitado, inmoral" (El Universal, 13-12-05); por su parte, y en el mismo periódico, Ricardo Alemán hacía notar que este estira y afloja en torno a la torpe y traidora iniciativa lanzada por los inquilinos del Congreso de la Unión "deja claro que la naciente democracia mexicana está fuertemente acotada por dos poderes fácticos que han trastocado los poderes constitucionales del estado mexicano: 'telecracia' y 'partidocracia'". Alemán hace una reflexión que duele: en este escenario, en donde la democracia es secuestrada, a la "opinión pública", o sea los ciudadanos, y a los poderes formales les han arrebatado "la facultad de defender los activos del estado, como es el espacio radioeléctrico".

David "Negro" Guerrero
(v.pág.19-B del periódico El Informador del 14 de diciembre de 2005).


Nuestras autoridades [en Jalisco], en vez de programar la obra pública a lo largo de los tres o seis años de cada administración, la realizan durante el último o los últimos dos años, con fines evidentemente electoreros, lo único que hacen es multiplicar los problemas de tráfico, ya de por sí intolerables, con lo cual la gente llega a los límites de la desesperación.

Editorial
(v.pág.4-A del periódico El Informador del 13 de diciembre de 2005).


Una visión egoísta del poder no permite el progreso, y eso es lo que ha impedido que México prospere. A pesar de la riqueza de nuestros recursos. Indudablemente, que si queremos cambiar el rumbo de nuestro país, tenemos que cambiar el perfil de la casta dirigente.

Por supuesto que no convienen los políticos que aspiran a empresarios y a enriquecerse, ni los ricos a convertirse en políticos.

Parece prudente buscar a los hombres virtuosos, nobles; a líderes con una visión humana y altruista. Que estén decididos a velar por los intereses de los demás y no por los suyos. Pero parece que hay muy pocos, y si existen no aspiran a gobernar y tal vez ni se los permitan. Pero sí sabemos, que son las personas más idóneas y adecuadas para realizar los proyectos que nos benefician a todos.

Guillermo Dellamary, filósofo y psicólogo
(v.pág.4-A del periódico El Informador del 13 de diciembre de 2005).


Pensamos que este tipo de alianzas, como la del Partido Verde y el PRI, sólo benefician al aliado que se maneja con el concepto de "empresa política", como es el caso de este Verde que vive al amparo del presupuesto del IFE y, sin arriesgar nada, ni hacer el ridículo con los votos que pudo haber obtenido Garza como candidato a la Presidencia.

Sólo les interesa mantener su registro y lograr algunos escaños plurinominales, ésos que se logran sin mayor esfuerzo y sin desgastarse en campañas, a cambio de unas migajas de votos. Una empresa política que, sin hacer grandes inversiones y reduciendo las pérdidas al mínimo, les quedan jugosas utilidades para repartirse entre sus directivos, es decir, que todo queda en familia.

Que el PRD se haya aliado con el PT es más natural. En realidad es un primo hermano y de la misma familia.

El PRD propone, cada vez más repetida y claramente, una reversión, donde la economía del estado sea la que dirija el operativo político, centralizando más el poder en manos de un ejecutivo todopoderoso, como hemos visto -aterrados- que AMLO se lanza ya en contra del director del Banco de México que propuso que los candidatos deberían exponer su plataforma económica -el cómo, dónde y cuándo-, y el Peje, populista como lo es y demagógico, se lanza a la yugular y en contra de la independencia del banco central y propone, desde ahora, que su director sea despedido. Si esto es en campaña, ¿cómo será su dictadura en el poder?

Entre más cacarean sus alianzas, más claro resulta que los aliados esconden que se trata de una manera de sobrevivir al amparo de un hueso que es parte del juego de la democracia, mientras sus dirigentes salen oriundos por la renovación de sus presupuestos -de nuestros impuestos-, renovando sus esfuerzos y las condiciones mínimas que les exige la ley para seguir a la sombra de una vida empresarial política muy rendidora, por lo pronto, para el próximo sexenio.

Martín Casillas de Alba
(v.pág.5-A del periódico El Informador del 13 de diciembre de 2005).


Los políticos de todos los signos suelen disfrazarse de muchas cosas (un atuendo según la ocasión) y hasta hacernos creer, al menos por un tiempo, que son lo que parecen. Por fortuna, también sucede que llega alguien y hace su parte para que vaya cayendo el disfraz. Hasta que termina la simulación.

Decía Andrés Manuel López Obrador, cuando gobernaba la capital, que no era necesario crear "más burocracia" para vigilar cómo y en qué se gasta los recursos públicos la autoridad. Bastaba -según su dicho- con "contralores ciudadanos" que no cobraran salario, "gente dispuesta a contribuir". Después se publicó que al menos 4 de 19 integrantes de la mentada "contraloría ciudadana" sí cobraban un sueldo en la Tesorería capitalina. Como no pudo evitar la creación de un Consejo de Transparencia, entonces el "Peje" -con la ayuda de su incondicional Bejarano, cuando mandaba en la Asamblea Legislativa- lo creó plagado de ¡burócratas! y con sólo 3 consejeros ciudadanos. Otra vez: no quiso ser transparente, sino sólo parecerlo.

Pero los jaliscienses tenemos también nuestro gobernante de disfraz, que se dice transparente y "cercano a la gente", pero que en los actos una y otra vez marca su distancia, asegurándose de que le escuchemos todos: aquí sólo hay un mandamás y ése soy yo. El flamante Instituto de Transparencia e Información Pública va dejando atrás su bautizo de escándalos y se ha metido de lleno en la aplicación de la ley que le dio vida, nada menos que enderezando un proceso de sanción -que ha llegado hasta la denuncia penal- en contra del titular del poder ejecutivo.

Es un hecho inusitado (lamentablemente) que un órgano ciudadano de control haga su chamba y exija al gobernante que acate la ley. Pero no menos inusitada es la reacción: el gobernante ha dicho que la ley está "mal elaborada" y por eso la combate en los tribunales, para justificar su desacato.

Pintos o colorados, amarillos o azules, algunos creen que les viene bien el disfraz de la transparencia, cuando en realidad son opacos y -como alguien los bautizó- "políticos chicharroneros", de los que dicen que aquí nomás los suyos truenan.

Víctor E.Wario Romo
(v.pág.4-A del periódico El Informador del 12 de diciembre de 2005).


¿Cómo explicarse que "inviertan" en publicidad (rótulos espectaculares en la vía pública, anuncios por televisión durante las transmisiones de eventos que alcanzan cifras récord de audiencia), aún como precandidatos, cantidades que superan con mucho las que aspiran a ganar cuando lleguen -en la remota hipótesis de que lleguen- a los cargos públicos para los que se promueven?

¿Quién está detrás de esas campañas?... ¿Qué propósitos inconfesables mueven a los "mecenas" que aportan su dinero a favor de equis o zeta candidato?... ¿Qué esperan conseguir a cambio de dichos apoyos, en la hipótesis -ilusoria en algunos casos- de que el voto popular convierta en gobernantes a esos aspirantes?...

Hay la perspectiva de que las próximas elecciones se signifiquen por el abstencionismo. Esa posibilidad se nutre, por una parte, del desencanto que el ciudadano común saca en limpio al cotejar la realidad en los rubros que más directamente lo tocan -seguridad, empleo, educación, salud, vivienda, servicios públicos...- con las expectativas que el verbo de los candidatos alimentó en campañas anteriores; por otra, se apoya en los antecedentes de algunos candidatos o precandidatos que ya desempeñaron puestos de elección popular, que dejaron trunco el ejercicio de los mismos, que dejaron incumplidos muchos compromisos... y que dejaron constancia de que su principal preocupación en el desempeño de esos cargos fue su promoción personal hacia puestos que les significan más reconocimiento, pero para los que no han demostrado aptitudes.

El ciudadano común ya alcanza a intuir que, en toda esta farsa, cumple un papel muy triste: el del tonto que, con sus votos, legitima el resultado de la misma.

Jaime García Elías, columnista y conductor radiofónico
(v.pág.5-A de El Informador del 12 de diciembre de 2005).


Diputados federales de los partidos Revolucionario Institucional y Acción Nacional calificaron como una "carta de buenos deseos", sin sustancia ni temas de fondo, el mensaje de toma de protesta del candidato presidencial de la alianza PRD, PT y Convergencia, Andrés Manuel López Obrador.

Los legisladores lamentaron que en temas como el fenómeno migratorio México-Estados Unidos no tenga propuestas, y que piense que el tema de la delincuencia organizada se resolverá sólo con mayor empleo y educación.

López Obrador redactó su carta de reyes adelantada, tocando temas como la corrupción, los malos funcionarios y el dispendio de los salarios en la administración pública, "pero no mencionó a Bejarano, Imaz, Gustavo Ponce y menos a su chofer, Nico".

No propuso nada en materia de seguridad e impunidad, "porque no conoce el tema ni cómo resolverlo. La prueba es que dejó en manos del crimen a la capital del país".

"Su corte de aplaudidores" estuvo conformada por ex priistas, ex salinistas. Leonel Cota, Manuel Camacho Solís y Ricardo Monreal fueron detractores del PRD hace una década, y hoy son "la crema y nata del Sol Azteca".

(V.pág.12-A de El Informador del 12 de diciembre de 2005).


El proyecto [de López Obrador] en sí es un tanto nebuloso y los números en realidad no cuadran. No hay, desde luego, la menor intención de cambiar realmente lo que no funciona en México: no hay voluntad alguna de afrontar el rancio sindicalismo que nos heredó el PRI, ni de cambiar esos absurdos dogmas que, contra toda lógica, nos impiden explotar el gas natural de nuestro subsuelo, producir petroquímicos, vender electricidad barata y exportar materias con valor añadido. Seguiremos extrayendo petróleo, nada más. Otros lo refinarán y nos lo venderán en forma de gasolina. Seguiremos haciendo trámites (la Ciudad de la Esperanza es el lugar donde toma más tiempo abrir un nuevo negocio). Seguiremos perdiendo competitividad. Seguiremos echando a nuestros compatriotas hacia Estados Unidos. Seguiremos como estamos.

Román Revueltas Retes
(v.pág.3 del periódico Público del 11 de diciembre de 2005).


Tregua navideña en las campañas. Ningún anuncio mejor que éste. Si supieran los contendientes el hartazgo de la población respecto a las campañas "políticas", de cierto que años atrás hubiesen ya guardado silencio. Pero no, su ambición les ha llevado demasiado lejos. Desde que Fox comenzó su campaña (1997) los mexicanos hemos visto desfilar un ejército interminable de próceres de todo tipo de color y sabor. Todos, sin excepción: desde el aspirante a una presidencia de pueblo rabón, así como candidatos a diputados, senadores, gobernadores y a la Presidencia de la República, todos, a cual más, sonríen y ofrecen un país que ni pueden cumplir, ni tampoco sabrían hacerlo.

En todos los niveles y partidos la jumentud -o burrez- intelectual abunda. Individuos que ni siquiera pueden pronunciar una frase coherente e hilada, se creen ahora con méritos para aspirar a cargos públicos que no tienen nada que ver su enanismo político y su indigencia de materia gris.

En una entrevista que me hiciera mi amigo y compañero Marcos Arana Cervantes acerca de la calidad y posibilidades de los candidatos a gobernador y presidente de la república, mi respuesta fue que "después de Alberto Cárdenas y Vicente Fox, cualquiera" (8/May/03). No me equivoqué. De entonces a la fecha la muchedumbre de próceres que desean salvar la patria, por cierto una patria que ni conocen ni saben cómo se forjó (ni el altísimo precio que pagaron nuestros padres y ancestros); han hecho de la televisión su escaparate para exhibir sus miserias y presumir sus derroches ante un pueblo pobre y sufrido, pero que a estos bribones -salvo honrosas excepciones- no les importa un comino su situación y lo único que desean es enriquecerse lo antes posible de ese botín llamado erario público. Supersueldos, bonos, gratificaciones, viáticos, dietas, viajes, compensaciones y demás eufemismos son el medio para saquear "legalmente" el país. Han llegado a tal punto de insensibilidad y cinismo que no se dan cuenta que tienen cansado al país.

Manuel Hernández Gómez
(v.pág.4-A del periódico El Informador del 10 de diciembre de 2005).


Germán Camacho Uribe, especialista en temas de vialidad y transporte, indicó que "desafortunadamente nos hemos dado cuenta que las obras se vienen realizando casi sin proyecto ejecutivo, es decir, conforme se va avanzando la obra".

Explicó además que siempre que se realiza una obra, ésta se va haciendo por etapas y que "a cada etapa de obra corresponde una etapa de desvíos [del tráfico]. En esta obra [López Mateos y Las Rosas], los desvíos se han venido improvisando conforme la obra lo va demandando, no porque estén previamente planeados".

(V.pág.11-B del periódico El Informador del 10 de diciembre de 2005).


El diputado [local] Javier Haro Tello y/o sus asesores necesitan urgentemente un curso de redacción. Está bien que Haro sea médico y que no esté obligado a escribir prosa poética ni nada por el estilo, pero su propuesta de ley para regular la tenencia de animales es un desastre. En la redacción hay una confusión tal que es fácil confundir a la mascota con su dueño. No se sabe a quién se le obliga a portar correa y bozal; quién tiene que lavar y dar de comer a quién; quién habla y quién ladra, etc.

La tremenda corte
(v.pág.2 del periódico Público del 9 de diciembre de 2005).


Marta Sahagún le cambió el nombre y hasta el sexo a Rabindranath Tagore, el escritor indio que ganó el Premio Nobel en 1913.

En el Museo de Antropología, en el marco de la entrega del Premio a la Mujer del Año, la esposa del presidente dijo: "Prefiero, si ustedes me lo permiten, decirlo como lo hice [hace] unos días en otro espacio maravilloso, con las palabras de la escritora Rabina Grant Tagora".

Trascendió...
(v.pág.3 del periódico Público del 9 de diciembre de 2005).


Las protestas que han suscitado las recientes leyes aprobadas por los diputados son efecto de una sola causa: la falta de auténtica representatividad de los legisladores. En efecto, los diputados no representan el interés de sus electores (hay muchos que ni electores necesitaron para llegar a la Cámara); obedecen más bien al interés de los partidos que los postularon y a su propio interés. Por eso son muy permeables a cabildeos e influencias de todo orden que buscan la aprobación de tal o cual ley en beneficio de un grupo determinado y no de la comunidad en general. [...] Lo que tenemos ahora es un enorme número de diputados cuyo elevado costo para los contribuyentes no se justifica. Lo ideal sería tener congreso pequeño y diputados grandes. Hoy por hoy -salvas honrosas excepciones- tenemos diputados de mínima estatura profesional y moral y un congreso desmesuradamente grande, desmesuradamente caro y desmesuradamente ineficaz...

Armando Fuentes Aguirre "Catón"
(v.periódico a.m. del 8 de diciembre de 2005).


Más que política, lo que los ciudadanos presenciamos todos los días es un triste espectáculo de descalificaciones y calumnias, insultos y amagos. No hay en ninguna parte propuestas y proyectos consistentes, un debate público de altura que coadyuve responsablemente a orientar el rumbo del país hacia una espiral virtuosa. Por el contrario, los partidos políticos, los candidatos, las autoridades, los representantes populares y demás actores políticos, están enfrascados en una batalla campal cuyo único horizonte a la vista es la sucesión presidencial del 2006. Todos contra todos.

A estas alturas el PRI y el PAN están más que preocupados por las encuestas que ubican desde hace meses a Andrés Manuel López Obrador como el más firme candidato a suceder a Fox en la Presidencia de la República. Pero en lugar de actuar políticamente, es decir, de confrontar con propuestas alternativas el pretendido proyecto de López Obrador hacia el 2006, han recurrido a todos los medios a su alcance, desafuero y guerra sucia incluida, para ablandar e intimidar a su principal amenaza.

Lo paradójico del asunto es que López Obrador y el PRD tampoco tienen un proyecto convincente, o mejor, no tienen un proyecto de nación definido, más allá de ideas vagas, lugares comunes y una retórica progresista y populista bastante hueca. El ex jefe de Gobierno del Distrito Federal gobernó la capital más con golpes espectaculares y coyunturales de gran visibilidad que con una propuesta de largo plazo que deje entrever una política alternativa para el país en caso de llegar al poder. Segundos pisos, pensiones para ancianos, endeudamiento público, clientelismo populista, inseguridad galopante, impunidad y corrupción, no son precisamente los ingredientes más alentadores de un proyecto alternativo para el país.

Ya es tiempo de que la politiquería ceda su lugar a la política, es decir, al debate público y la confrontación ante la ciudadanía de verdaderos proyectos de nación. No es denostando o exhibiendo al adversario en sus contradicciones y errores, a la persona y/o a un partido, como los candidatos se pueden posicionar en el electorado como alternativas viables. Ya es tiempo de la política. Es tiempo de propuestas. Señores candidatos, ¿acaso no se dan cuenta que en nuestro país todo está por hacerse? Lo que la ciudadanía exige es política, es decir, confrontación de propuestas y búsqueda conjunta de soluciones, y no el triste espectáculo que representan todos los días.

César Cansino
(v.pág.4-A del periódico El Informador del 7 de diciembre de 2005).


En el año 2006 cambiará el gobierno federal, el Congreso de la Unión y muchos gobiernos estatales y municipales. Los ciudadanos debemos estar pendientes de que no se aprovechen los políticos y se pongan de acuerdo en lo único que saben hacer por consenso, "repartir el botín". En ocasiones previas nos enteramos de la forma como se otorgan: bonos, gratificaciones, compensaciones, estímulos, retiros, seguros dotales o cualquier otro nombre que le den a sus raterías. A la hora de votar debemos tener presente quienes han participado en estas acciones ya sea recibiendo recursos directamente o consintiendo que otros lo hagan para que les deban el favor. El problema es que no habrá mucho de dónde escoger.

El Partido Verde formalizó su alianza con el PRI para apoyar a Roberto Madrazo en la elección presidencial. Hace seis años los verdes se aliaron con el PAN pero no quedaron contentos con el pago por sus servicios. Esta alianza promete que se refinará la corrupción. Por lo pronto ya hay iniciativas en la Cámara de Diputados para favorecer a los dueños del PVEM que también son los dueños de las Farmacias Similares.

El Partido del Trabajo y Convergencia acordaron apoyar a Andrés Manuel López Obrador, candidato único del PRD. En estos partidos, al igual que en el equipo de campaña de AMLO, existen infinidad de priistas. Parece que AMLO quiere hacer renacer al viejo PRI.

Víctor Manuel González Romero, profesor investigador y ex rector general, U. de G.
(v.pág.5-A de El Informador del 7 de diciembre de 2005).


Los tapatíos están inconformes por haber electo a un alcalde y que éste, a un año de concluir su gestión, la abandone para ir en búsqueda de la gubernatura. 93% de los consultados rechazaron el utilizar este puesto como trampolín político. Son votantes comunes, a quienes se les requerirá en 2006.

La molestia provocada entre un buen porcentaje de los tapatíos por la separación de Emilio González de la alcaldía, sin duda se repetirá en Zapopan, cuando solicite licencia Zamora. Ambos esperarán que el electorado tenga mala memoria y se olvide que no cumplieron su principal promesa: Hacer un gobierno de tres años.

(V.pág.5-A de El Informador del 7 de diciembre de 2005).


Políticos carentes del más elemental sentido de servicio público, que anteponen intereses personales o de grupo a la necesidad de impulsar el desarrollo sostenido de Guadalajara.

Hoy, por ejemplo, Guadalajara amanece con un nuevo alcalde, que a un año de concluir el actual período constitucional, entra al relevo por la licencia concedida a quien fuera electo por los tapatíos para cumplir tres años de gobierno, pero que a pesar de su promesa de campaña, de terminar su período, ha abandonado el cargo en busca de la candidatura de su partido al gobierno estatal.

Lo mismo sucedió hace seis años, cuando otro presidente municipal pidió licencia para escalar el siguiente peldaño en la administración pública, de suerte que quien paga los platos rotos es siempre Guadalajara. Si de por sí son insuficientes tres años para realizar una buena labor, peor resulta si el período se reduce a dos años, como ha venido ocurriendo.

Ningún interés personal o de grupo puede estar por encima de la ley. Si ésta fija tres años para los períodos municipales de gobierno es porque los legisladores así lo consideraron prudente, y la ley debe respetarse. Además, una ciudad como Guadalajara también merece atención y respeto. No es posible abandonarla al capricho de intereses partidistas.

Editorial
(v.pág.4-A del periódico El Informador del 6 de diciembre de 2005).


El fenómeno de discursos cada vez más generosos y peligrosamente cautivadores y populistas, parece ser la divisa corriente que es bien gastada tanto a nivel federal como estatal y municipal. De hecho, a todos parece convencer el buen diagnóstico que los candidatos han hecho de los problemas que tienen enfrente, pero es poco lo que proponen y mucho lo que dedican al desprestigio de sus contrincantes.

Al cumplir sus primeros cinco años de gobierno, el presidente Vicente Fox fue razonablemente bien calificado por las diferentes casas encuestadoras, a pesar de no haber cumplido con muchas de las promesas hechas en campaña.

Un fenómeno similar sucede en Jalisco, donde cada vez hablamos de proyectos de mayor envergadura, pero los resultados plasmados en la realidad son magros. Casos como el de Arcediano, la Ciudad Judicial, el macrolibramiento de Guadalajara, el saneamiento de la Cuenca Lerma-Chapala y el supuestamente litigado proyecto del Tren Bala a la Ciudad de México, dan cuenta del diferencial que existe entre la magnitud de miras mostrada en el discurso, y la poca capacidad de gestión para convertirlos en realidad.

A nivel municipal las cosas son tal vez peores, pues como la gestión dura sólo tres años y los titulares empiezan a dedicar tiempo, talento y recursos a sus propias campañas cuando apenas han consolidado a sus equipos de trabajo en sus respectivos cargos, las responsabilidades se confunden y los esfuerzos se diluyen antes de dar los primeros resultados ante todo lo que ofrecieron para ganar las elecciones.

Así pues, empezamos a pagar con proyectos que no ven la luz, con funcionarios que no conocen bien sus puestos, con legisladores que tienen como prioridad frenar las iniciativas provenientes de otros partidos y no el bien del país o su localidad, y todo esto se traduce en un país menos competitivo que obliga a sus jóvenes a buscar las oportunidades mas allá de sus fronteras.

Editorial
(v.pág.4-A del periódico El Informador del 5 de diciembre de 2005).


Salvo en los tiempos de campañas electorales, a los gobernantes les cae en la punta del ombligo tener que bailar al son que la sociedad civil les toca...

Jaime García Elías, columnista y conductor radiofónico
(v.pág.5-A de El Informador del 5 de diciembre de 2005).


Los votantes sólo pueden esperar que en los procesos internos, los militantes de cada uno de los partidos políticos elijan a sus mejores opciones y no se limiten a resguardar posiciones, porque ya electos, la ciudadanía completa padece a los malos funcionarios.

(V.pág.5-A de El Informador del 5 de diciembre de 2005).


A los gobernantes panistas, en su gestión, no les han salido las cosas como las esperaban, por la carencia de elementos indispensables en la política, tales como saber hacer gestiones ante quien corresponda, en forma adecuada y oportuna, y el cabildeo tan valioso en su momento, sobre las reformas que se necesitan para la buena marcha de la economía y del país.

Sin embargo, no toda la culpa la tienen los responsables del poder ejecutivo, puesto que los legisladores han hecho hasta lo imposible por imponer su voluntad, aún a costa de que todo en el país se detenga y de que se presente una fuga de inversiones, pues para ellos lo importante es que el ejecutivo no lleve adelante los planes y programas de su gobierno.

En este caminar de tortugas, hasta la Suprema Corte de Justicia de la Nación toma su parte, al durar un año para fallar una controversia del presidente Fox con el Congreso de la Unión sobre el Presupuesto de Egresos de este año, pues se congelaron varias partidas de dinero destinadas a los gobiernos estatales para obra pública, y algunas en el ramo educativo, para construir escuelas, comprar equipos y poner en marcha programas para mejorar la calidad de la enseñanza.

Es tiempo ya de que todos los poderes abandonen sus posiciones encontradas, para llegar a los consensos que México necesita para ubicarse en el lugar que le corresponde.

Luis René Navarro
(v.pág.1-B de El Informador del 5 de diciembre de 2005).


No creo que seamos muy soberanos si tenemos que importar gas natural -cuyos enormes yacimientos siguen intactos en nuestro subsuelo porque no tenemos recursos para explotarlos- al precio que los extranjeros nos fijan de manera perfectamente unilateral. Tampoco es signo de soberanía comprar gasolinas en Texas porque aquí no las podemos refinar.

Se ha hablado de la criminal obstrucción de la clase política mexicana a cualquier propuesta positiva por poco que sea expuesta por un oponente. Y, en vez de plantear, ahí sí, un cambio radical, una transformación de los paradigmas y una valiente renuncia a los perjudiciales dogmas que nos han mantenido en la miseria, Madrazo y López Obrador promueven que sigamos como estamos.

Román Revueltas Retes
(v.pág.3 del periódico Público del 4 de diciembre de 2005).


¿No podían escalonar las obras? ¿Era necesario que las pocas que se decidieron hacer las empezaran al mismo tiempo y en la misma zona?

2006 es un año de elecciones y a lo que se aprecia el gobierno de Jalisco le apuesta a la mala memoria y al conformismo social. Están equivocados.

Las urnas les confrontarán con su desatino. El malestar por dichas obras -que debieran ser de optimismo y mejoría de vida- es demasiado.

Irrita todavía más escuchar la prepotencia de estos derrochadores funcionarios, capaces de cambiar tres veces piso y decoración de la plazoleta en el cruce [de López Mateos] con Manuel Acuña (hasta que por fin les gustó). ¿No hay responsabilidades para estos gastalones de los dineros del pueblo? Y hay más. El lago artificial que apareció bajo la glorieta a Colón -diseñado como paso a desnivel pero las pérfidas aguas subterráneas les echaron a perder la fiesta-; ahora resulta que el lago "estaba dentro de los planes".

Manuel Hernández Gómez
(v.pág.4-A del periódico El Informador del 3 de diciembre de 2005).


El PRD y el PRI se quejaron de que es "muy alto" el tope de gastos de campaña para la elección presidencial.

Pero lo hicieron en la misma sesión del IFE en la que fueron multados por rebasar los topes de campaña en la elección de 2003.

[Hipócritas - el webmaster]

Trascendió...
(v.pág.3 del periódico Público del 2 de diciembre de 2005).


El PRD capitalino convertido hoy en botín, en disputa de tribus, panteras, Panchos Villa, ambulantes, oportunistas y clientelas de toda laya que reclaman para sí la verdadera representatividad de una izquierda que, al parecer, no se siente ya por ahí por ninguna parte.

El juego electoral se ha ido distanciando de los verdaderos intereses de la población. Los aparatos partidarios, beneficiarios de las millonarias prerrogativas concedidas por el IFE, parecen cada vez más burocracias de élite que, a espaldas del electorado al que dicen servir, se reparten el país como un botín. A fuerza de ceder el espacio de las ideas a la mercadotecnia, los candidatos presidenciales del PRI y del PAN se aprestan a iniciar su recorrido por el territorio nacional precedidos de un implacable bombardeo de spots televisivos, entonando casi la misma canción y acompañados de cortesanos que repiten, cambiando sólo el color de sus banderas, los mismos sainetes.

Epigmenio Ibarra
(v.pág.23 del periódico Público del 2 de diciembre de 2005).


América Latina muestra un alto índice de desconfianza en las promesas de candidatos, pues de acuerdo con mediciones recientes de Latinbarómetro, 64.7% de los electores cree que aquellos mienten para ganar las elecciones.

Jaime Preciado Coronado
(v.pág.24 del periódico Público del 2 de diciembre de 2005).


Mariano Palacios Alcocer, actual presidente del PRI, creó y dirigió la organización política Participa, en cuyos estatutos se descalifica al PRI y a todos los demás partidos políticos.

Palacios Alcocer tuvo a su cargo al mismo tiempo tanto al PRI como a Participa; pidió licencia en ésta dos días después de relevar a Roberto Madrazo y dejó transcurrir seis días para notificar al IFE que ya no seguiría al frente de la agrupación bebé.

El documento de Gordillo reproduce una parte de los estatutos con que Participa solicitó (12 de mayo de este mismo 2005) su registro:

"Reconocemos que los interlocutores políticos tradicionales más preparados para mediar entre la sociedad y sus gobiernos, son los partidos políticos. Sin embargo, muchas veces su desgaste institucional y anquilosamiento ideológico, en sus propuestas fundamentales, han pervertido y debilitado su función, propiciando una escasa credibilidad frente a los cudadanos. Por ello, es imprescindible que asociaciones o agrupaciones políticas, surjan en el escenario nacional para incentivar los estudios, análisis y propuestas que logren enfrentar los problemas de nuestro país, y participen en el conocimeinto político que los partidos políticos no llegan en momentos a brindar plenamente. Participa, como un nuevo actor en la vida política nacional, desea contribuir en las construcción del México del futuro, a partir de la aplicación de nuevas prácticas democráticas que marcarán nuestro proceder institucional y político...".

Carlos Marín
(v.pág.26 del periódico Público del 2 de diciembre de 2005).


En el DF lo importante es la estructura que ha logrado crear el perredismo y por eso, Marcelo Ebrard y el propio López Obrador, se han tenido que apoyar en la corriente más desprestigiada de su partido, la encabezada por René Bejarano y Dolores Padierna, pero que tiene el control de buena parte del voto clientelar en la capital. Un triunfo de Ebrard les garantizaría a ellos, también, posiciones como para tratar de desplazar a Nueva Izquierda y a las corrientes cardenistas.

Jorge Fernández Menéndez
(México Confidencial, 2 de diciembre de 2005).


Después de hacer público su deseo de obtener un 10 como gobernante y de conseguir un milagro de 12,000 millones de pesos por parte del secretario Francisco Gil, Vicente Fox dejó al descubierto sus problemas con la ortografía.

"Felicidades a una gran escuela que a formado una gran comunidad educativa", escribió en el libro de visitas ilustres de la Secundaria Anexa a la Normal Superior.

La falta de la hache resultó evidente para los profesores que en ese momento checaban tarjeta.

(V.pág.10 del periódico Mural del 1o.de diciembre de 2005).


Ser irresponsable, incapaz o negligente en la administración pública no tiene consecuencias de ninguna especie porque al final, nosotros, los ciudadanos, que con nuestros impuestos pagamos sus sueldos y de nuestras utilidades destinamos una parte para donativos en efectivo o en especie que serán administrados por los mismos funcionarios ineptos, no podemos correrlos de su puesto.

Si para algo son eficientes es para operar organizaciones de contubernio generalizado, en el que todos se cuidan la espalda y se tapan entre sí las tarugadas y corruptelas que cometen.

Ricardo Elías, arquitecto y empresario
(v.pág.12 del periódico Mural del 1o.de diciembre de 2005).


Cuesta trabajo creer -por los riesgos que esto entraña- que la autoridad del presidente de la república haya sido rebasada por la "baja burocracia", pero sorprendentemente así lo reconoció ayer el gobernador de Jalisco.

"El señor presidente permanentemente está dando indicaciones e instrucciones, y es algo, ahora sí que en la baja burocracia, en donde se nos complica", afirmó el ejecutivo estatal.

A mayor abundamiento, cuando el reportero le preguntó al gobernador cómo es posible que la baja burocracia pueda más que el presidente, respondió: "Pues créanme que a veces la baja burocracia es la que pone mayores problemas que cuando damos las decisiones quienes tenemos la obligación de tomarlas".

Más claro ni el agua.

Por lo visto no hay quien tenga la autoridad y la responsabilidad necesarias para prever futuras necesidades. ¿Será éste el principio del caos?, ¿para eso queremos la democracia?

Editorial
(v.pág.4-A del periódico El Informador del 30 de noviembre de 2005).

Lo cual obliga a pensar en lo risible (en la acepción de deplorable, no de divertido) que resulta un circo cuando el administrador no tiene empacho en reconocer que los manejos de la empresa están... en manos de los payasos.

Jaime García Elías, columnista y conductor radiofónico
(v.pág.5-A de El Informador del 30 de noviembre de 2005).


Andrés Manuel López Obrador prefiere las audiencias cómodas que no le hacen duros cuestionamientos sobre su pasado y propuestas de gobierno.

Leo Zuckermann, profesor e investigador del Centro de Investigación y Docencia Económica
(v.pág.4-A del periódico El Informador del 29 de noviembre de 2005).


En el primer semestre de 2006, la publicidad electoral aportará casi 20% de las inversiones totales en la industria, consideró el presidente de la Asociación Nacional de la Publicidad, Francioli Vázquez Rodríguez.

(V.pág.8-A de El Informador del 30 de noviembre de 2005).


Dicen los que lo conocen y saben leer al fondo de su repetido discurso y sus populistas aires mesiánicos, que se puede ver desde ahora que el señor López [Obrador] no va aceptar en sus jamases el resultado de las votaciones según lo dé el conteo de votos; esto lo ven por el reclamo, el grito, su discurso llorón por lo que lo afectan las encuestas.

Y se ve desde ahora con inquietud, con zozobra nacional, lo que podría venir al país cuando el señor Peje en incapacidad mental de digerir su derrota, diera lugar a actitudes de lucha más allá de lo que manda la cordura y madurez de las personas; más allá de lo que buscan y quieren los lineamientos de la democracia en México.

Luis Sandoval Godoy
(v.pág.4-A de El Informador del 29 de noviembre de 2005).


La realidad social de México sólo permite identificar al sector de los emigrados, como los únicos que realmente adquieren un verdadero progreso.

Lo que facilita identificarlos como los mexicanos que tienen la capacidad de generar una revolución en nuestro país.

En dos generaciones, y en muchos casos basta sólo una, para que la realidad socio-económica y cultural se modifique en su favor. Ellos sí saben qué se necesita hacer para que una realidad cambie. La de ellos cambió con trasladarse al vecino país del norte.

Estamos requiriendo cambios sustanciales, y más que esperarlos de los partidos políticos y de sus redentores con falsas promesas. Será de los mismos mexicanos que volverán decididos a cambiar al México disfuncional, al corrupto, al que descobija de oportunidades a su propio pueblo y los ha forzado a buscar fuera, lo que debía de existir aquí mismo.

Oportunidad para contar con trabajo, con las facilidades para abrir un negocio y mantener vigente la realidad de una auténtica educación, que es un reclamo fundamental de muchos mexicanos, que ya agotaron su paciencia.

Las revoluciones nacen de las contradicciones, de la ineficacia para resolver los problemas que tienen los miembros de una comunidad. Cuando el estado es ya rebasado por las necesidades e iniciativas del pueblo.

Estamos ya entrando en el período en que el agotamiento del gobernado, es proclive al nacimiento de líderes que motiven un cambio social, por las buenas o por las malas.

Los mexicanos que han dejado la patria y han prosperado, volverán con una mejor visión de lo que el país necesita. Y harán lo posible para que no nos quedemos con los brazos cruzados viviendo la misma mediocridad y apatía, en que hemos caído las últimas décadas.

Ya no debemos de seguir atrapados por propuestas insuficientes de los partidos y por gobiernos ineptos.

El papel transformador y revolucionario, no vendrá en esta ocasión de los oprimidos, sino de los que han sabido prosperar fuera del engaño en el que vivimos.

Bienvenidos paisanos, necesitamos más que su dinero, sus ideas e iniciativas.

Guillermo Dellamary
(v.pág.4-A del periódico El Informador del 29 de noviembre de 2005).


¿Podría modificarse este sucio y costoso mercadeo entre partidos? Por supuesto, si se reforma la ley. Se podrían sustituir las coaliciones por la figura de "candidato común", si dos o más partidos coinciden con la propuesta de algún político. En tal caso, es posible contabilizar la votación realmente obtenida por cada partido, que recibirá el número de curules que en justicia le correspondan, o perder el registro si no logra superar el umbral legal. Pero de sufragar por el PAN [en el 2000] lo estaban haciendo también por el tunante tucán [PVEM] (que gracias a ello ha recibido medio millón de pesos diario, y un millón en 2003 y 2006).

La figura de candidatura común es, con mucho, más cercana a la libertad e intereses de los ciudadanos pero, por lo mismo, no es popular entre los partidos. Y es que la prostitución (carnal o electoral) resulta benéfica tanto para la "sexoservidora" como para el cliente. Ambos la defienden con firmeza.

José Antonio Crespo, profesor e investigador del Centro de Investigación y Docencia Económica
(v.pág.5-A del periódico El Informador del 29 de noviembre de 2005).


López Obrador cada vez se parece más al venezolano Hugo Chávez, tanto en la forma en que concibe la política, como "en su proclividad a la confrontación verbal y en su rechazo a la modernidad", tal como lo describió Demetrio Sodi la semana pasada: siempre lo hemos visto generando respuestas verbales con un alto grado de paranoia (ya lo sabíamos), en donde niega, por ejemplo, la reciente veracidad de las encuestas de opinión (que ya no lo favorecen como antes), con una actitud dictatorial, evadiendo la realidad con esos fantasmas que siempre que pierde lo rodean, imaginando que hay un complot que inventa en donde hay "alguien" que trata de impedir que llegue al poder. Por supuesto que hay alguien que está impidiendo que llegue al poder, y no es un complot, es la población que está representada por las encuestas de opinión que ya no votarían por él, justamente, por ser poco confiable.

Cuando estaba en el D.F., se confrontó verbalmente con el presidente, con la Asamblea Legislativa, con los empresarios, con todo aquel que estaba en su contra, evadiendo responsabilidades e información y desatendiéndose de sus funcionarios corruptos. Ahora, para colmo, se niega a firmar un diplomático pacto, modelo de civilidad, como el que ha propuesto Carlos Slim y que nos suena más que razonable. Todo parece ser que ha entrado al siniestro mundo de las arenas movedizas, donde entre más se mueve uno, más se hunde y si sigue así, es probable que seguirá haciéndolo en esa arena de la opinión pública, pues ha entrado, pronto, en un círculo vicioso, donde se nota su inclinación a la confrontación verbal y donde claramente se ha marginado de la globalización y de la modernidad, para seguir con el estilo anacrónico de gobernar como el del señor Chávez, donde los venezolanos todavía no se recuperan gracias a su presidente, un provocador que sólo ha creado "la ruptura social y una división nacional que tardará años en zanjar".

Martín Casillas de Alba
(v.pág.5-A del periódico El Informador del 29 de noviembre de 2005).


El obispo de Ecatepec, Onésimo Cepeda, aseguró que equivocan la estrategia quienes apuestan por una guerra sucia, y calificó como "una estupidez" pretender, sin pruebas, desprestigiar a las autoridades electorales.

El prelado expresó que "lo que debería haber es una guerra de proyectos, de propósitos, un ver cómo hacemos un México mejor, un plantear proposiciones que puedan beneficiar a todo el país".

En su opinión, López Obrador "está cometiendo muchos errores", como descalificar las encuestas, a los empresarios, a los industriales, "el desprecio a esa gente no se debe hacer". Le sugirió: "No la riegues, porque te vas a quemar".

(V.pág.7-A del periódico El Informador del 29 de noviembre de 2005).


Es sabido que, cuando las cosas no le pintan bien, López Obrador pierde el control. Por eso, en su catilinaria contra los medios advirtió: "No, no voy a dar dinero, no tengo dinero para publicidad, pero como ciudadano mexicano tengo el derecho de que me den los espacios para hablar en los medios de comunicación". Pero no es que no tenga dinero; el que tenía no era suyo, era de los ciudadanos que pagan sus impuestos pero sirvió para que él promoviera su imagen. Los cuatro primeros años de su gestión como jefe de Gobierno gastó casi 500 millones de pesos en publicidad en medios.

También, de enero del 2001 a abril de 2005 gastó 12 millones de pesos del presupuesto de la ciudad [de México] para pagar 260 sondeos; de ese total, 254 fueron para medir la percepción de la gente sobre su imagen pública y la aceptación de su gobierno. Así es que, coincidiendo con él, hay que decir que tampoco nos dejaremos, pero de los políticos hablantines que enfurecen cuando alguien los pone frente al espejo.

Víctor E. Wario Romo
(v.pág.4-A de El Informador del 28 de noviembre de 2005).


¿Y qué se supone que va informar el presidente municipal de Guadalajara? ¿Qué dirá a los tapatíos que votaron por él, y a los que lo hicieron en contra? ¿Que la ciudad es un muladar, que la mugre es el distintivo? ¿Que su palabra no tiene valor, que deja el cargo porque sus ambiciones no tienen límite? Manifiesto es que las ambiciones superan en mucho a las capacidades, condición que no es propia del joven Emilio sino de la mayoría de la nueva y "democrática" clase política. Que aunque muy religiosos ignoran de manera absoluta la sentencia divina: "...Que no tenga(n) más alto concepto de sí que el que debe(n) tener, sino que piense(n) de sí con cordura" (Rom 12:3).

Ha llegado el momento [en] que debemos exigir más a los gobiernos. Ya basta de seguir gastando todo el dinero público en supersueldos, compensaciones, bonos, viajes, televisión, y demás derroches, cuando la pobreza aumenta y el malestar general suena a peligro.

¿Qué va a informar el presidente municipal? ¿Que cerró la principal avenida de la ciudad para que las personas salgan a pasear en bicicleta -que dicho sea de paso no cuesta nada y sí molesta-; mientras que los parques de la ciudad están completamente abandonados? ¿Eso también lo va a decir? Que el parque González Gallo es un muladar (desde hace años), así como el Liberación, San Rafael, el Morelos, y tantos otros.

Si alguien dudaba que el joven Emilio fuera de Lagos de Moreno la duda se disipó, recordándonos al ilustre alcalde, don Diego Romero.

Manuel Hernández Gómez
(v.pág.4-A del periódico El Informador del 26 de noviembre de 2005).


Entre los actuales, el Partido Verde Ecologista de México es el partido [al] que más se le ha relacionado con estas viejas prácticas de alianzas por conveniencias personales y económicas, más que por asuntos de la sociedad.

Ni siquiera se le ha reconocido un mínimo grado de pureza en sus intenciones de ser el partido de los ambientalistas, muchos de los cuales más bien lo abominan.

Vicente Bello en su columna "Tren Parlamentario"
(v.pág.10-A del periódico El Informador del 26 de noviembre de 2005).


La Presidencia de la República reprochó a la oposición en el congreso su falta de colaboración para desactivar las "bombas" financieras en el próximo sexenio.

El vocero de Los Pinos, Rubén Aguilar, reconoció que el presidente Vicente Fox heredará problemas financieros a su sucesor, pero justificó que se hizo todo lo posible por atender los graves problemas del país.

MURAL publicó el miércoles pasado que las pensiones en el IMSS y en el ISSSTE, las deuda interna y de inversión en empresas públicas, así como la dependencia de los recursos petroleros son "bombas sexenales" que deberá resolver el próximo presidente de la república, cualquiera que sea.

"La Presidencia de la República tiene plena conciencia de la gravedad que representa para el país problemas como el de las pensiones del IMSS, la situación financiera del ISSSTE y la insuficiencia de la recaudación fiscal", indicó ayer el vocero del presidente Vicente Fox.

(V.pág.2 del periódico Mural del 24 de noviembre de 2005).


En México, sólo los poderes legislativos de Guanajuato y del Distrito Federal dan trámite a iniciativas de ley presentadas por ciudadanos independientes.

Los intentos para permitir que particulares presenten iniciativas no han prosperado.

Actualmente sólo pueden ser tramitadas por las fracciones parlamentarias o por los legisladores independientes.

El Senado, el presidente de la república y los congresos locales, también están facultados.

(V.pág.9 del periódico Mural del 24 de noviembre de 2005).


He escuchado el argumento de que la ausencia de López Obrador de los foros empresariales es parte de una estrategia electoral. Andrés Manuel quiere ser percibido no sólo como el candidato de la izquierda sino el de los pobres. Dentro de esta estrategia, quizá él o sus asesores consideran que es conveniente mantener una distancia frente a los grupos empresariales. Después de todo, los empresarios tienen dinero y al parecer eso los hace sospechosos de todos los delitos y todos los abusos. O quizá el desprecio no sea ideológico sino práctico: los empresarios son relativamente pocos en un país de 106 millones de habitantes y representan por lo tanto un número escaso de votos.

Pero independientemente de las consideraciones prácticas, resulta inquietante que uno de los principales candidatos a la Presidencia de la República, el que se encuentra en primer lugar en las encuestas, se niegue a hablar con los empresarios del país. Cuauhtémoc Cárdenas -las tres veces que fue candidato presidencial de la izquierda- nunca rechazó hablar con los empresarios. Entendía la importancia que éstos tienen en una economía moderna. Sabía que para conseguir empleos hay que tener inversión. Y que no se puede tener inversión sin empresarios.

El rechazo de López Obrador a asistir a reuniones empresariales parece un lamentable retorno a una visión que durante mucho tiempo tuvo la clase política de nuestro país. A los empresarios los consideraba villanos en una visión marxista de la historia y la política en que la lucha de clases es una constante.

Andrés Manuel, de hecho, no gobernó de espaldas a los empresarios en el Distrito Federal. Colaboró con Carlos Slim en la reconstrucción del Centro Histórico de la ciudad, mientras que su segundo piso del Periférico lo hicieron un héroe entre varios constructores.

Aun así, en un momento en que los candidatos a la Presidencia deberían estar presentando sus propuestas a todos los grupos de la sociedad, y especialmente a quienes pueden realizar las inversiones que tanto requiere el país, es preocupante ver a un candidato que se niega a hablar con los empresarios.

Sergio Sarmiento
(v.periódico a.m. del 24 de noviembre de 2005).


La elección de Felipe Calderón Hinojosa, como candidato del Partido Acción Nacional, representó una opción diferente para los electores. Los ciudadanos no asocian a Calderón, o a sus allegados, con actos de corrupción como sucede con los candidatos de PRI y del PRD. Roberto Madrazo Pintado tiene una cola tan larga que hasta solo se la pisa y Andrés Manuel López Obrador no ha logrado convencernos de que haya sido ajeno a las actividades de Bejarano y Ponce, que fueron sus operadores político y financiero respectivamente.

La información dada a conocer el viernes pasado en relación a una conversación telefónica entre Felipe Calderón y Elba Esther Gordillo, la líder inmoral del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación, puede cambiar la percepción hacia el candidato del PAN. Es lamentable que Calderón busque una alianza con quien representa el lado oscuro del corporativismo mexicano. Los liderazgos sindicales que usan a los trabajadores para lograr poder, reparten y venden plazas, ofrecen votos a quien les conviene y se olvidan de su verdadera función, son un cáncer para nuestra sociedad. Todos conocemos las diferencias de Gordillo con Madrazo, pero, ¿sabemos cuáles son las propuestas de "La Maestra" para mejorar la educación en México y el bienestar de los maestros que buscan las aulas y no las curules?

Inicia la etapa en que los partidos de la chiquillada empiezan a vender caras sus facturas. El Partido Verde Ecologista de México se ofrece al PAN y al PRI para ver quién da más. El Partido del Trabajo tiene una postura similar. Hasta el Dr. Simi (Víctor González Torres), el político que más ha invertido en campaña, busca hacer alianza con el partido que le garantice mayores ganancias para sus farmacias. Todo indica que la elección será cerrada y los pocos votos que representan los de la chiquillada se van a encarecer conforme avance el proceso.

La imagen de Calderón como un candidato con principios éticos se pierde si entre sus estrategias está ganar votos por cualquier vía. Los mexicanos estamos cansados de políticos pragmáticos que hacen lo que sea, para su beneficio político, aunque con ello comprometan sus decisiones futuras. Si Felipe Calderón quiere realmente representar una opción de cambio, no puede hacer alianzas con quienes representan las inercias del pasado. ¿Para qué sirve que gane un candidato que promete cambiar, pero que para triunfar se compromete con preservar las canonjías de los corruptos del pasado?

Los mexicanos seguimos siendo ingenuos, soñamos que cuando se cambia al presidente se pueden cambiar las cosas en el país. Paradójicamente odiamos el presidencialismo y por eso desde el sexenio pasado le quitamos el poder al presidente.

Víctor Manuel González Romero, profesor investigador y ex rector general, U. de G.
(v.pág.4-A de El Informador del 23 de noviembre de 2005).


El ciudadano, ya curado de espanto después del 2000, tiene los oídos sordos para las promesas y, en cambio, el criterio mucho más avispado para eso de los engaños... Sin los cumplimientos de los ofrecimientos de campaña y sin la ilusión de "sacar al PRI de Los Pinos..." está en esa angustiante zona donde la muerte no llega y la vida se le escapa... sitio desde el que ni ruido ni silencio logran cambiar su nivel de vida... el que ha perdido lenta, pero abrumadoramente, uno que hoy añora sin esperanza de recuperar.

Estos candidatos iniciarán el 2006 desde la plataforma que despidan el 2005 y ésta no debe ser más baja que la de su contrincante, no importa que para ello recurran a las "necesarias" encuestas... ésas que a pocos ciudadanos han llamado, ésas que dicen decir de las preferencias de un electorado, que no somos ni usted ni yo... ésas que son hechas por encargo y que tienen el objetivo de darle "la verdad" al cliente y tenerlo contento... no importa que equivalga a tamizarlo todo a través de la estadística...

Entonces, los candidatos podrían, mucho mejor que pagar semejantes costos -que al final pagan los ciudadanos- dedicarse realmente a estudiar los problemas del país, a elaborar propuestas de trabajo y a discutirlas con los ciudadanos, ésos de a pie... ésos que no son llamados por las encuestadoras, pero que recibirían con enorme beneplácito la cercanía de los candidatos, no para prometerles lo incumplible, sino para sumarlos en la construcción de este país, que al final, es de todos los mexicanos, aunque hasta hoy, no se hayan beneficiado del ruido, del silencio, ni de su mermada soberanía.

Lourdes Bueno, investigadora de la Universidad de Guadalajara
(v.pág.5-A de El Informador del 26 de noviembre de 2005).


Según los estudios que sirvieron para elaborar el Programa Estratégico de Educación Cívica 2005-2006, el abstencionismo es propiciado por la falta de sentido y eficacia política, y por consecuencia, de beneficios para la población; el costo de las elecciones, y la distancia entre las propuestas de campaña y las demandas de la ciudadanía.

Otros factores que lo provocan son las campañas políticas centradas en la descalificación en lugar de las propuestas; la escasa identificación de los ciudadanos con los partidos políticos y el tipo de autoridad que se elige, lo que significa que en las llamadas elecciones intermedias se presente más nivel de abstencionismo.

(V.pág.2-A del periódico El Informador del 22 de noviembre de 2005).


Veían descargar gigantescos camiones con toneladas de víveres venidos de diversos rumbos del país, para los hermanos damnificados por los recientes ciclones. Escocíales el cordón incansable de voluntarios, bajando sacos de cereales, azúcar, arroz, cajas de medicinas, pañales, en fin. A los señores políticos de Chiapas se les hacía agua la boca... "ad quid perditio ista...".

Que aquello no estaba bien, pensaban en lo íntimo de su ser, que era un derroche, un despilfarro que podía tener aplicación política, ¿si no para qué están ellos allí? Y empezaron los señores madracistas y pejeístias a organizar el reparto, a colocar mantas y cartelones de información en los locales desde donde controlan el reparto de despensas para los necesitados.

El lema de campaña del señor Madrazo dice eso, pide eso, "Mover a México". Con esta frase dice que se convertirá en presidente de México. El lema apareció allá en una casona desde donde está repartiendo la ayuda humanitaria recogida en todo el país, y ya aquí, por artes de Belcebú. marcada con el signo del PRI al cual deben inscribirse los beneficiados.

"Mover a México", así sueña el candidato en tremenda crisis que está anticipando su derrota, contra la cual emprende lucha desesperada por remontar los escollos; por eso pide aquí al ciudadano en carencia de alimentos, presente su credencial de elector para registrarla como un voto a favor de su angustiosa campaña. Así quiere mover a México... a la ignominia.

Lo mismo hacen los corifeos de López Obrador dentro de su Comité de Promotores por el Proyecto Alternativo de Nación, a través del cual busca el control, el sometimiento abyecto de la mente y la voluntad de las masas, al entregarles un plato robado de lentejas, tal como lo estuvo haciendo y proclamando en demagógico desplante al frente del Distrito Federal.

Como nadie da nada por nada... Allá andan dos grupos, Los Panchitos y Los Taxistas en diligente actividad, repartiendo los víveres reunidos en el Zócalo de la Ciudad de México, a cambio de los signos de la popularidad que quieren ganar en los sectores más necesitados, los cuales ya han lamentado que "el dolor de uno, lo conviertan los políticos en provecho suyo".

Luis Sandoval Godoy
(v.pág.4-A del periódico El Informador del 22 de noviembre de 2005).


Pablo Gómez [diputado del PRD], hace un año hicieron alianza con el PRI en la aprobación del presupuesto, y dijo que las mayorías eran las que imperaban; ahora que nosotros sumamos voluntad con el PRI para sacar adelante el presupuesto, se quejó de la forma como se imponía la voluntad del número.

Rafael Sánchez Pérez, diputado federal por Jalisco del PAN
(v.pág.5-A del periódico El Informador del 22 de noviembre de 2005).


Un "recorte" que debe llamar nuestra atención es el que los diputados aplicaron al presupuesto del Instituto Federal Electoral, cuyos integrantes han advertido que podría haber afectaciones que vulneren los principios que deben regir en unos comicios democráticos. Es ya un lugar común decir que los mexicanos gastamos demasiado en los procesos electorales; pero sería un grave error de apreciación asumir que, por ese excesivo gasto, resulta válido mermar los recursos para la organización eficaz de elecciones como la que tenemos a la vuelta de la esquina. Ojalá que, cuando el IFE determine la asignación final de su gasto autorizado sean los partidos, y no la elección en sí misma, los que carguen con el "ahorro".

Editorial
(v.pág.4-A del periódico El Informador del 19 de noviembre de 2005).


El dinero que dejan al IFE en términos brutos incorpora una alta cantidad de recursos que aprobaron en una de las acciones más irresponsables que hayan realizado en su periodo legislativo, como la aprobación de 1,062 millones de pesos para el voto en el extranjero. Pensado clientelarmente, los diputados no contemplaron todos los estudios de factibilidad y costo que había realizado el IFE en el pasado para demostrar la inviabilidad. El voto de los mexicanos contemplaba, decían los diputados, la posibilidad de que cuatro millones de mexicanos en el extranjero -aunque pensaban principalmente en Estados Unidos-, sufragaran el 2 de julio. Hasta la fecha está resultando un fracaso. Para alcanzar las metas propuestas, tendría que haber un promedio de registro diario de 700 personas, pero hoy en día el promedio de registro apenas llega a 30 personas por día; o sea, menos de 0.5% de lo calculado.

Nadie deberá sentirse sorprendido que cuando se cierre la fecha para ese registro, el programa haya sido un rotundo fracaso. Tampoco nadie podrá sorprenderse que esa culpa se le transfiera al IFE, que públicamente mostró oposición a que se aprobara el voto de mexicanos en el extranjero por la inviabilidad en cuanto a costo y logística que ello significaba. Los diputados, claramente, están pensando en el corto plazo y no en la consolidación de instituciones democráticas ni en los pasos para avanzar en el desarrollo democrático del país. Pero, ¿qué hay de nuevo en eso? Este gasto, que será tirado a la basura, representa prácticamente el mismo porcentaje del recorte presupuestal que les endilgaron en San Lázaro, con lo cual los objetivos estratégicos del IFE para el 2006 quedan seriamente comprometidos.

Raymundo Riva Palacio
(v.pág.5-A del periódico El Informador del 19 de noviembre de 2005).


Desafortunadamente, las leyes en nuestro país privilegian a los partidos políticos y prácticamente estamos en sus manos, para todo: son los únicos que pueden postular candidatos a los diferentes puestos de elección popular y son quienes controlan los poderes legislativos, tanto el federal como los locales.

Acaparan además, la atención de los medios de comunicación con información que no es precisamente constructiva ni alienta la participación de los mexicanos en la democracia. Pero no tenemos de otra.

El PRI parece que está dando patadas de ahogado mientras cava su propia tumba; el PAN escandaliza a muchos con sólo contemplar la posibilidad o no descartarla, de que Elba Esther Gordillo se sume a las filas del blanquiazul de alguna manera y el PRD se encuentra inmerso en una lucha intestina por la candidatura para la jefatura de Gobierno del Distrito Federal con la filtración de más videos y notas de corrupción.

Por supuesto, los pequeños tienen lo suyo: Convergencia ya tiene problemas internos y el Verde Ecologista de México anda por las mismas desde hace tiempo.

Pareciera que con la conducta de los partidos políticos, éstos estuvieran tratando de inhibir la participación de la ciudadanía en las urnas (contrario a lo que les ordena la Constitución) apostando únicamente a sus "votos duros" y yo creo, estoy convencida, de que debe ser al revés, estén haciéndolo de manera deliberada o no.

Laura Castro Golarte
(v.pág.5-A del periódico El Informador del 19 de noviembre de 2005).


Por ahí se pasea en los medios televisivos Raymundo [Gómez Flores], priista que anhela la gubernatura [de Jalisco] diciendo que el pueblo lo escogó de senador. Recordemos que llegó por la plurinominal y había dicho que si llegaba en esa forma renunciaría, pero prefirió el hueso a cumplir con su palabra. Qué personajes pululan en nuestros corrillos políticos.

Carlos Eduardo C.Flores
(v.pág.4 "correo" del periódico Público del 18 de noviembre de 2005).


En Convergencia, el partido de Dante Delgado, los gérmenes de discordia aparecieron hace ya tiempo y se refieren a temas como el uso del financiamiento público y el carácter patrimonialista de los cargos de dirección.

Miguel Angel Granados Chapa
(v.pág.9A del periódico Mural del 17 de noviembre de 2005).


Lo menos que uno puede exigir de los políticos es honestidad y congruencia, desafortunadamente pocos políticos con dichas virtudes encabezan las encuestas para los diferentes cargos de elección popular.

Javier Estrada Figueroa
(v.pág.9A "Cartas a Mural" del periódico Mural del 17 de noviembre de 2005).


A partir de la elección estatal [de Jalisco] efectuada en noviembre de 1994 surgieron neopolíticos de pacotilla por todos lados, todos ellos, sin oficio político.

Llegaron a los partidos y al sector público tomándolos por asalto, sin idea de lo que es la adminsitración pública y lo que implica la vinculación ciudadana y el compromiso con las mayorías marginadas.

Se dieron cuenta [de] que en la anarquía o a río revuelto cualquier hijo de Adán puede ser político y acceder al maravilloso mundo de la administración pública (no para servir, sino para servirse).

Bernabé Covarrubias
(v.pág.9A "Cartas a Mural" del periódico Mural del 17 de noviembre de 2005).


México está asfixiado, casi ahogado, por la terrible corrupción que ha inundado sus venas. Es una especie (nuestro país) de adicto a la sustancia malévola que llamamos lambisconería y dejadez. No es inútil observar a nuestro alrededor a más de tres pobres mortales que ya no saben cómo hacerle para espantarse las moscas de este lamentable escenario. Hemos caído en una triste simulación de hacer como que hacemos las cosas bien, en donde los discursos suenan a todo dar y no faltan los solapadores.

Sabemos de aspirantes eternos al desempleo que de repente se sacaron la lotería para ejercer un cargo público y hoy andan orondos por la vida con cara de "¿soy o me parezco?".

David "Negro" Guerrero
(v.pág.12-B del periódico El Informador del 16 de noviembre de 2005).


El gran problema de los políticos actuales es vivir para sí mismos y olvidarse que su misión principal,es servir a la sociedad.

Hay dos posibilidades, o el poder los enferma muy pronto o sólo personas con cierto perfil, propensos a la enfermedad, son los que se interesan por la política.

Una de las tendencias más comunes es traer arrastrando rasgos narcisistas, un problema muy común entre personas que adquieren un cierto nivel de poder, fama o prestigio. Y consiste en "quererse tanto a sí mismos", que les importa muy poco atender a los demás, pues centran su vida en buscar ser atendidos y admirados por los demás.

Cualquier cosa, que los haga sentir afectados en su imagen, los irrita fácilmente y los motiva a ser agresivos con quien se atreva a no reconocer, lo que quieren que los demás piensen de sí mismos.

Son egocentristas, porque usan el poder y los recursos a su alcance, para inflar su propio ego.

Incluso pasando por encima de quien sea necesario, con tal de obtener lo que desean.

Son hipersensibles a la crítica, y se enojan con quienes los contradicen. Por ello prefieren contratar y rodearse de gente que los alabe y nunca les cuestione sus decisiones. Es más, alejan de su entorno, a todo aquel que les diga un no o afecte su inflada imagen de sí mismos. Y los que se atreven, pueden llegar a ser sus enemigos, simplemente porque no se sometieron a sus pretensiones.

El estado tiene como objetivo servir a la sociedad, por medio de una gran multitud de recursos. Por lo tanto, la personalidad de los funcionarios debería de ser la de los altruistas, es decir ,individuos devotos de la atención a las necesidades de los demás. Que llegan a sacrificar su propio ego, en aras de volcarse por el bienestar de la comunidad. Y que por supuesto no se sirven de ella para mejorar.

Dada la abundancia de políticos y funcionarios narcisistas y ególatras, es indispensable fortalecer una estrategia que impida, que gentes con estas tendencias, aspiren y logren sustentar cargo alguno.

Debería de existir un antidoping y una evaluación psicológica que detecte sus tendencias al alcoholismo, la mitomanía, la megalomanía, el narcisismo y la paranoia. Entre otras afecciones, que deterioran la capacidad de servir y ayudar al mejoramiento de la sociedad.

Si logramos revalorar la casta política de nuestro país, estaremos en posibilidad de también mejorar nuestra capacidad de gobernar.

Guillermo Dellamary
(v.pág.4-A del periódico El Informador del 15 de noviembre de 2005).


Honestidad y capacidad no se combinan en alguno de los candidatos y esto derrama su efecto hacia Jalisco, donde los funcionarios del gobierno enfrentan el repudio de la sociedad, como expiatorios de negligencia e intereses ocultos a la sociedad y a los medios en materia de obra pública rezagada, deficiente o abortada, con expresiones de soberbia altanería que contrasta con el servicio a que está obligado el servidor público.

Carlos Cortés Vázquez, consultor en comunicación
(v.pág.5-A del periódico El Informador del 15 de noviembre de 2005).


En el caso de Andrés Manuel López Obrador, por lo que dice y hace, lo veo más cercano al grupo de los gobernantes que respetan al mercado, pero que no quieren mucha competencia que digamos. Al de una izquierda que venera la intervención del estado, que protege a poderosos grupos rentistas y que carece de un consistente proyecto competitivo para la globalización. De ser así, si bien México no se convertiría en un desastre económico como el cubano o venezolano, tampoco lograría el impresionante éxito de los chilenos. Más bien tendríamos una mediocridad económica similar a la que hoy padecen brasileños y argentinos.

Leo Zuckermann, profesor e investigador del CIDE
(v.pág.4-A del periódico El Informador del 14 de noviembre de 2005).


El investigador Manuel Díaz Cid, asesor del Papa Benedicto XVI, se refirió a la participación de la Iglesia en la vida político electoral del país.

Apuntó que es lícito pugnar por una democracia que no se queda en la mera representación electoral, sino que se desarrolle hasta alcanzar una participación de la ciudadanía en las decisiones de las autoridades.

(V.pág.23-A del periódico El Informador del 14 de noviembre de 2005).


Priistas y perredistas apuestan a que el país entero se vaya al despeñadero con tal de que Fox no se pueda colgar ni media medalla.

Román Revueltas Retes
(v.pág.3 del periódico Público del 13 de noviembre de 2005).


El sistema de gobierno ya dio de sí en lo tocante a la solución de problemas de las minorías o de los conflictos causados por la impunidad de empresarios y políticos (por lo común, lo mismo, aunque ahora se invierten los caminos, después de tanto ver a gobernantes transformarse en empresarios, los empresarios han decidido ser los gobernantes, en forma directa o como poder delante del trono). El régimen que defiende la injusticia y la impunidad se enfrenta ya a uno de sus límites: el hartazgo organizado de manera espontánea en demasiados sectores. Civil o incivil, la sociedad será ya parte del próximo sexenio. O eso, o el autoritarismo con resultados desastrozos a corto plazo.

Carlos Monsiváis
(v.pág.17 del periódico Público del 13 de noviembre de 2005).


Con la estampida de los funcionarios públicos en búsqueda de una nueva candidatura se confirma la cabal existencia de una de las enfermedades del cambio mexicano: la "partidocracia". A los buscadores les interesa ganar ante todo el favor de quienes deciden en el partido de su militancia. Poco importa lo que han logrado, una mínima autocrítica de su paso por el puesto que ahora dejan una mirada al antes y al después, un respeto por los electores. La prisa por llegar, incluso la presión porque se puede llegar tarde, hace olvidar no digamos la elegancia y la cortesía; se olvida hasta la compostura.

La huida de los hasta ahora ocupantes de puestos de elección popular muestra cómo procuran el favor político, no del pueblo llano, sino de los "grandes" electores de su formación política.

La partidocracia ha formado políticos no profesionales sino por correr por un nuevo puesto. No hay en partidos y políticos corredores, por ejemplo, interés en hacer balance y confrontar promesas y logros, afirmaciones y realidades, y posturas ante los conflictos y posturas antes de los conflictos. Confirman que no son profesionales.

Los políticos sean fanáticos del cambio, de la restauración o de la oportunidad, no muestran que han [hayan] pensado en la realidad que es nuestro país y nuestra sociedad. Poco importa cuáles son las cualidades y las carencias de esta sociedad dinámica y a la vez pobre, saqueada, secuestrada. Poco importa la simulación si el negocio se consigue. Poco importan las personas y los ciudadanos si los convenzo de otorgarme el voto, Los políticos apresurados por conseguir el neohueso están obnubilados por la carrera y no han pensado qué hacer una vez alcanzado el triunfo. Por eso, ya que llegaron sólo saben empezar otra carrera. El país, la nación, los ciudadanos, la vida social son telón de fondo secundario de una obra en la que sólo importa derrotar al rival en turno.

Miguel Bazdresch Parada
(v.pág.17 del periódico Público del 13 de noviembre de 2005).


Independientemente del partido, este sexenio ha sido de gente inepta.

Aristóteles Sandoval, diputado local
(v.pág.2 "Las perlas" del periódico Público del 11 de noviembre de 2005).


El Instituto Federal Electoral solicitará a los partidos políticos la apertura del secreto bancario para la supervisión y verificación de sus movimientos financieros cuando lo considere pertinente y necesario la Comisión de Fiscalización del organismo electoral.

En el nuevo reglamento de fiscalización, que se aprobará hoy, los partidos, a petición del IFE, deberán enviar a la Comisión Nacional Bancaria y de Valores una autorización para que el instituto pueda acceder a esa información financiera partidista.

El presidente del instituto, Luis Carlos Ugalde, destacó ayer la importancia de solicitar la apertura del secreto bancario de los partidos políticos.

"El IFE, durante muchos años, ha solicitado que el congreso legisle para poder abrir el secreto bancario al IFE y esto no ha sucedido. Por lo tanto, lo que hará es obligar a los partidos políticos para que entreguen una carta autorizando a solicitar información", señaló Ugalde.

"Mediante esa carta, la CNBV podrá darnos la información financiera que permitirá al IFE, una vez que concluyan las campañas, poder tener mayor agilidad para investigar esas cuentas".

(V.primera plana de Mural del 10 de noviembre de 2005).


La efervecencia electoral provocada por las próximas elecciones locales ha aumentado el grado de movilidad de los responsables de los gobiernos y dejan a los municipios en condiciones defavorables para cumplir con las promesas de campaña. A la mitad del camino no sólo quedan las promesas e intenciones de principios del trienio, sino una población incapacitada para el ejercicio de sus derechos políticos. Así es muy difícil llegar a algún lado.

Tonatiuh Bravo Padilla, vicerrector ejecutivo de la Universidad de Guadalajara
(v.pág.11A de Mural del 10 de noviembre de 2005).


Las distintas secretarías elaboran sus programas como las reinas de belleza que cuando les preguntan en los certámenes qué desean, siempre piden la paz del mundo, con buenas intenciones para el 2006, aunque no especifican cómo conseguirán sus metas.

(V.pág.1B de Mural del 10 de noviembre de 2005).


Desde el presidente de la república hasta los candidatos y precandidatos a la Presidencia, pasando por los dirigentes nacionales de partidos, varios diputados, senadores, gobernadores, y otros muchos protagonistas de la vida política, han iniciado ya, con sus declaraciones y descalificaciones recíprocas, la disputa por los votos. Pero estos primeros escarceos sólo han dejado ver una gran pobreza de argumentos e ideas, por lo que se vislumbra una contienda electoral sumamente vulgar y mediocre, sin propuestas consistentes, plagada de violencias verbales, golpes bajos y engaños. Dicho en breve, tendremos un PRI redimiendo el pasado frente a las torpezas del actual gobierno; un PAN sobredimensionando las bondades de un "cambio" que en los hechos muy pocos alcanzan a percibir, y un PRD que se disfraza de una incrédula pureza de ideales y propuestas sociales frente a los "excesos" autoritarios y neoliberales tanto del pasado priista como del presente panista.

César Cansino
(v.pág.4-A del periódico El Informador del 9 de noviembre de 2005).


El suscrito comparte la generalizada creencia de que el pueblo ya no cree en la honradez de la clase política; de que la clase política se encuentra muy desacreditada, y por ello, solicita públicamente la definición de la postura de los partidos y de los candidatos del próximo sexenio, sobre temas fundamentalmente morales.

Ing.Pedro Vázquez Guerra
(v.pág.6-A "Buzón de nuestros lectores" del periódico El Informador del 9 de noviembre de 2005).


Los movimientos registrados al interior de los partidos políticos no son otra cosa que el reflejo del "pragmatismo", donde quienes participan en la lucha, no tienen otro interés que la búsqueda del poder.

Así, atrás quedaron las ideologías, la defensa de principios doctrinarios y hoy es frecuente observar "saltos" de un partido a otro, sin el menor rubor.

Así lo estimó el catedrático de la Universidad de Guadalajara, Pablo Arredondo Ramírez.

En tanto, David Gómez Alvarez, catedrático del Instituto Tecnológico de Estudios Superiores de Occidente (ITESO), sostuvo que la recomposición que viven los tres principales partidos políticos, PAN, PRI y PRD, obedece en buena medida a que todos, por vez primera, tienen altas posibilidades de ganar en la contienda constitucional del mes de julio de 2006, la Presidencia de la República.

"No es sólo el derroche realizado en las precampañas política y dado que hay posibilidades de ganar, al interior de los partidos se están despedazando".

Además, un elemento adicional es que se agudizó la aparición del "fuego amigo", donde las estructuras se vuelven frágiles, dado que son los propios militantes de los partidos los que han denunciado las irregularidades y "corruptelas".

Arredondo Ramírez consideró que ante este escenario, la ciudadanía verá llegar las contiendas electorales constitucionales a partidos y a candidatos "muy desgastados, porque los corazones del electorado ya están muy desilusionados".

Por su parte, Gómez Álvarez reconoció que lo reflejado en las encuestas es tan sólo una parte de la realidad, dado que 60% de los ciudadanos no han todavía definido su preferencia electoral.

Reconoció que la apuesta de muchos políticos es a la "memoria corta" de los ciudadanos, para que los escándalos se olviden de aquí a que se lleve a cabo el proceso electoral.

Sobre la participación electoral, Pablo Arredondo confió en que será importante, dado que una elección de presidente de la república, siempre tiene mayor interés de los ciudadanos.

Consideró que no es nuevo (sic) los "brincos entre un partido y otro", de hecho, el PRD utilizó a muchos ex militantes del PRI para conformarse. Lo novedoso, tal vez, coincidieron ambos, es que ahora se pasen del PRD al PAN, cuando en esencia son partidos antagónicos.

(V.pág.5-B del periódico El Informador del 9 de noviembre de 2005).


De hecho, el que la mayoría de los diputados no esté trabajando en el proceso legislativo más importante del año [la Ley de Ingresos y el Presupuesto de Egresos de la federación], ilustra claramente el retroceso que sufre el congreso cada que los partidos políticos aprietan amarras y asumen mayores controles, que derivan en un gatopardismo legislativo. Es decir, simular que el congreso decide cuando en realidad son los dirigentes, que así confirman la vieja y aún irrebatible teoría de que el poder legislativo está subordinado a la partidocracia.

Vicente Bello en su columna "Tren Parlamentario"
(v.pág.2-A del periódico El Informador del 8 de noviembre de 2005).


Nuestros gobernantes privilegian la política partidista sobre la administración píblica.

Editorial
(v.pág.4-A del periódico El Informador del 8 de noviembre de 2005).


Esas vidas paralelas de los dos tabasqueños han encontrado tales similitudes en sus maneras de ser y de operar que quizá por ello exista esa animadversión y enemistad entre ambos, que pudiera colapsar nuevamente en las campañas en pro de la Presidencia, tal como sucedió hace algunos años en la campaña por el gobierno del estado del sureste.

Y es que ambos se manejan en el ámbito del más puro pragmatismo o maquiavelismo político que evita consideraciones a la ética pública y a la palabra de honor empeñada, con lo que resulta muy difícil contender con personajes de esta ralea que basan su actuación en la famosa consigna de: el fin, es decir, el ansia personal de poder, justifica los medios.

Hace seis años, Vicente Fox arribó a la candidatura del blanquiazul en buena medida, siguiendo el procedimiento ya reseñado en el caso de los dos tabasqueños: madruguete y aplicación del principio de los hechos consumados o del más vale pedir perdón que permiso.

El representante del Partido Verde Ecologista de México: Bernardo de la Garza, desde hace unos meses hace ya precampaña, para muchos sólo encarecedora de lo que pediría el feudo familiar aposentado de ese partido, para entregar con mayores ventajas su registro en una coalición.

Juan de la Borbolla R., catedrático universitario
(v.pág.5-A de El Informador del 7 de noviembre de 2005).


"Muchos de los proyectos los toman los políticos, los ponen en sus programas de trabajo y hasta imprimen sus promesas, pero una vez que llegan al gobierno, se les olvida o crean otros intereses y relegan estos proyectos que como empresarios y ciudadanos quisiéramos que se realizaran".

En entrevista, Luis Enrique Reynoso Vilchis, empresario de las artes gráficas, lamentó que hasta la fecha "los políticos a los que les hemos encomendado estas tareas, no las han hecho".

Sin embargo, reconoció que en buena parte ha sido culpa de empresarios y ciudadanos, que prefieren "la comodidad" de sus negocios a trabajar por cambiar el estado actual de las cosas.

(V.pág.14-B de El Informador del 7 de noviembre de 2005).


Con esa fresca nos salió Pérez Plazólum [Plazola] al reconocer que sabía de las componendas en el Registro [Público de la Propiedad] desde marzo de 2001. Secretarios generales van y secretarios generales vienen, de éste y del otro partido, pero ninguno ha puesto remedio al descaro y todo se les va en aventarse la bolita. ¿Será que, cuando hay capital político en juego, al toro hay que entrarle por las ubres y únicamente cuando haya que dejarse ver?

Un funcionario ineficiente es tan dañino para la confianza como uno corrupto, si no es que van junto con pegado. Vistas así las aspiraciones políticas, en cualquiera legítimas, dejan de serlo cuando sirven de pretexto para eternizar a incapaces en el ejercicio del presupuesto. Mamando, que es gerundio.

Que lo sepan quienes ahora aspiran a un nuevo cargo aun dejando asuntos pendientes por doquier: se peca por comisión lo mismo que por omisión.

Toñimáximus
(v.pág.2 del periódico Público del 6 de noviembre de 2005).


Véase cómo los otros partidos políticos rechazaron la propuesta del PRD de ceder 10% del gasto electoral a los damnificados. El PRI habló de "reasignación espuria" y el PAN se fue a fondo: "Y es tan deleznable aquél que roba una despensa o que la limita para que se vote por un partido, como el que viene aquí a hacer estas propuestas" (Rogelio Carbajal). Tiene razón el perredista Horacio Duarte: "Desnudaron su mezquinidad".

Carlos Monsiváis
(v.pág.19 del periódico Público del 6 de noviembre de 2005).


Los políticos no se distinguen precisamente por seguir las huellas de San Francisco o la Madre Teresa. Las pillerías de muchos y las alianzas impensables de los más, dejan al descubierto una cofradía de tipos de cuidado.

Manuel Hernández Gómez
(v.pág.4-A de El Informador del 5 de noviembre de 2005).


En la negociación de la reforma electoral "definitiva" de 1996, en el punto número 12 convenimos "instaurar la figura del referéndum para reformas que incidan en decisiones políticas fundamentales... Establecer además la prerrogativa y la obligación ciudadana de votar en referéndum en los artículos 35 y 36 de la Constitución". En el punto 13 añadimos: "instaurar la iniciativa popular como una prerrogativa ciudadana".

Tanto en este capítulo como en el voto de los mexicanos en el extranjero, el gobierno de entonces expresó por escrito su inconformidad con el acuerdo. Manipularon después para diferir su aplicación y, en el contexto de la santa alianza, lo redujeron a su mínima expresión. En el caso del referéndum y de la iniciativa popular simplemente faltaron a su palabra y ratificaron su ancestral temor al ciudadano.

El cambio que viene demanda de nuevo el concurso y el aliento de la sociedad, pero también la incorporación de sus organizaciones en la construcción del futuro. No habrá movimiento en verdad progresista ni democracia digna de tal nombre que no enarbole, en el centro de su programa y como antídoto mayor de una globalización excluyente, la expansión del poder ciudadano.

Porfirio Muñoz Ledo
(v.pág.4-A de El Informador del 5 de noviembre de 2005).


Me imagino que el eslogan de Felipe Calderón sería particularmente popular en algún "paño menor": "Mano Firme-Pasión por México". Los del PRD podrían regalar sostenes femeninos de color amarillo con la leyenda: "desafórame cuando quieras"; en cuanto al PRI su peor eslogan podría ser "lo retro es lo de hoy".

Ana María Salazar, académica del ITAM
(v.pág.5-A de El Informador del 5 de noviembre de 2005).


Urge que nuestros legisladores sean sometidos a la transparencia que tanto exigimos los mexicanos del poder ejecutivo, pero que por alguna extraña razón no demandamos del legislativo y del judicial. Urge que los diputados y senadores transparenten sus ingresos y gastos, tanto personales, como de su staff. Urge que se escriban las reglas claras de lo que está permitido y de lo que no lo está para hacer cabildeo.

La denuncia de Miguel Angel Toscano no sólo va en contra de las tabacaleras, sino en contra de la corrupción de la clase política, de la "caquistocracia" que sigue gobernando México, ahuyentando la inversión y trabajando por el bien propio, en lugar de por el bien del país.

Genaro Lozano
(v.pág.4-A del periódico El Informador del 2 de noviembre de 2005).


En México las candidaturas independientes no sólo fueron permitidas hasta 1946, sino que eran parte del sistema político mexicano. Con 100 ciudadanos, cualquier agrupación podía postular candidatos en todos los niveles de gobierno. La postulación de José Vasconcelos en 1929, después de escindirse del partido gobernante, fue posible gracias a la existencia de las candidaturas independientes.

Mientras que en México todos los tribunales y órganos electorales locales habían emitido un veredicto "en estricto apego a la Ley Electoral" en contra de las aspiraciones de Jorge Castañeda, no hay ningún tribunal coherentemente democrático e imparcial en el mundo que pueda respaldar dicho fallo. No sólo constituye una resolución anticonstitucional, sino que tiene una vena autoritaria contradictoria con los valores y aspiraciones democráticas que tan trabajosamente se han abierto camino en el México contemporáneo.

Fue muy curioso, para decir lo menos, observar en estos días cómo los tribunales electorales, el IFE, el gobierno federal y los partidos se pasaron la pelota para dar largas a la petición de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos. Al final, el IFE, en un comunicado ridículo justificó de nueva cuenta el "veto" a Castañeda. Con todo, este caso sienta un precedente que ya no podrá subestimarse en el futuro. Con este tipo de decisiones, la democracia en México queda en entredicho a nivel mundial. ¿Hasta cuándo tendremos una democracia de ciudadanos? Que se cuiden los políticos cuando hablen de "normalidad democrática". Hasta que no se hagan las cuentas con situaciones tan absurdas como la referida o como el voto de los mexicanos en el extranjero por la vía consular, el registro de partidos locales o regionales y un sinnúmero de déficit democráticos en nuestra legislación, no se podrá hablar a cabalidad de una democracia electoral.

César Cansino
(v.pág.4-A del periódico El Informador del 2 de noviembre de 2005).


Se sabe que las masas que han sufrido engaños y manipulaciones, son cada vez más resistentes e incrédulas.

Ahora creen más en las personas que en los partidos, más en las actitudes que en las palabras. La honestidad es más deseable.

¿Habrá en quién confiar?

Guillermo Dellamary
(v.pág.4-A del periódico El Informador del 1o.de noviembre de 2005).


La feria del poder político convirtió en costumbre el uso de los instrumentos para posicionar la imagen del funcionario con vistas al siguiente puesto. Se soslaya que: Es su obligación trabajar y justificar el salario. Cumplir su deber con ética, aportando su esfuerzo a favor de la población. Conservar los bienes de la sociedad, entregados circunstancialmente para su administración, crecimiento y desarrollo.

El valioso instrumento de la comunicación social está desvirtuado con el uso desmedido de imágenes del servidor público cuya responsabilidad política es la de servir con creativa y productividad. Identifíquelos y saque usted, respetable lector, sus propias conclusiones.

La imagen del ser político-autoridad se deterioró al momento de emplear los bienes de la sociedad para fines personales de imagen con el propósito de escalar nuevas posiciones en el escalafón de la alta burocracia; antes de cumplir con la responsabilidad que le fue conferida. Esta costumbre ha corrompido los altos fines de la política de servicio, con la consecuente pauperización. Las obras públicas están, unas canceladas y otras en largo proceso de reparación o construcción.

Desvirtuado el valor de servicio por parte de la autoridad se margina el privilegio de servicio y surgen las alianzas-compromisos. Leemos, escuchamos y vemos los nombres de Madrazo, Montiel, Creel, Sahagún, Bribiesca, López Obrador, Ponce, Bejarano y en el ambiente local Calderón, Ramírez Acuña, Cárdenas, González Márquez, Zamora, Martínez Mora, Sánchez Aldana, Cosío, Gómez y varios cientos más ocupados en su futuro político anteponiéndolo al propósito de servicio con programas.

La reelección del líder Carlos Romero Deschamps, acusado por las millonarias disposiciones del Sindicato de Petróleos Mexicanos a favor del PRI hace cerca de seis años que lo pusieron al borde de la cárcel se han olvidado, pero Pemex continúa siendo empresa paraestatal ineficiente por falta de mantenimiento a sus instalaciones y carencia de infraestructura, a pesar de la elevación de los precios del petróleo en el mercado internacional; descontado que la gasolina sube al consumidor cada día primero. En el sector educativo, vital para el desarrollo, la profesora Elba Esther Gordillo infunde temores al sistema antes de contribuir a la erradicación del rezago expuesto por los organismos internacionales.

En ese contexto parece inalcanzable la recuperación esencial del poder político. Sus actores carecen de la vocación de servicio a la altura del privilegio de ser autoridad, y el efecto se derrama a la burocracia constituida en pesada carga para el erario por ineficiente y, en algunas áreas, corrupta.

Carlos Cortés Vázquez, consultor en comunicación
(v.pág.5-A del periódico El Informador del 1o.de noviembre de 2005).


Complicado cuadro se le presenta al ciudadano común: entre los aspirantes a los más importantes cargos de elección popular, y tomando en consideración que ninguno de los aspirantes tiene la pinta del caudillo, del líder carismático, del súper-héroe capaz de transformar, como por arte de magia, el estado de cosas vigente en el país desde tiempo inmemorial, no se ve con claridad al candidato ni de las esperanzas ni de las ilusiones...

Jaime García Elías, columnista y conductor radiofónico
(v.pág.5-A de El Informador del 1o.de noviembre de 2005).


La Vía RecreActiva, considerada como un éxito por la actual administración tapatía, encubre una verdad que conoce la mayoría de los tapatíos: El déficit existente de espacios recreativos.

Guadalajara cuenta con 75 unidades deportivas y 11 grandes parques, los cuales tienen una problemática común: abandono, falta de inversión y de proyección.

En su portal el ayuntamiento tapatío presume de un promedio de 38,000 asistentes a la Vía RecreActiva en el mes de agosto. No hay un cuestionamiento en torno a cuántos de ellos preferirían pedalear debajo de la fresca sombra de un árbol, escuchando el rumor del agua o corriendo sobre el pasto sin impactar sus rodillas o tobillos.

Ese abandono es el rostro oculto de la Vía RecreActiva, que ante la necesidad de la población de convivir en espacios seguros, a cielo abierto, está dispuesta a volcarse a las calles de su ciudad. ¿Se imagina usted la calidad de vida que se le generaría, si se recuperan para ésta los parques, unidades deportivas y demás espacios recreativos con que contamos?

Editorial
(v.pág.4-A del periódico El Informador del 31 de octubre de 2005).


Si algo se ha demostrado en los años recientes es la enorme resistencia de la clase política a debatir y optar en consecuencia por una alternativa a las dificultades económicas y sociales que agobian a los mexicanos. Ha sido la posesión del poder lo que ha marcado su discusión y el consecuente desgaste. Y siendo válida esa disputa, lo criticable está en que por tal interés se ha abandonado a la república. De ahí la validez práctica de las expresiones tales como "da lo mismo, todos son iguales", "no importa, todos son corruptos", "es inútil votar" y otras semejantes. En el fondo se ha desgastado mucho, quizás relegado, la representación real que los políticos tienen de los asuntos generales del país y de sus habitantes.

Miguel Bazdresch Parada
(v.pág.18 del periódico Público del 30 de octubre de 2005).


López Obrador representa el pasado económico, que ya quebró a México tantas veces y que lo volvería a quebrar. ¡No es ni siquiera una opción de izquierda! Es una reedición de lo más dañino de la política pública. Es un Echeverría, un López Portillo reloaded. Es el Ogro filantrópico de Octavio Paz.

Felipe Calderón, candidato panista a la Presidencia
(v.pág.22 del periódico Público del 30 de octubre de 2005).


Miguel Angel Toscano, joven diputado del PAN, abrió la caja de Pandora al declarar públicamente que varios diputados habían hecho viajes a invitación de las tabacaleras y que esto motivó su voto de rechazo al aumento del impuesto. El mundo se le vino encima. Incluso en su partido lo descalificaron y le pidieron que se callara. En el pleno, los diputados del PRI y del PAN minimizaron el asunto y trataron de echarle tierra. Miguel Angel prometió dar la lista con los nombres de los diputados que aceptaron las invitaciones y no lo ha hecho. Pero lo importante es que su denuncia, aunque sea incompleta, ventila un asunto que los diputados desean mantener a toda costa fuera del debate público: las relaciones que sostienen con los promotores de intereses particulares. Una investigación a fondo de esos vínculos terminaría por desprestigiar, si todavía es posible, al conjunto de los políticos. ¿Por qué? Porque nuestros diputados están en una situación extremadamente vulnerable frente a las tentaciones de todo tipo que les pueden ofrecer los poderosos grupos de interés. Gran parte de los diputados son políticos locales, líderes sindicales, personalidades de ámbitos diversos que no tienen una carrera legislativa ni la van a tener. Están ahí de paso. Eso los vuelve más vulnerables a las tentaciones y menos sensibles al escrutinio de los medios. Es uno de los resultados desafortunados de que esté prohibida la reelección inmediata de los legisladores. Y si a eso agregamos que no existe una ley que delimite claramente lo que es aceptable y lo que no, ni que obligue a transparentar las relaciones entre diputados y lobbistas, el resultado es un cúmulo de prácticas éticamente muy dudosas. Por ejemplo, ¿pueden aceptar los diputados invitaciones a comer? ¿Y a cuánto puede ascender la cuenta? Los que promocionan la legalización de los casinos ¿pueden invitar a los diputados a una visita guiada en Las Vegas? Hoy, nada lo prohibe. ¿Acaso un diputado promedio no se sentirá muy alagado si un importante directivo de una empresa tabacalera lo cita con todo pagado en Madrid para hablarle del compromiso social de su empresa? Seguramente.

Por eso, más allá del asunto del tabaco este tema no debería regresar al olvido en que lo quieren mantener los partidos.

Denise Maerker
(v.pág.23 del periódico Público del 30 de octubre de 2005).


Ya me puedo imaginar la incomodidad de Andrés Manuel López Obrador en la mesa de debate, ya que los otros contendientes insistentemente le preguntarán a AMLO por qué está buscando implementar su estrategia fallida para el resto del país. Y aunque tratará de argumentar que el problema de inseguridad es un lastre que viene desde los gobiernos priistas, esto no será suficiente. Si no pudo controlar y reducir la criminalidad en la Ciudad de México cuando fue su responsabilidad, por qué debe el electorado poner el futuro en sus manos, será la pregunta más difícil que tendrá que responder AMLO. La estrategia probable de AMLO será buscar desacreditar las cifras del Instituto Ciudadano de Estudios Sobre la Inseguridad, y de otros grupos que subrayan el deterioro de la seguridad pública en la capital y buscar convencer que sus propuestas de política económica se traducirán en una reducción a los problemas de criminalidad en el país.

Ana María Salazar, académica del ITAM
(v.pág.5-A de El Informador del 29 de octubre de 2005).


La Comisión Nacional de Derechos Humanos levantó una encuesta entre los integrantes de 650 organizaciones no gubernamentales en la cual se les pregunta su opinión sobre los partidos políticos.

El resultado muestra que el 80% de los miembros de las ONG dicen que los partidos ya no representan una opción para enfrentar problemas como la salud, la educación o el acceso a la justicia.

Esas mismas agrupaciones se dicen dispuestas a vincularse con organismos internacionales, instituciones educativas y la Iglesia, pero no con los partidos.

Trascendió...
(v.pág.3 del periódico Público del 28 de octubre de 2005).


El sistema está corrupto y en este gobierno están buscando chivos expiatorios de los de abajo, porque los defraudadores de cuello blanco la libran aunque se roben mil millones de pesos. Pero a los empleados los miden con otra vara. Por agarrar cien o docientos pesos los acusan de cohecho y los consignan. El sistema está mal y la política la están utilizando para enriquecerse y satisfacer sus necesidades. Está muy claro con este gobierno del cambio, entre comillas, se ha dedicado a pasear y a enriquecerse. En este país no pasa nada a pesar de las denuncias públicas y las pruebas.

Yo los acuso a todos los cabrones de bandidos y ratas. Son una bola de corruptos y no les tengo miedo, estoy en contra del sistema. No tengo enemigos personales, pero enemigos políticos sí porque milité en la opoisición al sistema por la vía radical, que está convencido de que la política es la delincuencia organizada. Viven de nuestros impuestos y están dedicados a saquear el erario. Pienso como hace 30 años y no me he retractado.

José de Jesús Ramírez Meza
(v.pág.7 del periódico Público del 28 de octubre de 2005).


Sin rodeos, el presidente de la Junta Local del IFE, Esteban Garaiz Izarra, les leyó la cartilla a los representantes de los ocho partidos políticos que participarán en el proceso electoral federal.

"El ciudadano mexicano quiere que los aspirantes al poder público no le vean la cara de retrasado mental, que no lo sigan bombardeando con vaciedades; quiere que le digan en breve y claro a dónde quieren llevar a nuestra nación con sus propuestas claras y reales; que no quieran comprar nuestro voto, porque lo que esperamos de ellos es bienestar colectivo, y eso no es un producto consumible", resaltó.

(V.pág.16 del periódico Público del 28 de octubre de 2005).


Madrazo es todo desprestigio y López Obrador es todo deshonestidad, pues deshonesto es aquel que promete cosas a sabiendas de que no podrá cumplirlas, y que comprometió gravemente el erario del Distrito Federal para hacer obras costosas y poco útiles a fin de ganar lucimiento personal, y para otorgar dádivas que favorecieran sus ambiciones de poder.

Armando Fuentes Aguirre "Catón"
(v.periódico a.m. del 27 de octubre de 2005).


Creemos más en la opinión que en los documentos.

Esto nos convierte en un bocado apetecible para los políticos que pueden manipular la opinión a través de acusaciones, "marketing", difamaciones sin pruebas y enlodamiento general que nos lleva a confusiones y conclusiones temerarias.

Por eso podemos tener de candidatos a Madrazo y al indesplumable señor López.

Nemesio Maisterra
(v.pág.8A del periódico Mural del 27 de octubre de 2005).


La fuerza de la corrupción nos ha jalado hacia ese abismo que, parece, interminable y, lo que es peor, parece inacabable. No alcanzo a ver barruntos de esperanza porque la crisis no sólo está en los modelos económicos, impuestos por el paso de los distintos gobiernos, igualmente implica, esa crisis económica, aspectos sociales, políticos y, sobre todo, morales. A tal grado llega que el poder, estando en las manos de unos cuantos, esos pocos se erigen como guardianes de la moral y del bien público, ésos son los políticos. ¡Son como el diablo predicando caridad!

Pedimos y pedimos a los gobernantes leyes más justas, gobernabilidad, erradicación de la impunidad, ¡seguridad!, y no sé cuántas cosas más para nuestro bienestar y para una convivencia más armoniosa que nos ayude a crecer, no tan sólo en lo económico, igualmente como personas. Ellos, sordos y ciegos al dolor del pueblo: ¡mienten y mienten!, no sólo eso, sumen al país en el caos y corrompen cuanto les atraviesa y roban lo que está a su alcance y, de paso, se llevan la esperanza de millones de mexicanos.

Pero no es culpa de los políticos, México es responsabilidad de todos, de gobernantes y gobernados. Si ellos roban y mienten es porque nosotros, apáticos y temerosos, se los permitimos, todos somos cómplices de atrocidades y virtudes.

Lucio Vázquez, médico
(v.pág.4-A del periódico El Informador del 26 de octubre de 2005).


La contienda está definida en el trilátero de la política nacional. En la esquina de los corruptos Roberto Madrazo es prácticamente el candidato al renunciar Arturo Montiel con el apoyo de la fortuna de sus hijos, por parte de los populistas, Cuauhtémoc Cárdenas cedió por sobrevivencia política y apoyará a López Obrador y en la esquina de la incompetencia han seleccionado a Felipe Calderón como su gallo. Hagan sus ahorros porque, aunque usted no lo crea, México tiene buenas oportunidades para empeorar. El costo de las campañas y precampañas será altísimo y de seguro impactará en el bolsillo de los mexicanos.

También debemos estar al pendiente de los premios de consolación de los perdedores. A Montiel se rumora que le darán impunidad al otorgarle una senaduría (de las que no venden comida pero tienen fuero constitucional). Alberto Cárdenas buscará algo en Jalisco ya que sólo es profeta en su tierra. Santiago Creel buscará a su promotor, Vicente Fox, para ver si lo cuela en alguno de los múltiples puestos que le quedan vacíos cada semana.

Víctor Manuel González Romero, profesor investigador y ex rector general, U. de G.
(v.pág.4-A de El Informador del 26 de octubre de 2005).


El sentido democrático de la contienda tiene un alto costo social sufragado con dinero procedente de los impuestos, lo que aumenta el desequilibrio de las finanzas nacionales invocando la necesidad de mayores ingresos, pero también observando su mejor aplicación, que no en prolongadas campañas en procuración de espectacular popularidad, sin tocar el fondo: los reclamos de la sociedad.

La población está consciente del despilfarro amparado por la ley que niega la justicia de aplicar los recursos públicos al impulso de la economía, mediante obras de infraestructura urgente, promotoras de inversión y competitividad en el concierto internacional donde se tiene reconocido rezago.

La democracia tiene precio, pero éste debe ser ponderado en función de las posibilidades nacionales. Es prioritario controlar las ambiciones personales, por legítimas que parezcan en el empleo de la conformación de imagen de candidatos, en menoscabo de la atención a los reclamos sociales; ésta es tarea inmediata de la administración gubernamental y deber legislativo.

Carlos Cortés Vázquez, consultor en comunicación
(v.pág.5-A del periódico El Informador del 25 de octubre de 2005).


Los ataques mutuos que se lanzan los dos principales precandidatos para la Presidencia de la República [del PRI], más la andanada vertida por la anterior secretaria general del partido en contra del anterior presidente del Comité Ejecutivo, pareciera ser simplemente el pleito encarnizado que provoca el hecho de enfrentar por primera vez en la historia de dicho partido, una elección presidencial sin el dedo decisorio de quien otrora aglutinaba los más disímbolos intereses subsistentes en dicho partido: el Presidente de la República en turno.

La defensa del presidente actual del partido y de los dos precandidatos a esos cuestionamientos no entra al fondo del problema del enriquecimiento inexplicable, sino simplemente se enfoca a atacar a la posible parte denunciadora, aunque tampoco se pueda afirmar la acusación lanzada contra el ejecutivo federal: "Es campaña fraguada en Los Pinos para distraer la opinión pública respecto de los cargos hechos a los hijos de la señora Sahagún".

Qué triste que el clima de impunidad existente en nuestro país para enriquecimientos inexplicables de políticos y sus familiares traiga consigo esta guerra de declaraciones hechas para desacreditar al adversario, sin que se consiga el objetivo central que la ciudadanía está deseando: que exista el aseo político suficiente como para que desaparezcan las ratas.

Juan de la Borbolla R., catedrático universitario
(v.pág.5-A de El Informador del 24 de octubre de 2005).


Está visto que los alcaldes suelen ser personas impreparadas para el ejercicio de su cargo... y que tres años -o menos, si deciden tirar el arpa antes- son insuficientes para que aprendan a ejercer.

Jaime García Elías, columnista y conductor radiofónico
(v.pág.5-A de El Informador del 14 de septiembre de 2005).


El coordinador parlamentario del Partido Revolucionario Institucional, en la Cámara de Diputados, Emilio Chuayffet Chemor, descartó la posibilidad de apoyar una reforma que permita la reelección de diputados y senadores en México.

El diputado priista dijo que con la reforma los legisladores federales aprenderían el trabajo parlamentario y "harían una carrera profesional que les permitiría ventilar, a través de muchos más años, decisiones que se quedan en el tintero por la cortedad o brevedad del lapso de representación".

Sin embargo, expresó, "soy particularmente enemigo de la reelección", así sea nada más referida a diputados y senadores, ya que ello mercantilizaría al poder legislativo.

"Si el dinero manda en la elección, el reelecto no será el que resulte de una mayor apreciación pública por su trabajo legislativo, sino el que tenga cercanía al dinero para ver asegurada su reelección".

En el Palacio Legislativo de San Lázaro, argumentó que ocurriría lo que sucede en los Estados Unidos, que lamentablemente es nuestro modelo para muchas cosas.

Hizo ver que en su opinión la reelección "no debe darse en la medida en la que no estoy convencido que la forma de elección en México esté alejada de los centros del dinero y del poder mediático".

(V.pág.18-A del periódico El Informador del 24 de octubre de 2005).


Los partidos políticos deben elevar el nivel de la contienda electoral para generar entre los votantes confianza y combatir el abstencionismo, señaló el arzobispo de Puebla Rosendo Huesca Pacheco.

En conferencia de prensa, señaló que para la arquidiócesis los partidos políticos no han generado credibilidad entre los mexicanos que permita asegurar una alta participación en la elección presidencial de 2006.

"El abstencionismo es como la fiebre, significa que algo está mal, que está enfermo, y en México parece que hay un desencanto por la democracia", comentó.

(V.pág.21-A del periódico El Informador del 24 de octubre de 2005).


Ley, gobierno y partidos políticos configuran la política de hoy. Estos inventos, al paso del tiempo, se han revelado defectuosos. Un defecto principal es reducir a un lugar pasivo a los ciudadanos. Han monopolizado la política. En especial los partidos políticos se han creído únicos participantes. Argumentan que el ciudadano no está preparado para tomar parte en la política, a no ser la acción de votar. Cuando alguien se atreve le cae toda clase de epítetos para descalificarlo. Los ciudadanos tienen que callar ante la ineficacia de la ley, la ineficiencia del gobierno y la prepotencia de los políticos.

Son ignorantes. Están acarreados por alguien Son aspirantes embozados a una prebenda. Están interesados en un bien particular o faccioso. Son oposición profesional al gobierno. Y otras visiones irrepetibles por indignas.

No obstante los inventos son inviables sin los ciudadanos: ¿Qué arbitran las leyes? ¿Quién sostiene al gobierno? ¿Quién financia a los políticos? Si los inventos juegan en contra de la participación ciudadana en la política, es necesario reformarlos de raíz.

Por eso la importancia de la recomendación cautelar de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos que pide al estado mexicano registrar como candidato sin partido a Jorge G.Castañeda. ¿Se romperá el monopolio político?

Miguel Bazdresch Parada
(v.pág.20 del periódico Público del 23 de octubre de 2005).


Un solo hombre está revelando con su lucha toda la podredumbre que cruza a la legislación electoral vigente en México, una legislación grotesca y escabrosa que no sólo no soporta la prueba de la democracia sino que la inhibe y entorpece. El hombre se llama Jorge Castañeda y su lucha no es otra que la de un ciudadano que busca que se le reconozca precisamente su calidad de ciudadano, tan simple como tener derecho a aspirar a un cargo de elección popular sin estar obligado a vender su alma a un partido político.

El asunto es tan básico que no admite digresiones: en cualquier régimen que se precie de ser democrático simplemente no existe ni puede existir impedimento alguno para que un buen ciudadano pueda postularse a un cargo de elección popular de manera independiente, es decir, sin pedir el cobijo o el respaldo de un partido político. Que un candidato independiente compita en condiciones desventajosas frente a la enorme maquinaría de los partidos es un cálculo que sólo compete a él; que no tenga recursos suficientes para hacer proselitismo es su responsabilidad; que al final no pueda convencer al electorado, también es un escenario posible que deberá ponderar, pero que la ley le impida a priori contender es una aberración de la democracia.

Como es sabido, todos los partidos políticos actuales no sólo no han estado a la altura de las exigencias sociales y los desafíos abiertos con la alternancia del 2000 sino que se han convertido en verdaderas amenazas para la estabilidad y la gobernabilidad del país. Cuando no se exhiben como refugio de delincuentes y mafiosos, mostrando una y otra vez un profundo desprecio por la ciudadanía, aparecen como estructuras obsoletas, incapaces de anteponer los intereses de la nación a sus intereses de capilla.

Pese a todo, la ley electoral vigente en México, el infumable COFIPE, impide la existencia de candidaturas independientes. Que todos los partidos con registro sean una calamidad, no importa. El hecho es que sólo postulado por uno de ellos alguien puede aspirar a un cargo de elección popular. Pero la mediocridad de los partidos no es el argumento de fondo para que existan o no candidatos independientes. En realidad no hay argumentos en clave democrática que justifiquen su imposibilidad, a no ser porque la ley electoral sea una ley timorata y abiertamente favorecedora de los intereses de los propios partidos.

Resultará muy curioso, para decir lo menos, observar en estos días cómo los tribunales electorales, el IFE, el gobierno federal y los partidos se pasaran la pelota y darán largas a la petición de la CIDH. Por lo pronto, Castañeda ya se puede anotar un triunfo, pues ha desnudado de un solo golpe las inconsistencias de nuestra incipiente democracia.

César Cansino
(v.pág.4-A del periódico El Informador del 22 de octubre de 2005).


Si se sumaran las cantidades que erogó en gastos publicitarios el ex gobernador del Estado de México -primero cuando todavía ejercía el cargo, y luego como aspirante- en su afán por conseguir una candidatura presidencial que ahora ha quedado fuera de su alcance, veríamos con nitidez un fenómeno que ha corroído hasta sus raíces al espectro partidista del país: el despilfarro de recursos públicos con absoluta impunidad. ¿Quién va a rendir cuentas sobre esos millones y millones de pesos que se sacaron del erario para financiar una aventura política que ahora se frustra, paradójicamente por la difusión del inexplicable enriquecimiento del ex funcionario de marras y su familia? ¿Quién pondrá un freno a los partidos políticos que no miran más que los terrenos de la competencia por el poder sin asumir un compromiso auténtico con los ciudadanos de que su dinero se gaste mesurada y escrupulosamente? Los desaciertos de los partidos y sus candidatos en esta contienda electoral deben ser el último capítulo de esta historia de opulencia partidista en un país con tanta miseria.

Editorial
(v.pág.4-A del periódico El Informador del 22 de octubre de 2005).


Entre las características del modelo político mexicano que deseamos abrogar se encuentran el verticalismo, el centralismo, el corporativismo y el patrimonialismo. El primero consiste en un modo de toma de decisiones en el que todos los órdenes de la autoridad están sometidos a un mando superior. El segundo se expresa en la concentración territorial del poder político. El tercero se define como la articulación subordinada de las distintas órbitas económicas y sociales y el cuarto como la falta de fronteras definidas entre el patrimonio público y el privado.

Los más recientes escándalos en los procesos de selección interna de los candidatos, aunados a los que hemos padecido a lo largo del sexenio y a los que habremos de descubrir cuando éste termine, nos aportan la evidencia de que el latrocinio continúa siendo el hoyo negro de la política nacional. Sólo que hoy no se encuentra bajo el relativo y condescendiente control de una potestad última, sino desparramado en los tejidos de la pluralidad política. A este fenómeno lo he llamado "la metástasis de la corrupción".

Todos los fenómenos a los que aludo nos vienen de antiguo y han conocido diversas metamorfosis. Para ser precisos, aparecen desde los inicios del régimen colonial y van cambiando de piel a través de los siglos. En particular el patrimonialismo, que corresponde a una concepción feudal del poder en la que se han sostenido todos los caciquismos y cuyas aportaciones a la expansión y perfil de la burguesía mexicana son innegables.

En mi variada experiencia como administrador público he podido corroborar que la corrupción, como todas las adicciones, exige -por encima de cualquier procedimiento que se elija- una voluntad política firme y sostenida para ser extirpada. También, que la derrota de los obstáculos ancestrales, derivados de la arbitrariedad y el clientelismo, demanda una refundación política basada en una nueva legalidad.

Dentro de una república renovada, tanto el peculado, el conflicto de intereses y el manejo indebido de información, como cualquier otra modalidad de la corrupción, pueden ser abolidas, en la medida que la honestidad se convierta en objetivo prioritario de la nación, del cual dependen su progreso y supervivencia.

Hemos librado una batalla fundamental contra el fraude electoral para conquistar el sufragio efectivo. Ahora tenemos que empeñarnos decididamente en erradicar la corrupción, a fin de alcanzar un gobierno efectivo. Se trata de una enfermedad curable, pero quien sea incapaz de vencerla tendrá que admitir el desahucio.

Porfirio Muñoz Ledo
(v.pág.4-A del periódico El Informador del 22 de octubre de 2005).


El fruto de su esfuerzo hasta el momento es una medalla de bronce obtenida en la Olimpiada Internacional de Informática, realizada en Polonia del 18 al 25 de agosto pasado, y su próximo objetivo es participar en la siguiente edición de la competencia a efectuarse en Mérida, Yucatán, el próximo año, y conseguir el oro.

Apasionado de la informática desde los ocho años, Luis Enrique Vargas Azcona, ha sido prácticamente un autodidacta y está empeñado en convertirse en el primer mexicano que obtenga el oro en la competencia internacional del área. Actualmente es el cuarto azteca que consigue el bronce.

El año pasado, la familia Vargas Azcona solicitó a través de un escrito dirigido al Gobierno del Estado de Jalisco, que apoyaran a Luis Enrique en su preparación, pero nunca recibieron respuesta.

En julio de 2004 la familia presentó a la Secretaría General de Gobierno una carta que fue turnada a la Secretaría de Educación Jalisco, y a pesar de que en repetidas ocasiones estuvieron llamando para conocer la respuesta, nunca les contestaron, "sólo nos dieron largas".

(V.pág.6-A del periódico El Informador del 22 de octubre de 2005).


El escenario político en México no refleja otra cosa más que "una lucha feroz al interior de los partidos políticos en torno a las candidaturas", así lo mencionó el investigador del Centro Universitario de Ciencias Sociales y Humanidades, Javier Hurtado, quien agregó que: "Tenemos la democracia más cara del mundo y la menos eficaz. El costo por voto emitido en nuestro país es de 26 dólares, mientras que en Argentina de 10, en Brasil de 12, en Francia 2.5 y en Estados Unidos 2.68".

(V.pág.9-B del periódico El Informador del 22 de octubre de 2005).


Cuauhtémoc Cárdenas opinó ayer que lograr que se permitan las candidaturas independientes en México representaría un avance democrático significativo.

(V.pág.30 del periódico Público del 21 de octubre de 2005).


El país está asustado con lo que está pasando y no hay alguien que tenga claro por quién va a votar.

Susana Zavaleta, actriz y cantante
(v.pág.7 de la sección "¡hey!" del periódico Público del 21 de octubre de 2005).


En los últimos 5 años, el 42% de los integrantes del Senado se ha distraído de sus labores para buscar candidaturas a alcaldías, gubernaturas, dirigencias de partido y una precandidatura presidencial.

(V.primera plana de Mural del 20 de octubre de 2005).


Cuando un político solamente piensa en el bien de la nación, lo más probable es que desprecie el bien del ciudadano. Es muy curioso, pero casi todos los países en donde existe retraso y miseria están gobernados por líderes que solamente piensan en el bien de su nación.

Cuando se lucha políticamente por la patria, por la nación, por el país, por la república no siempre es cierto que se lucha por los mexicanos en lo personal. Si le va bien a la patria, no necesariamente le va bien a todos los mexicanos. Entonces, cuando alguien habla de lo que "el país necesita" o "del proyecto de nación" hay que ponernos muy alertas porque no necesariamente eso es lo que los ciudadanos necesitamos.

El llamado "empoderamiento" o aumentar el poder de cada persona, es fundamental para otro proyecto de nación. Es una estupidez que un funcionario niegue información argumentando ¿para qué quieres saber la nómina o los gastos del municipio? Simplemente se debe contestar: "porque tengo derecho a saber lo que hacen con mi dinero".

Enrique Canales
(v.pág.11A del periódico Mural del 20 de octubre de 2005).


Aprovecho para cambiar de tema y celebrar lo que ha logrado Jorge Castañeda. Por supuesto que los partidos están muy enojados porque alguien puso en evidencia esa estúpida ley que los propios partidos cocinaron para su propio y exclusivo beneficio y agandalle, como diría Montiel, nuestro clásico joven. Hace rato, escuchaba a Lorenzo Meyer que dijo exactamente lo que yo quería decir: le esperan a Castañeda muchas zancadillas todavía, pero lo que ha logrado en favor de la oxigenación ciudadana de nuestra política, tan pestilente hoy que es coto privado de los partidos, es muy importante, muy valioso y muy agradecible. La brecha ya se abrió; nos toca ahora a los ciudadanos empujar para que la tarea política sea tarea de todos.

Germán Dehesa
(v.pág.1B de Mural del 20 de octubre de 2005).


El mensaje de Transparencia Internacional a México: (V.pág.2-A del periódico El Informador del 19 de octubre de 2005).
El mensaje de la Iglesia Católica a sus fieles es muy claro: no voten por quienes promueven leyes contrarias a la naturaleza y la moral, no voten por el PRD. Si además promueven que no se vote por los corruptos, terminarán promoviendo el abstencionismo.

Víctor Manuel González Romero, profesor investigador y ex rector general, U. de G.
(v.pág.4-A de El Informador del 19 de octubre de 2005).


Sería renovador, y esta vez sí un signo de cambio, que en lugar de desplegados, pancartas, cotidianos y ya enfadosos spots televisivos, con un porcentaje de los recursos de campaña se reconstruyeran escuelas, clínicas, cooperativas, centros de distribución de productos en las zonas afectadas [por el huracán Stan], aunque se pusiera sobre de estas obras letreros que dieran cuenta del candidato y partido que hubiera puesto esos recursos... Eso sí sería un positivo cambio. Un cambio que haría que en lugar de que cada vez que se abre Internet, o se quiera ver el contenido de algún periódico nacional, cada vez que se ingresa a los servidores comerciales, se vea la cara -imagen con artificial pero filosa dentadura de anuncio de pasta dentífrica- de los políticos en pugna; en lugar de ver caras y pagar caro... se pudiera ver una escuela mejorada, una clínica instalada y equipada... eso sí sería trabajar por la población mexicana, eso sí sacaría los votos necesarios que en la campaña que ya lleva cinco años, serán requeridos...

Lourdes Bueno, investigadora de la Universidad de Guadalajara
(v.pág.5-A de El Informador del 19 de octubre de 2005).


Jorge Castañeda, aspirante independiente a la Presidencia de la República, entregó ayer martes una misiva al Instituto Federal Electoral (IFE), en la que le solicita aplique las medidas cautelares que ordenó la Corte Interamericana de Derechos Humanos, para que el ex canciller sea registrado como candidato en la contienda electoral de 2006.

Como plazo, el IFE tiene 10 días naturales a partir de la recomendación de la Corte, que fue el pasado 17 de octubre. Castañeda Gutman consideró que el órgano electoral no podrá hacer a un lado las resoluciones que emitió la Corte, en las cuales piden se permita su registro como candidato a la Presidencia.

"Estoy seguro que el IFE atenderá esta recomendación, no tengo la menor duda en que hará un esfuerzo para resolver el problema causado por los mismos partidos que no han legislado en torno a las candidaturas independientes".

[Ya mero van a hacerlo, sería como separarse de la ubre del erario, igual que el legislar sobre el plebiscito, el referéndum y la consulta pública - el webmaster]

En conferencia de prensa, el ex secretario de Relaciones Exteriores afirmó que el IFE es una institución autónoma del poder ejecutivo, pero no del Estado Mexicano, y por ello está obligado a cumplir con las normas establecidas dentro del marco legal y en particular de los tratados internacionales.

(V.pág.7-A del periódico El Informador del 19 de octubre de 2005).


El presidente del Centro Empresarial de Jalisco, Luis Fernando Pérez Aguayo, aseguró que la respuesta en materia de seguridad ha quedado por debajo de las expectativas.

Peor aún, están interesados en otros asuntos, electorales principalmente, que ni siquiera termina sus periodos por buscar otros puestos "dando brincos de chapulín" olvidan sus propuestas de campaña por participar en el escenario electoral, están más preocupados por darle difusión a su imagen que por trabajar en el cargo por el que se les eligió y se les paga.

Como ejemplo del despilfarro citó los gastos en imagen de Guadalajara y Zapopan que tan sólo en los últimos cuatro meses han gastado 60 millones de pesos en promoción de su imagen.

Lamentó la falta de ética por utilizar recursos humanos y del erario público para colocar su imagen ante la ciudadanía, disfrazada de promoción de su oficinas de comunicación social, en donde por cierto, el presupuesto se gasta en el último año de su administración por lo que pidió que este sea distribuido en los tres años de la gestión.

(V.pág.8-A del periódico El Informador del 19 de octubre de 2005).


Me parece muy evidente que estamos viviendo una crisis intelectual y social, principalmente dentro de la clase política.

Los planes y proyectos que nos presentan los precandidatos no tienen un sustento ideológico. Son meras formas pragmáticas con tintes electorales.

Pequeños matices hacen la diferencia. Pero de fondo no hay ninguna propuesta que realmente tenga sustancia ni una reflexión seria de lo que requiere México para su bienestar.

Los políticos están disgregados en partidos que ya no cumplen su función de conocer y estudiar a fondo a la sociedad mexicana y sus problemas. En consecuencia falta una unidad de pensamiento y todos acaban por ser esfuerzos mediocres y aislados.

Sobran seudo políticos y faltan ideólogos serios y consistentes.

La tendencia es que suban, a la palestra política, hombres que ambicionan una rebanada del poder, pero sin una idea de lo que significa poseerlo. Ni mucho menos para qué tenerlo. Creen que es cuestión sólo de hacer bien una chamba, de cumplir con la ley o de hacer obras en beneficio de la comunidad. Pero no conciben una clara filosofía política que respalde su pensamiento, sobre los más importantes y variados asuntos que preocupan a los mexicanos.

Hay un gran vacío de pensamiento y reflexión.

Hay una crisis de intelectuales.

Abundan los asesores porque los que detentan el poder, no están haciendo el debido trabajo intelectual.

Se gasta mucho dinero en construir una fatua democracia, pero que está hueca, es de forma y no de fondo. Aparenta que estamos desarrollando una visión política, con diversas alternativas, y sólo estamos edificando un tianguis de propuestas sin esencia.

Debemos dejar atrás la ociosa romería democrática que sólo entretiene y retrasa los verdaderos acuerdos y consensos nacionales. Que deben ser, ante todo, las ideas, las creencias y los proyectos que debemos de realizar unidos los mexicanos.

Creo que es momento de exigir pensamientos e ideas firmes y convincentes a los políticos. Gente que debe ser culta, inteligente y bien preparada. Y no mediocres con ambiciones, sin liderazgo ni visión.

Guillermo Dellamary
(v.pág.4-A del periódico El Informador del 18 de octubre de 2005).


Sin duda los dioses del Olimpo están favoreciendo al Peje, pues, semana a semana, vemos cómo se desplaza de un lado para el otro, dando aparentes buenas noticias y ganando tiempo y prestigio entre los potenciales votantes mientras que el resto de precandidatos se pelea, se persiguen, se acusan y se arañan, éste, como buen político, anuncia su plataforma -le guste o no a su partido-, declarando los famosos 50 puntos de gobierno, incoherentes y con más pies que cabeza pero que intenta llegar a los diferentes sectores del país, al tiempo que se ha dado el lujo de anunciar su notable equipo de asesores, que nos suena más a una prepropuesta de gabinete para el poder ejecutivo, llamado el "Consejo de Notables", señalando al mismo tiempo, como debe ser en cualquier drama que se presente entre los mortales, al villano de la obra, más conocido como el "innombrable", mientras que sus verdaderos operadores construyen las redes ciudadanas, convenciendo en el más allá del inframundo a los taxis piratas, vendedores ambulantes y traficantes de influencias que finalmente le ofrecen su apoyo si siguen recibiendo premios, dinero y concesiones con la mano derecha, al tiempo que muestran sus potenciales votos de confianza corporativa con la izquierda, ufanos de haber convencido al pueblo de que ahora sí lo van a sacar de la pobreza.

Martín Casillas de Alba
(v.pág.5-A del periódico El Informador del 18 de octubre de 2005).


Durante una gira por el Estado de Morelos, ayer domingo, Andrés Manuel López Obrador convocó a evitar que "los mafiosos de la política" se apoderen de México, porque las nuevas generaciones recriminarán haberles heredado un país "dominado por el hampa".

(V.pág.2-A del periódico El Informador del 17 de octubre de 2005).

Demasiado tarde, ya nada puede hacerse al respecto - el webmaster.


La característica de las campañas de los precandidatos ha sido así, una guerra que refleja los grupos de poder dentro de los propios partidos, que ante los ojos del ciudadano que votará en las elecciones del próximo año, sólo parece eso: Una pelea interna que a nada conduce de cara al futuro del país.

La sociedad está cansada ya de este tipo de campañas, porque no escucha, ve o lee, lo que en verdad le interesa: Propuestas concretas para dar solución a los problemas que aquejan a la nación: inseguridad, pobreza, desempleo, mejores condiciones para la clase trabajadora, incentivos para los inversionistas, apoyos a grandes, medianos y pequeños empresarios, programas sociales y una larga lista de rezagos por revertir. De nada de esto dan cuenta los precandidatos.

Con sus peleas y divisiones internas como bandera de campaña, quizá logren convencer únicamente a los militantes de sus propios partidos para que otorguen el voto a uno u otro, porque con alguno de ellos podrán estar de acuerdo.

Al ciudadano que habrá de votar el próximo año hay que convencerlo con algo diferente, y no es mucho lo que deben ofrecer: Sólo propuestas que no sean promesas falsas, sino acciones concretas viables de llevarse a cabo. Las campañas políticas son para ello, y no para ventilar diferencias mediante peleas públicas. La ropa sucia se lava en casa, y el ciudadano merece ser tomado en cuenta.

Editorial
(v.pág.4-A del periódico El Informador del 17 de octubre de 2005).


Se relajó la disciplina y miren el desorden que se traen todos los políticos, son los mismos de siempre, las mismas familias y uno que otro colado que se andan peleando por lo que ellos creen es su patrimonio y lo es. Se han enriquecido de manera impune, ¿por qué? Porque las leyes y quienes legislan [que son los mismos políticos - el webmaster] son ambiguos, siempre dejan huecos, siempre dejan espacio a la interpretación. Y ahí estamos (todo un país) inertes esperando que alguien nos mueva o de perdida se asome un rayo de esperanza.

Guillermo H.Navarro Corona
(v.pág.4 "correo" del periódico Público del 16 de octubre de 2005).


Si los funcionarios intentaran escuchar música de calidad; leer poesía, novela; ir al teatro, serían más sensibles: nos darían cultura, tendrían más vida interior, podrían ver por el bien de nuestro país y no por intereses personales. Pero sólo están buscando tener más, y con ello logran tener menos. No necesitan sindicato que los lleve a huelga, siempre están en ella. ¿Y nosotros? Somos un país huérfano.

Karla Sandomingo
(v.pág.13 del periódico Público del 16 de octubre de 2005).


Se ha hecho una costumbre incontrolable encontrar y ventilar públicamente las actividades "poco honorables" de los políticos, sobre todo las de quienes se postulan a puestos de elección popular. Los adversarios políticos se revisan las entrañas entre sí. Y es bien pagado quien encuentre en las entrañas del otro, informes relativos a cualquier actividad cuya carátula pueda ser formulada en tono de sospecha o de deshonestidad o sólo de enriquecimiento, ante el imaginario social. También es bien pagado quien sepa ocultar, "blindar", esas actividades ante cualquiera que las examine. Dicho en popular, la contienda política es una lucha en el lodo.

La honra artificiosa, aquella que queda porque se le pegó menos lodo que a los adversarios, viene a ser el principal argumento para solicitar y otorgar el poder. Discutir aciertos y equivocaciones en los encargos anteriores de cada personaje, desentrañar los fundamentos de sus ideas y las consecuencias prácticas de los mismos para los asuntos públicos se vuelve tarea de historiadores y otros bichos de cubículo.

Enlodados, y nosotros viendo y gritando, ningún luchador sale a publicar su pensamiento, por ejemplo, sobre los sucesos recientes en el IMSS. En otras palabras: Señores aspirantes, déjense de cosas. Digan públicamente que proponen para el IMSS. ¿Cómo van a proponerse resolver esa bomba de tiempo financiera, social y política? Si llegan a la esperada silla les espera esa decisión. ¿Cuál van a tomar? En otras palabras, sálganse del lodo y enfrenten la realidad de un gobierno condicionado, de un sistema legal obsoleto, de una organización del trabajo tramposa y atrasada. Y no se vale retórica. Quiten ustedes IMSS y pongan Pemex, CFE, educación, seguridad, penales, y el gobierno todo. La perversión está en que vemos el plumaje pero no el temple.

Miguel Bazdresch Parada
(v.pág.19 del periódico Público del 16 de octubre de 2005).


El mitin de López Obrador en San Martín Texmelucan fue de los más concurridos, con casi 3,500 personas. Al termino del mismo, a plena vista de todos, un señor que dijo llamarse Carlos recogía tarjetas de los asistentes.

"Es para comprobar que vinieron", dijo el individuo mientras recibía el papel que representaba el pase de lista.

Entre los que desfilaban llegó una señora que aceptó hablar: "Si no venimos nos quitan tres martes sin vender (los martes se pone el tianguis en esta cabecera municipal) y esos lugares nosotros ya los pagamos".

"¿Quiénes son ellos?"

"Los líderes del Frente Popular Francisco Villa que tienen el control de los vendedores ambulantes de San Martín. El líder es Rubén Reyes y si no venimos nos castigan".

(V.pág.24 del periódico Público del 16 de octubre de 2005).


De gira por la Ciudad de México, Roberto Madrazo criticó duramente a Vicente Fox y Andrés Manuel López Obrador. Este último, aseguró, practica la "demagogia teologal y oferta de fe, esperanza y caridad".

Es evidente, dijo, que las promesas del candidato presidencial del PRD no se van a cumplir y que sólo pretenden "narcotizar el desconsuelo" de millones de familias.

(V.pág.26 del periódico Público del 16 de octubre de 2005).


Según la enciclopedia, siniestro quiere decir: avería grave, pérdida importante y destrucción fortuita, todo eso y mucho más es el saldo del paso del ciclón "Stan" por las costas del Golfo de México; el viento, con una velocidad menor a 150 kilómetros por hora, no presagiaba la magnitud del daño que provocarían las lluvias asociadas al fenómeno, unas cuantas horas después ya degradado y convertido en tormenta tropical, arroyos y ríos del sureste empezaron a salirse de su cauce destruyendo todo lo que encontraban a su paso.

Una señora damnificada en entrevista televisada declaró que los ríos y arroyos no habían ido a donde estaba la población, ellos fueron a su encuentro construyendo sus viviendas en las orillas donde el riesgo es mayor, aquí están las consecuencias de la falta de planeación, la codicia y la complicidad entre autoridades, instituciones y constructores de vivienda.

Jesús Daniel Muñoz Ríos, agrónomo
(v.pág.5-A del periódico El Informador del 15 de octubre de 2005).


Hace cerca de dos meses, Roberto Madrazo le envió un mensaje a Arturo Montiel. Que tenga cuidado, dijo, que si Pedro Aspe, el secretario de Hacienda de Carlos Salinas le había resuelto el problema del endeudamiento, que le volviera a pedir ayuda para que resolviera los problemas financieros familiares. Sabía, como varios más, que hacía más de un año la Secretaría de Hacienda indagaba transferencias de dinero de la familia Montiel en el periodo de su gubernatura en el Estado de México. Que lo arregle, volvió a pedir Madrazo al mensajero, pues si estalla un escándalo en contra de Montiel, le afectará también a él. Madrazo había diagnosticado correctamente: hoy, los dos precandidatos del PRI a la Presidencia están profundamente heridos, tras conocerse por televisión de la fortuna de los hijos de Montiel.

Análisis simplistas, bajo la lógica del policía de que el principal sospechoso es el más beneficiado, identifican al candidato del PRD a la Presidencia, Andrés Manuel López Obrador, como el que mayor beneficios obtiene del escándalo. Con la misma metodología, se podría ubicar también al presidente Vicente Fox y a su esposa Marta Sahagún para demostrar que en materia de tráfico de influencias, la tentación es colectiva. O los propios precandidatos del PAN a la Presidencia, que vieron como su propio cochinero en el proceso interno de selección de candidato, podía ser ocultado por el estruendoso ruido priista. Por supuesto, Madrazo figura como el autor intelectual, aunque era tan obvio que él resultara culpable, que parece poco creíble que, inclusive sus porros oaxaqueños, hubieran cometido una torpeza de tal calibre. La pregunta real no es quién fue, sino para qué desencadenó todo esto.

Raymundo Riva Palacio
(v.pág.5-A de El Informador del 15 de octubre de 2005).


El representante de los grupos indígenas, Córpulos Meza, quien fungió como portavoz de los jóvenes indígenas inconformes con la política que se practica en los últimos años. Al preguntarle qué es la política para él, en una palabra, se quedó callado por un instante, movió los ojos como buscando algo en el cielo, metió sus manos a los bolsillos del pantalón y respondió de tajo: ¡corrupción!

(V.pág.11 del periódico Público del 14 de octubre de 2005).


El estado corrupto mexicano no ha sido desmantelado. Esta omisión es una de las mayores faltas cometidas por el actual presidente de la república. Hay muchos políticos que se apropian de fondos públicos con propósitos de financiamiento de grupos o sencillamente para el enriquecimiento personal. Los circuitos de la corrupción siguen funcionando casi como antes, pero con la diferencia de que, bajo Carlos Salinas, se organizó como un sistema completo y, ahora, cada quien hace como puede.

En la superficie de la corrupción pública mexicana se encuentra el cinismo con que el asunto se trata por parte de la clase política. Las denuncias se escriben en la picaresca nacional, sin que las autoridades hagan algo y sin que el congreso emita disposiciones que ayuden a combatir este mal endémico de México.

Pablo Gómez
(v.pág.21 del periódico Público del 14 de octubre de 2005).


El IFE y la inmensa mayoría de los institutos electorales locales han sido incapaces de llamar a cuentas precisas a los partidos y menos de tomar las medidas y recomendaciones administrativas para corregir las faltas en que se incurra. Las precampañas no tienen siquiera la legislación pertinente y las normas vigentes para las campañas son tan débiles, y hay tan poca voluntad de la mayoría de consejeros electorales para aplicar la ley, que el déficit democrático persiste en: impunidad en el uso de recursos y obras públicas; arbitrariedad en el monto de recursos privados gastados, sin informar sobre orígenes y destinos de cuantiosas sumas monetarias; mercantilización de medios de difusión, que no reparan en la iniquidad propiciada.

Jaime Preciado Coronado
(v.pág.22 del periódico Público del 14 de octubre de 2005).


Don Severino me escribe desde Hermanas, risueña población a donde se retiró para tomar las aguas y escribir un ensayo intitulado: "El IMSS, un gran dilema: ¿pozo sin fondo o callejón sin salida?".

En su carta me dice don Severino que ha seguido con atención el asunto de la sucesión presidencial. "Tomando en cuenta los dos precandidatos que luchan en el PRI, y el virtual candidato que ni siquiera tuvo que luchar en el PRD, considero que la mejor decisión que podemos tomar los ciudadanos es que en el próximo sexenio no haya presidente".

He contestado ya la amable misiva del ilustre polígrafo. Le digo que su idea no me parece mal, sobre todo si se piensa que en este sexenio tampoco hemos tenido presidente, y no ha pasado mayor cosa.

Armando Fuentes Aguirre "Catón"
(v.pág.11A del periódico Mural del 13 de octubre de 2005).


Se dice que la política es el arte de posibilitar acciones, sin embargo, nuestros políticos la han convertido en el arte de manejar escándalos. Vivir en, con y para el escándalo se ha convertido en actividad de políticos. Ya no importa tanto ser buen orador o estar bien preparado, ni siquiera tener trayectoria dentro de su partido; lo importante es saber manejar escándalos. También se debe tener dominio de la teoría del complot, como antídoto contra los escándalos. En lugar de aclarar aquellas cosas por las que algún político es acusado, se dice que se trata de un complot en su contra por razones políticas. La defensa ante las acusaciones se convierte en un ataque a quien denuncia o a las supuestas razones del porqué se denuncia. Los medios de comunicación han encontrado un gran negocio en el "reality show" de la política. La falta de procesos confiables y expeditos para aclarar las acusaciones ha creado un océano de oportunidades para los medios de comunicación. A final de cuentas lo que menos importa es la verdad.

El último escándalo (hasta el momento de escribir estas líneas) lo dio a conocer Víctor Trujillo, en su noticiero matutino. El conductor dio a conocer que la familia de Arturo Montiel, precandidato presidencial por el PRI y ex gobernador del Estado de México, es investigada por la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, por el origen de más de 35 millones de pesos depositados, en efectivo, en cuentas de su hijo y por diversas operaciones de compraventa de inmuebles (me imagino que los espectaculares que dicen "Con Montiel sí ganamos", los redactaron sus hijos).

No me queda duda de que tienen razón quienes dicen que la política es el "show business" de la gente fea.

Víctor Manuel González Romero, profesor investigador y ex rector general, U. de G.
(v.pág.4-A de El Informador del 12 de octubre de 2005).


Es trágico que al país lo gobierne la disputa partidista. Sería parodia, si no fuera por lo trágico que resulta ya a estas alturas que los mexicanos vivamos en medio de una campaña de un sexenio de duración; gobernados por la lógica de "ganarle" al de enfrente y no por los imperativos del desarrollo integral. Hace seis años estábamos preocupados por financiar el desarrollo. Hoy lo estamos por el financiamiento de las campañas, sean pre o post.

Miguel Bazdresch Parada
(v.pág.21 del periódico Público del 9 de octubre de 2005).


No es un secreto que el actual Consejo General del Instituto Federal Electoral llegó cargando a sus espaldas cuestionamientos por el reparto de cuotas que hicieron en él los dos partidos con mayor votación en la elección del 2000; pero esa misma desconfianza que ha permeado a otras capas de la sociedad, debe ser atajada de inmediato, con acciones que lo avalen, para tener ya un árbitro confiable.

Editorial
(v.pág.4-A del periódico El Informador del 8 de octubre de 2005).


Cuando las elecciones del 2000, aquí sí, meses antes (y no días) de que empezara el proceso electoral, también hubo una serie de cambios que colocaron al IFE en la mira. En aquel momento se dijo que era "natural" que se dieran esos cambios y durante semanas el Instituto estuvo expuesto a un constante golpeteo -innecesario desde mi punto de vista- pero que a los partidos políticos les sirve para distraer y llevar agua a sus molinos. Son conductas irresponsables porque a ellos principalmente, les conviene que el IFE sea una institución sólida y no se vale cuestionarla sin razón.

Que no nos llame a sorpresa que durante el proceso, algunos partidos políticos intenten una vez más desacreditar al IFE.

Laura Castro Golarte
(v.pág.5-A del periódico El Informador del 8 de octubre de 2005).


La sociedad civil, que fuera protagonista central del cambio, ha sido marginada después de la alternancia, y se halla desalentada por la pequeñez e inconsistencia de las dirigencias políticas. Percibe el bloqueo de la acción gubernamental como una afrenta y no acierta a encontrar opciones esperanzadoras para el futuro que nos alcanza.

En días pasados, un grupo compacto de empresarios, rodeado de atractivas personalidades, lanzó un Acuerdo Nacional para la Unidad, el Estado de Derecho, el Desarrollo, la Inversión y el Empleo. Se trata de un texto meditado, sustantivo y abarcador. Sugerente e imaginativo en diversos pasajes y discutible en otros. No exento de lagunas y ambigüedades, contiene sin duda material valioso para el debate público.

El documento reconoce la necesidad de transitar hacia un Estado de Derecho capaz de sostener políticas de largo plazo. Omite no obstante cualquier mención a las reformas que requeriría tal metamorfosis. Entre otras, las que asegurasen una mayor autonomía del estado respecto de los poderes fácticos y viabilizaran tanto la gobernabilidad interna como la reinserción del país en el escenario global.

Los autores se dicen "respetuosos de la responsabilidad constitucional del estado", y sin embargo, el acto pareció una ceremonia de defunción de cuerpo ausente del jefe del ejecutivo, convocante por antonomasia de la unidad entre los mexicanos, justo cuando su mandato se halla en estado avanzado de descomposición.

El jefe formal de los empresarios expresó, de modo amenazante: "El voto será utilizado por una sociedad que castigará a quien no tome las decisiones adecuadas".

Porfirio Muñoz Ledo
(v.pág.4-A del periódico El Informador del 8 de octubre de 2005).


Reivindicar lo ciudadano lleva a la democratización del estado nacional; pugnar por la vigencia de derechos económicos, sociales y culturales propios de una ciudadanía contemporánea es avanzar en el reconocimiento del interés general, una tarea que no han podido cumplir solos ni los intereses corporativos gremiales, aunque se disfracen de sociedad civil, ni los partidos y políticos profesionales. Ni unos, los gremios, las corporaciones, ni los otros, funcionarios públicos y de partido, dejan de ser ciudadanos. El problema es que los primeros se proponen una ciudadanía fundada sobre el egoísmo grupal y los segundos parcelan, fragmentan lo ciudadano en función de intereses coyunturales electorales; ni unos ni otros pueden integrar la diversidad ciudadana, pues la identidad grupal que los reúne les impide ver, escuchar, registrar y, ante el deterioro de la política asociada con el sistema de partidos, representar y solucionar las tensiones entre el interés general y la heterogeneidad estructural de una sociedad desigual, polarizada como la nuestra.

Jaime Preciado Coronado
(v.pág.24 del periódico Público del 7 de octubre de 2005).


Diputados en marte

(Publicado en el suplemento "Ocio" del periódico Público del 7 de octubre de 2005).


México es un país muy responsable.

Y acepta las consecuencias de sus actos de chismorreo, trivialidad y dejadez. Por eso aguanta callado a la sarta de sátrapas y parásitos que forman buena parte de su clase dirigente.

Aguanta a sus señorías, sus caprichos, burlas, sueldos y viajes insultantes. Aguanta, incluso, que se ostenten como servidores y representantes populares.

Nemesio Maisterra
(v.pág.4A del periódico Mural del 6 de octubre de 2005).


Si el gobierno permite y escucha las voces de las personas, ¿para qué juntarse? ¿Es muy buena cada una de las organizaciones que forman parte de la sociedad civil? Lo dudo porque viendo las mismas caras en los mismos roles, ya muchos encontraron su "modus vivendi". Muchos de estos modernos "cruzados" viven de recolectar dinero del público para sus causas "nobles" siendo caciques abusivos que manejan dinero a su capricho, simulando elecciones internas.

Ahora bien, cuando una organización civil trae una consigna dogmática de un grupo faccioso que persigue su propia agenda, para mí, ya no podemos hablar de que esa organización establece un puente entre el ciudadano y la autoridad.

Si una propuesta de alguna organización civil no se convierte en una propuesta de una organización política o de una autoridad, entonces es necesario sospechar del valor civil de dicha propuesta. Hay muchas propuestas de la sociedad civil que no son propuestas democráticas, al contrario, son propuestas facciosas contrarias al espíritu democrático.

De la misma forma, muchos partidos, incluyendo el PRD, el PRI y el PAN, filtran ayudas económicas a organizaciones civiles que son apéndices de dichos partidos, disfrazados de cualquier cosa con cualquier bandera. Es fácil imaginarse la posibilidad que gobiernos extranjeros o facciones de intereses extranjeros, mantengan organizaciones dentro de la sociedad civil, dedicados a sus legítimos o ilegítimos propósitos.

Perdonen, pero no hay nada de romántico en estar idealizando las bondades de la sociedad civil, pues ni emergió del sismo del 85 ni sabemos sus buenas o malas intenciones, ni tampoco podemos afirmar que entre más sociedad civil, más democracia participativa.

Enrique Canales
(v.pág.4A del periódico Mural del 6 de octubre de 2005).


En culpa de verborrea está cayendo López Obrador al hacer los ofrecimientos que hace, tan elementales y de tan pedestre nivel que más parecen de candidato a alcalde de un villorrio que de aspirante a dirigir una república. Eso de que cuando sea presidente no usará el avión presidencial, y viajará sólo en vuelos comerciales, es cosa risible, pero da la medida exacta de los modestísimos alcances del candidato único del PRD que todavía no es candidato. Al hacer tal declaración AMLO no se pone a pensar en los problemas de seguridad que originaría el hecho de que el presidente viajara en vuelos comerciales, ni en las molestias que sufrirían los pasajeros, ni en los inconvenientes y dificultades de todo orden para las líneas aéreas. Las dificultades y trastornos serían muchos y el ahorro ninguno. López Obrador se quiere presentar como un político austero de costumbres, pero al hacerlo cae en la chabacanería y la simpleza. Volvemos a lo mismo: populismo puro, demagogia barata que nada más a quienes no piensan ni razonan puede impresionar. Pronunciamientos aldeanos son los de López Obrador. Y un país como el nuestro no es aldea...

Armando Fuentes Aguirre "Catón"
(v.periódico a.m. del 6 de octubre de 2005).


Tantos aspirantes a una candidatura para puestos de elección popular de todos los partidos, pueden "adoptar" un parque, y en lugar de pegar calcomanías en los automóviles, repartir volantes o reunirse con amigos en la búsqueda de recursos, les redituaría más en la simpatía de los votantes, el acudir a "su" parque los fines de semana, con un bote de pintura y brochas, arbolitos para reforestar, utensilios de limpieza, etc., y dedicar una jornada completa cada ocho días, a remozarlo.

Editorial
(v.pág.4-A del periódico El Informador del 3 de octubre de 2005).


Queremos combatir lo que él (Carlos Pereyra), con dureza pero con ingenio, llamó "la política del agandalle", esta política del abuso y de la violación de reglas, de la ausencia de autocontención y de la proclividad a los acuerdos corruptos, a las presiones ilegales e ilegítimas y de la avidez por las ganancias pecuniarias. Contra la "política del agandalle", que no es otra cosa que la perversión y el envilecimiento de la política democrática; proponemos construir una política sensata, responsable y guiada por un compromiso ético de luchar contra las desigualdades y las injusticias que traspasan cada poro de nuestra nación.

Gilberto Rincón Gallardo, en la presentación de la Fundación Carlos Pereyra, el 27 de agosto de 1999
(v.pág.4-A del periódico El Informador del 3 de octubre de 2005).


Videoescándalos vienen, videoescándalos van y los partidos políticos, como el ave fénix, resurgen de sus cenizas para seguir medrando de las prerrogativas. Bejaranos van, Bejaranos vienen y los protagonistas de esas truculentas historias, como el gato Félix, se pasean rascándose la panza y a la risa y risa.

De acuerdo con la lógica -es un decir que priva en nuestra partidocracia, para ser candidato a lo que sea resulta que hay que llamarse Gastón Billetes. Ya vimos al operador político del Peje agarrar pacas de dólares hasta que el portafolio se destripe o las ligas se revienten; después vimos a las huestes del Niño Verde rematar regidurías como si fueran plazas sindicales o aviadurías en Pemex. ¿Habladurías? Bueno fuera, pero las evidencias indican lo contrario. Señoras y señores, ahí tienen ustedes la estatura moral de la tercera y la cuarta fuerzas políticas.

En este país de narcocampañas y narcolimosnas, ¿no sería prudente poder saber cuánto les ingresa, en qué se lo gastan y de dónde lo sacan? No es ocioso, porque los gobernantes con "patrocinadores" tienen compromisos con todos, menos con quienes les dieron su voto.

Hay quienes dicen que nuestra democracia es "incipiente". A mí me parece deficiente. Y mientras sólo sirva de trampolín para trepadores ambiciosos, repulsiva.

Toñimáximus
(v.pág.2 del periódico Público del 2 de octubre de 2005).


Nuestros hombres políticos no sólo dedican su tiempo -que es el tiempo de todos, el tiempo de la nación- a sus mezquinas rencillas y luchas de poder sino que, en los hechos, constituyen un criminal estorbo al desarrollo de México. Lo más escandaloso es que ellos son, en sentido estricto, nuestros representantes pero, canallescamente desentendidos de los intereses superiores de la nación e irremediablemente acobardados por la simple perspectiva de perder un puñado de votos en las siguientes elecciones, tienen una agenda propia, viven en la distancia, en un país de ficción que imaginan diferente -mucho más benigno, desde luego, a cuenta de los privilegios que disfrutan- y, anestesiados, no tienen ni siquiera problemas de conciencia ni mucho menos de rendición de cuentas.

No ha habido, por lo que parece, una visión común de los problemas de México tan apremiante como para que los responsables de propiciar los cambios y de ejcutar las políticas públicas se hayan sentido obligados a dar respuestas. Están ahí, debatiendo sobre los encuentros entre Carlos Salinas y el actual secretario de Hacienda, ocupados en sus negocios de venta de regidurías, entretenidos en pequeñeces, pegándose de gritos en las cámaras, relamiéndose con el dinero que les va a tocar en las campañas y, sobre todo, sacándose los ojos entre ellos sin haber siquiera echado una mirada a los grandes temas de la nación: el crecimiento, la inseguridad, el empleo, la educación. Vamos a ver si ahora, confrontados a una iniciativa de los ciudadanos más prominentes y emprendedores de este país -hombres de negocios, intelectuales, científicos, es decir, creadores de las verdaderas riquezas materiales y culturales de México- se despiertan por fin y se ponen a trabajar por el bien de todos.

Román Revueltas Retes
(v.pág.3 del periódico Público del 2 de octubre de 2005).


Este sexenio ha sido de borrachera partidocrática y mediática. Es momento de ponerle freno y dar paso a la sobriedad.

No es posible escudarse más en leyes y normas para no escuchar el grito de la realidad. Es una percepción nacional que ciertas posiciones de partidos y políticos ya no se pueden sostener. Por ejemplo: Poco importa si es legal o no gastar la enorme cantidad de millones que los políticos están gastando en precampañas o campañas internas. La percepción generalizada es que se atenta contra el sentido más elemental de respeto por la situación que viven los mexicanos. El país no puede permitirse, pero sobre todo no lo necesita, gastar en el proceso electoral los 6 o 7,000 millones de pesos que costará, por arriba, el proceso electoral federal; sumemos el monto en los estados y municipios y lo que se gasta"por abajo" y tendremos una cifra varias veces mayor que lo invertido en el Programa Oportunidades.

Si los diputados, senadores y demás gerentes de la política no han sido capaces, en los cinco años anteriores, de hacer los cambios correspondientes en las leyes, que un día sí fueron necesarias, es porque en el fondo no representan al pueblo sino a los intereses partidocráticos. Así de evidente es el exceso.

No importa que sea legal retirarse de un cargo de elección popular para aspirar a una candidatura. La percepción general es de fraude, de frustración y enojo. Aún no acaban de dar el ancho, de mostrar sus capacidades reales y de lograr lo prometido y ya buscan una nueva chamba como si se tratara de una feria y de visitar todos los "puestos".

Muchísimos no queremos campañas largas, costosas y aburridas. A los partidos, a los políticos, a los medios electrónicos les bastarían tres días completos, bien pensados, para mostrar a todo el país sus críticas, sus propuestas y sus diferencias para informar al elector y [que] éste razone su voto.

¿Por qué si para el voto en el extranjero sólo se permite un tríptico por partido, con sus ideas y propuestas, no se aprueba para los que aquí estamos?

Miguel Bazdresch Parada
(v.pág.20 del periódico Público del 2 de octubre de 2005).


El problema del IFE es de origen, porque su integración se dio como reparto de cuotas entre el PRI y el PAN; eso es lo que está ocasionando todos esos diferendos.

No hubo una buena integración del Consejo General del Instituto y también en el caso del tribunal hay demasiada cercanía con el PRI y el PAN.

Andrés Manuel López Obrador, precandidato a la Presidencia de la República por el PRD
(v.pág.22 del periódico Público del 2 de octubre de 2005).


Un triunfo de Alberto Cárdenas [en la elección interna del PAN] sería una clara señal de que se acerca el Apocalipsis.

Juan Alberto Vázquez
(v.pág.30 del periódico Público del 2 de octubre de 2005).


El llamado "Acuerdo de Chapultepec", que fue firmado el pasado jueves, es una auténtica lección de cómo alcanzar consensos cuando se tiene altitud de miras, que diversos líderes sociales, empresariales, del sindicalismo y la academia, del deporte y el espectáculo, han mandado a quienes han tenido en sus manos el monopolio de la política partidista y han hecho de ella un botín con grandes rendimientos grupales, pero muy magros resultados en beneficio de la sociedad. Los distintos órdenes de gobierno, la representación legislativa, el poder judicial, los partidos políticos y toda la pléyade de candidatos que recorren el país gastando recursos públicos con retórica poco convincente y escasa de argumentos y propuestas, deberían tomar nota del mensaje que lleva la rúbrica de centenares de mexicanos que piden no postergar más los acuerdos para alcanzar mejores niveles en la calidad de vida de todos.

Editorial
(v.pág.4-A del periódico El Informador del 1o.de octubre de 2005).


Hoy nadie se pronuncia en contra de la urgencia de llevar a cabo la profunda reforma del estado y existe una extendida conciencia pública sobre la urgencia de construir un nuevo sistema político, que asegure la sustentabilidad de la democracia y la viabilidad del país. A pesar de ello, los actores políticos responsables no han avanzado en los acuerdos mínimos que permitieran llevar adelante una empresa de tal envergadura. Hemos caído en la insalvable contradicción del doble lenguaje, que a su vez incrementa el descrédito de la clase gobernante.

Cumplimos, con cierta lentitud pero de modo irrevocable, la primera fase del cambio político, comúnmente llamado la "reforma pactada". Esto es, llevamos a cabo las modificaciones legales para que el voto se respetara y se generó también la emergencia social que hizo posible el triunfo electoral de los adversarios del poder establecido. Con ello, se satisfizo una gran asignatura pendiente de nuestra historia pero arribamos a un escenario inédito, en que los contendientes privilegiaron la ocupación y el reparto del poder y desestimaron la reforma institucional. Nadie, por otra parte, mostró interés real en abolir las prácticas autoritarias del pasado, ni en combatir las secuelas de la corrupción.

En estas circunstancias, se volvió imposible consumar la segunda fase de toda transición, comúnmente llamada la "ruptura pactada", indispensable para el establecimiento de un nuevo sistema político.

Fue evidente que a la derecha le importaba, casi exclusivamente, lograr reformas legales y crear condiciones políticas para llegar al poder; o como lo formularon más tarde: "para sacar al PRI de Los Pinos". Dentro de esta lógica, la alternancia política se concretaba en la sustitución rotativa entre los partidos de la titularidad del poder ejecutivo. No se les recuerda, por ello, ninguna propuesta sustantiva para cambiar el régimen político ni apoyo alguno para la consecución de las reformas.

Por su parte, el grueso de la izquierda, una vez iniciada la campaña electoral del año 2000, se extravió en la apología del caudillismo y parecía olvidarse de los objetivos de fondo que justificaban su propia denominación: la "revolución democrática".

Porfirio Muñoz Ledo
(v.pág.4-A del periódico El Informador del 1o.de octubre de 2005).


Preocuparse porque Gil Díaz se reunió con Salinas, sobre si éste conocía a Carlos Ahumada o no, sobre si López Obrador quiere vivir en Palacio Nacional o en Los Pinos, es estúpido, intrascendente. La dimensión que tiene para millones de personas que siendo la economía 12 en el mundo somos la 55 en competitividad tendría que ser objeto de un enorme debate público. Pero la información ha pasado casi desapercibida. La mayoría de los candidatos y partidos están ocupados en otra cosa: en el chisme barato, en la intrascendencia.

Jorge Fernández Menéndez
(México Confidencial, 30 de septiembre de 2005).


Estaban ahí la mañana de este jueves, en el alcázar del Castillo de Chapultepec, muchos de quienes pueden hacer realidad una parte importante de los objetivos planteados en el Acuerdo Nacional que hoy se firmó, y eso con sólo enderezar las acciones de sus enormes fortunas y empresas en esa dirección. También estaban líderes sociales y gremiales que con el poder de sus organizaciones pueden empujar al gobierno, a los partidos políticos, a los candidatos presidenciales a asumir compromisos que ahí se plasman y a establecer verdaderos objetivos de estado más allá de los intereses partidarios.

¿Pasará lo firmado de la letra a la realidad? ¿Escucharán el gobierno, los partidos, la clase política este llamado o prestarán de nuevo oídos sordos?

Que este país no aguanta más sin una redistribución más equitativa del ingreso. Que no podemos seguir cumpliendo puntualmente con lo establecido en el Consenso de Washington mientras cunde en el país el desempleo y la frustración y la miseria campean por todos lados. Que la corrupción generalizada nos tiene sitiados y la inseguridad pública nos hace vivir con el temor de ser asaltados o muertos en cada esquina. Que este miedo crece por la inoperancia del sistema judicial y la impunidad que garantiza al criminal seguir actuando aun desde la cárcel, y eso en el extraño caso de que caiga en ella. Que la democracia ha sido convertida en una mercancía por el cinismo brutal de los políticos que se postran ante el poder del dinero gracias al cual conquistan, seducen, manipulan la voluntad ciudadana luego de eternas y costosísimas contiendas electorales.Que ya no podemos seguir desmantelando y reconstruyendo cada seis años al país entero de acuerdo con el capricho del gobernante en turno, de su partido, peor aún de su grupúsculo, de su pandilla. Que nos duele y nos angustia el porvenir de nuestros hijos porque la educación que reciben no es buena y la salud que podemos ofrecerles es peor. Que se nos acaban los bosques, el agua, el aire que respiramos. Que estamos hartos, cansados, frustrados porque el país no crece con justicia, en democracia real y efectiva, con empleo, con seguridad, con salud, es algo que ya nadie, por más que viva en su burbuja de bienestar, puede negar.

Recorren ya el territorio nacional los candidatos con su retahíla de promesas. Los partidos se desgarran en contiendas internas marcadas más por la mezquinidad y la trapacería que por la confrontación de ideas. Izquierda y derecha han perdido la orientación ideológica que les daba sentido. El mundo no es el mismo pero ellos siguen iguales, instalados en el pasado. Sólo que ya no debaten entre sí, ya no se confrontan con sus tradicionales enemigos ideológicos. Más bien se dehacen en luchas intestinas y se fraccionan o en nombre de una "pureza" que ya no existe o se pierden en inútiles intrigas palaciegas o se deshacen en medio de verdaderas peleas callejeras, más propias de pandillas que de partidos políticos. Es la disputa por el poder casi a cualquier costo.

La saturación de mensajes en los medios hace imposible y por momentos innecesario distinguir quién pertenece a qué partido y qué es lo que realmente pretende. Poco importan, por otra parte, las diferencias ideológicas; hay muchas mentiras, demasiada mercadotecnia, pura mercadotecnia y casi nunguna propuesta. Nadie en la clase política parece realmente pensar en el país. El reparto anticipado del botín los tiene absortos y esto mientras la gente desencantada, frustrada, harta también de la política y los políticos comienza a considerar la democracia sólo como un estorbo. Que este mal, la indiferencia, se propague aún más es un riesgo que no podemos permitirnos. Urge devolver majestad a la política. Enderezar el debate al campo de las ideas y las propuestas. Para eso sirve, entre otras cosas, el Acuerdo Nacional.

Hay en él, sobre todo, un propósito claro: establecer políticas de estado para que el país no siga a merced de los vaivenes sexenales, para que crezca con justicia, empleo, seguridad y en democracia. ¿Quién puede estar en desacuerdo?

Si los políticos recogen la estafeta, si este documento, entre otros que puedan surgir que lo complementen y enriquezcan, les ata las manos y les libera las ideas, el próximo proceso electoral podrá significar un afianzamiento de la democracia en México y no su depedida.

Epigmenio Ibarra
(v.pág.23 del periódico Público del 30 de septiembre de 2005).


El último capítulo del Acuerdo Nacional para la Unidad, el Estado de Derecho, el Desarrollo, la Inversión y el Empleo, habla de reformar la administración pública para hacerla más eficiente.

Aquí es necesario "legislar para que las empresas del estado tengan una gestión autónoma, sin interferencias políticas, desvinculadas de los presupuestos públicos, operadas con transparencia por órganos de gobierno profesionales, con un consejo de administración cuyo mandato sea maximizar la riqueza nacional, reinvertir utilidades y fomentar el mantenimiento y desarrollo".

Que posean "consejeros independientes que nombren y remuevan al director general y que decidan sobre las inversiones y compensaciones; con un comité de vigilancia y auditoría".

Finalmente, se propone "generar las medidas necesarias para asegurar el desarrollo permanente y sostenible de las instituciones de seguridad social, así como del sistema de pensiones y jubilaciones".

(V.pág.25 del periódico Público del 30 de septiembre de 2005).


Si analizamos los orígenes de nuestros partidos políticos, encontramos que surgieron de una manera u otra, del movimiento revolucionario. El PRI fue el resultado final de los ensayos de institucionalización de la vida política de los revolucionarios, que buscaban dar continuidad a sus programas sociales y políticos, y desde luego garantizar su permanencia en el poder.

Por su parte el PAN surgió como el hermano desavenido, fundado por un talentoso e importante funcionario de los gobiernos que corresponden a la década del callismo, Manuel Gómez Morín, que perteneció al llamado grupo de los "siete sabios", desempeñó importantes cargos en varias administraciones y contribuyó de manera importante a fincar el sistema bancario y financiero del país, pero desilusionado por la traición a los principios e ideales de la Revolución, se desligó del gobierno y decidió fundar el PAN, como respuesta ciudadana a la búsqueda de una auténtica democracia, así como de los valores nacionales fundamentales.

Por su parte el PRD debe su origen igualmente a la desilusión de prominentes priistas, que en la década de los 80, decidieron separarse del partido oficial, considerando que éste había claudicado de sus principios revolucionarios y que no respondía ya a las auténticas demandas del pueblo mexicano.

Pero en el comienzo del siglo XXI parece que las estructuras de estos partidos políticos están resistiendo muy débilmente al juicio del tiempo y de las actuales necesidades, pues se encuentran inmersos en una serie de polémicas internas y de luchas por el poder y ante los ciudadanos y habitantes del país, no muestran una convincente postura ideológica y una congruencia con sus principios e ideales. El espectáculo que están presentando ante el país, es el de grupos dentro de los cuales luchan encarnizadamente sus dirigentes, por controlar los puestos de gobierno y la posibilidad de colocar a sus incondicionales en los mismos. La pregunta es si estamos en presencia del final del ciclo de dichas estructuras políticas, y si debemos los ciudadanos comenzar a construir nuevas instituciones y plantear nuevos rumbos y conductos, más flexibles y saneados, para encauzar la acción pública. Hasta ahora, estos institutos políticos han tenido secuestrada a la vida política del país y nada indica que estén dispuestos a soltar tan jugosa prebenda que les concede la ley.

Es por ello que los ciudadanos debemos buscar nuevos canales de organización política, que nos retribuyan el carácter de actores políticos y que nos permitan realmente expresar nuestras inquietudes y nuestra manera de pensar en lo que concierne a la Cosa Pública, pues hasta ahora hemos sido y seguimos siendo, espectadores pasivos de una serie de batallas internecinas en los partidos políticos, que se disputan con fiereza las canonjías políticas, sin dar opción alguna a los auténticos dueños del poder público, que por definición constitucional lo es El Pueblo. Las encuestas muestran de manera por demás incontrovertible, el hartazgo y la desilusión de los habitantes del país, ante la manera de conducirse los políticos, y de la manera de conducir los destinos del país. Por lo tanto es tiempo ya de que se busquen nuevos caminos para la expresión de la voz ciudadana, en política ésta es la que tiene la última palabra.

Sergio A.López Rivera, abogado
(v.pág.5-A del periódico El Informador del 28 de septiembre de 2005).


No es falta de planes ni de iniciativa lo que ha dado al traste con muchos proyectos de desarrollo para el Estado [de Jalisco], sino la incapacidad para continuarlos más allá de períodos de gobierno, porque son generalmente los políticos, en un afán proselitista, electorero, sin el más elemental sentido de servicio público, los que cada tres o seis años intentan reinventar el municipio, el estado o el país, deslindándose de lo poco o mucho que pudieron haber alcanzado sus antecesores.

Editorial
(v.pág.4-A del periódico El Informador del 27 de septiembre de 2005).


Livianita la semana. Allá el negocio que espere. Nosotros traemos otras tareas de trascendencia a futuro, de trascendencia a rango, a cargo, a puesto... a hueso pues, para que no digan que actuamos a las callandas. Ora para acá y la otra semana para allá, así andan nuestros altos funcionarios en declarada, activa y efectiva campaña electoral.

El señor Paco, señor de altos vuelos y caminos largos emprendió su reciente promoción electoral a los estados del sur, y no alcanza a ver que en esto que hace, daña, no favorece a su candidato; que éste tendría mejor aceptación si no se le hiciera cargar este fardo, como decir: pa’ que te digo, Paco; si otros dicen que a Felipe contigo, ya lo besó el diablo.

No entre verdes magueyeras, éste pasa ahora por Jalisco con signos de inquietud, de desgano, descomposición política que comienza en las oficinas estatales. Todo lo que hace, promueve, inicia, propone o emprende la autoridad de Jalisco, topa en el choque bravo y resuelto de los ciudadanos que parece que se pusieron de acuerdo para decir no a todo.

Luis Sandoval Godoy
(v.pág.4-A del periódico El Informador del 27 de septiembre de 2005).


La avasalladora dictadura de los medios electrónicos está haciendo que, ahora más que nunca, la prestancia de los protagonistas sea requisito indispensable para siquiera poder aspirar al triunfo. Fuera los torpes, los tímidos, los reservados, los discretos, digan lo que digan, piensen lo que piensen. Es el momento de los que, a través de los artificios de la actuación, pueden proyectar la imagen del duro, del que no tiene dudas, del simpático. Y, lo peor es que no podemos realmente saber lo que hay detrás.

Román Revueltas Retes
(v.pág.3 del periódico Público del 25 de septiembre de 2005).


"Reitero mi invitación a los ciudadanos partidarios de este país, para que nos abstengamos en absoluto de asistir a los juegos del gobierno, mientras los dueños no respeten a la afición".

Porque esa es la medida: La indignación que causa observar mil y una veces los mismos errores, las mismas explicaciones, las mismas disculpas y la repetición ad nauseam de la misma película de imposiciones y desprecios.

Los gobiernos mexicanos han de enfrentar la inmediata posibilidad de que los ciudadanos nos abstengamos de acudir a sus llamados.

Insistamos en el vergonzoso ejemplo de las campañas políticas. Se ha hablado desde años atrás y cada vez que se trata de hacer algo, pasa ¡nada! Durante años se ha dicho que es vergonzoso el dinero que cuestan. Igual número de años que los intentos de modificar las leyes chocan con los intereses de unos cuantos: los partidos, que sin respeto por el país y por los ciudadanos y con la mira sólo en el dinero, mantienen las disposiciones indignantes sobre el financiamiento de las mismas, con mil argumentos, cada uno peor que el otro. No más argumentos acerca del por qué no se puede. Sólo cambien la ley. Ya. ¿Por qué será que cambiar la ley y decidir en contra del ciudadno sí se puede, y rápido? Para eso no hay obstáculos. En Jalisco una decisión y un proyecto de resolución lo muestran. Las autoridades electorales de Jalisco decidieron retirar de sus medios electrónicos de información los datos relativos a los cheques que se otorgan a los partidos, alegando que corresponde a los partidos informar cuánto recibieron. Sin embargo, ese hecho, cierto, no fundamenta que el cheque otorgado por el IEEJ no sea responsabilidad del emisor. Y como es dinero público, también es su obligación legal darlo a conocer a los ciudadanos. Otra cosa es torcer los renglones.

Miguel Bazdresch
(v.pág.19 del periódico Público del 25 de septiembre de 2005).


Sigue quedando en evidencia la incapacidad del ejecutivo [jalisciense] para convencer, para negociar y la verdad es que ni siquiera sería necesario llegar a ese punto si la gente fuera tomada en cuenta e informada de manera comedida y oportuna, pero no, se han de llevar las cosas a los extremos.

Laura Castro Golarte
(v.pág.5-A del periódico El Informador del 24 de septiembre de 2005).


El presidente es testigo de un franco y abierto deterioro de los partidos políticos y de una legislatura dividida, desorganizada, que confirma las pocas probabilidades de que alguna iniciativa de ley urgente sea aprobada en este periodo.

Ana María Salazar, académica del ITAM
(v.pág.5-A de El Informador del 24 de septiembre de 2005).


Andrés Manuel López Obrador no se muerde la lengua, pero el IFE debería enrolar sus gastos actuales en los de su campaña oficial, y aun lo que erogó en promocionarse durante todo el sexenio, pues él está en campaña por la Presidencia desde que asumió el gobierno del DF, aunque fingiera otra cosa.

Ya no le queda al Peje jugar al "compló", porque la gente descubrió su patraña, como tampoco intentar desprestigiar a los organismos electorales, para no reconocer su fallo final de la elección presidencial, si le resultara adverso.

Salvador Flores Llamas
(v.pág.5-A de El Informador del 24 de septiembre de 2005).


Una cuestión inquietante es el por qué dos funcionarios del nivel del secretario de Seguridad Pública federal, Ramón Martín Huerta, y del comisionado de la Policía Federal Preventiva, general Tomás Valencia Angeles, viajaran en el mismo aparato rompiendo reglas básicas del protocolo de seguridad.

Marcela Gómez Zalce
(v.pág.22 del periódico Público del 23 de septiembre de 2005).


Se puede tener una mejor democracia si se incorporan en las instituciones los planteamientos ciudadanos. Ellos se constituyen en contrapesos de la tendencia permanente del sistema político a parcelarse, en función de intereses partidarios o de sectores sociales influyentes. Así lo muestran algunos logros innegables de sociedad y gobierno en la modelación y moderación de dos instituciones fundamentales para la vida pública nacional: el Instituto Federal Electoral y el Instituto Federal de Acceso a la Información Pública. Sin embargo, la potencial calidad democrática que aportan esos institutos enfrenta el deterioro producido por el protagonismo de las elites partidarias y funcionarios gubernamentales, que han pervertido el carácter ciudadano autónomo y vigilante con que nacieron esos organismos. Así como el actual Consejo General del IFE muestra los arreglos por cuotas entre partidos, los institutos estatales han reproducido esas mismas prácticas. En contraste, aunque el IFAI cuenta con consejeros que aportan calidad democrática a la relación entre gobierno federal y ciudadanos, los organismos estatales continúan cercados por las negociaciones partidocráticas centradas en cuotas de poder.

¿Podrán esos organismos potenciar los aciertos de sus pares federales, cuando los integrantes de sus direcciones están más preocupados por responder a sus patrocinadores que a impulsar el interés general?

Urge otro diseño institucional para incorporar planteamientos ciudadanos que contribuyan, de manera honesta e informada, a una mayor calidad democrática.

Jaime Preciado Coronado
(v.pág.24 del periódico Público del 23 de septiembre de 2005).


Para nuestros gobernantes es imposible combatir la corrupción, cuando ellos mismos, sus partidos y muchos de sus funcionarios, la fomentan al no sentir la obligación de comprobar los gastos que hacen con nuestro dinero. Si el de arriba es corrupto, los de abajo también. Es injusto que los obligados ante ellos seamos nosotros, mientras ellos, que están a nuestro servicio, no se sientan obligados ante nadie.

Si los funcionarios de abajo ven que su jefe cuenta con una partida oficial para "atención ciudadana", "gastos de viaje" o "promoción social", digamos, y se gasta dicha partida en dádivas y caprichos personales, pues los de abajo se sienten autorizados a pepenar lo que sea por donde sea. Si el jefe, por corrupto, siente que no tiene por qué comprobar sus gastos autorizados, entonces todos sus funcionarios están autorizados a corromperse también.

En un empleo normal en cualquier empresa, todo gasto de un empleado que no se comprueba es considerado como rasquiña, porque así lo considera Hacienda y así también lo consideran los accionistas. Si eso se hace con el dinero privado, pues con el dinero sagrado del pueblo deberíamos ser más estrictos.

Funcionarios de los tres partidos principales muestran una tendencia similar en el ocultamiento del dinero de nuestros impuestos. Después de haber sacado al PRI de Los Pinos, no podemos decir que los funcionarios de un partido son más decentes que los funcionarios de otros partidos.

Los altos jerarcas del PAN, PRI y del PRD, han bloqueado la aplicación de la Ley de Transparencia de una manera brutal y seguimos enviando buena parte de nuestros impuestos a ciegas.

Enrique Canales
(v.pág.13A del periódico Mural del 22 de septiembre de 2005).


Con estos gobernantes actuales, ya no sabe uno si reír o llorar.

El proceso es siempre el mismo con todos, sin importar los colores de su camiseta: buscan a como dé lugar un espacio en los medios para darse a conocer y adquirir cierta "fama", aunque sea mala, y luego van tras de un hueso. Si la fortuna les sonríe y consiguen uno por la vía electoral, hagan de cuenta que sacaron reintegro en la Lotería: ya tienen otra oportunidad de seguir jugando. Pero ahora con ventaja: mediante trucos de maguito de fiestas infantiles: nada por aquí, nada por allá... acaban por desaparecer una feria sin que nadie se dé cuenta. Pero no para robársela, cómo creen: ahora todos "son honestos", hasta los mismos rateros de hace unos cuantos sexenios.

Más bien, el dinero es para un buen fin: entregárselo a los medios, de preferencia a las dos televisoras, para conseguir aún más notoriedad y así intentar el siguiente asalto... perdón, salto.

Pero no todos los años son de elecciones, por desgracia para ellos -para nosotros, casi todos los años son de desgracia-, así que en lo que esperan, deben hacer como que trabajan. Y como decía mi abuelo Pancho, ahí es donde la puerca torció el rabo.

Es en esos años fatídicos, tediosos, donde deben anunciar sus proyectos, consultar sus decisiones, transparentar los recursos, negociar con los inconformes. En pocas palabras, es cuando deben gobernar. Y ahí está el problema: no saben cómo hacerlo.

Es verdad: en este país, los gobernantes desconocen su oficio.

Paco Navarrete
(v.pág.3B del periódico Mural del 22 de septiembre de 2005).


En la lucha desmesurada por el poder público en la que se han involucrado políticos de todos los niveles y de todos los partidos, con miras a las elecciones del 2006, no podía faltar un elemento que refleja el bajo nivel en que han caído las precampañas y un mal augurio de lo que falta por venir: el cinismo político.

Cuando en la arena política se compite, no por una plataforma ideológica, no por programas de gobierno, no por un proyecto de nación, sino por el simple afán de conquistar o mantener el poder, surge el oportunismo, los principios salen sobrando y también la congruencia histórica.

De esta manera, llega un momento en que los partidos y sus militantes tratan de enterrar y olvidar a toda costa su pasado, rechazando cualquier atadura ideológica, histórica, ética o moral que les impida cumplir su único objetivo, que es mantener o conquistar el poder, a costa de lo que sea.

En estas circunstancias, se empiezan a plantear en el país escenarios que difícilmente se hubieran concebido hace unos años. En contiendas electorales siempre hubo golpes bajos, deserciones y traiciones, pero hay indicios de que asistimos al comienzo de una etapa de descarado oportunismo o cinismo político, como no se había visto en mucho tiempo.

Dentro de este marco, no es de extrañar la declaración del secretario general del PAN invitando abiertamente a la disidente ex-secretaria general del PRI y todavía dirigente de uno de los sectores más combativos del priismo, el magisterio, a sumarse a las filas panistas para lograr el triunfo de los albiazules en las elecciones del 2006.

En correspondencia, la profesora Gordillo reconoció que ha tenido acercamientos con los precandidatos panistas a la Presidencia de la República, Santiago Creel Miranda y Felipe Calderón Hinojosa, además de que no se ignora su liderazgo en el Partido Nueva Alianza, que ayudó a formar cuando todavía era secretaria general del PRI, y desde luego sus compromisos con los huéspedes de Los Pinos.

Entre los panistas existe buen ánimo para abrirle a la profesora un campo común de acción y pensamiento político, ya que esto fortalecería la campaña blanquiazul, afirmó uno de los precandidatos aludidos, Santiago Creel.

Por lo visto, la lucha por el poder une ya a viejos adversarios, encaminados hoy a formar alianzas que ni en sus épocas de mayor apertura hubieran imaginado fundadores del PAN como Manuel Gómez Morín y Efraín González Luna, reconocidos ideólogos de su partido.

No sabemos cómo evolucionen las estrategias planteadas ahora por los dirigentes partidistas ni cómo reaccionarán ante ellas los electores, pero de lo que sí podemos estar ciertos es que el abandono de principios en aras de alcanzar el poder por el poder, nunca fue señal de buenos gobiernos.

Editorial
(v.pág.4-A del periódico El Informador del 21 de septiembre de 2005).


A nombre de una docena de asociaciones civiles, este martes se llevó al Congreso del Estado un documento que será repartido a los 40 diputados que manifiesta el rechazo a la forma en como se integró y continúa formándose el organigrama del Instituto de Transparencia e Información Pública del Estado [de Jalisco].

Hacen una invitación a los coordinadores de cada fracción parlamentaria para que participen en la "Mesa Ciudadana por la Transparencia", en la que se exigirá que los partidos políticos no participen y que los cargos sean ocupados por las personas con los perfiles adecuados.

Hay algunas cosas que ya despiertan inquietud, porque el instituto se vaya a partidizar o lo tenga algún coto de poder.

Son distintas las voces que han señalado a personas que formarán parte del instituto y que tiene un relación directa con el PAN, tal es el caso de quien fungirá como director jurídico, Claudio Lemus Fortoul, Cynthia Cantero Pacheco y Paula Ramírez, entre otros.

(V.pág.10-B del periódico El Informador del 21 de septiembre de 2005).


El malo, el malo y el peor

(Publicado en el periódico El Informador del 20 de septiembre de 2005).


La repentina paralización del sistema computarizado de semáforos de Guadalajara ha venido a empeorar de manera considerable la ya de por sí difícil problemática de tránsito que desde hace años vive la ciudad por sus deficientes vialidades y el constante aumento de vehículos en circulación.

Nadie discute la bondad del programa de modernización de semáforos, que de acuerdo con la Secretaría de Vialidad, vendrá a mejorar el flujo vehicular de las más importantes avenidas, donde el actual sistema se encuentra obsoleto; pero es necesario realizarlo con rapidez y eficacia y, si es posible, por partes, arteria por arteria, sin necesidad de colapsarlo todo.

El plan de modernización se lleva a cabo en 19 zonas de la ciudad, que comprenden un total de 800 cruceros semaforizados, y de acuerdo a lo informado por funcionarios de Vialidad, su rehabilitación podría tardar hasta 15 días, lo que representa un serio problema para la ciudad.

No parece lógico que tratándose de un sistema computarizado, se haga necesario tardar hasta dos semanas para rehabilitarlo, cuando lo normal, si se trabaja con equipo tan sofisticado, sería ocupar unas cuantas horas, si no es que minutos.

Ahora bien, si de lo que se trata es de "impresionar" a la gente, para que note que alguien está trabajando [a lo pendejo, agregaría el webmaster], ciertamente no pudieron haber escogido mejor alternativa que colapsar a un mismo tiempo todo el sistema de semáforos, pero a sabiendas de que esto lesiona el interés público.

Editorial
(v.pág.4-A del periódico El Informador del 20 de septiembre de 2005).


La Asociación Nacional para la Reforma del Estado pidió a los partidos políticos fijar una posición clara, e impulsar en el congreso una reforma para fiscalizar los gastos de las campañas electorales que podrían alcanzar los nueve mil millones de pesos el próximo año.

En conferencia de prensa, Porfirio Muñoz Ledo, presidente de la asociación, dijo que la campaña electoral de México podría ser "la más cara en la historia de la humanidad".

(V.pág.12-A del periódico El Informador del 20 de septiembre de 2005).


Todavía no pueden dar cauce a los asuntos que se han generado durante su gestión, pero muchos de ellos ya están atendiendo las precampañas electorales. Los regidores del Ayuntamiento [de] Guadalajara acumulan al menos 400 asuntos sin resolver y los pendientes en las comisiones edilicias se siguen acumulando.

(V.primera plana del periódico Público del 18 de septiembre de 2005).


Que nadie se llame a engaño: con tal de pasarse otro período mamando del presupuesto un maromero de la polaca, independientemente de signo y partido, es capaz de gastarse hasta lo que no tiene y prometer lo que sabe no podrá cumplr jamás... ¡y todo en nombre de la democracia!

Toñimáximus
(v.pág.2 del periódico Público del 18 de septiembre de 2005).


El líder zapatista ironizó sobre los modelos de oratoria existentes en la actualidad entre la clase política mexicana: "Está el método de poder enfrentar la polémica. Señor subcomandante Marcos, ¿qué tiene que decirle a Andrés Manuel López Obrador y al PRD?", se preguntó Marcos frente a los más de dos mil presentes en el poblado zapatista. "Lo que diga mi dedito", se autorespondió para luego pintar un dedo al candidato presidencial perredista.

Posteriormente hizo referencia a Roberto Madrazo al señalar: "Hay más métodos de oratoria que también están de moda. Está el modelo genealógico. Mi papá me enseñó que aquellos que quieren a México lo venden todo completo, no en partes".

"Otro modelo autocrítico es: porque soy mediocre, quiero ser presidente", mencionó en referencia a Santiago Creel.

Dichos ejemplos, dijo, "son más o menos los estilos de oratoria que recomiendan los asesores de imagen y cobran bastante. Yo se los hubiera hecho gratis".

(V.pág.23 del periódico Público del 18 de septiembre de 2005).


La mayor parte de los usufructuarios del poder -en los tres niveles- se acercan más a la monarquía que a la democracia que tanto se pregona (en momentos hasta el hartazgo).

Manuel Hernández Gómez
(v.pág.4-A de El Informador del 17 de septiembre de 2005).


No es posible seguir ocultando la información, especulando con ella ni manipulándola, cuando se trata de asuntos que tienen que ver directamente con la sociedad; de hecho, no es posible que lo sigan haciendo con respecto a ningún tema, porque los gobernantes (y se me hace muy grande el nombre) son nuestros empleados, votamos por ellos y les pagamos (como diría Antonio Muñoz Serrano, los becamos para que "construyan sus carreras políticas") de manera que su obligación es hacernos caso.

Laura Castro Golarte
(v.pág.4-A de El Informador del 17 de septiembre de 2005).


Esta semana el Papa señaló una terrible realidad que, solamente él, como pontífice, podía externar sin que surgieran reacciones y acusaciones de injerencia. Benedicto XVI apuntó que "sigue siendo motivo de gran preocupación que en algunos ambientes, por el afán de poder, se hayan deteriorado las sanas formas de convivencia y la gestión de la cosa pública y se hayan incrementado, además, los fenómenos de la corrupción, impunidad, infiltración del narcotráfico y del crimen organizado".

La única forma de interpretar este señalamiento es como un regaño a la clase política, ya que expresa lo que probablemente es uno de los factores más peligrosos y desestabilizantes para las elecciones del 2006: los actores políticos que rigen la vida y muerte de los partidos están haciendo decisiones que satisfacen a sus intereses personales, sin importar la responsabilidad que como líderes deberían asumir y el impacto que sus decisiones pueden tener en la estabilidad democrática en México.

La existencia de políticos irresponsables no es un fenómeno exclusivo de México, lo sufren todas las democracias. El problema en México es que los mecanismos que deberían de prevenir el mal comportamiento de la clase política no están funcionando. A los malos e irresponsables políticos no sólo no se les castiga, sino que en nuestro país prosperan. El voto del ciudadano, que debería de ser el bat de la democracia para golpear a los malos políticos, deja de ser útil en el momento en que, ante la desesperación por la débil caballada de los candidatos, el ciudadano no participa en un juego en donde la única opción es votar por el "menos malo" o el "menos corrupto" o el "menos ineficiente".

Es un error asumir que las decisiones que tomarán los líderes del PRI, PRD, PAN, Convergencia, el Partido Verde o el PT estén cimentados en su preocupación por el futuro de México. No, sus decisiones están fundamentadas en los sentimientos más primordiales que tienen que ver con la intriga, los odios, las venganzas, y las ambiciones desmedidas.

Ana María Salazar, académica del ITAM
(v.pág.5-A de El Informador del 17 de septiembre de 2005).


Otra historia real es que ahora cada zapopano, gracias a su presidente municipal, debe 500 pesos más de los que ya debía y todo para gastar más en publicidad de obras malhechas que lo que se gasta en la propia obra.

Santos Joel Flores Ascencio
(v.pág.4 "correo" del periódico Público del 16 de septiembre de 2005).


Debería ser delito electoral gastar en cualquier tipo de campaña.

Sigue creciendo el desencanto con la política y los políticos sin que se vislumbre un remedio para esos males. La política está opacada por la mercadotecnia, de manera que triunfan los que mejor mercantilizan sus programas personales y si acaso partidarios. La cultura política está mediatizada por valores clientelares que dependen de liderazgos que combinan en distinta proporción soluciones mesiánicas y providencialistas.

Nuestras elecciones son las más caras del mundo, en términos del gasto público destinado a los partidos como entidades de "interés público". Y si añadimos a los 70 pesos que costará cada voto en 2006 la organización del proceso electoral, los miles de millones que se han gastado en precampañas y campañas, recursos no fiscalizados, es probable que esa cantidad supere el gasto público. Tal dispendio es una bofetada con guante de plomo al elector, pues la precariedad y pobreza de la mayoría no aguantará más, no aceptará que cuando menos los recursos públicos se gasten arbitrariamente para encumbrar a supuestos representantes que, llegados al gobierno, se desentienden de sus representados. Se podrían justificar las (pre)campañas por los empleos que generan, pero también es cuestionable la concentración del ingreso que propician, pues particularmente los medios electrónicos son los que más se enriquecen.

Los mismos desencantos de la elección presidencial se reproducen en las elecciones locales... los liderazgos cosméticos fabricados por la mercadotecnia, el abuso del gasto público con fines electorales, el predominio de la partidocracia que copa cada vez más los espacios ciudadanizados, el auge del político profesional que brinca de un puesto público a otro.

Jaime Preciado Coronado
(v.pág.22 del periódico Público del 16 de septiembre de 2005).


Si de enfrentar conflictos se trata, hay actitudes diferentes. Una de ellas consiste en dialogar serenamente con la contraparte, poner sobre la mesa coincidencias y divergencias, e intentar reducir las segundas y acrecentar las primeras. La otra -muy de moda, por cierto- consiste en autoproclamarnos víctimas de un "complot". (La primera actitud es propia de las personas inteligentes; la segunda es característica de los políticos... incluidos los que, a veces, parecen personas inteligentes).

Jaime García Elías, columnista y conductor radiofónico
(v.pág.5-A de El Informador del 14 de septiembre de 2005).


Ciertos diputados a falta de capacidad intelectual para planear y discutir reformas legales hacían y siguen haciendo [durante los informes presidenciales], ahora en menor cantidad, auténticas payasadas que les otorgaron sus cinco minutos de fama, a cambio de propiciar ese descrédito con que la opinión pública mira en general a los legisladores.

Juan de la Borbolla R., catedrático universitario
(v.pág.5-A de El Informador del 12 de septiembre de 2005).


El semanario de la Iglesia Católica "Desde la Fe" asegura que no se puede crear confianza en la ciudadanía apoyándose en frases y discursos, cuando la realidad partidista es otra.

Ello "nos ha recordado el viejo estilo de arrebatar el poder por la fuerza que por mucho tiempo funcionó y que creíamos que ya estaba desterrado del país", dice.

Ante esas actitudes, crece la desconfianza ciudadana hacia los políticos.

"Es tiempo de superar las confrontaciones estériles que han hecho de la política una actividad de rijosos, que pone el mal ejemplo, pues pasa por alto las leyes y deja fluir recursos de dudoso origen".

(V.pág.13-A de El Informador del 12 de septiembre de 2005).


Nuestros gobernantes, o al menos los que han hecho de la polaca un modo de vida y de la grilla un modus operandi, pasan ahora por una coyuntura que los muestra de cuerpo completo: son tiempos electorales y algunos quieren ser candidatos a lo que haya modo, no importe que para serlo tengan que deshacer alianzas y romper promesas, incluso las propias. Como dice por ahí un cantautor de Centroamérica, son unos auténticos profesionales de la mentira.

Ese es el problema: gastan millonadas en hacerse ver como los prohombres que no son para que luego, ante las oportunidades que su cargo genera, saquen a relucir el cobre de simples mortales sí, pero de gustos caros y refinados.

Si vivir fuera del presupuesto es vivir en el error, vivir en el presupuesto y no derramarlo sobre los seres queridos (o las amigas más queridas, en su defecto) es una completa barbaridad, han de pensar. ¿Será eso lo que los panistos de nuevo cuño entienden por gobierno humanista? Porque visto desde la calle, el asunto parece más como un conflicto generado por una doble moralidad...

Toñimáximus
(v.pág.2 del periódico Público del 11 de septiembre de 2005).


La única justificación ética, moral, política y científica de seder el poder a un individuo concreto de la colectividad está en el principio del servicio. Si alguien recibe poder es para que lo utilice, ante todo, para servir al pueblo que se lo confiere.

Miguel Bazdresch
(v.pág.20 del periódico Público del 11 de septiembre de 2005).


El candidato del PRD a la Presidencia, Andrés Manuel López Obrador, piensa que Salinas va sobre de él, pero se sobrevalora. El objetivo de Salinas apunta a Zedillo, donde López Obrador sería, ante sus ojos, instrumento del ex presidente.

Raymundo Riva Palacio
(v.pág.5-A de El Informador del 10 de septiembre de 2005).


A Carlos Monsiváis le parece curioso que en estos tiempos se discuta el descrédito de la clase política: "Jamás tuvo crédito. Vivía en torno a las ceremonias del poder. Lo que tenían era aptitudes para el acarreo y aptitudes para el compadrazgo. Decir 'crisis de la clase política' es regalarle algo que nunca tuvo".

El PRI, sin ideas, sin resignación a la pérdida del poder y con ganas de recuperarlo, como si Los Pinos fuera parte de su patrimonio. El PAN, sin entendimiento de la sociedad moderna, con censura de la píldora del día siguiente y hasta de El crimen del padre Amaro. Con "su líder moral, Diego Fernández, y su líder intelectual, Alberto Cárdenas", el PAN va del fundamentalismo amargo a la contemporización con el poder. El PRD por su desatención a las ideas políticas, a su ideología y a la honradez, "como organización partidaria nos ha decepcionado". Así ve Carlos Monsiváis a los partidos políticos.

Carlos Monsiváis lamenta la decepción de los jóvenes mexicanos en los políticos y las instituciones: "Si vamos a ser sinceros, la desesperanza no viene del futuro del país, sino del futuro personal". En su opinión, "el desempleo es la norma".

(V.pág.20 del periódico Público del 9 de septiembre de 2005).


Es evidente en el caso jalisciense reciente que la participación ciudadana se percibe como una amenaza y no como una oportunidad. Se menosprecia el potencial abierto por los esquemas participativos en la orientación de las decisiones de los gobiernos locales, pretextando que lo ciudadano es por naturaleza conflictivo y no representa el interés general.

Jaime Preciado Coronado
(v.pág.24 del periódico Público del 9 de septiembre de 2005).


La protección del derecho de libertad de expresión debe entenderse no sólo a las opiniones o puntos de vista manifestados en el interior de los partidos políticos, sino también a aquellas otras expresiones que se difunden en el exterior.

La restricción o limitación de la libertad de expresión en mayor medida de los límites permitidos constitucionalmente no sólo haría nulatorio el ejercicio de un derecho fundamental, sino podría activar las tendencias oligárquicas de los partidos políticos.

Sentencia Sub/JDC-393/2005 del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación


Necesitamos exigirle a Lopez Obrador su definición de democracia porque hay muchos de la izquierda, inclusive en este mismo periódico, que definen a la democracia como la votación directa por el pueblo en una plazuela a mano alzada. Todos hemos visto que por ese teatro montado se han eternizado los caciques de los indígenas y los líderes de los sindicatos que odian el voto personal y secreto entre varias opciones diferentes en una elección formal.

Hasta que no escuche de parte de Andrés Manuel una crítica clara al gobierno de Fidel Castro por ser dictadura antigua y una crítica clara al gobierno de Hugo Chávez por ser una dictadura emergente, voy a traer el "sospechosismo" de que Andrés Manuel estaría dispuesto a reelegirse eternamente si el pueblo así lo decide. Conste, estoy pidiendo simple honestidad, con dos declaraciones claras y contundentes estaré tranquilo porque todavía López Obrador me merece confianza.

Enrique Canales
(v.pág.6A de Mural del 8 de septiembre de 2005).


El ex presidente español Felipe González dijo estar "preocupado seriamente" porque en México lo que está sucediendo en la clase política es que "la camisa importa menos que la oportunidad de ocupar un puesto".

Esto que definió como "exceso de transfuguismo político debilita la democracia y la política".

Al referirse a los jóvenes universitarios, les dijo que en el 2006 enfrentarán su primera elección, por lo que les lanzó: "Que Dios los ilumine... porque no sé por quién votarán".

(V.resumen informativo de Notisistema del 8 de septiembre de 2005).


Grupo Televisa podría recibir el próximo año ingresos por concepto de campañas electorales por alrededor de 130 millones de dólares, luego del aumento que aprobó el Instituto Federal Electoral para este concepto.

(V.pág.8-A del periódico El Informador del 7 de septiembre de 2005).


El ex jefe de Gobierno del Distrito Federal, Andrés Manuel López Obrador, está bajo la lupa de algunos inversionistas, luego de un fuerte gasto en programas sociales e infraestructura en la capital que impulsaron su popularidad pero que hacen dudar de cómo manejaría las cuentas públicas si llega a la Presidencia.

(V.pág.9-A del periódico El Informador del 7 de septiembre de 2005).


Mi meticuloso amigo "se metió" al sistema Google y encontró este listado: Ector (sic) Jaime Ramirez Barba. Secretario de Salúd del Estado de Guanajuato. "Doctorado en Ciencias de Salúd. Pacific Western University 1993-95. Lo curioso: No se imparte esa materia con certificación legal en tal Universidad. Y normalmente nadie logra un doctorado serio en dos años. Otro caso: Esperanza Avalos Díaz, Directora de Servicios de Salúd del Gobierno de Zacatecas. "...Doctorado en Ciencias de Inmunología por Pacific Western University". No hay tal grado de especialización allí. Seguimos: Salvador Ordaz Monteca de Oca. Diputado por Veracruz en el Congreso de la Unión (PRI). "Doctorado en Filosofia con Especialización en Ciencia Políticas por la Pacific Western University". No es posible tal titulación oficial. Otro más con estudios de doctorado de tal Universidad es Mariano Latapí Ramírez. En 2004 ingresó al Organo Superior de Dirección de la Contaduría Mayor de Hacienda de la Asamblea del D.F. Uno que no compagina: Carlos Tena Sánchez, "Doctorado en Administración con Especialidad en Management por Pacificil Western University".

J.Jesús Blancornelas
(v.pág.4-A del periódico El Informador del 6 de septiembre de 2005).


Hoy daría la impresión que democracia para algunos es hacer lo que se les da la gana, tener altos índices de popularidad, que todos o la mayoría estén contentos, que es actuar sin límites.

Lo peor que nos puede pasar en la próxima elección es que los partidos se conviertan en una marca, que a los candidatos los veamos como un producto y que los electores pasen a ser consumidores, y entonces la batalla de las ideas y las propuestas se rinda ante las campañas publicitarias.

Eso no se debe permitir, ésa es una versión barata de la libertad y de la democracia.

Josefina Vázquez Mota, secretaria de Desarrollo Social
(v.pág.17-A del periódico El Informador del 5 de septiembre de 2005).


Vergonzosa actitud de los políticos, que parecen interesarse únicamente en conquistar el poder para enriquecerse y alimentar su delirio de grandeza.

Audón Coria, editor
(v.pág.10 de la revista Selecciones de septiembre de 2005).


Nunca he creído ni una palabra de los políticos, sé que mienten por convicción y que sólo les interesa el bien común de su familia (deberían ser estériles). He pensado en que llegará un día en que la sociedad vuelva a erigir guillotinas y los hagamos desfilar uno a uno.

Héctor Torres Méndez
(v.pág.4 "correo" del periódico Público del 4 de septiembre de 2005).


Los mexicanos hemos tenido un sexenio donde la clase política exhibió sus carencias y ambiciones.

Carlos Mota
(v.pág.3 del periódico Público del 2 de septiembre de 2005).


Esta clase política, la del fracaso de la primera mitad de la primera década del siglo, la repudiada por la sociedad, la que no heredará más que desánimo, está convencida de que la culpa es del vecino. La culpa es de Fox, tibio, desfondado, impotente. No, es del PRI corrupto y artero. No, es del PAN mediocre. No, es del PRD por su vulgar solipsismo. Si alguna virtud tuvo el Quinto Informe fue la de escenificar con admirable plasticidad la metáfora de la miseria de la política nacional: no hay ideas, las cosas se dicen y leen al revés, nadie está interesado en escuchar a nadie.

No hay mucho que hacer, porque esta es nuestra clase política, responsable primaria de nuestra pequeñez; la que mientras el mundo viajaba en trenes ligeros, se empeñó en realzar su pesada estupidez. En efecto, esta generación tenía una cita con el futuro. Ni cuenta se dio.

Ciro Gómez Leyva
(v.pág.13 del periódico Público del 2 de septiembre de 2005).


Los diputados locales [de Jalisco] pretenden extender un año más el "hueso" al pasar de tres a cuatro años el plazo de su trabajo como legisladores.

La Comisión de Puntos Constitucionales acordó ayer que el tiempo en su cargo deberá aumentar en la misma proporción propuesta para los munícipes.

La justificación oficial es la intención de empatar las elecciones de diputados con las de alcaldes y ahorrar dinero en los comicios [¡Sí Chucha!].

(V.primera plana de Mural del 1o.de septiembre de 2005).


Las contribuciones privadas para mejorar la precaria situación de millones de mexicanos nunca sobran y sin duda son una obligación moral de los que más tenemos, pero cuando éstas se tienen que dar por la ausencia del gobierno o por sus fallas, se convierten en una especie de doble impuesto.

Hay que señalar que muchas personas, equivocadamente, creen que el hecho de que una donación privada sea deducible de impuestos significa que el gobierno, finalmente, es el que la paga. Y no es así.

Deducir de impuestos una donación no quiere decir que el total de un donativo lo rebajemos de los impuestos que pagamos, sino que el monto de la aportación se lo restamos a as utilidades generadas y sobre el saldo pagamos nuestros impuestos. En otras palabras, lo único que el gobierno "paga" (más bien que recibe de menos) es aproximadamente el 30% del monto del donativo, y el resto es una erogación real de la persona o empresa que lo da.

Mientras el gobierno, por los motivos que fuere, no sea capaz de cubrir las necesidades básicas de toda la población, a los particulares no nos queda más remedio que contribuir en la medida de nuestras posibilidades a mitigar las necesidades de los que menos tienen, pero esto no debe convertir a las instituciones privadas de beneficencia en sustitutos permanentes de las responsabilidades sociales del gobierno y menos, cuando se trata de la educación y salud básica de los mexicanos.

Sí, hay que apoyar, pero al mismo tiempo hay que señalar lo que el gobierno no hace, para que no se vuelva conchudez oficial el que los ciudadanos paguemos fielmente nuestros impuestos y después éstos sean administrados al antojo de los gobernantes en turno y los destinen a miles de cosas más, sin antes haber resuelto lo básico.

El gobierno, como tal, no tiene conciencia. En todo caso es la conciencia de los funcionarios públicos la que debiera operar; sin embargo, todos duermen tranquilos sabiendo que las prioridades del gasto son: primero sus sueldos y después las necesidades básicas de los ciudadanos, cuando debiera ser exactamente al revés.

Duele todavía más cuando la corrupción, la ineptitud y la ineficiencia se ven en las áreas del gobierno que tienen que ver con la administración de los recursos destinados a la educación y a la salud, o en los apoyos económicos que se dan a organizaciones supuestamente altruistas (por ejemplo, Provida) en las que los recursos humanos y materiales destinados a beneficiar a los que menos tienen se dilapidan miserablemente o terminan en las bolsas de los que quieren tener más.

Los políticos han abusado de la idea establecida de que "la solución somos todos". Si bien esto en muchos sentidos es cierto, no puede convertirse en la excusa para no lograr resultados ni en el intercambio de áreas de responsabilidad.

Sería mucho pedir que toda la población tenga acceso garantizado a una educación superior, pero cuando menos tenemos derecho a pedir que la educación pública (aunque sea sólo hasta secundaria) sea de calidad, y que sirva para algo.

Sería mucho pedir que en cuestiones de salud todos los mexicanos tengamos acceso a tratamientos médicos especiales tecnológica y científicamente avanzados, pero sí tenemos derecho a pedir que los servicios de salud básicos y las condiciones de vida elementales de los mexicanos estén dignamente resueltos.

Ricardo Elías, arquitecto y empresario
(v.pág.6A del periódico Mural del 1o.de septiembre de 2005).


El congreso ha sido una institución democrática y estatal ejemplar y responsable, si bien es cierto que por culpa de los partidos políticos, sus integrantes, sin pretender hacer una generalización improcedente, no están a la altura de lo que debería ser en cuanto a capacidad y responsabilidad parlamentaria, lo que no excluye ni exime de responsabilidad a los propios diputados del PAN, del PRD y de los demás partidos minoritarios, que han visto en la designación de sus candidatos, un modo de darles una prebenda y una seguridad económica, sin preocuparse de su capacidad parlamentaria.

Sergio A.López Rivera, abogado
(v.pág.5-A del periódico El Informador del 31 de agosto de 2005).


Cuando México necesita crecer 4.6% durante 11 años para abatir la pobreza, de acuerdo con la CEPAL; cuando es tiempo de trabajar y ponerlo todo para que el PIB per cápita aumente 2.9% y que la población mexicana pueda tener expectativas de un desarrollo medio... cuando las necesidades de la población se multiplican, los problemas sociales de este país han crecido desmesuradamente; cuando se podría construir soluciones para mejorar este lamentable estado de cosas, aprovechando que el precio del petróleo -como nunca antes- ha pasado la barrera de los 70 dólares por barril; en este sexenio de los absurdos, sin reforma electoral que regule las precampañas y ponga topes de gasto más acordes con las realidades del país, todos los recursos existentes se dedicarán a la mercadotecnia electoral... desde el financiamiento de los partidos, chicos y grandes, unos feudos, otros lucro familiar y algunos más, la estrategia para obtener recursos fáciles cada campaña... pero en todos los casos cada partido hará una desmesurada inversión en publicidad a través de medios, especialmente electrónicos -entiéndase Televisa y TV Azteca- inversión que llegará a casi 70 centavos por cada peso que los partidos reciban de las arcas públicas, de los recursos de la población mexicana... Lo que deja claro quiénes serán los únicos en ganar con esta forma -incomprensible- de democracia... Lo que deja claro quiénes se llevarán las ganancias, pero también, quiénes controlarán los tiempos, imagen y mensajes políticos y, por lo tanto, quiénes determinarán hacia dónde se irá la "bolita" en este juego que ha dejado de ser el justo de una democracia, para convertirse en otra forma de esquilma de la población, en este tiempo de alternancia.

Es decir, que con estos haceres, el poder de las elecciones se traslada, poco a poco, pero de manera firme, de las urnas y los votos, de los políticos y las propuestas, al paso previo: el manejo de los medios electrónicos de los mensajes, tiempos, horarios y, desde luego, en la acumulación de los enormes recursos y consecuentemente de las decisiones; todo lo que hace crecer un abrumador poder que, unido a ese diálogo establecido entre políticos y medios electrónicos, donde el ciudadano ha sido vuelto espectador, determinará ya no sólo la fuerza de los candidatos, sino la agenda política...

Lourdes Bueno, investigadora de la Universidad de Guadalajara
(v.pág.5-A de El Informador del 31 de agosto de 2005).


El precio de la democracia es alto y así podría calificarse optimistamente, la cifra de aspirantes, pero la población desconcertada percibe sólo ambición ante la ausencia de proyectos para sus reclamos de justicia social. A cambio se autoriza la regularización de autos introducidos de manera irregulara al país, sin que ello provoque convencimiento sino severa controversia.

Carlos Cortés Vázquez, consultor en comunicación
(v.pág.5-A del periódico El Informador del 30 de agosto de 2005).


Premios

(Publicado en el periódico El Informador del 29 de agosto de 2005).


En medio de tanta babosada refulge, como gema, la de un gobierno estatal [de Jalisco] que, en materia de obra pública, va de tropiezo en tropiezo: acostumbra prolongar las obras hasta que ningún vecindario o comercio aguante; enfrenta oposición para el siguiente puente que piensa construir; y tiene en su contra cuentas pendientes por botarse el presupuesto en carreteras malhechas, caras, peligrosas y antiecológicas, nomás.

Toñimáximus
(v.pág.2 del periódico Público del 28 de agosto de 2005).


El neoliberalismo funciona para ellos (los políticos), para sus grandes negocios, para sus cuentas de banco, para su clase, que ya es la misma que la alta, pues en México ya son un sinónimo gracias al PAN. Desgraciadamente si llega el PRI de nuevo, no hay maquillaje que cubra y es extraño cómo hablan los gobernadores, dicen "vamos a gobernar por México" cuando en sus estados el narcotráfico creció tremendamente, así como las bandas en general.

Damián Alcázar, actor
(v.pág.5 de la sección "¡hey!" del periódico Público del 28 de agosto de 2005).


Está planteado en México un debate de gran envergadura. Me refiero al tema de las candidaturas independientes en el sistema electoral mexicano; esto es, al derecho de los ciudadanos a contender por un cargo de representación popular sin necesidad de ser postulados por un partido. Cuestión definitoria de las relaciones entre un régimen político y la observancia de derechos fundamentales.

Se trata de un derecho consagrado por la Constitución, pero limitado por la ley. O más bien, de una prerrogativa que no se encuentra regulada de manera que sea posible concretarla. Un caso típico de capitis diminutio, en el que coexiste la titularidad de un derecho con la imposibilidad legal de ejercerlo. Situación harto frecuente en un sistema constitucional con aspiraciones "paradigmáticas" más que normativas, en el que proliferan derechos sin garantía, deberes sin sanción, ambigüedades deliberadas e incontables contradicciones jurídicas.

La imposibilidad de presentar candidaturas sin el concurso de los partidos responde a un principio de autodefensa de los sistemas políticos establecidos. Es una saga de la tradición autoritaria. En nuestro caso la limitación expresa se introdujo hasta 1946 como una reacción contra los cismas que había sufrido el partido del gobierno. Simultáneamente, se incrementó de 100 a 30,000 el número de afiliados requerido para el registro. El control residía en la discrecionalidad de su otorgamiento. Así, el panorama "democrático" que ofrecíamos en el horizonte de la posguerra era el de un sistema solar, compuesto por un "partido hegemónico", y de otros autorizados o estimulados, con exclusión de los prohibidos o francamente clandestinos.

Por esa razón, la reforma política iniciada en 1977 tenía por columna vertebral la elevación a rango constitucional de los partidos políticos y la legalización de los proscritos, junto con las modificaciones legislativas que les permitirían ocupar mayores espacios en el Congreso. Los cambios ulteriores fueron en la misma dirección, lo que hizo finalmente posible que en 1988 se conjuntase una secesión del partido gobernante y un vasto movimiento cívico con un frente de partidos políticos registrados.

Vistas en perspectiva, resulta inverosímil la diversidad de batallas políticas y de cambios legales que hubimos de efectuar, durante más de un decenio, para que el ciudadano mexicano pudiera elegir libremente a sus gobernantes. Todos esos esfuerzos convergieron fatalmente en el fortalecimiento de los partidos en tanto interlocutores y contendientes válidos del poder hegemónico.

Entre otros avances sustantivos, logramos suprimir la ancestral prohibición de excluir la legislación electoral del control de la constitucionalidad; sólo que nuestra contraparte vedó la vía de amparo y lo limitó a la acción procesal que puede ser emprendida por autoridades públicas, minorías parlamentarias y los propios partidos políticos, con lo que puede configurarse, como es el caso, una clara denegación de justicia.

No afirmaría lo mismo respecto de las candidaturas independientes. El tema nunca estuvo en la agenda del partido gobernante y fue sostenido muy débilmente por la oposición.

En modo alguno quedó zanjada la cuestión esencial: ¿el derecho constitucional a ser votado en las elecciones debe canalizarse exclusivamente a través de los partidos políticos? ¿Quién es el titular de ese derecho, el partido o el ciudadano? Más tarde, en ocasión de la convocatoria para la reforma del estado, concluimos a fines del 2000: "Si bien la participación individual de los ciudadanos puede provocar una atomización indeseable, también lo es que ha venido perfilándose una partidocracia. En ese escenario, resulta preferible un régimen democrático que permita a los ciudadanos postularse en forma independiente para los cargos de elección popular".

Los mismos argumentos en uno u otro sentido que ahora surgen a la luz pública fueron entonces discutidos. Coincidimos en que se trata de un derecho que, como muchos otros, exige requisitos para ser ejercido, sin que por ello se viole el principio universal de "acceso a la función pública en condiciones de igualdad". Quedó también claro que éstos pueden ser más exigentes que los que se requieren para formar un partido, como acaba de establecerse en la reciente reforma a la legislación electoral de Sonora.

Se discutió la cuestión del financiamiento público de esas candidaturas tanto como su necesaria armonización con el conjunto del sistema electoral. Se acudió al derecho comparado, que en este caso no es concluyente, ya que un tercio de los países suscriptores de la Declaración de los Derechos del Hombre ha legislado al respecto, mientras casi dos tercios no lo han hecho. Se invocó tanto el fantasma de Fujimori, como el de Hugo Chávez, para probar dos hipótesis contrarias e igualmente ciertas: el rechazo ciudadano al monopolio de los partidos y los peligros que amenazan a la democracia representativa si se alientan candidaturas "bonapartistas" o aventureras.

Lo que nos pareció indiscutible es la existencia de lagunas jurídicas que traban intencionalmente el ejercicio de derechos fundamentales y la inaceptable carencia de recursos eficaces para su defensa. Sobre ambos extremos debió haberse pronunciado la Suprema Corte que, en virtud de la parálisis legislativa, es la única instancia que puede impulsar hoy la congruencia de nuestro orden normativo y desatar la reconsideración de nuestro andamiaje constitucional.

Asombra la ligereza con que las veleidosas mayorías de nuestro supremo tribunal rotan también los criterios en que fundan sus veredictos. En la cuestión del presupuesto prevaleció la interpretación "sistémica", en abierta contradicción con el texto de la norma; ahora se invoca la literalidad de una disposición secundaria en olvido de principios que la Constitución postula. Me temo que el común denominador de sus decisiones siga siendo la proclividad de privilegiar al poder sobre el ciudadano.

La transición se encuentra de esta suerte bloqueada por la astenia democrática de los tres poderes: el ejecutivo porque no entiende las reformas, el legislativo porque no las quiere y el judicial por su incapacidad genética de iniciativa. El escenario ideal para la regresión histórica.

Porfirio Muñoz Ledo
(v.pág.4-A de El Informador del 27 de agosto de 2005).


No puedo dejar de mencionar la cereza del pastel, reflejo inequívoco de cómo se hacen las obras en Jalisco: con los pies y pensando siempre en el 2 de julio de 2006: la reducción en la capacidad del tramo de colector que sustituyeron en López Mateos desde Garibaldi hasta Mar Negro.

Cinco fuentes (una identificada, SIAPA, y cuatro no -todas especializadas en ingeniería hidráulica y colectores y con sentido común) y sólo una no (Sedeur), están de acuerdo en que se redujo la capacidad del colector. Por supuesto, el que está mal es el mundo, ellos [Sedeur] no.

Laura Castro Golarte
(v.pág.5-A de El Informador del 27 de agosto de 2005).


Si un ciudadano percibe que es apreciado por sus buenas intenciones políticas, no le debe nada a la justicia y quiere promoverse para conseguir el voto ciudadano, a la fecha no lo puede hacer. Los partidos políticos cometen contra nosotros no un bloqueo, sino un incesto porque nos violan los derechos ciudadanos a ser votados. Sólo podemos ser votados si asistimos a las capillas partidistas, si prometemos fidelidad y si les cantamos alabanzas a los líderes de algún partido.

Los partidos son carpas abiertas para ir a aplaudir a los monigotes del estrado, pero son capillas cerradas para ofrecer oportunidades políticas. Para los partidos, los méritos corresponden a los años de disciplina dentro del partido y no al valor civil realizado y logrado en las callejuelas ciudadanas. Es indigno obligarse a agachar la cabeza y soportar a los jerarcas partidistas quienes con el dedo interno señalan a sus favoritos.

Ellos se dicen representantes de la ciudadanía, pero la militancia activa, considerando a todos los partidos, no llega ni al 10% de la población, por lo tanto, los partidos tienen una autorización legal, pero no tienen una representación real.

Los partidos principales, el PRI, el PAN y el PRD, desde hace muchos años han impedido la participación personal para que alguien por el puro y glorioso hecho de ser mexicano, sin problemas con la justicia, pueda ser electo en una elección política. El mexicano puede votar, pero todavía no encontramos la manera de que pueda seguir independiente y también pueda ser votado para dedicarse libremente al bien de su comunidad sin compromisos partidistas.

El hecho de que el ciudadano apreciado por su comunidad no tenga un procedimiento que le garantice su independencia frente a otros grupos es una desgracia democrática ya inaceptable. En el caso de Jorge Castañeda, la Suprema Corte ha recibido críticas de peso al no poder diferenciar entre la defensa de un proceso legal electoral y la defensa de un valor democrático supremo.

Si los partidos dentro del Congreso son los que nos han bloqueado, al menos una fuerte crítica debería de hacer la Suprema Corte: incitar al Congreso a que busque la manera de reconocer el derecho a mantener nuestra independencia personal, participar en alguna contienda de precandidatos no comprometidos y lograr aparecer como "candidato independiente" en las boletas de votación.

Para el dócil político mexicano, el pundonor es desechable y aplaude al que le digan.

Comprendo que los partidos políticos son necesarios para "civilizar" a una sociedad carente de cultura política, y también para darle forma y orden a los procesos electorales. No traigo pleito con los partidos políticos, ellos pueden tener sus rituales, exámenes, sus ridículas disciplinas y pueden ningunear a sus militantes más humildes.

Sin la vigilancia de los partidos es claro que algún populista pudiera colarse por la cocina, pero ya estamos viendo que los partidos más bien fomentan a sus propios populistas. ¿Tienen miedo a que un Marcos Guillén pudiera postularse para gobernador de Chiapas o para presidente de México? Al cabo, ya hemos tenido y tenemos toda una retahíla de ridículos líderes políticos como para formar una antología.

Si el Congreso, en vez de plurinominales, tuviera diputados independientes, entonces, la crítica, las discusiones y la fuerza de la libertad inyectaría de una gran vitalidad mexicana al Congreso. Ahora, los congresistas son vasallos que tienen que votar de acuerdo con lo que piensan sus cabecillas partidistas. Ridículo.

Abriendo campo a la imaginación, ¿será posible que el IFE pueda manejar de forma transparente un partido político independiente -éste sí sería un cascarón- con el único objeto de darle espacio político a los candidatos independientes, para que ahí puedan competir con reglas claras por el voto ciudadano preliminar para entonces ganar su derecho a aparecer en las boletas de elección popular?

¿Cuál sería la ideología de este partido independiente, abierto, tipo cascarón? Pues precisamente, el fundamento ideológico es que el fin último de toda política es lograr que cada persona sea independiente y soberana para que todos los ciudadanos vean que también tienen un ancho camino personal para servir a los demás.

Toda nación se hace más fuerte cuando es más crítica y diversa por contar con más ciudadanos libres e independientes que puedan ser electos, precisamente, por no tener compromisos cupulares.

Enrique Canales
(v.pág.7A de Mural del 25 de agosto de 2005).


El dineral que van a ganar Televisa y TV Azteca en el 2006 (y a eso súmenle lo que se van a embodegar con el Campeonato Mundial de Futbol); y a esto hay que añadir los desfiguros de Marcos quien, para mi gusto, procedió correctamente al denunciar que esta "izquierda" que tenemos es una farsa, pero él no lo es menos con sus proyectos entre utópicos y publicitarios y también hay que añadir el porquerillero que está surgiendo en torno a los fideicomisos (el guardadito) que presuntamente están en manos de Mariano Tres Patines Azuela y su tremenda Corte. Por esto y muchas cosas más, de momento me incorporo al reino vegetal.

Germán Dehesa
(v.pág.1B de Mural del 25 de agosto de 2005).


El muy evidente retraso en todas las obras del gobierno estatal [de Jalisco] ha sido letal para las actividades comerciales en las zonas afectadas por los depredadores urbanos. Cientos de negocios han cerrado por falta de clientes, y aún así la Sedeur comete la imprudencia de iniciar obras en otros rumbos de la zona metropolitana.

Pedro Mellado
(v.pág.2B del periódico Mural del 25 de agosto de 2005).


Siquiera por conveniencia -señores aspirantes a cargos de elección popular-, deberían tratar al elector, al menos en esta fase de "coqueteo", con delicadeza, y hacer un mínimo esfuerzo por honrar su inteligencia.

Ya vendrán los tiempos en que algunos de ustedes sean gobernantes. Entonces sí, además de atormentarlo con exacciones sin cuento, podrán tratarlo como está acostumbrado a que lo traten: con la punta del pie...

Jaime García Elías, columnista y conductor radiofónico
(v.pág.5-A de El Informador del 24 de agosto de 2005).


Justo reproche del ciudadano: "¿Servicios públicos baratos para nosotros, que pagamos impuestos, y salarios, prebendas, dádivas y prestaciones onerosas para ustedes?... ¡Bonita democracia pregonan, señores fariseos!...".

Jaime García Elías, columnista y conductor radiofónico
(v.pág.5-A de El Informador del 23 de agosto de 2005).


Cuatro mil y pico [millones de pesos] recibirán frescos los partidos políticos para cubrir parte de sus campañas -y vaya usted a saber qué mas-, eso sí, transparentes cuando declaren estos gastos que se repartirán en justas rebanadas: PAN 30%, PRI 27%, PRD 17.5%, PVEM 9.2%, PT 6.5% y el resto el 9.8%.

La reacción cuando nos enteramos que las prerrogativas a los partidos será equivalente al 0.07% del PIB y al 1.52% del ingreso de los impuestos, puede que nos diga algo adicional, pero el sentimiento sigue siendo el mismo y nos peguntamos si vale la pena tanto gasto para que los candidatos digan unos lugares comunes o sus frases huecas y sus falsas promesas -o ¿no Fox?-; ideas que no son más que buenos propósitos o locuras como la que nos acaba de aventar a quemarropa el famoso AMLO, cuando propone convertir "los impuestos en contribuciones... y... bajo protesta que los ciudadanos digan la verdad para que luego puedan expresar cuánto tienen de ingresos y qué porcentaje (de estos ingresos creen que) tiene que pagar de impuestos..." tal como el Peje dixit mientras que se nos doblan las rodillas nada más de pensar en los créditos al exterior que va a sustentar este programa al cambiar las reglas "neoliberales" de cobrar impuestos y no dejar que sea la voluntad de los ciudadanos.

Hay un sentimiento generalizado y nos sentimos agredidos por esta repartición de los recursos públicos a los partidos. Vivir en la democracia nos cuesta más que a otros en el mundo y todo parece ser que fue la ambición de los políticos que provocan el miedo a la dictadura de partido, tal como la vivimos por casi un siglo.

Martín Casillas de Alba
(v.pág.5-A de El Informador del 23 de agosto de 2005).


Caro le está resultando al país el camino que ha elegido para vivir la democracia. A las voces que se han hecho escuchar señalando el dispendio de recursos económicos en la materia, se sumó ayer domingo la Iglesia Católica, lamentando que a nivel mundial, México es el país que destina el más alto presupuesto para una contienda electoral. Y fue más allá, al calificar como ofensivo el derroche, considerando la crítica situación por la que atraviesa la nación.

Se invierte más -dijo- en la búsqueda de la democracia, que en el combate a la pobreza, y seguramente hay caminos más económicos para que México siga en la ruta de la democracia.

Mientras, se escatima la aprobación de presupuesto destinado a programas sociales: salud, educación agricultura, creación de empleos... combate a la pobreza.

Las voces de la sociedad se han elevado, y lo mismo protesta la iniciativa privada que organismos asistenciales, agrupaciones de obreros y campesinos, analistas políticos, académicos y ahora la Iglesia. Voces que predican en el desierto, porque parecen no ser escuchadas. Los poderes ejecutivo, y sobre todo el legislativo, han puesto oídos sordos ante las quejas, y los partidos políticos y sus precandidatos siguen derrochando recursos.

Editorial
(v.pág.4-A del periódico El Informador del 22 de agosto de 2005).


Jamás se perdona a un político la falsedad y en el mensaje actuado lo primero que se siente es lo artificial y postizo, parecido a lo que sienten los actores sobreactuados por más de 100 representaciones. Hay que dejar las actuaciones. Hablar de frente y nada más.

Tampoco juzgo correcta la exagerada atención a la apariencia. Es demasiado evidente el maquillaje; hay unos que salen emplastados, polveados y coloreados. Lo que es peor, preocupados por la edad, hay unos que se pintan canas, cejas y bigotes. Con todo respeto sea dicho: quedan como máscaras de cartón, de aquéllas del día de todos los santos.

Alberto Orozco Romero, licenciado en Derecho y exgobernador de Jalisco
(v.pág.4-A de El Informador del 22 de agosto de 2005).


En lo que se decide si sólo la clase gobernante merece beneficiarse con los dineros del pueblo o si éste también es digno de que sean de cierta calidad las migajas de la obra pública que caen de la mesa de los poderosos, vale la pena subrayar el hecho de que, en pleno conflicto, cuando los vecinos buscan a algún funcionario con capacidad de atención y eventualmente con poder de decisión para plantearle sus legítimas inquietudes y proponerle posibles alternativas, el funcionario público por excelencia en el estado [de Jalisco] se encuentra fuera del país.

Jaime García Elías, columnista y conductor radiofónico
(v.pág.5-A de El Informador del 22 de agosto de 2005).


Lo que el país necesita es caminar. Durante el presente sexenio se han frenado las reformas estructurales requeridas para su desarrollo, como la eléctrica, energética y laboral, por eso la Confederación Patronal Mexicana, a través de sus 57 centros ubicados en todo el país, está convocando a personas y grupos a sumarse a un gran movimiento ciudadano.

A través de la consulta a la población, se elaborará un perfil con las características que los mexicanos esperan ver en sus gobernantes, una vez que los partidos políticos hayan designado a sus candidatos formalmente, se le presentará a cada uno el proyecto y se le pedirá que firme el compromiso con la ciudadanía, ya que los políticos tienen muy frágil la memoria.

Fernando Pérez Aguayo, dirigente del Centro Patronal de Jalisco

Para nadie es un secreto que los partidos políticos no han respondido a las expectativas de la población, tampoco lo es la crisis de credibilidad en que estamos sumergidos, de ahí que surja la necesidad de que sean movimientos emanados de la propia sociedad, los que vengan a sacudir esta situación.

La Coparmex está encabezándolo porque tiene capacidad para ello, no sólo tiene en sus filas a los hombres que generan el dinero en este país, sino también a quienes toman decisiones y les afecta la inamovilidad en la que estamos inmersos.

Su intención es buena, pero se corre el riesgo de caer en la tentación de "partidizar" el movimiento; si ya tiene el dinero, el siguiente paso es ejercer el poder y si deciden movilizar la voluntad ciudadana a favor de un solo candidato, entonces sí podrían cambiar el rumbo del proceso.

Fernando Avendaño Gálvez, miembro del Centro de Estudios Políticos, Económicos y Sociales del PRI
(v.pág.5-A de El Informador del 22 de agosto de 2005).


Dicen que en países desarrollados hay alcaldes y legisladores que duran 30 ó 40 años en el cargo porque su buen desempeño hace que los electores los reelijan una y otra vez.

Dicen bien. Pero la realidad nuestra de cada día es otra. En nuestro ambiente, la democracia todavía no ha superado la etapa del día de las elecciones. Gran parte, si no es que la mayoría de los votantes, piensa que con acudir a las urnas cada tres y seis años ya cumplió y que los votados tienen la obligación de hacer milagros y aliviar todas las dolencias sociales.

En materia de reelección, disfrazada o abierta, hay que repetirlo, nuestros políticos sólo quieren el más pequeño de los pretextos para eternizarse en los cargos. Si a pesar de la ley, se dan aberraciones como la de Víctor Cervera Pacheco que fue reelecto como gobernador de Yucatán; si se abriera una pequeña, pequeñísima rendija legal, se multiplicarían los Cervera que, de por sí, abundan en la fauna política mexicana.

En otro ambiente, que representa una isla anacrónica en el mar de la democracia, como es el sindical, la realidad muestra otra cara del dictador que los mexicanos llevamos dentro. Los cargos no sólo son de por vida, sino hereditarios. Un caso: Francisco Hernández Juárez, electo en 1976 secretario general del Sindicato de Telefonistas de la República Mexicana, bajo la bandera del combate a la reelección dictatorial de Fidel Velázquez Sánchez, va por la marca del viejo líder de la CTM.

En consecuencia, en la sociedad mexicana, la reelección es el más dañino de los virus. Quienes simplistamente sostienen que la prueba de la reelección permitiría a la sociedad castigar a los malos y premiar a los buenos, no tienen la menor idea de lo que son capaces quienes viven del presupuesto público. La comisión de diputados de Jalisco que aprobó alargar a cuatro el periodo de los presidentes municipales demostró con su propuesta que no lee la historia reciente, mucho menos la remota, de México.

Hoy sería el aumento a cuatro años. Mañana sería a seis. Pasado mañana la reelección. Y de ahí para adelante, sabría Dios.

Hoy sería la reelección de los diputados. Mañana la de senadores. Pasado mañana la de gobernadores. Y, ya encarrerados, volvería la presidencial; primero, sólo por dos periodos consecutivos y luego por los que permitieran al dictador del futuro superar la marca de 1877 a 1911 de Porfirio Díaz.

En resumen, la reelección, abierta o disfrazada, es tentación que debe ser evitada durante varias generaciones, hasta que México haya ingresado permanentemente al primer mundo.

Marcos Arana Cervantes
(v."El Trilenio" en la pág.14-B de El Informador del 22 de agosto de 2005).

Comentario del webmaster: De por sí, sin reelección, hay políticos que toda su vida se la han pasado pegados a la ubre del presupuesto, sin haber desarrollado nunca una labor de utilidad para la sociedad, ¿qué sería si se les diera la posibilidad de repetir en el mismo puesto de elección?


El país es pobre pero, en esta orgullosa celebración de una democracia reducida a lo electoral, el estado es muy generoso. Y, de paso, los partidos no son ya una mera correa de trasmisión de la voluntad ciudadana sino que se han vuelto un fin en sí mismos, grandes organizaciones consumidoras de recursos desembolsados alegremente en baratijas para embobar al pueblo. Pero, de todos los dispendios posibles, no hay otro más apremiante que el gasto en las televisiones. Cualquier hijo de vecino sabe que gracias a la caja idiota, por poco que se repita el mensaje, el candidato devendrá en gran hechicero, en inconmensurable encantador, en colosal mago perfectamente capaz de hipnotizar a las multitudes y de llevarlas a donde sea menester. No hace falta siquiera un buen mensaje ni alardear de contenidos. Esto es un asunto de imágenes, no de ideas; de sensaciones, no de argumentos. Basta mayormente con la presencia y el estilo. Importa el rostro y el color de la camisa. El "impacto", le llaman. Casi no hay tiempo para decir nada de sustancia y todos expresan casi lo mismo -promesas de simple sentido común, compromisos crónicamente irrealizables, buenos deseos- pero, eso sí, la imagen de marca y el color de la franquicia deben quedar absolutamente "posicionados".

Sería más o menos divertido si no costara tanto dinero. Y es que la tele es cara. Carísima. La tele va a devorar prácticamente todo el dinero que los contribuyentes le hemos aportado a los partidos. Si llegara algún valiente a poner orden, comenzaría por ahí, por regular los tiempos a que tiene derecho el estado y por garantizar unas transmisiones mínimas para todos los participantes, ni siquiera excesivas, que estarían así primeramente obligados a derrochar menos dinero y, en segundo lugar, a hacerlo de manera más racional e inteligente. Nadie se atreverá, sin embargo. Ninguno de los tres grandes partidos, para empezar. Porque se ha establecido ya una complicidad de facto entre unos y otros, una auténtica simbiosis entre el poder político y el poder de las televisiones. Son interdependientes con el agravante de que el anunciante es también la muy probable víctima del periodismo electrónico. El gobierno, a su vez, es el gran pagador. Y, como hemos evolucionado mucho políticamente, paga para que le peguen, desde luego, pero, al mismo tiempo, tiene en todo momento las riendas y el poder de cerrar el grifo. Es una especie de equilibrio del terror. Muy poco saludable para nuestra vida política, que diga, para nuestros bolsillos. Con ese dinero se podrían hacer muchísimas cosas. Pero no. Se quedará en pocas manos y, al final, no recordaremos siquiera en qué se gastó porque las palabras se las lleva el viento. Y las imágenes, aún más.

Román Revueltas Retes
(v.pág.3 del periódico Público del 21 de agosto de 2005).


Las precampañas y las campañas electorales tienden a detener el desarrollo normal de la administración pública; las decisiones se toman en función del interés electoral, muchas cosas se dejan de hacer por el costo político que pueden representar, otras se hacen buscando comprometer a potenciales aliados.

Los medios de comunicación deben darle espacio a la agenda del gobierno para el último año de las administraciones y los ciudadanos deben estar atentos de que ésta se cumpla. Esta agenda no debe ser coyuntural, debe responder a los compromisos establecidos en el plan de desarrollo. Los compromisos de campaña no deben sustituir a los compromisos del gobierno; no permitamos que la competencia electoral anule las tareas del gobierno; también del último año se rinden cuentas.

Ismael Orozco Loreto
(v.pág.14 del periódico Público del 21 de agosto de 2005).


Reconfortante algarabía ha suscitado la imposición de un paso elevado como solución a la vialidad automovilística en el cruce de las avenidas López Mateos y Las Rosas. Si sólo fuera para que las autoridades, con todo y el daño a su hígado y a su ego, recordaran que aquí hay ciudad porque hay ciudadanos y no sólo clientes electorales, ya sería memorable el suceso. Estas autoridades, hoy en el gobierno, con base en su sordera se han creído la especie de que "van solas" y nada las detiene. La ciudad la hacemos las personas y nuestros afanes. Olvidar ese sustento tiene en los hechos mismos, las consecuencias.

Miguel Bazdresch Parada
(v.pág.19 del periódico Público del 21 de agosto de 2005).


El subcomandante Marcos señaló que el PRI apuesta a la "desmemoria" en estos tiempos electorales, ya que ellos "fueron los actores de la pesadilla que hoy sufrimos" y con "la coartada" de una revolución institucionalizada disfrazaron la pesadilla con "fraudes, matanzas y control corporativo". También enumeró una serie de críticas contra el PAN, a quien acusó de no tener nada que ofrecer. Continuó, asimismo, con sus críticas contra el PRD, a quien calificó como un partido 'rancio y decrépito' heredado del PRI.

(V.pág.21 del periódico Público del 21 de agosto de 2005).


Durante el actual gobierno -si se puede llamar así a esta parodia- las ambiciones políticas han estado desatadas. Tenemos meses que los grandes anunciantes en las televisoras (enriquecidas como nunca) son precisamente los pre-pre-candidatos, quienes derrochan miles de millones ante un pueblo cansado, hambriento, y con acceso limitado a la salud; que mira con molestia e ira reprimida a una clase política indolente que promete tantas cosas, que a sabiendas que no va a cumplir -como lo hizo Fox-, las ofrece como gracia magnánima.

¡Qué arrogancia! Si tuviesen un poco de decencia y auténtico compromiso con el pueblo al que pretenden gobernar, bastaría con que le digan que van a cumplir con su deber; que se bajarán su escandaloso sueldo; que laborarán todo su jornal; que atenderán con amabilidad y respeto a los ciudadanos; que dejarán a judiciales y policías para que cumplan con su deber (en lugar de traerlos de guaruras). Y por supuesto, que en ese cumplimiento de su deber, ejercerán el mandato que la ley les confiere, metiendo en orden a la fauna delincuencial que parece ser la que gobierna en realidad al país.

Manuel Hernández Gómez
(v.pág.4-A de El Informador del 20 de agosto de 2005).


Descendemos a la plutocracia por la vía de la demagogia sin habernos instalado en la democracia. Como si la clase gobernante padeciera un edipismo incurable que la hiciese depender de una fuerza y de un dictado superiores a sus propias capacidades. Huérfanos del poderoso Leviatán en que habitaban, las dirigencias políticas recurren a la majestad del dinero en tanto referente común y escudo protector de sus notorias incompetencias.

Hace unos días, esa caja registradora de subsidios y de votos en la que están convirtiendo al Instituto Federal Electoral descorrió el velo de las prerrogativas: Los partidos políticos dispondrán durante el año 2006 de un bolsa total establecida en 4,913 millones de pesos, esto es, cerca de 440 millones de dólares; cifra superior sin duda, en términos absolutos y relativos, a cualquier otra erogada en la historia por un gobierno para sostener a los contendientes en una elección. Ciertamente ofensiva, en el país de la desigualdad social y de la anemia fiscal.

Semejante inflación presupuestal no ha sido fruto del azar ni del regateo. Se trata de una estrategia deliberada para transformar un sistema de partido hegemónico en otro, de dinero hegemónico, mejor adaptado a los vientos de la globalización. Cualquier avance democrático suponía la separación orgánica del partido gobernante respecto del aparato del estado; pero como la intención no era dejarlo a la intemperie, se le entregó en dote una tajada considerable de recursos públicos. La oposición terminó aceptando la parte proporcional que le correspondía conforme a criterios mínimos de equidad, con el riesgo de que nuestro naciente pluralismo desembocara en la sustitución de un régimen de partido de estado por otro, de alternancia entre tres partidos de estado.

Ocurre, sin embargo, que la lógica de la privatización es implacable y termina siempre colocando los bienes públicos al servicio de intereses privados. En este caso, la incalificable permisividad de la ley ha propiciado la transferencia de cuantiosos recursos fiscales a las cadenas de radio y televisión por cuenta de la publicidad política. Se ha instaurado así una suerte de subasta del poder, en la que los fondos públicos son apenas la postura de base y los márgenes de la competencia están determinados por el flujo de los dineros privados. Como quien dice, los apostadores de la política juegan en un costoso palenque construido por el estado.

No sólo asistimos al vaciamiento ideológico de la política, sino a la manipulación despiadada de la soberanía popular por aquellos que aspiran a suplantarla. La sustitución de las propuestas y programas por la desmesura de la chatarra electrónica corresponde puntualmente a la ausencia de proyectos de gobierno. En el extremo, los candidatos no aspiran a gobernar, sino a administrar los intereses a los que se han previamente sometido. ¡Mi reino por un spot!, parecieran clamar desde su impotencia.

Los poderes fácticos se han erigido en árbitros del acontecer político, como consecuencia de la abdicación de los partidos. En vez de haber parlamentarizado el régimen presidencial, como aconsejaba la necesidad de construir mayorías estables, se ha presidencializado el congreso por vía de la supeditación de los grupos parlamentarios a los caudillos. Así, cada pequeño ejército bloquea a las huestes de su adversario y, entre todos, empantanan el proceso legislativo hasta anular la posibilidad de que la ley vuelva a ordenar la vida de la nación.

Porfirio Muñoz Ledo
(v.pág.4-A de El Informador del 20 de agosto de 2005).


Tarde o temprano tendrá que desaparecer el indebido monopolio que en México detentan los partidos políticos sobre la actividad polítca. En virtud -más bien en vicio- de ese monopolio los ciudadanos tienen impedimento legal para presentarse como candidatos en un proceso electoral. Sólo pueden hacerlo a través de las siglas de alguno de los partidos registrados. Eso vulnera gravemente sus garantías individuales, y viola tanto la letra como el espíritu de la Constitución. La Suprema Corte de Justicia falló en contra del ciudadano Jorge Castañeda, quien ha impugnado con razón, y con tesón, la torcida legislación electoral que otorga a los partidos esa prerrogativa, pero al fallar así tomó en cuenta únicamente cuestiones adjetivas, no de sustancia. Vale decir que no entró al fondo del asunto. Otra cosa será cuando los ministros del máximo órgano de justicia se sientan libres de las presiones que los partidos ejercen en todos los ámbitos para mantener su monopolio, y fallen sobre la materia de este asunto, y no sobre cuestiones meramente procedimentales. Mientras tanto el vicioso estado actual de cosas seguirá siendo una evidencia más del atraso político de México.

Armando Fuentes Aguirre "Catón"
(v.periódico a.m. del 18 de agosto de 2005).


En este país se está construyendo una democracia -de partidos- que absorbe recursos en cantidades que agraden el desarrollo de la población; cantidades que van más allá de lo que el gobierno invierte en áreas sociales que son prioritarias... porque lo que el Instituto Federal Electoral gastará en la organización de los comicios de 2006, sumado los recursos para los partidos políticos, 12,907.8 millones de pesos, es un alto porcentaje de lo que el gobierno destina al combate a la pobreza en Oportunidades; es decir, el gasto electoral absorbe mucho de lo que es indispensable para la atención a la población con pobreza, grupo que rebasa ya 40% de los mexicanos.

Desde luego; es importarte el proceso electoral; nadie escatima la relevancia de la organización de los comicios; contar con partidos plurales garantiza que la población pueda estar representada en su diversidad. Esto no está a discusión, sí en cambio la tergiversación que de este gasto se ha hecho en los últimos años. Mismos en los que resulta una mina de oro, armar un partido político de duración efímera, sólo una o dos campañas, cobrar los recursos que son destinados al apoyo de partidos, y una vez que no se gana... para eso están... se cobran las ganancias y a otra cosa mariposa... a buscar otro negocio porque ése se acaba en cada periodo electoral.

Baste saber que los partidos políticos recibirán 4,913 millones de pesos, superior al gasto que en este año realizará la Secretaría de Gobernación o la Secretaría del Trabajo y Previsión Social, todos estos organismos con la obligación de mostrar el movimiento de recursos, en cambio los partidos, tienen una manga mucho más ancha y navegan con pocos candados financieros.

Alonso Urrutia en su nota periodística hace un interesante comparativo entre el monto que uno de los partidos mayoritarios recibirá y el presupuesto de cualquiera de los institutos de especialidades de la Secretaría de Salud que atienden a amplias poblaciones y que son los pocos reservorios de investigación médica que existen en el país: A un partido mayoritario, da igual cuál, se le otorgará más que al Instituto Nacional de Pediatría -788.6 millones de pesos-. Más que al Instituto Nacional de Cardiología, -sólo 684 millones de pesos-. Más para un partido político y sus publicidades que para el Instituto Nacional de Cancerología, que tiene 461 millones de pesos, o el Instituto Nacional de Neurología y Neurocirugía,a los que sólo les asignaron: 424.2 millones de pesos...

Ahora, es posible que la publicidad de los partidos, chicos y grandes, realicen mejor trabajo que esos institutos mencionados... es posible que el darle a un partido más recursos que al Instituto que trata a la población mexicana con cáncer, sea más saludable desde la perspectiva de quienes reparten el presupuesto nacional... es posible, pero no es justo, ni equitativo, ni ético, porque lo que se ha generado con estas alegres cuentas no es una verdadera democracia, sino una democracia de urna donde el ciudadano tiene toda la libertad de seleccionar la "carita" que se anuncia... pero no de elegir cómo pretende que el desarrollo le llegue...

Lourdes Bueno, investigadora de la Universidad de Guadalajara
(v.pág.5-A de El Informador del 17 de agosto de 2005).


Dicen los señores diputados [de Jalisco] que cuando se habla de un mal papel, de horas muertas, de cargos que no responden a lo que de aquel comisionado se esperaba, es porque la gente está mal informada, no conoce el ritmo de trabajo, ni los esquemas de actividad, ni las respuestas y logros alcanzados.

Para contraponer esta mala información y esta falsa imagen que del Congreso se tiene, emprenderán en los medios electrónicos una intensa campaña publicitaria; una campaña que implicará un alto costo, costo necesario para que la ciudadanía comprenda y ame a sus diputados. El pueblo dice: sí, una campaña con cargo al erario público. Así cualquiera.

Otra vez los díceres de la gente como evangelios chiquitos... Que pueden decirse también al contrario: hazlo, actúa, cumple, responde con empeño, realiza las funciones que te competen y olvídate de andar convenciendo con una costosa propaganda: ¡hazlo y se dirá! Pero como no lo haces, ni cumples lo que el pueblo espera de ti, no queda sino criticarlo.

Todo esto para solicitar del Congreso y de sus dirigentes que ya no carguen más el gasto público, que ya no echen más compromisos al contribuyente, que no se quiera sostener con el dinero público una propaganda que bien podría evitarse si ellos cumplieran en cada parte, en cada aspecto, en cada una de las encomiendas de su incumbencia.

Luis Sandoval Godoy
(v.pág.4-A del periódico El Informador del 16 de agosto de 2005).


Ya se hizo pública, hace varias semanas, la lista de los aún diputados locales a los que tiene sin cuidado el creciente desprestigio del gremio y el de cada uno de ellos en particular. Total, ellos ya se van... Y como en ese singular oficio se parte de la premisa de que el pueblo no tiene memoria -esa es la regla... no exenta, por supuesto, de las excepciones que la confirman-, los "saltimbanquis" de la política sólo aspiran al salvoconducto que representa la bendición de su partido para saltar a otro cargo público, sin tener que pasar por la aduana de los comicios, para seguir medrando impúdicamente del Presupuesto.

Así como el dispendio de los fondos públicos en los "gastos de campaña" de los candidatos es, por donde se mire, ofensivo para el pueblo al que se escatiman los fondos para los servicios públicos más elementales, las indecentes piruetas de los saltimbanquis, que muchas veces buscan el "premio gordo" de alguna gubernatura o alguna alcaldía, pero de hecho piensan en el "reintegro" de una regiduría o una diputación plurinominal -para ellos no hay plato malo ni carta aborrecida-, son una burla para la democracia. Y para el ciudadano, desde luego.

Jaime García Elías, columnista y conductor radiofónico
(v.pág.5-A de El Informador del 16 de agosto de 2005).


Hoy más que nunca en nuestro país tiende a confundirse la administración pública con la política, siendo como son dos cosas totalmente distintas, porque la política electoral es búsqueda del poder, mientras que la administración pública es ejercicio del poder en aras del bien común.

Pese a que por definición y por conveniencia social no deben confundirse ambas actividades, en los últimos tiempos, concretamente a partir del presente sexenio, gobernantes de todos los niveles, federal, estatal y municipal creen tener derecho a mezclarlas sin el más mínimo recato.

De esta manera, surgen aquí y allá, a lo largo y ancho del territorio nacional, numerosos funcionarios públicos, que habiendo sido electos para desempeñar determinada función de gobierno durante determinado período, dedican gran parte de su tiempo a participar en actos de claro contenido electoral.

Esto contrasta con la tradición observada durante muchas décadas en México, incluso antes de la Revolución, en la época porfirista, cuando fue proverbial el ejercicio de la administración pública. El general Porfirio Díaz, cuya labor ha sido justamente cuestionada en el aspecto social, pero no lo suficientemente ponderada en materia económica, exigía "poca política y mucha administración". Reducir la política a su mínima expresión era una de las claves de su larga permanencia en el poder, pero al mismo tiempo alentaba una eficiente administración.

Más tarde, los gobiernos revolucionarios emanados del PRI trataron de equilibrar ambas disciplinas, dando tanto a la política como a la administración pública espacios y tiempos definidos, con claros deslindes entre los dos campos, a fin de permitir la renovación constitucional de los gobiernos, sin detrimento del ejercicio administrativo.

Sin embargo, con la alternancia del poder, es decir, con el arribo de la oposición a los más altos niveles del gobierno, las pasiones políticas se han desatado de tal manera que pareciera que ya no hay gobernantes, sino únicamente políticos en campaña permanente, porque resulta que apenas llegan por elección popular a ocupar un cargo público, cuando ya están pensando en cómo ascender el siguiente peldaño del poder, sin darse tiempo para gobernar, para administrar y resolver los problemas más urgentes de la sociedad, que es para lo que fueron electos.

En consecuencia, sin demérito del desarrollo democrático, es preciso deslindar una cosa de otra, para darle el tiempo necesario a la atención de los problemas sociales, ya que de otra manera, lejos de avanzar, el país podría irse a pique.

Editorial
(v.pág.4-A del periódico El Informador del 15 de agosto de 2005).


¿Reducirá el 'chapulinismo' político ampliar el período presidencial [municipal] a cuatro años? Lo más probable es que no; en lugar de abandonar su cargo unos meses antes, lo harán faltando un año. ¿Quién espera en la banca 24 meses? La memoria de los votantes es muy voluble y se olvidan de ellos.

(V.pág.5-A del periódico El Informador del 15 de agosto de 2005).


Además de un porcentaje elevado de indecisos, un alto porcentaje, cercano a la mitad del padrón, de ciudadanos no interesados en acudir a votar. Unas elecciones con la mitad de los votantes implican un gobierno con respaldo de diez o doce millones de mexicanos, lo cual en este país de más de cien millones de habitantes, quiere decir que sólo un 12 o 15% de los mexicanos lo quiere.

[...]

La ley electoral y los procedimientos establecidos hacen muy difícil el fraude a la antigua. Hoy se recurre a la llamada "ingeniería electoral" mediante la cual los partidos identifican dónde y con cuántos votos pueden ganar. Así, tratan de controlar la votación en ciertas casillas o secciones específicas. Y control significa entusiasmar al ciudadano por su propuesta o hacer lo necesario para anular la sección ganada por otros. Y eso requiere financiamiento para operar con gente y análisis muy finos. En el fondo es una burla de la voluntad ciudadana, pues una casilla nula por un detalle técnico, no obstante la legalidad del hecho, anula la expresión de quienes ahí acudieron con confianza en el respeto por su voto.

Miguel Bazdresch Parada
(v.pág.17 del periódico Público del 14 de agosto de 2005).


Varios de los precandidatos del PRI y del PAN cuando se les confronta con el tema del dinero, fuera del aire y off the record señalan la campaña de Enrique Peña Nieto como un ejemplo a seguir. Así, cinicamente, ven en el derroche de esa contienda la receta para ganar.

El tema es grave, está en juego el tipo de democracia que queremos, pero sólo cuando atraviese esa extraña línea que divide a la opinión entre los muy informados y los menos, los políticos se van a preocupar y dejarán de lado el cinismo.

Denise Maerker
(v.pág.22 del periódico Público del 14 de agosto de 2005).


En su borrador de decreto que fue aprobado por los diputados [de Jalisco] de la comisión para las reformas constitucionaes, se hicieron bolas con las fechas y todas, pero todas las fechas las pusieron mal. En la parte de los transitorios, pusieron 2009 en lugar de 2010, y en lugar de 2013, 2014 y en lugar de 2012, 2009 y en lugar de 2017, 2016.

No puede ser.

No, cuando se supone que no hacen otra cosa; no, cuando tienen tanto tiempo trabajando en la reforma electoral (ésta es la segunda parte); no, cuando se trata de temas tan importantes y delicados para la ciudadanía; no, cuando disponen de tantos asesores y, no, cuando ganan lo que ganan.

¡Ah! Pero dentro de unos días los jaliscienses seremos testigos de lo que hacen los diputados, porque ellos creen que la mala percepción que la ciudadanía tiene de su "trabajo" es por falta de difusión.

Quiero ver que en los spots de radio y televisión que próximamente saldrán al aire, los legisladores recononozcan este tipo de errores, que digan que no hicieron bien su trabajo, que hablen además de la falta de consensos, de que en lugar de corregir los errores se van a hacer "grilla" a sus partidos; de la agenda que tienen pendiente; de la carrera política que con nuestros votos ellos están forjando.

Laura Castro Golarte
(v.pág.5-A de El Informador del 13 de agosto de 2005).


No hay izquierda definida en el país, los restos de Valentín Campa, Benita Galeana y de otros ilustres militantes conviven -en medio de la corrupción y el golpe bajo- a fuerza de "alianzas", bendiciones a exmiembros del PRI y a uno que otro panista resentido, tanto como "proyectos" de gobiernos plenos en ocurrencias, "puntadas" y sueños guajiros. Denisse Dresser, v.gr., ha desarmado, con base en preguntas al estilo del Catecismo Ripalda, el medio centenar de vaciladas de Andrés Manuel López Obrador, con tino y certeza (Proceso, 07/VII/05).

Francisco Arvizu Hugues
(v.pág.15-B de El Informador del 13 de agosto de 2005).


Vivimos el imperio de la simulación, la corrupción y la mentira. Peor aún, el de la desesperanza y la frustración generalizada.

Los mercaderes de la política -desde el PRI o el PAN- han hecho de la democracia su coartada. Las precampañas electorales son sólo una farsa. El inmenso despilfarro de recursos para vender candidatos -que no tienen el menor decoro- es un insulto, un agravio más a los millones de mexicanos que no ven, otra vez, ninguna posibilidad de construir un futuro mejor para ellos y para sus hijos. Miles de millones de pesos -¿quién lleva la cuenta?- imponen una lógica prostibularia a la política: ¿cuánto tienes?, ¿cuánto vales?

¿Quién puede creer todavía en la política y en los políticos? ¿En esa política y en esos políticos? ¿Quién se traga sus mentiras, sus arrebatos de fe democrática, la retahíla de promesas con la que nos bombardean a diario?

No está al debate una propuesta de nación. ¡Qué va! Al contrario, todos hablan de lo mismo; de lo que las encuestas establecen como el "hit parade" de las necesidades y aspiraciones públicas; vigentes siempre porque funcionarios van y vienen y nadie cumple.

Los que son de sobra conocidos por su historial corrupto se tornan de pronto verdaderos patricios. Serenos, creíbles e impolutos. Las oscuras componendas con los medios -como la apuesta por las apuestas de Santiago Creel- se disuelven ante nuestra vista. Lo que en otro país ocasionaría el derrumbe de un político aquí, merced a los impactos publicitarios, se deja pasar, se olvida simplemente. ¿Para qué sirve entonces la memoria?

¿Qué democracia que se diga verdadera descansa sólo en el poder del dinero y abdica de su soberanía, de manera tan desvergonzada, ante el poder de la televisión?

¿Qué sucede en la izquierda electoral? El clientelismo, las tribus, la selección de los más oscuros aliados o compañeros de viaje, la corrupción, las prácticas electoreras contaminan, empañan, desvirtúan los esfuerzos del perredismo al que urge una refundación, una reinvención ética profunda.

Epigmenio Ibarra
(v.pág.21 del periódico Público del 12 de agosto de 2005).


El semanario británico The Economist se sumó ayer a los medios internacionales que han criticado a Santiago Creel y acusó al ex secretario de Gobernación de ser "un heredero aparente" de Vicente Fox "que poco promete" e incluso le tildó de "orador poco inspirador, considerado políticamente inepto".

(V.pág.26 del periódico Público del 12 de agosto de 2005).


En México existen 33 millones de personas entre los 12 y los 29 años de edad, una masa heterogénea con bastas diferencias y un par de coincidencias: están cansados de la corrupción y desconfían de los políticos.

(V.contraportada del periódico Público del 12 de agosto de 2005).


La Suprema Corte avala el inmoral monopolio que los partidos detentan sobre la vida pública de México. Ciertamente Jorge Castañeda no ganará nunca el concurso de Mister Simpatía. Es propietario del 90% del narcisismo que hay en el país (el otro 10% se lo reparten entes como Marcos, algunos futbolistas y ciertos galanes de la televisión). Sin embargo en este caso le asiste la razón, y Castañeda merece reconocimiento por el empeño con que ha defendido un derecho básico de los ciudadanos, derecho conculcado por leyes amañadas hechas en beneficio de esas grandes empresas, tan rentables, que son en México los partidos políticos. Es una pena que algunos ministros de la Corte, quizá para no indisponerse con los tales partidos, hayan echado mano a argumentos legaloides, especiosos y de pura forma, en vez de entrar al fondo de este asunto, que tarde o temprano tendrá que revisarse en bien de la honestidad política, de la justicia y del original espíritu de la Constitución.

Armando Fuentes Aguirre "Catón"
(v.periódico a.m. del 11 de agosto de 2005).


Por más que el partido Nueva Alianza quiere deslindarse del poderoso sindicato de maestros, en Jalisco es innegable el lazo que los une.

¿O alguien puede explicar qué meritos tiene el dirigente estatal del nuevo partido, Oscar Díaz, para ocupar ese puesto? ¿Tendrá que ver con que es hijo de Juan Díaz de la Torre, ex secretario general de la Sección 16 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación?

S.Cabañas
(v.pág.6A del periódico Mural del 11 de agosto de 2005).


Hoy también le toca al sol azteca, al PRD nacido sin remedio del PRI.
Tiene, junto al PRI, esperanzas por conseguir la Presidencia en 2006.

Cuenta con un gallo indesplumable, el señor López, que ha logrado, pese a las corrupciones de su equipo, a su rechazo a la transparencia y demás, una popularidad muy superior a la de su partido.

Es el Fox del PRD.

Cuenta su candidato el señor López con un equipo priista experimentado (Camacho Solís, Ebrard, Bejarano, etcétera).

Cuenta con unos medios de comunicación que le regalan su publicidad (más de 1,300 entrevistas mañaneras y litros de tinta en primeras páginas).

Cuenta con el complejo populista y mesiánico del pueblo mexicano.
Cuenta con el DF.

Sin embargo, la provincia está africanizada: hay muchos antílopez.

Nemesio Maisterra
(v.pág.6A del periódico Mural del 11 de agosto de 2005).


El presidente de la Cámara de la Industria del Calzado del Estado de Jalisco, Eduardo Huber Flores, aseguró que hasta el momento son mínimos los operativos contra comerciantes de mercancía ilegal que se han realizado en Guadalajara y eso que las leyes municipales otorgan facultades para hacerlo.

Según el empresario, todo obedece a que el alcalde, Emilio González Márquez, no quiere perder votos.

Al Centavo
(v.pág.2A de la sección "Negocios" del periódico Mural del 11 de agosto de 2005).


Cuauhtémoc Cárdenas señaló ayer que en la propuesta de Andrés Manuel López Obrador no hay definición en política energética, en el manejo de la reserva y en actividades básicas. Punto medular de un país que tiene como pocas veces antes al petróleo como su mayor ingreso -junto con las remesas de los emigrados- y que ha dejado decaer todos los demás sectores económicos...

Lourdes Bueno, investigadora de la Universidad de Guadalajara
(v.pág.5-A de El Informador del 10 de agosto de 2005).


Si de veras que les dolió el fuetazo que les dejó caer Marcos como quien latiguea a un mulo pando. Tanto, que el Pejelagarto pareciera que todavía no puede hablar, o ha optado por defenderse a través de sus correligionarios.

El sábado, Marcos dijo al 'Pejeman' que no sólo es un "traidor", sino que ha encajado perfectamente bien en el esquema de una clase política que una vez planteó Carlos Salinas de Gortari.

Una clase política mentirosa, arrogante, ensoberbecida por el poder, y terriblemente escandalosa y corrupta.

Vicente Bello en su columna "Tren Parlamentario"
(v.pág.10-A del periódico El Informador del 9 de agosto de 2005).


Lamentable, casi patético, el numerito que han montado los panistas. El precandidato más publicitado, con derroche ofensivo de recursos de origen misterioso, prefiere no comparecer ante una audiencia de medio millar de funcionarios de su partido, a sabiendas de que perderá el juego por una mala apuesta hecha cuando era secretario de Gobernación. Y el presidente del blanquiazul, que había amenazado que quien no acudiera a la cita podría ser sancionado, al constatar la ausencia del rubio "hombrecito" que despachó (permisos y concesiones) en Bucareli, simplemente se encogió de brazos.

Ahí siguen, deambulando por el país, arrastrando la cobija, luchando contra la losa que el inquilino de Los Pinos se encarga todos los días de hacer más pesada. Por eso, ahora los estrategas panistas piensan que sería bueno armar pronto un debate televisivo para que levante el raiting de Bebeto, Felipillo y Santiaguín.

Los perredistas recuperaron su santo y seña. El caudillo-candidato andaba de vacaciones y mal se había ido cuando las legendarias tribus se desataron. Gracias a un providencial video que apareció de la nada, pero que prueba mucho del trafique de apoyos sociales por votos en la ciudad de la esperanza, armaron su Tucom para tratar de inhabilitar al delfín del Peje (así son los nombres de los que actúan bajo el agua), el tal Marcelo Ebrard que ¿tenía? asegurada la candidatura para ser jefe de Gobierno del Distrito Federal, aunque nadie sepa si es perredista.

Víctor E. Wario Romo
(v.pág.4-A de El Informador del 8 de agosto de 2005).


Los gobernantes de por acá creen que con el federalismo debiera pasar como con la moda: servirse nomás de lo que les acomoda. Por eso están prestos para quejarse del trato que reciben de la federación en materia de participaciones o lo que sea, como están puestos para aventar la papa caliente alegando incompetencia ante ciertos asuntos peliagudos. Ocurre entonces un singular caso de ceguera selectiva, y los asuntos que debiera atender el gobierno federal dejan de ser considerados problema por los gobiernos locales, que justifican su inacción diciéndose atados de manos.

Toñimáximus
(v.pág.2 del periódico Público del 7 de agosto de 2005).


La única manera legal de impugnar las leyes electorales es mediante un juicio de acción de inconstitucionalidad. ¿Y quién puede promover tal juicio? Pues, solamente las minorías legislativas de los congresos, los partidos políticos y, si le apetece, el señor procurador de la República. El sistema dicta las leyes, así sean flagrantemente inconstitucionales, y el mismo sistema, nadie más, tiene el poder de corregirlas. Juez y parte. Creo que no es una cuestión de formas. Finalmente, hay muchos impresentables en los partidos. Y también muchos candidatos. Esto parece más bien un inamovible monopolio del poder.

Román Revueltas Retes
(v.pág.3 del periódico Público del 7 de agosto de 2005).


Cuando uno se pone a mirar las señales de compañías como Televisa y TV Azteca siente que está mirando la señal de alguien que está confabulado con la cúpula política. Y si la cúpula política es la enemiga de la sociedad, la que no entiende nuestros reclamos en contra de la violencia, la que no escucha nuestras súplicas por más y mejores condiciones de trabajo, la que juega con nosotros y la que nos da atole con el dedo, Televisa y TV Azteca también.

¿Entonces, para qué jugamos a la crítica y a la libertad de expresión si nuestra crítica y nuestra libertad de expresión acaba cuando entran los cheques?

Yo recomendaría que hubiera emisiones noticiosas o de análisis político donde estuviera prohibido que se anunciaran los precandidatos y los candidatos. Y que empezaran así, con una pantalla negra donde se leyera la leyenda: "por respeto a nuestro público, a nuestros anunciantes y a nuestra credibilidad, en este programa no habrá anuncios políticos pagados de ninguna clase".

Alvaro Cueva
(v.pág.17 del periódico Público del 7 de agosto de 2005).


El subcomandante Marcos arremetió nuevamente contra López Obrador, contra Cuauhtémoc Cárdenas y contra el PRD, aseguró que está integrado por "bribones y sinvergüenzas".

El líder zapatista criticó una vez más al aspirante presidencial mejor posicionado en las encuestas: no es una alternativa para los mexicanos, "nos quiere regresar al pasado socialista; nos va a partir la madre a todos" y agregó que cualquier argumento en torno a apoyar la candidatura del tabasqueño o del PRD está condenado a fracasar.

(V.pág.23 del periódico Público del 7 de agosto de 2005).


Más que nunca, ahora requerimos de gobernantes capaces de poder atender las necesidades de la vida pública y a la vez no estar cegados por sus propias aspiraciones personales de poder, ni hechos bolas por sus impropias declaraciones cantinflescas. Puede haber suficiente recurso para promover la felicidad de casi todos; siempre, si se administra bien la oportunidad histórica del país.

Norberto Alvarez Romo, promotor de desarrollo sustentable
(v.pág.5-A de El Informador del 6 de agosto de 2005).


Los políticos no quieren hablar de ética política para no tener que morderse la lengua.

Pablo Gómez
(v.pág.23 del periódico Público del 5 de agosto de 2005).


Todo el mundo sabe que los políticos, del partido que sean, cuentan mentiras; claro que para ellos son necesarias porque son mentiras políticas; mentiras cuya única finalidad es llegar al poder.

Guadalupe Loaeza
(v.pág.7A del periódico Mural del 4 de agosto de 2005).


El Peje deja a la Ciudad de México controlada por la delincuencia y con la deuda más grande de su historia, sin embargo, su popularidad es altísima. De acuerdo a las encuestas de opinión, si las elecciones fueran hoy el Peje sería el sucesor de Fox. Este fenómeno es indicador del desencanto de los ciudadanos con las élites gobernantes del país, ligadas al PAN y al PRI.

Víctor Manuel González Romero, profesor investigador y ex rector general, U. de G.
(v.pág.4-A de El Informador del 3 de agosto de 2005).


De acuerdo a ejemplos extranjeros, 500 diputados son más de los necesarios para acordar el desempeño congruente del país. El repudio social no deja dudas y tampoco se ve posibilidad de reformar para agilizar la reducción de favoritismos por parte de los partidos políticos, convertidos en agencias de empleo a cambio de apoyos.

Un aspecto, expuesto por los medios de comunicación, es el muy costoso subsidio a los partidos. Está demostrada la carga que constituye para el país, con el parapeto de salvaguardar la democracia en su proceso de transición que ya nadie cree, excepto sus integrantes al comprobar su eficacia para alcanzar beneficios de grupos.

El escenario actual de inquietud en los círculos políticos, se proyecta en las oficinas de gobierno, que aunque nunca se han caracterizado por eficientes, ahora acusan ausencias frecuentes de funcionarios ocupados en buscar su ubicación con los potenciales actores dentro de la futura administración federal, estatal o municipal.

Inquieta la observación extranjera y su inversión, que en muchos casos decide emigrar o inhibe sus intenciones de llegar, cancelando las posibilidades de empleos, requeridos en un millón anual y que apenas llega a 400,000.

La población vive la decepción con desesperación, escuchando promesas constantes, y algunas estruendosas sin sustento, de los aspirantes y por lo mismo las encuestas auguran un elevado abstencionismo que de ocurrir, la consecuencia será un gobierno débil, falto de apoyo para resolver las carencias nacionales en el competido concierto internacional.

La prueba es lo ocurrido en el actual sexenio. El entusiasmo se convirtió en decepción, pues aunque no es posible esperar las soluciones del gobierno en su totalidad, la estabilidad y la promoción efectiva sí son de su competencia para que la población, crea, participe y se convenza de los rendimientos con unidad de propósitos. De otra forma, el populismo se encumbra sobre los reclamos, la virtud genera el vicio y desánimo egoísta.

Las campañas por la popularidad han sustituido las propuestas serias de "cómo" alcanzar la prosperidad. Tales dispendios de tiempo y recursos han trascendido a la población, que empieza a sentir desconfianza hasta del Instituto Federal Electoral, que ante un abstencionismo perdería el valor de la credibilidad como ha sucedido con el congreso y las autoridades.

Carlos Cortés Vázquez, consultor en comunicación
(v.pág.5-A del periódico El Informador del 2 de agosto de 2005).


A la hora de la hora, el voto es una decisión que considera varias circunstancias, entre ellas, el miedo que, como una sombra, nos persigue recientemente dado la inseguridad en la que vivimos. Otra forma de votar es simplemente para castigar a los políticos que hacen esos discursos huecos junto con la decepción del partido que no ha logrado nada de lo que imaginábamos podía haber logrado o, en muchos casos, se vota por aquel demagogo que sabemos ha seducido a un buen sector (popular) que, a su vez, se muestra agradecido por la ayuda recibida (tercera edad) y que, por más que nos oculten el propósito y la intención política, sucede como lo hacía el tricolor, gran experto en esta materia tal como lo hizo el Peje, uno de sus fieles imitadores.

También el voto puede ser corporativo, como aquél en el que tú me das y yo hago como que te doy, de las grandes confederaciones de sindicatos. Pero hace dos sexenios empezó, poco a poco el cambio.

Casi en todos los casos el cambio se dio con una buena cantidad de expectativas que, para nuestra decepción, ha habido pocos resultados a la vista y por lo tanto, el desánimo es más o menos generalizado.

En verdad cada quien mira según el cristal con el que vea y cada quien habla según le ha ido en la feria. Unas veces la feria es espantosa y las víctimas pierden la vida, mientras que, detrás del podium, los políticos (no todos) niegan la inseguridad y la población (por lo menos la capitalina) vive cada vez más entre el pánico y el horror: los ladrones asaltan al menos pintado, los "grafiteros" hacen de las suyas impunemente, los "Bejaranos" se arrebatan los dólares para seguir operando para manejar a los "invasores", como lo hacían en el Revolucionario los "Camachos" que están en la "pejecampaña", pero que logró mover a los ambulantes a su antojo, con una caja chica con la que operaba eficientemente a billetazos.

Pero el día que llega uno a votar, tal vez lo haga por el candidato más predecible aunque no sea el más popular.

La sociedad rechaza la incertidumbre. Sólo los jóvenes son los que se arriesgan, pues son ellos los que tienen la energía para hacerlo. El resto de la población prefiere votar por quien le brinda una mayor seguridad y ese candidato o ese partido debe ser predecible. Tal vez detectar quién es predecible es todo, y en eso consiste la sabiduría popular.

Martín Casillas de Alba
(v.pág.5-A del periódico El Informador del 2 de agosto de 2005).


A pesar de ese talante autoritario y opaco de su gobierno, [López Obrador] dijo a La Jornada en entrevista publicada el viernes 29 de julio: "La gente no me va a recordar como víctima. Aspiro a que me recuerde por la obra social y por tratar de acreditar un nuevo modo de hacer política, en el que los pobres son prioridad".

Pese al papel protagónico de personajes como su tesorero tahúr Gustavo Ponce y su secretario gángster René Bejarano, se sueña en el olimpo de los puros: "Imaginen que no triunfe el dinero sobre la moral, imaginen que el pueblo derrota al poder de las mafias y del hampa de la política. Ganar la Presidencia de la República no va a ser fácil. Nos estamos enfrentando a quienes van a utilizar todo el dinero del mundo, todas las trampas, los conozco bien, los he padecido".

Víctor E. Wario Romo
(v.pág.4-A de El Informador del 1o.de agosto de 2005).


En México tal vez no podríamos hablar todavía de un animal moribundo, pero sí en extremo anémico y con inclinaciones suicidas. Nos acercamos al escenario final de las transiciones fracasadas, en las cuales el estado se vacía de poder y la sociedad de confianza. Al término de dos decenios de liberalización económica y de competencia política abierta, en vez de haber remodelado las instituciones para gobernar los cambios, hemos desembocado en el usufructo elemental del poder remanente, la banalización de su desempeño y la subasta de la autoridad para la preservación de sus privilegios.

Faltan más de 16 meses para que expire el mandato sexenal de los poderes y todo parece indicar que éstos han renunciado a la responsabilidad de su ejercicio. La decisión de los partidos en el sentido de no legislar en el congreso reformas mínimas para frenar el dispendio electoral, regular la contratación de radio y televisión y robustecer las facultades de fiscalización del órgano electoral, constituye una declaración de guerra contra la equidad del proceso. Lo hicieron con la clara intención de eludir el control legal de los abusos que pretenden cometer. Contaron además con la tácita complicidad del Consejo del IFE, que nada hizo para impulsar las reformas, propaló que no eran necesarias para asegurar la legalidad de los comicios y ahora derrama lágrimas de cocodrilo por carecer de facultades para cumplimentar sus deberes constitucionales.

Las precampañas quedaron deliberadamente al margen del orden normativo y se han vuelto el escenario demostrativo de los nuevos contubernios entre las potestades del dinero privado y las de la administración pública. Una de ellas en particular; la del llamado "candidato triple A", merece no sólo denuncia pública sino inquisición legal. Sucede que, a título de retribución por dudosas concesiones otorgadas en el desempeño de una función pública, el autor de la decisión recibe de sus beneficiados reducciones publicitarias estimadas en varios millones de dólares. Un flagrante conflicto de intereses y tal vez una modalidad perniciosa del peculado.

Por su parte, diputados y senadores habían ya incurrido en cesión de competencias soberanas al no atreverse siquiera a presentar el dictamen que contenía reformas moderadas a la Ley de Radio y Televisión. En todos los frentes se observa el mismo patrón de conducta: el repliegue, en ocasiones vergonzoso, de la autoridad respecto de los poderes fácticos que se suponen determinantes para las elecciones del 2006. Esto es, el creciente debilitamiento y privatización de los poderes públicos como consecuencia corrupta del llamado "gobierno de los gerentes" y proemio inevitable de la restauración de los sobrantes del antiguo régimen.

El efecto combinado de la partidización del ejecutivo, el abandono de las responsabilidades de gobierno y el imperio del dinero sobre los procesos políticos podría precipitar, en poco tiempo, deplorables retrocesos. Me refiero al deterioro de nuestra posición internacional, particularmente en la relación con los Estados Unidos, y a nuestra progresiva vulnerabilidad frente a todas las modalidades del crimen organizado, que podrían tornarse irreversibles.

Porfirio Muñoz Ledo
(v.pág.4-A de El Informador del 1o.de agosto de 2005).


Nos alarmamos grandemente de constatar que, por algunas razones que no logramos todavía entender, el presunto populismo del potencial caudillo [López Obrador] le está rindiendo muy buenos dividendos: es por lo de la ayuda a los viejos -decimos despreciativamente; es porque ha construdio obras de relumbrón con dineros salidos de quién sabe dónde, en vez de reparar las pestilentes fugas del drenaje profundo o de dar mantenimiento al muy subterráneo e invisible Metro -añadimos desdeñosamente; es por haberle sabido extraer a un torpe proceso judicial el más provechoso de los papeles, a saber, el de la víctima acosada por la implacable maquinaria de un estado faccioso -rematamos finalmente, con la exasperación de quien reconoce lo redituable de una buena actuación.

Román Revueltas Retes
(v.pág.3 del periódico Público del 31 de julio de 2005).


Los analistas se han encargado de decirnos en todos los tonos que el país está en manos de unos cuantos y a los demás no nos queda otra que ponernos en esas manos, si algo queremos que nos toque. No obstante esas horribles realidades, es más horrible el quedarse sentado.

En los once meses y fracción faltantes para la elección del nuevo gobierno escucharemos de los postulantes de cada partido político, promesas, discursos retóricos, acusaciones, pleitos de lavadero, de cantina y de callejón; presentarán ideas nuevas, dirán que sí a toda petición, prometerán resolver en algunos minutos cualquier problema que se les señale e inundarán los medios de comunicación con cualquier cantidad de propaganda.

Es de vital importancia la instauración de una institución de estado independiente y autónoma, de hecho un nuevo poder, para fiscalizar las cuentas del dinero público, un auténtico Tribunal de Cuentas con poder para revisar e intervenir en las cuentas públicas, a tiempo, y sin consigna política o de la autoridad. Sólo así el país y los ciudadanos estaremos seguros que se fiscaliza (es decir, se revisa si el gasto produce lo prometido y si lo prometido es bueno para todos) a los partidos, a los gobiernos y a las entidades que usan dinero de los ciudadanos. Así sabríamos, por ejemplo, si de verdad los municipios no tienen para el alumbrado público según se quejan ahora Guadalajara y Tlajomulco. ¿Quién de los apuntados propone algo así? Nadie. Les asusta.

Los ciudadanos requerimos hoy un estímulo para cumplir la ley pues aún se piensa que la componenda es mejor que la ley. Mejor, excepto para la democracia. Podemos exigir si cumplimos. De otro modo nos compran: con dádivas, con puestos, con hacerse de la "vista gorda", con obra pública "chafa" pero vistosa.

Hoy hace falta ir más allá de perseguir y castigar al infractor, que mucho sería, hacia estimular al que sí cumple. ¿Quién propone algo así? Hoy, nadie. Les asusta. Y ahí entramos a la cancha los ciudadanos. O hacen algo de eso o no hay voto.

Miguel Bazdresch Parada
(v.pág.18 del periódico Público del 31 de julio de 2005).


El estilo de gobernar de López Obrador, ciertamente popular, no muestra rasgos de modernidad o de apertura, tal como se muestra en su ambigüedad respecto a la ley, la resistencia a la transparencia o a un efectivo escrutinio público.

Para muchos fuera del DF, AMLO es una opción indeseable para presidente.

Federico Berrueto
(v.pág.20 del periódico Público del 31 de julio de 2005).


Seguimos siendo testigos impotentes de las abrumadoras y costosísimas campañas de los muchos suspirantes a la Presidencia que pretenden vendernos la sonrisa de uno, la mirada de otro, la determinación de aquél, y todos compitiendo por el eslogan más pegador e igual de intrascendente.

Definitivamente este mes de julio de 2005 el ambiente respecto a la política y a los políticos no es el mejor. Flota en el aire y se aprecia en los periódicos y en las tertulias un hastío creciente respecto a lo que ocurre en nuestra vida pública. La tentación de rechazar a todos los partidos y políticos diciendo que todos son iguales es grande. De hecho, se ha vuelto muy difícil evitarlo.

¡Qué diferente al ambiente que se respiraba hace seis años!

Desde analistas tan conocidos como José Antonio Crespo, que llama a votar por el que menos gaste porque implícitamente consideran que las diferencias entre los posibles candidatos son intrascendentes, o las críticas del subcomandante Marcos, que rechaza de tajo a todos los partidos y a todos los políticos, hasta los comentarios desganados, y "yo te lo dije", de los menos politizados frente a la actual orgía publicitaria de los candidatos; todos dicen que ellos, los políticos, son iguales, un asco.

No hay que cansarse de denunciar el imperfecto sistema de reglas que los empuja a derrochar sin consecuencia, o a vacacionar en la Cámara o el Senado sin costo para su futuro político.

Denise Maerker
(v.pág.23 del periódico Público del 31 de julio de 2005).


Es urgente que la sociedad esté muy atenta y lleve un registro de las cuentas pendientes, del desempeño pasado y presente de quienes ahora se apuntan para seguir contendiendo en procesos electorales, para presidencias municipales, diputaciones y senadurías, gobiernos de los estados y Presidencia de la República. Esta información será fundamental a la hora de marcar la boleta.

Editorial
(v.pág.4-A del periódico El Informador del 30 de julio de 2005).


Pocos son los gobiernos que se han preocupado por introducir y ampliar la red de colectores, porque resulta que la obra subterránea no se ve, no luce, y por tanto carece de utilidad electoral, sobre todo en estos tiempos en que reunir votos parece ser el interés público número uno.

Editorial
(v.pág.4-A del periódico El Informador del 27 de julio de 2005).


Frecuentemente se publicitan como logros de los gobiernos lo que no son sino obligaciones como gestores de la colectividad que los eligió. Ello es entendible desde el punto de vista de los gobernantes, que desean adornar su labor como funcionarios eficientes y que responden a la sociedad. Los ciudadanos no debemos caer en el espejismo de logros que son elemental responsabilidad de gobierno, y por tanto no nos deben ser presentados como acciones excepcionales, producto del dinamismo del gobernante.

Sergio A.López Rivera, abogado
(v.pág.5-A del periódico El Informador del 27 de julio de 2005).


Tiempo les falta hoy a nuestros diputados y senadores para organizar precampañas electorales y satisfacer sus intereses personales, de grupo y de partido. Lejos, muy lejos, se encuentran de pensar en hacer un servicio a la nación, abordando la agenda económica y social, que como en el caso de la cuestión energética, es impostergable.

Abundarán en los próximos meses las promesas de solución por parte de precandidatos y candidatos de todos los partidos, pero los electores no olvidarán que cuando sus representantes tuvieron la oportunidad de trabajar por México, simplemente no lo hicieron.

Editorial
(v.pág.4-A del periódico El Informador del 26 de julio de 2005).


Sin control.

(Publicado en el periódico El Informador del 26 de julio de 2005).


Los 50 planes de AMLO son un tiro de escopeta destartalado e incongruente que lo hizo sólo para cazar patos-votos tal como lo ha hecho desde que asumió el poder en la capital: planes sin estructura, como buenos deseos o perdigones para ver quién se suma a su favor, donde es notable, paradójicamente hablando, que se crea él mismo que es importante la transformación de las Islas Marías en ecoturismo o de Los Pinos en museo. En verdad, ¿ustedes creen que estos "planes", resuelven algo de fondo o nos permiten avanzar en algún sentido?

Martín Casillas de Alba
(v.pág.5-A de El Informador del 26 de julio de 2005).


José Antonio Crespo, profesor e investigador del Centro de Investigación y Docencia Económica, acaba de lanzar la semana pasada, a través de un artículo publicado en "El Universal", una muy sugerente propuesta para quienes asistimos, asombrados e indefensos, a esta feria de complicidades en la que los partidos políticos y sus grupos parlamentarios en el Congreso de la Unión han convertido a las campañas políticas.

En su artículo, luego de razonar sobre lo que está ocurriendo con el aberrante gasto que despilfarran aspirantes a cualquier cargo público, se pregunta si los ciudadanos podemos hacer algo para revertir esta tendencia perversa del gasto irrefrenable en campañas. Su respuesta es la siguiente: "Sí; emitir su voto a favor de aquel candidato que, con opción real de ganar la elección, gaste menos en publicidad mediática durante la campaña oficial, en proporción a su financiamiento legal. Castigar así el derroche y premiar la (relativa) austeridad, pero no con exhortos morales o llamados a misa, que a nada llevan, sino con el único instrumento político-legal en nuestras manos: el sufragio".

Está claro que los partidos políticos no tienen el menor interés en actuar con decencia, con responsabilidad y de cara a las exigencias de la mayoría de los mexicanos que, además de todo, somos los que les pagamos a los políticos (por la vía de las prerrogativas legales) para que gasten a diestra y siniestra en campañas huecas, llenas de colorido, de gesticulaciones y frases apantallantes, pero carentes de ideas y propuestas serias. Los partidos representados en el congreso no legislarán en contra de sus intereses y de eso no debemos tener la menor duda.

Escribe Crespo: "El candidato más dispendioso puede atraer a buena parte del electorado a través de su costosa publicidad, pero también perdería esa proporción de electores que, de ser exitosa esta estrategia, podría ser determinante. Se trata de invertir la relación hoy vigente, en la que el derroche es electoralmente redituable, a otra en la que resulte contraproducente. Cambiar el binomio 'despilfarro = victoria' por el de 'despilfarro = derrota'. Mientras más electores se sumen a esta estrategia -lo que puede medirse por encuestas- mayor su impacto, lo cual generaría un precedente que obligue a los partidos, después de 2006, a pactar la reforma relegada. De lo contrario seguirán como ahora, como si nada, ignorando cínicamente a los ciudadanos".

Víctor E. Wario Romo
(v.pág.4-A de El Informador del 25 de julio de 2005).


El Poder Judicial de la Federación determinó que no proceden los amparos de la administración pública federal contra resoluciones del Instituto Federal de Acceso a la Información (IFAI).

Con ello, las dependencias tendrán que entregar al instituto la información solicitada.

El IFAI informó ayer, en un comunicado, que con esa determinación será improcedente cualquier amparo promovido por personas físicas contra resoluciones del IFAI que sólo afectan a la administración pública federal.

María Marván Laborde, comisionada presidenta del IFAI, dijo al respecto que los amparos han sido una forma en la que las dependencias y los servidores públicos han buscado resistirse a la Ley Federal de Transparencia y Acceso a la Información Pública y Gubernamental.

(V.pág.10-A de El Informador del 25 de julio de 2005).


Son necesarias nuevas reglas del juego.

"No me gusta la política" es la fórmula más segura para que los políticos sigan haciendo de las suyas, porque a ellos sí les gusta.

Abandonar, consciente o inconscientemente, el deber de participar en la cosa pública es la más nociva de las irresponsabilidades cívicas.

Mientras se arraiga la cultura de la participación ciudadana, hay remedios para aliviar los males. Por ejemplo:

  1. Obligar legalmente a quienes fueron electos por voto popular a terminar su mandato.
  2. Eliminar el subsidio a los partidos políticos y, de todos modos, revisar sus fuentes de financiamiento, como instituciones de interés público que son.
  3. Fijar porcentajes concretos a los diversos ramos del gasto público para evitar que los gobernantes dediquen la mayor parte del dinero a sueldos y prestaciones de ellos mismos o a partidas establecidas a su conveniencia.
Marcos Arana Cervantes
(v."El Trilenio" en la pág.12-B de El Informador del 25 de julio de 2005).
En esta ruleta de la política, hasta perdiendo ganan... algunos. El chiste es figurar para tener alguna derrota cara que vender, aunque no quede cara para dar después.

Toñimáximus
(v.pág.2 del periódico Público del 24 de julio de 2005).


Lo más inquietante es el sentimiento de impotencia que tenemos los ciudadanos al sabernos desprotegidos y la frustración de ver que el estado no asume sus responsabilidades.

De ahí que una campaña televisiva, para nosotros, no sea una acción política ni mucho menos sino simplemente la estrategia desesperada, casi rabiosa, de quien no sólo se siente amenazado en lo más fundamental, su integridad personal y la de su familia, sino que se confronta, en su desamparo, a la escandalosa ineptitud de sus gobernantes aderezada, encima, de un discurso egoísta, autocomplaciente, mentiroso, demagógico y distante.

Nuestro desencanto y nuestra cólera se enfilan hacia una clase política ensimismada toda ella en sus mezquinas luchas de poder, indiferente e incapaz de siquiera definir las prioridades nacionales mientras que el país se descompone aceleradamente. Los responsables son todos.

La exhibición pública del horror en unos anuncios televisivos es, ante todo, un intento de sacudir las adormecidas conciencias de nuestros gobernantes. No es político. Es ciudadano. Pero ellos son los que lo politizan todo. Hasta el último secuestro de un hombre que, por lo visto, debería de haber sido tan anónimo como esos infelices que mueren todos los días en la oscuridad para gran tranquilidad de los políticos.

Román Revueltas Retes
(v.pág.3 del periódico Público del 24 de julio de 2005).


Un pobre partido político, según el dogma de 2005, es un partido que apenas tiene para derrochar.

El 17 de julio pasado, la escritora Elena Poniatowska dio cifras que podrían configurar un tratado del desperdicio: la televisión mexicana recibe 5.7 millones de pesos diarios de publicidad política; Jorge Castañeda ha invertido en la precampaña para su precandidatura 19 millones de pesos; el gobernador del Estado de México Arturo Montiel le regaló al viento (o a cualquier vacío conceptual o físico) 300 millones de pesos; y desde el 15 de abril, Santiago Creel ha esfumado 130 millones de pesos.

En los últimos seis días -consigna Elena Poniatowska- Creel ha volatilizado 22'031,477 pesos. ¿Qué se fizo el rey don Juan? El derroche no sirve para nada, pero sin el derroche ningún candidato se siente alguien.

¿Se justifican 12,000 millones de pesos de presupuesto electoral para promover la reingeniería facial de esta galería de iluminados? Nadie responde positivamente la pregunta, pero la Cámara de Diputados no acusa recibo.

Carlos Monsiváis
(v.pág.18 del periódico Público del 24 de julio de 2005).


Asistimos simplemente al espectáculo de la debilidad patética del estado mexicano frente a la defensa de los intereses de unos cuantos.

Esta semana, en MILENIO Guillermo Valdés escribió: "De las 17 ramas de actividad que componen la economía nacional (...) 11 presentan un elevado grado de concentración monopólica, es decir que menos de 4 empresas (pueden ser 1 o 2) controlan entre 66 y 100% del mercado en que operan, según un análisis elaborado por GEA. (...) Esto quiere decir que, cuando mucho, 44 empresas controlan casi la totalidad de la economía nacional". Y son esos 44 grupos empresariales a los que nuestros políticos se la pasan pidiéndoles dinero para hacer sus multmillonarias campañas. ¿Cómo imaginar siquiera que se atrevieran a tomar decisiones autónomas, de acuerdo al interés del país, si los tienen completamente agarrados?

No hay forma.

Denisse Maerker
(v.pág.22 del periódico Público del 24 de julio de 2005).


El obispo de Saltillo, Raúl Vera López, consideró injustificable y escandaloso el dispendio de recursos que se gastan en precampañas, pues contrasta con el incremento de la pobreza e inseguridad en el país.

Durante su homilía en la Basílica de Guadalupe con motivo de la peregrinación anual de la Diócesis de Saltillo, Vera López señaló que con esos gastos excesivos quienes aspiran a la Presidencia de la República o a cargos públicos demuestran que sólo buscan el poder por el poder.

Mencionó que a cambio de apostar por las propuestas que hagan de México un país que progrese, los partidos políticos se han dedicado "a inyectar dinero en publicidad para inflar la imagen de los aspirantes, dinero cuya procedencia compromete de antemano a los candidatos con los intereses de la iniciativa privada y otros".

El jerarca católico advirtió que es muy peligroso que tanto dinero se invierta en las precampañas y campañas, pues sólo provoca "desconfianza".

Dijo que la sociedad civil debe saber que es ella la que nombra a los representantes, y les paga mediante sus impuestos. Esa conciencia ciudadana, subrayó, se debe vivir en las próximas elecciones y así pedir cuentas a los gobernantes y a los congresos.

(V.pág.2-A de El Informador del 20 de julio de 2005).


Cuando los diputados dicen que el sistema jurídico no está acorde con la realidad actual, entonces es cuando las preguntas muerden los calcañales. ¿Qué hacen, pues, los fabricantes de las leyes para que el sistema jurídico sea perfeccionado? ¿O por qué no hacen lo suficiente para cambiar las estructuras del sistema político mexicano?

Voces del ejecutivo federal, como las de Vicente Fox, Marta Sahagún, Santiago Creel y, entre otros, Francisco Gil Díaz, han echado todo el peso de la responsabilidad a la oposición, a la que le achacan el marasmo legislativo que ha llevado a la anulación de reformas que cambiasen de modo de caminar al estado mexicano.

No dejan de tener una gran razón estos personajes -de declaraciones tan interesadas, por supuesto, dado el protagonismo que tienen en su búsqueda de la permanencia en el poder-, pero los opositores no tienen todas las llaves que abren la puerta de las reformas del estado.

Fox y su partido son cruciales para abrir de par en par esa puerta, pero no han querido, porque más allá del querer o el poder cambiar leyes, han estado confrontándose dos visiones, cuando menos, de país. Y nadie ha querido ceder.

Clímax de este enfrentamiento han sido los vetos presidenciales a algunas leyes aprobadas por la oposición en el congreso, donde son mayoría.

Mucho del marasmo ha sido provocado también por la mordacidad de unos y otros, con el propósito de que las ganancias políticas no se las lleve nadie.

Vicente Bello en su columna "Tren Parlamentario"
(v.pág.2-A del periódico El Informador del 23 de julio de 2005).


Es lamentable -sin que se les culpe por ello- que una gran cantidad de jóvenes esté considerando seriamente no votar en los próximos comicios porque tienen la creencia de que no sirve para nada, aun cuando los votos estén bien contados y sean respetados.

El desencanto es mayúsculo.

Editorial
(v.pág.4-A del periódico El Informador del 23 de julio de 2005).


Los 50 compromisos del proyecto político que presentó Andrés Manuel López Obrador el fin de semana pasado parecerían ser uno de los primeros grandes errores del perredista en su camino a la Presidencia. Los compromisos de AMLO, más que promesas, son una lista desordenada de buenas intenciones y fantasías populistas, redactadas sin ninguna intención de justificar cómo se implementarían y de dónde vendrían los recursos para cumplir con tales promesas electorales desorbitadas.

Por más loable que sean las intenciones de AMLO, ¿de donde surgirán los fondos para: la pensión alimentaria, atención médica y medicinas gratuitas; para mejorar los servicios del IMSS y del ISSSTE; para la creación de 200 preparatorias, y 30 universidades; apoyar el deporte, la agricultura, y la pesca, la cultura; fomentar la lectura y la ciencia, SIN subir impuestos (# 40) y sin privatizar el sector energético (# 22) y manteniendo el equilibrio macroeconómico (# 45)?

El prometer los qués sin establecer los cómos es sólo una de las múltiples y más sencillas críticas a las propuestas de AMLO. Los que lo apoyan podrán argumentar que por lo menos es un intento del candidato del PRD a poner sobre la mesa una lista de propuestas que tendrán que debatirse. El problema es que con sólo presentar esta lista se abre un boquete en la credibilidad del candidato, ya que los 50 compromisos nos señalan a un político que no sabe sumar y restar. ¿O es la lista una señal de que López Obrador ignora cómo implementar políticas públicas, ya que ni siquiera intenta priorizar tales propuestas? O tal vez representa algo mucho más preocupante. Como dice el refrán popular: "Quién mucho promete, dos cosas hace: promete y miente". Entonces ¿cuál es la verdadera propuesta de López Obrador?

Ana María Salazar, académica del ITAM
(v.pág.4-A de El Informador del 23 de julio de 2005).


Los partidos políticos han sido rebasados por la modernidad, el discurso político, por tanto resulta anacrónico.

Manuel López de la Parra
(v.pág.5-A del periódico El Informador del 23 de julio de 2005).


El jueves, después del anuncio rimbombante [del gobernador de Jalisco] de que había una inversión sin precedente para obra pública, en el Congreso del Estado se exponían las pésimas condiciones de la carretera Mascota-Las Palmas-Vallarta, la que se supone que ya está terminada. Ayer, otro diputado lo confirmó con otras imágenes y, por referencias directas de habitantes de la zona, efectivamente, aquello se está cayendo.

¿Y qué pasa? Nada, no pasa nada.

Laura Castro Golarte
(v.pág.5-A del periódico El Informador del 23 de julio de 2005).


La nueva carretera Mascota-Las Palmas es una obra mal hecha y significa un alto riesgo de accidentes para quienes la utilizan actualmente. Presenta hundimientos, deslaves y hoyancos en 60% de los 80 kilómetros de camino, carece de señalamientos en 30% y presenta cuarteaduras.

(V.pág.14 del periódico Público del 22 de julio de 2005).


Hace unas semanas, los legisladores de Nuevo León aprobaron una nueva ley ambiental estatal que incluye, entre otras curiosidades, una reimplementación del programa de verificación vehicular y la aparición, como plan de emergencia, del Hoy No Circula.

En general, la comunidad ambientalista se ha manifestado contra estas iniciativas del gobernador porque no responden al verdadero problema de contaminación del aire que hay en la ciudad; nadie ha podido defender la implementación de estas medidas.

Lo que se desprende de esta aprobación es el descuidado trabajo legislativo que hicieron los diputados, al aceptar la ley sin informarse o consultar a personas con autoridad (sobran en el estado). Es obvia la intención recaudatoria de la administración, o qué: ¿nadie le dijo al gobernador que en Monterrey el principal problema del aire son las micropartículas de polvo y no las emisiones vehiculares?

Alejandro Gonzáles
(v.pág.44 del periódico Público del 22 de julio de 2005).


La actitud asumida por la Asamblea Legislativa del "Peje" López Obrador, en donde en el artículo 44 bis de la Ley de Transparencia de la capital castiga al ciudadano que busque sacar ventaja de la información pública obtenida.

Dentro de la transparencia, el ciudadano debe buscar la información que es de todos, y que la autoridad elaboró con nuestros impuestos porque con esa información espera obtener una ventaja. Por favor, perredistas igualitarios, obtener información para obtener ventajas es un requisito para progresar.

Enrique Canales
(v.pág.6A de Mural del 21 de julio de 2005).


Lo nuevo que surgió en propuestas de reformas electorales a la Constitución Política del Estado de Jalisco fue la propuesta del PRD y de Convergencia por permitir las candidaturas independientes o ciudadanas.

(V.pág.3B de Mural del 21 de julio de 2005).


¿Quién habrá dicho que para tener democracia es necesario realizar campañas políticas tan costosas, campañas que por su dispendio en publicidad televisiva, esta vez, los mexicanos pagarán más de 1,160 millones de pesos? Nadie que tenga cacumen. Entonces, algo está mal cuando las actuales campañas -antes de iniciar- ya degluten el poco presupuesto de la nación que podría servir -si de eso se tratara- para el desarrollo de los mexicanos, pero que, bajo los actuales sexenales, termina yéndose por el despeñadero de la publicidad y de los negocios. O, lo que es lo mismo, de los subsidios nacionales a empresas privadas... Hasta que las arcas -ya casi perdidas- del pueblo mexicano, se agoten y la democracia se vuelva dolorosa tragedia.

Es de tal magnitud el negocio que la manipulación de la democracia proporciona a través de campañas de relumbrón a las dos televisoras más importantes del país -Televisa y Televisión Azteca- que analistas de Banamex-Citigroup y Deutsche-Ixe calcularon sus ingresos en alrededor de 1,160 millones de pesos, monto al que ascenderá lo que se ha dado en llamar, eufemísticamente: el gasto electoral...

Campañas de relumbrón para que algunos políticos digan lo que otros, más listos que ellos, les indiquen; de la manera que otros, mejor capacitados que ellos, les sugieran; con un equipo, más hábil que ellos, que les construya una imagen -siempre artificial- sobre una cara sin rostro. Campañas con discursos armados por expertos que dirán lo que los políticos no cumplirán; con "apoyo" de "estrategas", rescoldos de viejas usanzas puestas a circular de nuevo... Y esto, sólo deja al pueblo sin saber quién es verdaderamente el candidato, qué piensa, cómo opina, pero esto tiene sin cuidado a los cuidadores de ésta "su" democracia...

Todo parte de la tremenda parafernalia que son los excesos para hacer creer que se tiene lo que sin duda en este país muchos, demasiados, políticos han perdido: honestidad cívica y política.

Lo que resultará de todo esto es que la fiesta electoral la van a tener las empresas de la pantalla chica…las que, gracias al "democrático" traslado de recursos -el negocio se les da a las dos televisoras por igual-; un dinero que los mexicanos trabajaron, ellas, las dos empresas más poderosas, podrán tener: ganancias sin jugar, subsidios sin arar, mercado sin salir a vender... ¡Ah!, pero eso sí, todo en aras de unas campañas que lograrán... lograrán... esta vez, ¿qué lograrán?

Lourdes Bueno, investigadora de la Universidad de Guadalajara
(v.pág.5-A de El Informador del 20 de julio de 2005).


Por lo general los diputados no están interiorizados en cuestiones de arte y cultura, les falta información. Si dependiéramos de lo que saben los diputados, estaríamos perdidos.

Francisco Javier Ibarra, crítico de arte
(v.pág.5-A de El Informador del 20 de julio de 2005).


Frases ocasionalmente ingeniosas... Frases, en casi todos los casos, huecas, insustanciales, vanas... Frases sonoras, grandilocuentes... Frases discurridas por publicistas profesionales, con el ánimo de que funcionen como los "slogans": con la intención de que dejen algún sedimento en la memoria de los indefensos ciudadanos: consumidores, cuántas veces a pesar nuestro, de esos productos desechables que son los políticos.

Los publicistas hacen lo que saben: discurren frases "de impacto", según ellos; contratan espacios en los medios y en la vía pública para desplegar sus espectaculares y pendones; creen, con ello, haber cumplido. El resto lo dejan a factores aleatorios como pudiera ser lo impredecible de un resultado cuando hay verdadera democracia... o al "carisma" del candidato...

El "carisma" de marras consiste, en términos llanos, en la capacidad camaleónica del interfecto; en su capacidad de simulación; en el talento histriónico que se requiere para parecerse a los hombres y mujeres que el ciudadano quisiera ver en los cargos públicos: honestos, generosos...; sensibles a las necesidades del pueblo. A falta de una verdadera vocación de servicio o de una sólida formación ideológica, son incapaces de proponer sus objetivos de gobierno o de asumir públicamente compromisos con la sociedad. Por supuesto, también son incapaces de proyectar sus verdaderas intenciones... Si lo hicieran, ¿quién votaría por ellos?...

Jaime García Elías, columnista y conductor radiofónico
(v.pág.5-A de El Informador del 19 de julio de 2005).


La semana pasada fue particularmente pródiga en gestos autoritarios y expresiones de baja estofa protagonizados por el gobernante tabasqueño. La "renovación" del Consejo de Transparencia -decidida por la servil mayoría perredista de la Asamblea Legislativa del Distrito Federal- del que han eliminado ya a los consejeros incómodos (especialmente a la consejera María Elena Pérez Jaén); la iracundia del "Peje" ante cuestionamientos sobre la calidad de las obras viales que ha emprendido; su pertinaz negativa a revelar cifras y datos sobre los contratos de esas mismas obras; y sobre todo la vulgar e incomprensible arremetida contra el consejo del Instituto Federal Electoral, van pintando al verdadero político desatado, intransigente, retador y ambicioso, que se ha adueñado del partido que lo postuló para el cargo que todavía ostenta.

El más grave de los tropezones de la semana pasada del jefe de Gobierno -ungido ya como candidato único del Partido de la Revolución Democrática, merced a la declinación del ingeniero Cuauhtémoc Cárdenas- fue el haber repetido la torpe cantaleta del "compló" ante la difusión de los anuncios televisivos de la agrupación México Unido contra la Delincuencia, A.C., que proyectan casos reales -verdaderamente estrujantes- de personas agredidas por la delincuencia desatada de la Ciudad de México. De ese tamaño es el desprecio de López Obrador por todo aquello que no le resulta cómodo, o que no abona a sus desmedidas ambiciones. Ése es, como dijera un cronista deportivo, un político ¡de primerísimo nivel!

Víctor E. Wario Romo
(v.pág.4-A de El Informador del 18 de julio de 2005).


Negligencia e ineptitud de las autoridades, más preocupadas por significar su paso por los cargos públicos con obras de relumbrón, que por cumplir, modestamente -como ofrecieron hacerlo, cuando apenas eran candidatos, los que hoy son gobernantes-, como responsables de dependencias creadas para prestar servicios públicos.

Jaime García Elías, columnista y conductor radiofónico
(v.pág.5-A de El Informador del 18 de julio de 2005).


En todos los medios y a todos los niveles, es un despilfarro de recursos el que se hace en las precampañas de parte de todos los prospectos a candidatos. La situación es igual para quienes aspiran a las diputaciones, alcaldías, gubernaturas y hasta Presidencia, lo que ocasiona el agobio de la población, que manifiesta su hartazgo al no acudir a las urnas.

Deben aplicarse sanciones económicas a los aspirantes a un puesto de elección popular que utilicen su representación pública para promoverse; incluso debería plantearse la posibilidad de negar el registro a quienes se encuentren en esta situación. Cuentas claras y total transparencia deben exigirse.

Fernando Pérez Aguayo, dirigente en Jalisco de la Confederación Patronal Mexicana
(v.pág.5-A de El Informador del 18 de julio de 2005).


Desde la anterior gestión, el entonces Consejo Electoral [de Jalisco] propuso un Código Electoral en el cual se incluía el reglamentar las precampañas; se encuentra en manos de los diputados, porque son ellos quienes deben de aprobar la reforma legal y aún tienen tiempo, ya que, de acuerdo con la ley, las reformas deben estar listas 90 días antes del inicio del proceso; así que para septiembre sería la fecha límite.

Rosa del Carmen Álvarez, consejera electoral
(v.pág.5-A de El Informador del 18 de julio de 2005).


Es un círculo vicioso: La mayoría de los actuales diputados [locales de Jalisco] ya se promueven para el siguiente cargo; entonces, lo que menos les interesa es reglamentar las precampañas y ponerse a legislar en serio. Lo que significa que apenas "trabajaron" poco más de año y medio. ¿Será esto meritorio para una nueva colocación?

(V.pág.5-A de El Informador del 18 de julio de 2005).


La democracia en México sufre un retroceso ante la imposibilidad de concretar el "cambio". Ello puede evitarse si fortalecemos la imagen del ciudadano, pues por ahora cuenta con pocos recursos para dejar sentir su presencia en la sociedad y se halla desprotegido ante los poderes públicos, indicó Roberto Castelán Rueda, rector del Centro Universitario Lagos, de la Universidad de Guadalajara.

(V.pág.11-B de El Informador del 18 de julio de 2005).


Diputado local.

Los diputados locales jaliscienses ni siquiera han llegado a la mitad de su gestión constitucional y ya están buscando otro puesto político.

La pérdida de rumbo explica los traspiés que un día sí y otro también están dando los legisladores, con el riesgo de que un día de éstos le colmen la paciencia a la sociedad y la hagan reaccionar enérgicamente.

Los hechos hablan de que los diputados hacen su trabajo movidos por intereses ajenos al bien común. No se toman la molestia de leer los documentos que aprueban. Ahora que si les dan su visto bueno a sabiendas de que son ilegales, la cosa está peor.

Las pruebas del desaseo con que hacen su tarea forman rosario interminable.

Los legisladores deciden según su conveniencia y no apegados a lo que dice el librito, mucho menos de acuerdo con el interés de sus representados.

Por eso no salen de un hoyo cuando ya cayeron en otro.

Marcos Arana Cervantes
(v."El Trilenio" en la pág.12-B de El Informador del 18 de julio de 2005).


Como los periodistas, los funcionarios "venden" credibilidad, pero parecen olvidar con demasiada facilidad que la credibilidad se destruye con "promesas incumplidas", eufemismo para "mentiras".

Dice un dicho que prometer no empobrece, que cumplir es lo que aniquila. Habría que írselo pensando, porque después de 75 años de promesas incumplidas, sólo los prometedores profesionales (y sus aliados naturales) han podido acumular riqueza. Si bien que lo dijo un cínico: el político pobre no es más que un pobre político. Eso es gobernar con visión Azcárraga: para un pueblo de jodidos.

Toñimáximus
(v.pág.2 del periódico Público del 17 de julio de 2005).


El que no es corrupto rebasa los topes económicos marcados por la ley, el que no tiene nexos turbios con los medios de comunicación lleva una pésima vida personal y el que no se está haciendo menso nomás por cobrar engaña a la opinión pública a través de los más viles mecanismos de seducción.

Mientras que en los anuncios de la tele el precandidato equis dice que está harto de malos políticos, las noticias no dejan de señalarlo a él, precisamente a él, como un pésimo político.

Mientras que los spots del precandidato señalan que el señor es un ejemplo vivo de progreso, paz y estabilidad social, las reflexiones editoriales de los periódicos lo pintan a él, precisamente a él, como un tirano manipulador, violento y mentiroso.

Con todo respeto, ¿qué pasa con la democracia cuando no se cree en ninguna de las opciones que aparecen en las boletas?

¿Qué se hace en estos casos? ¿Se deja de votar? ¿Se vota por el menos peor? ¿Se vota nomás porque el voto es un derecho que los mexicanos nos hemos ganado a base de revoluciones y de transiciones? ¿No existe una entidad superior como para ir a reclamar?

Lo pregunto porque es obvio que quienes no están obligados por su empresa o por su sindicato a votar por determinado partido, deben estar pensando lo mismo que yo.

¿Por quién voy a votar en 2006 si ningún candidato me funciona? ¿Cuál de todos estos precandidatos va a hacer algo bueno por mi país y por mi familia si el que no está rodeado de protagonistas de “videoescándalos” no ha podido hacer nada bueno por nadie?

¿Para qué se vota? ¿Para regalarle una chamba multimillonaria a un tipo que luego se olvida de que ocupa un puesto de elección popular, para cumplir con un ritual sexenal, para pedir milagros, para jugar al "ya merito" o para validar algo que de otra manera sería "invalidable"?

No me cuesta ningún trabajo entender el abstencionismo electoral.

Para cualquier ciudadano que no tiene trabajo, que no completa para el gasto y que ha sido víctima de un abanico de desgracias que van del delito a la discriminación, debe ser muy irritante soportar meses y meses de anuncios con políticos fingiendo ser lo que no son, llegar a una casilla y tener que tachar un nombre.

¿Cuál se tacha? ¿El que durante seis años se la pasó engañando al pueblo, el que se niega a reconocer que México está sumergido en los asaltos, el que no va a poder hacer nada contra el crimen organizado, el que tiene enemigos hasta en su propio partido, el que no soporta críticas o el que sabe que ni siquiera tiene posibilidades de ganar pero que se va a quedar con una buena lana después de las elecciones? ¿Esto es democracia? A mí me suena más a una especie de guerra civil ubicada en un estrato alto que a una democracia.

Lo que más me desconcierta es que es una guerra civil institucionalizada por un sistema político al que, al parecer, lo único que le importa es cumplir con una tradición sexenal.

Lo que más me desconcierta, insisto, es que esta guerra civil, institucionalizada y de estrato alto, es pagada y paradójicamente padecida por los estratos bajos de la sociedad.

¿Hay manera de decir: yo no voy a votar si no va a haber buenos candidatos? ¿Hay manera de decir: ya no gasten en esas señoras y en esos señores, mejor gastemos en algo de provecho? ¿Hay manera de parar esto?

No es que la democracia sea algo que se tenga que parar, es que si ya sabemos que vamos a perder nuestro tiempo en 2006 y que a consecuencia de ese error vamos a padecer seis malos años, mejor vamos a tomar otras medidas.

Yo no quiero verme en 2011 jalándome los pelos de la desesperación por vivir en un sexenio cargado de irregularidades, corrupción, candados políticos, complots, violencia y crisis, y que me digan [que] el único culpable soy yo porque yo elegí ese gobierno en julio de 2006.

¡Qué cómodo para los gobernantes! Si funciona, es porque ellos son muy buenos. Si no funciona, es porque usted y yo elegimos mal.

Ya todo el mundo está haciendo sus maletas para 2006, amarrando "hueso" para 2006 y repartiéndose el dinero de 2006. Así no se puede vivir, ya no se diga avanzar.

Yo creo que si no hay opciones hay que decirlo. Y que haya opciones no es que haya montones de precandidatos compitiendo por su lugar en las boletas electorales de 2006.

Que haya opciones es que usted y yo veamos claro, que esos precandidatos y candidatos realmente puedan hacer funcionar este país durante los próximos seis años. Ya, olvídese de transformaciones mágicas, de premios mayores y de que México se vaya a convertir en Suiza en un abrir y cerrar de ojos porque eso ni siquiera está en nuestro código genético.

Pensemos en gente que pueda hacer que este país funcione durante los próximos seis años.

¿Para qué queremos más de 15 precandidatos? ¿Para qué queremos más de cuatro nombres en las boletas electorales si con dos buenos que hubiera sería suficiente?

Alvaro Cueva
(v.pág.16 del periódico Público del 17 de julio de 2005).


No hay apoyo, la Secretaría de Cultura no está interesada, en absoluto, en promover las Bellas Artes, de hecho no saben ni qué es eso. La orquesta existe de milagro.

Isaac Ramírez, chelista de la Orquesta Filarmónica de Jalisco
(v.pág.34 del periódico Público del 17 de julio de 2005).


Durante décadas, las carreteras de Jalisco han tenido la fama de malas y peligrosas por las deficientes condiciones en que se encuentran.

Se podría pensar que por razones lógicas y naturales, las carreteras de Jalisco están como están por falta de recursos, por falta de proyectos, por burocracia y problemas administrativos, porque los dueños de la tierra no quieren ceder los derechos de vía; por cuestiones ecológicas, mala calidad de los materiales, corrupción incluso. Y algunas de estas razones, en unos casos más que en otros, unas más que otras, han pesado para que los avances en la materia sean tan lentos y pobres, que para cuando se termina una carretera o los trabajos para su mantenimiento, hay que volver a empezar ahí mismo desde el primer kilómetro porque ya se deterioró.

Editorial
(v.pág.4-A de El Informador del 16 de julio de 2005).


Se lee en su artículo 33 [de la Ley del IFAI], que el IFAI es un órgano federal, con autonomía operativa, presupuestaria y de decisión, encargado de promover y difundir el ejercicio del derecho de acceso a la información... Pero sus hacedores (los legisladores) no le dieron una facultad necesaria, fundamental: el poder, el derecho de iniciar los procesos penales o civiles contra quienes le negasen información.

Vicente Bello en su columna "Tren Parlamentario"
(v.periódico El Informador del 16 de julio de 2005).


López Obrador arremetió contra el IFE al que calificó de "hipócrita" por "hacerse de la vista gorda" en los gastos de los diferentes precandidatos mientras a él le "pusieron trabas" en su intento de impulsar el redondeo en los supermercados para recaudar fondos para su campaña. Olvida que se trata de cosas completamente diferente, y que en todo caso resultan mucho más numerosos y costosos los anuncios cotidianos en radio, prensa y televisión del GDF, pagados con recursos públicos, que el de cualquiera de los precandidatos actuales, eso sin especificar cuánto costó y quién pagó toda la campaña contra el desafuero.

Jorge Fernández Menéndez
(México Confidencial, 15 de julio de 2005).


A mí tampoco me gusta la izquierda electoral mexicana. Su clientelismo. Lo angosto de sus miras. Su falta de creatividad y compromiso. Su vulnerabilidad frente al poder del dinero. Tampoco me resigno a aceptarla porque, como se dice en la calle, no hay de otra. Creo que hay que reinventarla por completo y creo, como Unamuno, que "de escultores y no de sastres es la tarea".

Condeno la imposición de candidatos. La creación de camarillas. La canonización en vida. El manejo de los índices de popularidad como valor supremo.

Epigmenio Ibarra
(v.pág.23 del periódico Público del 15 de julio de 2005).


Al menos 18 candidatos a algún cargo de elección popular deben a los tapatíos unos 438,585 pesos de impuestos por licencias para propaganda en bardas y alrededor de 1'315,755 pesos de multa, además de los costos por el retiro de los anuncios.

El gobierno tapatío multa a algunos políticos que se promueven en bardas sin permiso, pero no sanciona a otros como al propio alcalde Emilio González Márquez, quien mantiene, desde hace al menos dos años, varias pintas de las pasadas elecciones.

(V.pág.6B de Mural del 14 de julio de 2005).


En las elecciones presidenciales del año próximo... Quizá el enemigo a vencer lo será el abstencionismo y la actitud de escepticismo e incredulidad de los ciudadanos, ante procesos electorales que pueden ser muy bien intencionados, pero que sólo dan al ciudadano la oportunidad de votar, mas no la de seleccionar a los candidatos de los diversos partidos contendientes. Aún falta en nuestra precaria democracia, el sentido democrático de la partidocracia y de los políticos, que se niegan a entregar a los ciudadanos, los procesos electorales y de selección de candidatos, que son el verdadero origen de la democracia.

Sergio A.López Rivera, abogado
(v.pág.5-A del periódico El Informador del 13 de julio de 2005).


El precandidato panista a la Presidencia de la República Felipe Calderón Hinojosa tiene, sin duda, enorme capacidad, apertura y ética probada, tanta que es difícil que le dejen llegar a la final en la actual política mexicana, donde lo inmoral se privilegia, la incapacidad opera y la ausencia de ética: es práctica diaria.

Lourdes Bueno, investigadora de la Universidad de Guadalajara
(v.pág.5-A de El Informador del 13 de julio de 2005).


Para el politólogo César Cansino, el excarcelamiento de René Bejarano, que a decir de la población debería estar en la cárcel, contribuye a que la popularidad de López Obrador descienda.

(V.pág.2-A de El Informador del 12 de julio de 2005).


¿De qué estamos hechos que ya no nos indignamos a la vista de esos "slogan" publicitarios?... ¿Cuántas veces nos han dado atole los vividores de la política, con el mismo dedo de las frases publicitarias, grandilocuentes pero huecas?... ¿Cómo es posible que sigamos cayendo en el engaño, alimentando esperanzas, creyendo que detrás de esas sonrisas como de anuncio de dentífrico hay algo más que la intención de tomarnos el pelo; de prometernos la luna, el sol y las estrellas, a sabiendas de que no está en su mano cumplirlas, y que nosotros, ingenuos, cándidos, bobos, sigamos creyendo en estos malos merolicos de feria de pueblo?...

Es insultante que se dilapiden tantos recursos públicos en esas precampañas estériles. Estériles, porque de antemano se sabe que muchos de los personajes cuyos nombres proliferan, todavía sin los logotipos pero ya con los colores emblemáticos de sus partidos, están perdidos de antemano... Ellos mismos lo saben: el descrédito que arrastran por los pobres, ocasionalmente vergonzosos y hasta escandalosos desempeños en cargos públicos que ya tuvieron en sus manos, los descalifican "a priori". Con tanta cola que les pisen como arrastran, no podrían ser, bajo ninguna circunstancia, los candidatos "rentables" que piden los partidos, y especialmente los llamados grandes... Cualquiera diría que esos precandidatos de pacotilla entran a la lotería de la política no en pos del premio mayor, sino del premio de consolación que les dejen...

Jaime García Elías, columnista y conductor radiofónico
(v.pág.5-A de El Informador del 12 de julio de 2005).


Desde que Miguel Alemán gobernaba Veracruz, el [Proyecto] Fénix iba a encontrar terreno fértil para anidar en Coatzacoalcos, y no tenía por qué ser distinto de Altamira, pero desde entonces a Fox ya le escocía saber que el proyecto beneficiaría políticamente a los gobiernos locales, incluso más que a Acción Nacional, pues difícilmente cosecharía electoralmente en julio de 2006 lo que sería inaugurado a mitad del próximo sexenio. Y lo comenzó a detener.

Y todavía más cuando vio que los gobiernos de Veracruz y Coatzacoalcos quedaron bajo la égida del PRI. Fidel Herrera desde sus tiempos de senador había insistido para que el Fénix se aposentara plenamente en Coatzacoalcos, pero, siempre mezquino, el gobierno federal amagaba con que también el Fénix podría levantar el vuelo en Tamaulipas.

Ayer que se supo de su cancelación parcial, el Proyecto Fénix fue objeto de una revisión con ácido por parte de diputados federales como Pablo Gómez Alvarez, quien de ello dijo: "Fue una decisión estrictamente política, que no tiene nada que ver con la economía real. Y además, es la Cámara de Diputados la que realmente da dinero a Petróleos Mexicanos para inversión, y el presidente no los puede cancelar".

Se refería a la disminución inversora del Fénix, cuyo seguimiento se centrará en la autorización de mil millones de dólares. Y ya no de acuerdo al monto real (el doble) que los diputados habían autorizado para ello.

Preguntas como la siguiente regurgitaban por doquier en San Lázaro: ¿Cómo es posible que teniendo el apoyo político e institucional del Congreso de la Unión, Fox haya decidido dar marcha atrás a un proyecto que, además, tiene la chapa de urgente desde el principio, porque coadyuvaría a detener las importaciones de productos refinados y el apuntalamiento de dos economías: la nacional y la de Pemex, ésta última tan vapuleada y dañada, al grado de que siguen los accidentes apareciendo lo mismo en Veracruz e Hidalgo, que en Tabasco o Campeche?

El ejecutivo federal había logrado también dejar claro entre los diputados que no dudará en demandar otra controversia constitucional ante la Corte si éstos, en septiembre, consiguen los dos tercios del pleno para recetarle el mismo Presupuesto de Egresos (para 2005) que aprobaron en noviembre de 2004.

El perredismo, ayer lunes, salió al paso de aquel ultimátum: Si el PRI sostiene su palabra, decía el diputado Alfonso Ramírez Cuellar, entonces la Cámara de Diputados reiterará los mismos términos en que fue votado y aprobado aquel decreto del gasto público. Y, como en el presupuesto de 2005, en el del año siguiente tampoco se aprobaría una partida -tan requerida por el ejecutivo federal- para pagar el servicio del Fobaproa.

Vicente Bello en su columna "Tren Parlamentario"
(v.pág.10-A del periódico El Informador del 12 de julio de 2005).


Como nuestras autoridades educativas estatales [de Jalisco] saben de educación lo que yo sé de chino, no me tomó de extraño que en nuestro periódico EL INFORMADOR apareciera la noticia que daba cuenta que el Centro Escolar "Basilio Vadillo" lo quieran destruir y el lugar donde hoy está, convertirlo en estacionamiento público, a fin de obtener dinero, pues recuerde que es tal la avidez que los funcionarios actuales tienen por él, que son capaces de vender hasta... (aquí anote usted lo que crea que son capaces de vender), sobre todo sabiendo que ya tan sólo falta un año para que dejen el "agarradero", pues nos resultaron más agarruñas que los avaros.

Adolfo Martínez López
(v.pág.5-A de El Informador del 11 de julio de 2005).


La política es un buen negocio, desde luego, pero hay que poder estar ahí, con la reputación legal más o menos intacta aunque la otra, la fama pública, esté llena de imborrables máculas.

Román Revueltas Retes
(v.pág.3 del periódico Público del 10 de julio de 2005).


Es increíble ver la encuesta publicada hace unos días sobre Alberto Cárdenas Jiménez, el Caballo negro. En ésta se dice que él está a la cabeza de las preferencias de los tapatíos, en la contienda para presidente de la república. Es poco más que absurdo; si en retrospectiva se analiza el bajo o nulo desempeño que tuvo como gobernador del estado de Jalisco, donde lo único que lo caracterizó fueron las novatadas y caprichos. A su entrada a la Conafor poco o nada hizo para la protección de los bosques. También están el bajo desempeño, la torpeza y la ceguera que mostró al frente de la Secretaría del Medio Ambiente, ya que en gran medida ayudó a retrasar la administración de los recursos naturales de nuestro país. En síntesis, es un político que ha tenido la oportunidad de llegar a puestos que le han quedado muy grandes; sólo su ambición lo ha mantenido en palestra. Por otra parte, no es de extrañarse el supuesto apoyo de los tapatíos hacia el Caballo negro, ya que en esta Perla Apatía suele darse el reconocimiento y poder a los menos aptos; sin embargo, no hay que generalizar, no todos somos esos tapatíos o jaliscienses que apoyan al Caballo negro.

Agustín Buenaventura G.
(v.pág.4 "correo" del periódico Público del 10 de julio de 2005).


Si ya se sabe que en 2006 va a haber un abstencionismo monumental porque los mexicanos le perdimos la fe a la democracia, a los políticos, a los candidatos, a las promesas y a las transformaciones, ¿por qué nadie hace nada al respecto? ¿Dónde están las campañas de reposicionamiento de la democracia? ¿Dónde están las reflexiones sobre todo lo que se gasta inútilmente en unas elecciones igual de inútiles?

¿Por qué si la macrosensación que flota en el aire es que ninguno de los posibles candidatos que vamos a tener para 2006 va a servir para algo bueno, nadie toma cartas en el asunto?

Alvaro Cueva
(v.pág.18 del periódico Público del 10 de julio de 2005).


En Jalisco, el gobierno ha legislado no sin resistencia, para crear instituciones diseñadas que sean conducidas por ciudadanos sin pretensiones de acceso al poder político. Sin embargo, el fenómeno de la "partidocracia" las ha empañado y desnaturalizado. Hacen creer que se les debe a ellos y no a la ley. Las elecciones, los derechos humanos, la transparencia y rendición de cuentas, la función pública y la política social son áreas de un gobierno democrático, necesitadas de vigilancia ciudadana activa y vinculante. Son actividades centrales para mantener la salud de un régimen democrático mediante la prevención y sanción de los excesos y soberbias de los gobernantes y los funcionarios públicos. En México y en Jalisco la ley manda "ciudadanizar" el Instituto Electoral, la Comisión de Derechos Humanos, el Instituto de Transparencia, los Consejos de Participación Social para la Educación y el Consejo Económico y Social.

Sin embargo, los partidos y los gobernantes han encontrado la manera de "sacarle la vuelta" a esa entrega de poder a los ciudadanos. El camino ha tenido dos etapas. En la primera cumplieron la ley y su espítiru, tal cual. Al menos en la mayoría de los casos. Los encargados de buscar y designar a los ciudadanos lo hicieron con el ojo puesto en la trayectoria, preparación y realizaciones de los candidatos, de manera que se aseguraran dos cosas. Por un lado, independencia de criterio (y no buscar el favor del gobernante que los designó) y por otro, capaces de comprender la tarea de vigilancia ciudadana, conocer los puntos claves de la efectividad gubernamental y exigirlos de manera no negociable. Esta etapa produjo una gran legitimidad de esos organismos ciudadanos y, sin duda, fundamentó una mejoría notable en las áreas de gobierno organizadas con ciudadanos en el poder. Los institutos federales electoral (IFE) y de acceso a la información (IFAI) son las joyas de la corona.

La segunda etapa, larga en el tiempo, es breve en los sustancial. Los gobiernos (sobre todo los estatales) y los partidos políticos en los congresos implementaron una regresión trágica. La hicieron sin manifestar su molestia por las correcciones y aun multas que se les impusieron por sus excesos, sino en "lo oscurito". Decidieron nombrar ciudadanos a modo, mediante el expediente (no dicho) de hacer sentir, en los hechos, que el designado les debía el favor, el cual sería cobrado "en su oportunidad". ¿Cuándo? Cuando un asunto escabroso o vergonzoso pudiera empañar o meter en problemas al partido o al gobierno. Nuestro Congreso local eludió el espíritu de la ley en los recientes nombramientos de los consejeros de los institutos electoral y de transparencia e información pública. La "partidocracia" quiere controlar la democracia. Los demócratas seguiremos reclamando activamente el poder que la ley nos concede.

Miguel Bazdresch Parada
(v.pág.20 del periódico Público del 10 de julio de 2005).


Si pensábamos que el docenato trágico era insuperable, que el dúo Echeverría-López Portillo sería para siempre el punto negativo de referencia, de cierto que nos equivocamos. La deuda externa que nos dejaron estos malos gobernantes se ha convertido en cosa de juego, en ejercicio de principiantes; sobre todo cuando vemos asuntos escalofriantes como el Fobaproa, o el endeudamiento a que ha sometido Vicente Fox a Pemex. Si alguien creyó que el endeudamiento del docenato sería pagado por los hijos y nietos, con las deudas y malos manejos durante los gobiernos de Zedillo y Fox, ni en 500 años podremos salir de semejante hoyo negro. Claro, excepto que entre la horda de próceres que se pelean por cuidarnos, saliera uno, repito, uno que realmente quisiera a México. Un hombre que venciendo su propia ambición material y fajados los lomos sujetara la ambición de la desenfrenada clase política; que utilizara los recursos que ahora se llevan mediante altísimos sueldos, bonos, prestaciones y demás eufemismos -para disfrazar sus latrocinios- y los canalizara en las necesidades públicas. En una palabra: para poner en orden este país.

Lamentablemente no se ve ninguno con tan valioso perfil. El PAN ni siquiera tiene caballada, si acaso jumentos disfrazados de equinos. El PRD fuera de ese dictadorzuelo que daría el tiro de gracia a lo que queda de país, los demás son parte de una visión sesentera, producto de marchas y manifestaciones, de hippies trasnochados que han vivido de las nostalgias del ‘68, sin aportar nada positivo al esfuerzo y la riqueza nacional. El PRI no anda mejor, ante la falta de una cabeza con mano firme, todos se creen héroes insustituibles y la necesaria disciplina partidista, ha sido reemplazada por la egolatría de un caudal interminable de apóstoles balines en todos los niveles (y eso que es el mejor preparado de todos los partidos y el que cuenta con los mejores hombres ¿cómo estarán los demás?).

¿No les da pena a todos pagar publicidad televisiva de más de medio millón de pesos (cada anuncio) cuando han dejado al pueblo endeudado hasta sabe Dios qué generación y las necesidades sociales se acumulan a diario? ¿En serio, no les da vergüenza? Ninguna persona honorable con sentido común se atrevería a gastar tanto dinero para un cargo que en la actualidad lejos de ser una distinción parece un desprestigio, además de que los contrincantes suman legiones, y lo que queda de patria es tan poco.

Manuel Hernández Gómez
(v.pág.4-A de El Informador del 9 de julio de 2005).


La fiscalización de las precampañas va estrechamente ligada a la vida interna de los partidos políticos, evidentemente. Y quienes controlan a las dirigencias -léase Manuel Espino y Fox y su esposa; Roberto Madrazo; Cota y el Pejeman- no permitirán que grupos internos distintos a sus intereses compartan lo que, al final de cuentas, cada partido político no tiene: ánimos de equidad.

En la repartición de las culpas no sólo estarían en la primera fila los dirigentes actuales. También figurarían allí personajes como los que ahora acusan y se quejan. ¿Qué, gente como Francisco Barrio, verbigracia, no podía realmente hacer algo para cambiar las reglas jurídicas que permitieran mayores grados de equidad, en las contiendas internas de los partidos políticos?

Que se recuerde, ningún personaje de la clase política -del partido que sea- se ha hecho eco de lo que en el mundo de las universidades se ha estado insistiendo: de la necesidad imperiosa, para la salud de la república, de reformar las leyes con propósitos máximos como los siguientes: democratizar la vida interna de los partidos políticos; controlar los gastos de precampañas y aun de las campañas.

Casualmente es el Partido Revolucionario Institucional el que no se ha quejado como los otros partidos políticos. Saben los priistas que son los más grandes alentadores de un sistema político que obra para las cúpulas, en detrimento de los demás, que son la mayoría. Roberto Madrazo es ejemplo redivivo de ello.

Si hubieran querido priistas, panistas y perredistas, ya habrían construido nuevos caminos jurídicos, como los que piden desde las universidades para llegar a la democratización de los partidos y de los procesos electorales.

Vicente Bello en su columna "Tren Parlamentario"
(v.pág.7-A del periódico El Informador del 9 de julio de 2005).


El ministro retirado de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, Juventino Castro y Castro, también ex titular jurídico de la PGR, dijo que como experto en materia penal no termina por entender los arraigos; "me parece que son totalmente incorrectos, pero no como figura jurídica o recurso, sino por la manera como los utilizan las autoridades judiciales".

Sin mencionar nombres o casos concretos, expresó que al parecer con los arraigos se tratan de ocultar las equivocaciones; no quieren quedar mal, como sucede con las pruebas del ADN, y entonces solicitan este recurso para "ver qué otra cosa encuentran".

(V.pág.10-A de El Informador del 9 de julio de 2005).


Si a los servidores públicos les molesta que les encaren sus fallas de desempeño, ya sea por falta de tiempo gracias a los viajes o a sus juegos de golf o a su incapacidad, pues que se pongan a trabajar porque están en problemas.

Arturo Manzano G.
(v.pág.4 "correo" del periódico Público del 8 de julio de 2005).


Alcanzado el inicio de un cambio político, dejado atrás el viejo sistema de partido-estado e iniciado un proceso de transición a otro régimen, el mayor problema es que nadie sabe adónde se dirige el país.

El primer rasgo de la situación es que la impronta del viejo sistema es demasiado grande.

Otra manifestación de la falta de rumbo político es la negativa del Congreso de la Unión a modificar la legislación electoral para regular las precampañas, garantizar y normar el acceso de los partidos a la radio y la televisión, fortalecer las facultades fiscalizadoras del IFE y puntualizar los tipos penales en esta materia. El PRI y el PAN se negaron a apoyar un proyecto formulado con su propa participación y sin dar explicaciones. No hay duda que no estaban preparados para emprender un cambio legislativo bajo la presión de sus propios precandidatos.

Los políticos suelen ser miedosos en un contexto de conveniencias y futurismos. Este fenómeno se debe al temor de ser excluido por los jefes o a ser incomprendido por su propio partido, presa éste del pragmatismo más ruin. Esto es lo que ocurre hoy en el país y lo que también explica que el debate programático no adquiera la importancia que requiere el más superficial cambio democrático.

Pablo Gómez
(v.pág.25 del periódico Público del 8 de julio de 2005).


Dicen, y con razón, que donde hay más de tres izquierdistas hay por lo menos dos escisiones. Dicen, además, que llegados al poder, así sea el más pequeño cargo, los izquierdistas olvidan sus ideas, sus convicciones y se adaptan, camaleónicos, a los usos y costumbres del viejo régimen. Dicen, por último, que las reglas del juego electoral, dentro incluso de los partidos, antes de entrar a la arena política abierta, el poder del dinero, la fuerza clientelar de las facciones, los amarres y alianzas que hay que establecer, hacen que un militante y, peor, un candidato de izquierda vaya perdiendo, forzosamente y aun antes de llegar al cargo, su congruencia moral, su compromiso efectivo, concreto, cotidiano, con quienes menos tienen.

Epigmenio Ibarra
(v.pág.25 del periódico Público del 8 de julio de 2005).


Sin irnos a los tiempos remotos del Benemérito y de Don Porfirio, y a los sangrientos años del caudillismo, todos, desde Portes Gil hasta Fox, han puesto su grano de arena, o su enorme ladrillo, para construir ese abstencionismo y ese desencanto de la vida pública. Por supuesto que la responsabilidad no ha sido sólo del ejecutivo, sino que los diputados, con su desprestigiada gestión, y todos los ciudadanos hemos ido conformando la actual decepción y desprestigio de la vida pública.

Jesús Gómez Fregoso
(v.pág.26 del periódico Público del 8 de julio de 2005).


A pesar de la retórica que llama a participar al votante, el desánimo parece vencer. Preocupa que ese abstencionismo sea sin embargo favorable para el tricolor, pues no olvidemos que su voto duro es nacional, corporativo y forzado para millones de electores, mientras que el resto de los partidos no logra consolidar un voto libre, constante y razonado de esa magnitud. Pero preocupa más que ese resto de partidos también impulse -incoscientemente- el abstencionismo, mediante el predominio de la mercadotecnia política centrada en la imagen del candidato, y a través de múltiples intentos por manipular o influir en negociaciones cupulares alrededor de los organismos públicos supuestamente "ciudadanizados".

Persiste la incredibilidad causada por la impunidad de los delitos electorales de los Amigos de Fox y en torno del pemexgate.

Jaime Preciado Coronado
(v.pág.26 del periódico Público del 8 de julio de 2005).


Por obra y desgracia de las circunstancias políticas actuales iremos a las urnas a escoger no entre lo mejor, sino entre lo más malo...

Armando Fuentes Aguirre, "Catón"
(v.pág.9A de Mural del 7 de julio de 2005).


La Procuraduría General de la República sigue acumulando derrotas. Las últimas han sido el caso de lavado de dinero en contra de René Bejarano -quien podrá ser responsable de muchos delitos pero no de ése- y los de delincuencia organizada y lavado de dinero contra Archivaldo Guzmán, El Chapito. Otro gran fracaso fue el de Nahum Acosta, el ex jefe de giras de la Presidencia de la República,

Hay buenas razones para pensar que la próxima derrota de la PGR será el caso en contra de Joaquín Romero Aparicio, el arquitecto a quien ahora le ha tocado ser víctima de la PGR.

Según la información que dio a conocer el 4 de julio el portavoz de la Presidencia de la República, Rubén Aguilar, a Romero Aparicio se le detuvo porque se pensó que se trataba de Vicente Carrillo Fuentes, hermano del narcotraficante Amado Carrillo Fuentes, El Señor de los Cielos. A pesar de que ya ha quedado demostrado que es falsa esta identificación, la PGR no ha querido reconocer su error y ha buscado otras maneras de mantener al arquitecto privado de su libertad.

Si bien uno puede entender el esfuerzo de la PGR por conseguir éxito en una tarea que parece imposible, la verdad es que la ligereza con la que la institución está haciendo acusaciones a personas que aparentemente no tienen nada que ver con el tráfico de drogas o el lavado de dinero es inquietante. Una y otra vez se detiene a personas durante semanas o meses sólo para que salgan exoneradas sin siquiera el clásico "Usted disculpe".

Y lo peor de todo es que cualquiera de nosotros -usted o yo- puede ser la siguiente víctima de esta estrategia de la PGR: de primero privar a la gente de la libertad y después averiguar si tiene algún nexo con el narco.

Sergio Sarmiento
(v.periódico a.m. del 7 de julio de 2005).


A pesar de que en este sexenio se legisló que se debe dedicar a labores científicas al menos 1% del PIB, la realidad es que dedicamos menos de 0.4%. No hay duda de que para nuestros políticos, invertir en campañas es más redituable que invertir en ciencia.

Víctor Manuel González Romero, profesor investigador y ex rector general, U. de G.
(v.pág.4-A de El Informador del 6 de julio de 2005).


El vínculo débil de la democracia mexicana no son los ciudadanos sino los gobernantes, y no ha llegado la misma a funcionar debidamente porque los políticos que llegan al poder político, no han sabido leer el sentido y significado de la democracia desde el punto de vista de la acción pública.

Su principal error en su comportamiento como gobernantes, radica en que el poder que reciben, no está equilibrado en su fuero interno con un sentido ético y responsable de su ejercicio, ni con la conciencia de que están actuando como gobernantes, gracias a un mandato ciudadano que les fue dado en virtud de las elecciones democráticas.

Lamentablemente nuestros gobernantes, una vez firmemente sentados en su cargo público, se olvidan que son mandatarios y no todopoderosos en el uso de las facultades que recibieron por parte de los ciudadanos. Por no sabemos artes de qué influjos, llegan a no escucharse sino a ellos mismos y a ignorar el deseo y la aspiración de quienes los eligieron, sólo son sensibles a la adulación y al servilismo de sus colaboradores cercanos, que no son capaces de emitir ningún juicio crítico hacia su actuar como gobernantes, pues temen despertar la ira del superior jerárquico en caso de hacerlo. Les molesta cualquier actitud crítica, sea ésta positiva o negativa, tanto de los medios de comunicación como de los ciudadanos en general, y pierden con toda facilidad la paciencia ante cualquier intento de crítica hacia sus omisiones o acciones equivocadas.

Ya no les interesa, una vez entronizados en su cargo poderoso, la relación de su actuar con la verdad y con la libertad. Se convierten en seres intransigentes y distanciados de toda relación con el pueblo que los eligió, y se olvidan que poseen un poder totalmente relacionado y determinado por su responsabilidad moral y guiado por el respeto hacia los ciudadanos que los eligieron.

Lamentablemente, en estos momentos, a pesar y no obstante que ya gozamos de democracia electoral, en el sentido de que podemos elegir a nuestros gobernantes y el voto se respeta, nos falta aún que nuestros gobernantes entiendan su papel democrático en el ejercicio del poder, y lleguen a superar la tentación de la soberbia que da el poder.

Deben por tanto los gobernantes, ser capaces de resistir a la tentación de creer que por el solo hecho de haber sido elegidos, sus decisiones son sabias y correctas, y que no les merece el ciudadano, ninguna explicación ni atención y que todos aquellos que se atreven a criticarlos, están siempre y totalmente equivocados y sus críticas únicamente provienen de actitudes negativas y antidemocráticas. Cuando el gobernante deja de escuchar a la ciudadanía, no cabe duda que ha perdido todo sentido de la proporción.

Sergio A.López Rivera, abogado
(v.pág.5-A del periódico El Informador del 6 de julio de 2005).


365,000 automóviles más que hoy, en las mismas calles de la zona metropolitana de Guadalajara, dentro de un año.

Reflejo de la incapacidad de las autoridades y de la ineptitud de sus aconsejadores profesionales para disponer acciones, invertir recursos o aprovechar la capacidad de endeudamiento de municipios o gobiernos estatales, al efecto de privilegiar el transporte colectivo -cada día más ineficiente, indigno e inadecuado para las necesidades de la población- en vez de propiciar la multiplicación exponencial de esas células cancerosas del mundo moderno que son los automóviles diseñados para circular a 240 kilómetros por hora... y condenados a rodar, a paso de caracol, por las (eso sí) cada vez más espectaculares rúas citadinas.

Jaime García Elías, columnista y conductor radiofónico
(v.pág.5-A de El Informador del 6 de julio de 2005).


La mayoría de los políticos, aún no terminan la actual gestión y ya se encuentran con la mira puesta en el siguiente puesto político; sus actuales acciones van encaminadas a ganar simpatizantes; de ahí que cualquier trabajo que no les brinde proyección, simplemente no les interesa o lo dejan de lado.

El ausentismo es alto en las oficinas públicas o éstas se ven llenas de gente que va a buscar apoyo, y es que un alto porcentaje de funcionarios ya se encuentra haciendo campaña, buscando adeptos para el siguiente cargo de elección popular, aun cuando les falten meses para terminar la actual gestión.

(V.pág.5-A de El Informador del 6 de julio de 2005).


Con las primeras tormentas
hubo calles inundadas,
muchos árboles caídos
y colonias afectadas.

Aunque cada año sucede,
y es en los mismos lugares,
el problema pone en jaque
a nuestras autoridades.

Son muchos meses sin lluvia
para tomar precauciones
y evitar que se repitan
tan penosas situaciones.

Anflopo
(v.pág.5-A de El Informador del 5 de julio de 2005).


Decía Napoleón que "en las revoluciones hay dos clases de personajes: los que las hacen y los que se aprovechan de ellas". Algo similar podría decirse de la democracia: unos personajes la hacen (que serían, en el caso, los idealistas que soñaban en un México en que los ciudadanos tuvieran el privilegio de elegir a sus gobernantes), y no vivieron para ver realizados esos legítimos anhelos, y, otros se aprovecharon de ella... O sea... Los que engatusaron al pueblo. Los que le prometieron, en sus campañas, cosas que no estaba en su mano cumplir. Los que, ya en el ejercicio del gobierno, se han olvidado que la democracia no consiste solamente que los gobernantes sean elegidos por el pueblo, sino que gobiernen para el pueblo, para el bien común, y no sólo para satisfacer sus apetitos personales o sus intereses de grupo o de partido. Los que simulan no entender que la incompetencia en el desempeño de los puestos públicos es una de las formas más censurables de la deshonestidad...

Jaime García Elías, columnista y conductor radiofónico
(v.pág.5-A de El Informador del 5 de julio de 2005).


Incontinencia oral de otros que abren la boca para soltar lo que sea, como malos políticos de banqueta, incultos hasta más no poder que se desbordan con una mala gramática infantil, donde el sujeto, el verbo y el predicado lo sueltan tal como les sale de la cabeza y es uno el que tiene que interpretar lo que quiso decir y, más que eso, justificar sus debilidades de pensamiento, tanto en su discurso como en su obra, como si perdiéramos el sentido crítico de esos hommo politicus que creen que con aparentar honestidad -casi siempre cuestionada-, deberían ser congruentes y terminar en algún lado...

Martín Casillas de Alba
(v.pág.5-A de El Informador del 5 de julio de 2005).


En el DF lo que no disminuye es la "Pejemanía" y, al compás de las notas de algunos medios de comunicación, no hay espacio para los fracasos, para los errores de un gobierno que no es gobierno sino gobernante y, más que eso, candidato. Nadie quiere ver la ciudad endeudada, nadie quiere ver al gobierno opaco y autoritario, nadie quiere ver que López Obrador "va a dejarnos un tiradero y se va a ir de candidato", como me decían un par de amigos periodistas de la capital el viernes.

Víctor E. Wario Romo
(v.pág.4-A de El Informador del 4 de julio de 2005).


Los ecuatorianos proponen exámenes psicológicos y de inteligencia para los aspirantes a diputados.

(V.pág.15-A de El Informador del 4 de julio de 2005).


Democracia, término que para el presidente de México significa la posibilidad de llegar a la más alta investidura del poder político, donde comprobó que la vida no es fácil.

¿Qué significa el inasible término "democracia" para otros seres que no están en la posición de privilegio de Fox? Pues, por ejemplo, para los panistas y perredistas, la posibilidad de llegar a presupuestos más carnosos que roer; para los priistas democracia es sofisticación de trampas electorales en vías de recuperar lo que (creen que) les pertenece.

Juan Alberto Vázquez
(v.pág.28 del periódico Público del 3 de julio de 2005).


Hay mucha gente que está harta, cansada de los partidos políticos tradicionales, de derecha, centro o izquierda, de sus promesas vacías, de su hipocresía, de su despilfarro, de la colección de eslóganes sin sentido que nos recetan sin descanso. Hay muchos ciudadanos en este país -y en muchos otros- que ya no le creen ni una sola palabra a esos políticos que con miles de millones de pesos en la bolsa y para hacerse de otros miles de millones de pesos más, se disputan, como mero botín personal o de grupo, los cargos de elección popular. Hay muchos, millones de personas, para quienes las palabras "elecciones", "democracia", "alternancia en el poder" y "progreso" nada significan.

Cunden la desesperanza, el esceptisismo, la frustración. Vienen los candidatos en campaña a prometer que todo, ahora sí, será distinto. Para intentar convencernos de esto invierten en sus campañas políticas millones de pesos que no les pertenecen. La gente con desconfianza acude a las urnas (la mayoría de las veces, sin embargo, el verdadero vencedor es el abstencionismo), deposita en ellas su voto y sus esperanzas. ya sabe, por experiencia, que casi nunca lo prometido se cumple y que quien tan cerca se dijo de él, quien le palmeó el hombro, saludó a los hijos, le tendió la mano, lo llamó "amigo", "compañero", una vez llegado al poder olvidará que son esos votos y esas esperanzas los que le consiguieron el empleo.

Ni aquellos más entusiastas, más ideologizados, más militantes dejan de sentir un hueco en el alma cuando miran de nuevo allá, a lo lejos, al candidato ungido gobernante y sienten cómo las promesas, tan insistentes, de una vida mejor se desvanecen por completo.

Se ha perdido o está por perderse totalmente la que debiera ser la indispensable conexión entre democracia y bienestar social. No se sigue una del otro; al contrario, pasan elecciones y elecciones y la brecha entre los jodidos y los ricos se hace más profunda. Sólo quien consigue hueso gracias a su militancia, es decir, a su pertenencia al aparato de partido o a una de sus fracciones clientelares, puede sentir realmente los beneficios directos de una victoria electoral. La mayoría se queda, como siempre, con las manos vacías.

El problema no es sólo de ética personal, de ser o no inmunes a las veleidades del poder, a la corrupción, a la locura que casi siempre trae consigo. No se trata de que llegados al cargo por la vía del voto no intenten cumplir con sus compromisos de campaña. Es que no pueden. Llegan casi todos con las manos atadas. Para alcanzar la candidatura fueron paso a paso vendiendo su conciencia. Además, el sistema mismo los condiciona, los amarra.

Los compromisos de sus partidos, los nexos inevitables con el poder económico, la brutal dependencia, la esclavitud, más bien, a la que están sometidos por los grandes consorcios de la televisión -son o no son gracias a la pantalla- les dejan poco o ningún margen de maniobra. Unos no cumplen porque no pueden; la mayoría no lo hace porque no quiere, porque no le nace hacerlo.

Y, no obstante, ¿quién carajos se va a poner a pensar en el desgaste brutal de nuestra incipiente democracia? Al contrario, "va viento en popa" dicen todos embriagados con la posibilidad de derrotar al adversario, de exhibir sus miserias humanas, de aprovechar sus debilidades, de explotar su ineficacia, su corrupción, sus mentiras.

Impúdicamente -no ven la viga en el ojo propio-, dirigentes partidistas, precandidatos, legisladores se dedican con devoción a terminar de demoler lo poco que queda de confianza en el sistema. Cada victoria de la oposición, que llega al poder después de un desgastante proceso interno en que toda la ropa sucia se lava en público, se convierte, paradójicamente, en el incremento exponencial de las posibilidades de retorno del antiguo régimen. "Prefiero a los corruptos de siempre que a los pendejos", dice mucha gente con su voto al PRI.

Epigmenio Ibarra
(v.pág.23 del periódico Público del 1o.de julio de 2005).


Los que están en los primeros lugares en las encuestas, sin importar el partido, están enfermos de poder, no importa de qué manera ganen la postulación de su partido, harán lo que sea para lograrlo.

Santiago Creel, Roberto Madrazo y el señor López están pisoteando lo que es ético, para lograrlo, y estoy seguro que lo lograrán y por lo tanto no voy a votar este 2006; por primera vez en los últimos 20 años no voy a votar, me convertiré en un abstencionista más en las estadísticas.

Mi última esperanza es que el partido naranja postule a un candidato externo, porque entre los políticos qué poquitos candidatos buenos existen, y los que son buenos no llegarán nunca a la candidatura. Y como los políticos dicen que si no es candidato de un partido no puede ser votado, aunque tenga más capacidad que sus candidatos, somos rehenes de los partidos, si no votamos por ellos nuestro voto no vale.

Sergio Ponce
(v.pág.7A de "Cartas a Mural" del periódico Mural del 30 de junio de 2005).


Los diputados creen que la fidelidad consiste en anteponer los intereses propios, de grupo y de partido, a los objetivos de su trabajo como legisladores. Y que si alguien cuestiona su proceder es porque se encuentra coludido con el "grupo rival". Por eso no pueden hacer correctamente su trabajo, porque les gana el miedo de no contar con el apoyo de su grupo y partido para conseguir una nueva chamba, y entonces, a la hora de votar prefieren protegerse en lugar de asumir su obligación con el logro de avances sociales.

De lo que no se han dado cuenta es de que tienen los reflectores encima y que la gente y grupos sin compromisos partidistas los observan con detenimiento para evaluar su actuación como legisladores y definir si son aptos para volver a ocupar puestos públicos.

Isabel Sepúlveda
(v.pág.7A del periódico Mural del 30 de junio de 2005).


El Congreso de Sonora aprobó ayer el nuevo Código Estatal Electoral que contempla las candidaturas independientes, por lo que Sonora se convierte así en el primer estado del país en ofrecer esta figura que abre la oportunidad a los ciudadanos sin partido político.

(V.pág.10A del periódico Mural del 30 de junio de 2005).


Señor gobernador [Ramírez Acuña]:

En su parlamento, usted fue reiterativo en un punto: primero dijo que las giras [al extranjero] "no son para ir a recoger dinero ni traer sólo inversiones; quien así lo asuma -agregó-, ignora lo que está pasando en el mundo"; luego remachó al aseverar que los viajes "no son únicamente para atraer capitales; es una visión pobre quien (sic) así lo esté manifestando".

Refieren los reportes de la impropiamente llamada "rueda de prensa", que no hubo preguntas y respuestas porque usted, al terminar el informe, "se levantó del asiento y salió apresuradamente del salón".

Con su venia, con respecto a la ignorancia supina sobre "lo que está pasando en el mundo" y a la pobreza visual en el aspecto intelectual o cultural, asumo que probablemente esas limitaciones (hijas, quizá, del analfabetismo o del espíritu aldeano del gremio, pero no necesariamente de la mala fe) contribuyan a difundir una apreciación errónea y, por ende, una valoración injusta de su trabajo. Apreciación errónea y valoración injusta que, al contaminar los elementos de juicio que el ciudadano debería tener, condicionan que dos terceras partes de los encuestados -desorientados por los medios- tampoco capten los beneficios de los viajes de los gobernantes, y que 92%, contagiado por la ignorancia y la indigencia cultural de los periodistas, estima que no se justifica gastar dinero del pueblo en esos viajes.

Espero no sea demasiado atrevimiento (no en nombre de los periodistas, que podrían aprovechar sus horas libres para acudir a escuelas nocturnas a que los ilustren -"desburricen", decía mi abuelo-, pero sí en nombre del pueblo que con sus votos lo hizo gobernador y que tampoco -por culpa de la prensa, lo acepto- tampoco entiende ciertas cosas) pedirle, atentamente, una explicación: ¿para qué sí sirven esos viajes y por qué está bien gastado el dinero del pueblo que se invierte en ellos?...

Jaime García Elías, columnista y conductor radiofónico
(v.pág.5-A de El Informador del 29 de junio de 2005).


En mi pueblo los hombres logran tener una imagen después de un largo, arduo y conocido tren de vida. Sus actos diarios y sus capacidades naturales mueven a la población entera a encasillarlos en tal o cual jerarquía.

Así pues, Don N.N., el honrado, se ha ganado esa reputación, gracias a su propio esfuerzo vendiendo kilos de mil gramos en su tandajón, dando el cambio hasta el último centavo, ofreciendo sólo productos de calidad desde hace muchos años.

Fulano, el ratero, quien siempre se aprovecha de cualquier situación para obtener un beneficio personal, egoísta, a costa de los demás, también se ganó ese epíteto, merced a sus actitudes cotidianas. Lo mismo podemos decir de zutano, el borrachín, mengano, el hipócrita y perengano, el intelectual.

En mi pueblo, de cuando en cuando, aparecen individuos que con su propio dinero intentan comprarse una imagen que dista mucho de la realidad. A esas personas las llamamos sinvergüenzas, descarados, y a los que caen en su juego los reconocemos como pobres ingenuos embaucados.

Abyectamente, también hay quienes se presentan y pretenden adquirir o detentar una imagen comprada con caudales ajenos, pagada con dinero que pertenece al pueblo, dinero que debiera ser aplicado en beneficio de la colectividad en lugar de ser dilapidado en vanas campañas de promoción personal distorsionada. A esos personajes los llamamos #$%& (por respeto al lector no me atrevo a escribirlo) y a los incautos que ceden bajo el peso de tan dolosos ataques publicitarios, tampoco me atrevo a escribir cómo los llamamos.

Quien tenga oídos que escuche y quien tenga entendimiento que discierna.

Ing. Bernardo Vázquez Rodríguez
(v.pág.6-A "Buzón de nuestros lectores" de El Informador del 29 de junio de 2005).


López Obrador, como político vemos que es un tipo marrullero que ha actuado en los límites tolerables del cinismo pues lo que piensa no es lo que dice y sólo hace lo que le conviene, estrictamente hablando, para dar el siguiente paso, como fue esta candidatura a la Presidencia a pesar de haberlo negado con esas frases socarronas de "déjenme trabajar" que, como podemos ver, era parcialmente cierto nada más que le faltaba completar la frase y decir: "déjenme trabajar para poder llegar a ser candidato".

Como político sólo le gusta hablar de sus triunfos y evade los problemas reales acusando siempre, paranoicamente, a sus enemigos que planean un complot en todo lo que ha salido mal.

Como administrador deja mucho que desear: sus obras incompletas -segundo piso y el fracaso del metrobús- han aumentado la deuda a un nivel que nunca antes se había tenido. Dos de sus más allegados colaboradores, están en la cárcel por pillos: uno, el secretario de Finanzas, resultó un gran jugador de Las Vegas y está acusado de malversación de fondos. El otro, su operador político, recoge billetes grandes frente a las cámaras y opera a las masas informes de taxistas piratas, ambulantes y adultos en plenitud que reciben, como estrategia social, su sobre con sus 800 pesos regando en su milpita para poder contar con ellos en el momento que los necesiten.

La seguridad sigue igual que antes, la corrupción nunca se había destapado como cloacas en la superficie, las obras están hechas con prisa y llenas de imperfecciones -segundo piso inundado, metrobus un caos y el viejo metro abandonado- entonces uno se pregunta, ¿cómo es posible que sea tan cínico que pretende jugar por la grande?

Martín Casillas de Alba
(v.pág.5-A del periódico El Informador del 28 de junio de 2005).


El Ing.Alberto Cárdenas, con carrera similar a la del presidente Fox, además de edad y carisma, aunque en el pasivo de ambos contaría su deficiencia cultural que los ha expuesto a crítica despiadada por justificadas causas, aunque sin real penetración en los segmentos populares y mayoritarios, identificados y hasta simpatizantes son la vulgaridad y barbarismos.

México reclama la aparición de un estadista, promotor capacitado en la visión futura de lapsos corto y largo, impulsores de confianza. Tal personaje no aparece y los visibles transitan por la ruta del populismo y la simpatía. Infortunadamente no es ese el perfil ideal del gobernante y serio estadista que requiere México. Por ello la aguda ironía popular ya dice Bimbeto al referirse al ingeniero Cárdenas, aludiendo a la predilección que le guarda el industrial del PAN, Lorenzo Servitje.

Carlos Cortés Vázquez, consultor en comunicación
(v.pág.5-A del periódico El Informador del 28 de junio de 2005).


Al Ing.Alberto Cárdenas Jiménez el sábado se le hicieron dos preguntas relacionadas con el "proyecto-país". La mayor aproximación a una respuesta concreta fue que ese "proyecto-país" va a ser confeccionado por un grupo de "expertos" y de "creativos", y que en septiembre se hará público. Lo cual sugiere dos cosas: una, que ese proyecto, por ahora, no existe; y dos, que ese proyecto no es suyo.

De donde, salvo prueba en contrario, se infiere que su "candidatura" está colgada más de su carisma y de su audacia, que de lo que el ciudadano quisiera encontrar en los aspirantes a un cargo tan serio como el de presidente de la república: claridad de miras... y capacidad probada.

Jaime García Elías, columnista y conductor radiofónico
(v.pág.5-A de El Informador del 27 de junio de 2005).


A través del editorial del semanario "Desde la Fe", la Iglesia Católica señala que los tiempos electorales están manchados por el mal uso de los recursos públicos destinados a este rubro.

Así, lamenta que sectores como el de salud y el de educación sean sacrificados, "en aras de llenar las arcas de los partidos, que hacen 'su agosto' con derroches inútiles" que sólo benefician a los medios masivos de comunicación y no a la población en general.

Asimismo, el editorial del órgano oficial de la Arquidiócesis de México exhorta a vigilar y exigir cuentas a los gobernantes, ya que los candidatos "hacen alarde inmoral de promesas imposibles, de intenciones inexistentes, de expectativas mesiánicas y populares que ellos, mejor que nadie, saben que nunca podrán alcanzar".

"Hacen del engaño un sistema, y de la mentira una industria demagógica para alcanzar el poder que, una vez logrado, no se pone en función del bien común y del progreso social".

La inversión en la democracia, con resultados decepcionantes y raquíticos, asegura la publicación, ha fracasado, por lo que los mexicanos ya no creen en la clase política ni en las instituciones.

(V.pág.14-A de El Informador del 27 de junio de 2005).


Según el discurso en boga, el mercado libre es una condición sine qua non para la democracia. Llevada sin embargo esta premisa hasta la idolatría, la democracia misma se ha convertido en un mercado en el que rigen la oferta y la demanda. O, peor aún, en un producto que se compra y se vende al mejor postor. Primero hay que empezar por construirle al candidato una imagen de producto vendible: su apariencia física, su forma de vestir, su manera de expresarse, su lenguaje corporal, etc., sin importar en realidad mucho lo que diga. Esto naturalmente ya cuesta. Pero lo pesado viene después: difundir esta imagen por los medios masivos, sobre todo la televisión, que según horario y volumen de audiencia cobra cada minuto con cifras superiores a seis dígitos. Y ya se sabe que quien actualmente no aparece en la televisión no existe; y mientras más aparece, más existe.

Para reforzar esta imagen mediática y evidenciar que los candidatos todavía son de carne y hueso, vienen entonces las giras y los baños de pueblo. La renta de aviones, helicópteros, autobuses, automóviles. El alquiler de estadios, teatros o la simple adecuación de espacios públicos. El pago de seguridad privada, la iluminación y el sonido. La comida, la bebida, los volantes, las cachuchas, los distintivos, las calcomanías. Tres estados, seis ciudades, miles y miles de potenciales electores frenéticamente visitados de ser posible en un solo día.

Y luego están las encuestas. Ellas nos dicen quiénes son los buenos y, entre ellos, quién va ganando; porque al igual que en la televisión, quien no aparece en ellas no es nadie. Las empresas encuestadoras han proliferado y las hay de todo tipo, desde independientes y muy serias, hasta las que se venden a quien lo solicite.

Todo, en síntesis, se compra y se vende en este mercado democrático y los controles son muy laxos.

Lucía Luna Elek
(v.pág.18 del periódico Público del 26 de junio de 2005).


Por falta de examen crítico, la continuidad política sufre grave quebranto. Esperamos a que un gobierno termine su mandato para censurar lo que de él nos ha parecido censurable cuando ya no es hora de corregir. Los funcionarios entrantes se dedican a menospreciar y contradecir la obra de sus antecesores, y la continuidad política se convierte en intermitencia y viraje.

Flavio Romero de Velasco, licenciado en Derecho y en Filosofía y Letras y exgobernador de Jalisco
(v.pág.4-A de El Informador del 25 de junio de 2005).


Lo que sin duda alguna es evidente es que, una vez más, el Gobierno del Estado [de Jalisco] no se preocupó por no dejar cabos sueltos en su propuesta de hacer una presa en El Zapotillo-Las Escobas en lugar de San Nicolás.

Es inconcebible que después de los problemas que se enfrentaron con los pobladores de San Gaspar de Los Reyes, quienes mantuvieron una oposición férrea, los operadores del gobierno estatal no aprendieran la lección y simplemente no tomaran en cuenta a los habitantes de El Zapotillo y Temacapulín en el municipio Cañadas de Obregón, antes de lanzar a los cuatro vientos la propuesta.

La verdad, yo no veo por ningún lado la supuesta capacidad política de la actual administración estatal, ni la fortaleza de carácter, ni el rigor, ni el interés de Jalisco (trabajando unido y en paz) por sobre todas las cosas. Todo se reduce a un "slogan" que no corresponde a la realidad.

Y por supuesto que no ayuda, pero en nada, la declaración esa del diputado Salvador Cosío de que "el agua de Jalisco es para los jaliscienses" ¿pues en qué mundo vive?

Laura Castro Golarte
(v.pág.5-A de El Informador del 25 de junio de 2005).


Una de las tantas tragedias del sexenio de Vicente Fox Quesada es que cundió el ánimo de que cualquiera puede ser presidente.

Francisco Arvizu Hugues
(v.pág.15-B de El Informador del 25 de junio de 2005).


La que resulta incomprensible es la designación en la procuraduría del medio ambiente del ex gobernador de Querétaro, Ignacio Loyola.

Parece pertinente preguntarse si en la procuraduría de protección del medio ambiente se puede designar a un hombre en cuyo gobierno se construyeron hospitales sin drenaje, torres de control sin cimientos, centros de rehabilitación que debieron ser demolidos por fallas estructurales, y además sin experiencia en esa área.

Jorge Fernández Menéndez
(México Confidencial, 24 de junio de 2005).


Las herencias nocivas del presidencialismo pueden enrarecer la competencia partidaria. Máxime cuando los árbitros electorales están cuestionados por ser resultado de cuotas partidarias.

Jaime Preciado Coronado
(v.pág.22 del periódico Público del 24 de junio de 2005).


Secretarios de vialidad de este sexenio gubernamental panista, están rezagados en vialidad, careciendo de soluciones prácticas, porque estando hecha para 400,000, circulan en la zona metropolitana tapatía 1'600,000 vehículos, que a todas horas generan enormes embotellamientos por todos lados; concretándose secretarios "a vegetar", para obtener jugosos sueldos, sobresueldos, compensaciones, bonos mensuales, bimestrales, semestrales, anuales, aguinaldos, etcétera, que les ayuden a enriquecerse, mientras duren en tales cargos.

Si al problema de vialidad, sumamos contaminación ambiental de la zona industrial, e incendio intencional simultáneo de 11,500 hectáreas (provocado por delincuentes pirómanos, fraccionadores que pretenden enriquecerse ilícitamente más, fraccionando "La Primavera"), como consecuencia, tenemos contaminación ambiental a niveles absurdos, atribuibles sólo a ineptitud de actuales autoridades [in] competentes de Jalisco.

Gamaliel Guzmán González(v.pág.4-A del periódico El Informador del 22 de junio de 2005).


Al referirse a las fuerzas políticas nacionales (PAN, PRD, PRI), [el "subcomandante"] Marcos mencionó en forma contundente algo que avalamos muchos mexicanos: "allá arriba reinan la indecencia, la desfachatez, el cinismo y la desvergüenza".

Víctor Manuel González Romero, profesor investigador y ex rector general, U. de G.
(v.pág.4-A de El Informador del 22 de junio de 2005).


Es increíble, estamos a punto de completar la primera mitad del año y todavía se encuentra en discusión el presupuesto que habría de estar rigiendo la operación financiera del gobierno para este año. ¿Qué clase de país creen nuestros gobernantes y legisladores que tenemos? Si el no contar con un presupuesto aprobado para poder operar la parte ejecutiva del gobierno no es requisito, ¿para qué necesitamos tanta estructura política que seguramente sangra nuestras finanzas públicas?

No se sorprenda, la mayoría de los legisladores que atienden en San Lázaro se encuentran de vacaciones o bien, asisten a apoyar la labor promocional de aquellos precandidatos con quienes sus filias les prometen oportunidades más interesantes, es decir, están concentrados en sus futuras oportunidades particulares, pero no al pendiente de representar a quienes por ellos orientaron su voto.

Tal parece que en San Lázaro, en vez de tener la sede de la Cámara de Diputados, tenemos la Cámara de los "Nos": No a las reformas; no a asistir a cumplir con las comisiones asumidas; no a lograr un acuerdo presupuestal con el ejecutivo; no a trabajar por defender los intereses de la ciudadanía que puso en la democracia sus esperanzas de progreso social y político, y no a sacar adelante los pendientes legislativos que pudieran contribuir, aunque fuera un poco, a tener pequeños avances en nuestra estructura legal.

Lo peor del asunto es que de quienes nos quejamos, nos representan por la voluntad de nuestro voto.

Editorial
(v.pág.4-A del periódico El Informador del 20 de junio de 2005).


Qué risa con el millonario Jorge Emilio González, del Partido Verde Ecologista, haciendo como que limpia ríos y bosques mientras pide castigos "más severos" para que se cuide el futuro del agua y de las plantas.

¿Será que los castigos actuales ya son severos? ¿A poco ahora hay castigos? ¿Qué no se supone que él iba a ser castigado por aquel videoescándalo del año pasado y que nadie le hizo nada?

¿Con esa credibilidad para los castigos El Niño Verde pretende pedir castigos para los demás?

Alvaro Cueva
(v.pág.17 del periódico Público del 19 de junio de 2005).


Un político marginado es aquél que vive sin el cerco de las cámaras y micrófonos y que desesperado por su alejamiento del carisma, es capaz de volverse despreciable con tal de que su familia no lo desprecie por carecer de imagen.

Carlos Monsiváis
(v.pág.18 del periódico Público del 19 de junio de 2005).


En nuestra endeble y primitiva democracia, hay que aprender a decir ¡No! al uso de medios de control psicológicos que confunden y degradan a las mayorías, ya sean rumores, abuso de símbolos, de creencias o publicidad masiva dirigida.

Flavio Romero de Velasco, licenciado en Derecho y en Filosofía y Letras y exgobernador de Jalisco
(v.pág.4-A de El Informador del 18 de junio de 2005).


Uno de los mayores defectos de la política mexicana es la irrupción del dinero en la lucha por el poder. El fenómeno no es nuevo pero, ahora, se trata de una subasta cuando, antes, era sencillamente la expresión de la existencia de un partido-estado.

La guerra electoral tiene en su centro el dinero, pues muchos políticos piensan que la propaganda abusiva es indispensable para obtener el triunfo. Pero, ¿por qué los poderosos desvían dinero para apoyar a sus amigos candidatos? Se trata de una inversión; es el dinero del poder para la reproducción de éste. ¿Por qué los empresarios destinan dinero para apoyar a sus amigos candidatos? Se trata también de una inversión; es dinero de los dueños de éste para la reproducción del mismo.

Pablo Gómez
(v.pág.23 del periódico Público del 17 de junio de 2005).


Ahí tienen a sus güeyes ciudadanos dando bandazos de un partido a otro hasta que la muerte nos separe de este matrimonio ciudadano-partidista en el que a fuerzas nos metieron a todos.

¿Podremos acaso pedir la anulación de este matrimonio aun después de haber sido consumado (porque de que sí nos co..eron a todos no cabe la menor duda)?

Ricardo Elías, arquitecto y empresario
(v.pág.10A del periódico Mural del 16 de junio de 2005).


Culpables, lo sabemos, son todos los políticos, vivos y muertos, que se enriquecieron hasta la saciedad por un sistema de gobierno que así lo postulaba.

Raúl Salinas sólo es uno más, que cayó, por azar.

Nemesio Maisterra
(v.pág.10A del periódico Mural del 16 de junio de 2005).


El diputado brasileño Ney López, presidente del Parlamento Latinoamericano, señaló que en los partidos políticos de la región "no hay lealtades ni fidelidades partidarias, y sólo siguen al poder económico de turno", lo que transforma "la gobernabilidad en una utopía".

(V.pág.16-A de El Informador del 15 de junio de 2005).


Falta poco más de un año para las elecciones federales y estatales, y el "bombardeo" publicitario de los aspirantes a obtener la candidatura de sus partidos está en grande. Claro, los actuales funcionarios llevan ventaja sobre los que no lo son, porque tienen publicidad gratuita gracias al puesto.

(V.pág.5-A de El Informador del 14 de junio de 2005).


En el Estado de México, e incluso en la capital del país, hemos sido testigos de una contienda millonaria. Los priistas y los panistas se acusan mutuamente de haber rebasado el tope de gastos de campaña, y el Instituto Electoral y su Consejo de Fiscalización han sido incapaces de poner un alto a la especulación y a las sospechas ofreciendo datos y mediciones confiables y oportunas.

Hay un ingrediente de esta elección que debe alertarnos particularmente. Es la indiferencia, el hastío con el que la opinión ha vivido todos estos escándalos y excesos.

Lo empezamos a ver a nivel nacional. Las fortunas que se están gastando los precandidatos en sus campañas televisivas son insultantes y sin embargo no parecen generarles mayores costos en la opinión. ¿De dónde están sacando tanto dinero Yarrington, Martínez, Montiel, Jackson y Creel, por citar a los que más aparecen en televisión? ¿Quién paga todo esto? ¿Por qué lo aceptamos? ¿Por qué no les resulta contraproducente?

Si aceptamos todo ya sabemos hacia dónde vamos, ahí está el ejemplo de lo que está ocurriendo en el Estado de México, el derroche, los escándalos: un remedo de democracia.

Denise Maerker
(v.pág.22 del periódico Público del 12 de junio de 2005).


El precandidato a la Presidencia del PRI, Enrique Jackson, señaló que es necesario evitar que gane el que tenga más dinero, ya que de esta forma los políticos tendrán dueño.

(V.pág.23 del periódico Público del 12 de junio de 2005).


La famosa escritora Harriet Beecher-Stowe señaló alguna vez que "las clases ignorantes son las clases peligrosas. La ignorancia engendra monstruos" . Y es que Alberto Cárdenas es de alguna forma signo de los tiempos, ciego entre ciegos, producto de esta nueva democracia que en su larga lengua y nula preparación política, pensaron -al menos lo intentaron- que bastaba con querer y criticar para mejorar nuestra situación local y nacional, menospreciando el oficio y el saber (con los resultados que todos padecemos, donde los dineros públicos se llevan por carretadas en supersueldos, bonos, seguros, viajes, anuncios, y la estabilidad se desmorona ante la preocupación de los ciudadanos conscientes de lo que sucede).

Manuel Hernández Gómez
(v.pág.4-A de El Informador del 11 de junio de 2005).


Los tres principales partidos políticos sufren severas y añejas crisis, que se están agudizando precisamente por las luchas de poder entre sus simpáticos grupos.

Marcela Gómez Zalce
(v.pág.22 del periódico Público del 10 de junio de 2005).


La gran contribución de Adolfo Aguilar Zinser a la vida pública fue quizá probar de manera fehaciente que en la figura del político cabe perfectamente la del científico, que la reflexión no está reñida con la capacidad de acción política ni con el liderazgo (como parecen empeñados en probar los políticos mexicanos) y que, sobre todas las cosas, es la riqueza de conocimientos y el rigor de pensamiento lo que puede salvar a la clase política de su mediocridad apabullante, y al país de caer en el abismo hacia donde es conducido por manos inescrupulosas.

Rogelio Ríos Herrán
(v.pág.8A del periódico Mural del 9 de junio de 2005).


[A los políticos mexicanos] hay hasta licenciaturas para estudiarlos. lo más curioso es que éstas sean parte de las llamadas humanidades, y no pertenezcan al troco común de las ciencias biológicas como veterinaria o hasta las ciencias agropuercarias, digo, agropecuarias.

Y es que en su favor hay que decir que los máximos grillos mexicanos han logrado evolucionar a pasos agigantados en muy pocas décadas, hasta colocarse en las ligas mayores a nivel mundial, en lo que respecta a sus capacidades de negociación, de proyección, visión a futuro y, sobre todo, sus habilidades de supervivencia. Por si fuera poco, además, desde hace pocos años ya son capaces hasta de ganar elecciones democráticas. ¡Oh!

El único problema que no han sabido resolver es, una vez que ganan una elección, como hacerle para gobernar de una forma más o menos capaz. Algunos son excelentes cabilderos; otros, grillos de medio pelo. Pero todos son gobernantes mediocres, si acaso, cuando no definitivamente ineptos.

Paco Navarrete
(v.pág.3B del periódico Mural del 9 de junio de 2005).


No cabe duda que la integración del Instituto Electoral del Estado [de Jalisco], ha carecido totalmente de transparencia, imparcialidad y ciudadanización, que brillan por su ausencia en su nominación. Afirmamos que la acción política en nuestro país, está secuestrada y controlada totalmente por partidos políticos y grupúsculos que los rodean y esto prueba esa afirmación. Para comenzar, se hizo a los aspirantes (que al parecer fueron más de 170), una serie de exámenes totalmente amañados y orientados a especializaciones como la abogacía, que no es correcto, pues los consejeros deben ser designados con base en su fama pública, en su trayectoria social y comunitaria, en su espíritu ciudadano y su acción conformada con la ética social, así como en una imagen limpia y transparente ante la sociedad. Por comentarios de algunos participantes, esos exámenes fueron una manipulación provocada para excluir a quienes conviniera, de manera que los partidos políticos, a través de nuestros ínclitos diputados, se repartieran las cuotas de acuerdo a su capacidad de negociación, que es precisamente lo sucedido.

Los ciudadanos, de nueva cuenta, hemos permanecido totalmente pasivos e impávidos, ante esta nueva arbitrariedad de los integrantes del congreso estatal y esto es otro atraco contra la ciudadanía y contra la tan ofrecida ciudadanización de la política. No es sino una prueba más del secuestro de la acción política, que ejercen las élites partidistas y sus corifeos, para controlar y poder manipular con mayor libertad, los procesos electorales que se avecinan para el próximo año.

Lamentablemente en nuestro país, parece que no hemos avanzado grandemente, por lo menos en materia política, pues ya en la segunda mitad del Siglo XIX, José María Vigil, distinguido periodista tapatío y gran conocedor de la política mexicana, escribía lo siguiente: "Una turba de aspirantes sin moralidad ni convicciones asalta los puestos públicos para hacer de ellos su patrimonio, dándose el nombre de políticos liberales, demócratas, y de constitucionalistas; desgarran la ley, oprimen al pueblo y se convierten en despreciables tiranuelos; desplegando una charlatanería insufrible, atruenan los oídos con las bellas palabras de patria, derecho, libertad, justicia; mientras que en la realidad sólo obedecen la voz de intereses bastardos, importándoles un bledo que el país se hunda, que la independencia peligre, y que las instituciones desaparezcan. El pueblo mexicano sufre entretanto todas las consecuencias de ese desorden; multitud de causas diversas concurren a mantener el mal".

Estas palabras no pueden ser más actuales ni más apropiadas a la realidad que estamos viviendo en estos momentos, no sólo en el ámbito político de nuestro estado, sino en toda la vida política nacional. Los ciudadanos debemos reflexionar seriamente sobre estos acontecimientos, y formarnos el propósito de contribuir con nuestra acción a recuperar esos espacios, que ahora con total falta de ética, monopolizan los partidos políticos y sus incondicionales.

Sergio A.López Rivera, abogado
(v.pág.5-A del periódico El Informador del 8 de junio de 2005).


México, DF / Agencia Reforma

El que quiere cambiar el modelo económico del país -Andrés Manuel López Obrador- reprobó esa materia en sus estudios universitarios.

Según los historiales académicos que emite la UNAM, López Obrador tuvo 6.2 de promedio (de acuerdo a créditos obtenidos, es decir, aún adeuda materias) cuando cursó Ciencias Políticas. En el historial académico del perredista se registra que ingresó a la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales de la UNAM en 1973. Pero 14 años después, en 1987, todavía estaba presentando exámenes extraordinarios para aprobar la materia de Seminario de Tesis I y II.

Con número de matrícula 7370246-5, López Obrador acumula siete materias no aprobadas: entre ellas Economía que reprobó en dos semestres seguidos. Lo mismo ocurrió con Matemáticas y Estadística, donde no las aprobó ni en los exámenes extraordinarios.

Por si fuera poco, el precandidato del sol azteca apenas pasó las materias de Partidos Políticos, Psicología Social y Filosofía Política. De hecho, tiene 13 "S" de 38 materias en total -que según la UNAM es una calificación que marca como "suficiente".

Hasta aquí, la nota publicada por el diario Reforma.

Ahora lean lo que al respecto, publica el día de hoy el prestigiado columnista CATON:

"Fui maestro durante 40 años. En ese tiempo la experiencia me enseñó que las calificaciones no dicen todo acerca de un alumno, pero sí hablan mucho de él. Las buenas notas en las materias escolares son indicativas de sentido de responsabilidad, de trabajo, de tiempo dedicado al cumplimiento de los deberes cotidianos. Puede haber, es cierto, estudiantes brillantes que luego son profesionistas mediocres, y aun fracasados."

"También, al contrario, sabemos de malos escolares que luego triunfan en la vida. Pero unos y otros constituyen excepciones, y es posible asentar un principio general según el cual las actitudes y conductas que alguien mostró como estudiante serán las mismas que luego evidenciará cuando profesionista, y en su modo de ser como persona. Por eso reviste interés grande el análisis hecho por el Grupo Reforma de las calificaciones que en la Universidad obtuvieron los tres principales aspirantes a la Presidencia."

"Ese análisis muestra que Andrés Manuel López Obrador hizo su carrera en la misma forma que habla: a pausas. Tardó 14 años el señor en terminar una carrera que se cursa en cinco. Vale decir, fue fósil de la UNAM. Reprobó materias a diestra y a siniestra, y varias las aprobó en exámenes extraordinarios merced a la infinita benevolencia de esa indulgente madre, la Universidad."

Se puede concluir que los logros de López Obrador NO han sido fruto de la preparación y mucho menos del estudio arduo y disciplinado (se nota que el señor AMLO paso por la escuela pero por afuera y muy lejos), sino de la ocasión. Desde luego la política no es cosa de academia, pero difícilmente podrá ser presidente bueno quien fue estudiante tan malo...

(Recibido por e-mail el 7 de junio de 2005).


Los tres Poderes de la Unión, cada uno por su causa particular, perdieron el respeto relativo de que gozaban y con él, la credibilidad. Paradójicamente, la espectacularidad y hasta dramatización, comúnmente conocidas como sensacionalismo o "amarillismo" han pasado a ser la plataforma de lanzamiento a la popularidad del individuo que una vez conocido, y aun reconocido por sus errores y hasta actos delictivos, llega a figurar como adalid de las causas populares, amparado por el cínico populismo, la ingenuidad o ignorancia de la población que con facilidad olvida cometiendo el error de entregar su voto a cambio de promesas inalcanzables, envueltas en mensajes huecos o el clásico ataque al opositor.

Del candidato debemos exigir propuestas. Qué se propone, cuál es la seguridad de lograrlo y específicamente: de dónde saldrán los recursos aplicables a sus propósitos. Esto es: qué, cómo, cuándo y cuánto. Porque ahora es humillante la información que de la bolsa supuestamente "seca" del erario, que no realiza obras apremiantes de infraestructura, se extraen cientos de millones de pesos para establecer las fórmulas calificadas democráticas de precandidaturas en los partidos políticos.

Carlos Cortés Vázquez, consultor en comunicación
(v.pág.5-A del periódico El Informador del 7 de junio de 2005).


Cualquiera puede ser presidente.

(Publicado en el periódico El Informador del 6 de junio de 2005).


Muchos de los impulsores del voto útil del foxismo no encuentran a quién respaldar en el 2006.

Jorge Fernández Menéndez
(México Confidencial, 3 de junio de 2005).


Desaseo es la palabra más apropiada para calificar la selección de consejeros del Instituto Estatal Electoral de Jalisco. Queda claro que en la lógica partidocrática se negociaron cuotas de poder: cuatro consejeros para el partido que tiene la mayoría parlamentaria y tres para el que le sigue. ¿Dónde está lo perverso de esas negociaciones? Los partidos solamente tienen voz en los organismos electorales porque no pueden ser juez y parte, pero se aprovechan de su rol como electores para influir sobre quiénes fungirán como árbitros; se intercambian apoyos a personas afines al partido por compromisos para favorecerlo en la calificación de las elecciones. Se hizo un montaje para hacer creer que se procedería de otra manera.

Se premió la fidelidad de más de alguno con grupos políticos específicos, entre ellos el del gobernador.

Jaime Preciado Coronado
(v.pág.22 del periódico Público del 3 de junio de 2005).


¿Dónde está el flanco débil, dónde está el talón de Aquiles del gobierno del presidente Fox? Hasta ahora ha estado en la operación política y ha estado en su operador político, el encargado de la política interior.

Podrá [Creel] ser muy buena persona, un bombón, como dijo Andrés Manuel, pero como secretario fue malísimo; esa es la verdad.

Felipe Calderón, aspirante a la candidatura presidencial del PAN
(v.pág.2A de Mural del 2 de junio de 2005).


Del total control gubernamental de antaño, los órganos electorales pasaron a ser consejos ciudadanizados, pero de ahí, hoy por hoy están cada vez siendo más impactados por la partidización.

Tonatiuh Bravo Padilla, vicerrector ejecutivo de la Universidad de Guadalajara
(v.pág.11A de Mural del 2 de junio de 2005).


Con los negros y los refritos (y no estoy hablando de frijoles) don Vicente ha conquistado dos cumbres de la sonsera gratuita muy difíciles de alcanzar para el resto de los mortales, aunque sean políticos. Pero, por voluntad no ha quedado. AMLO y sus afirmaciones acerca de la sorprendente seguridad que hay en la capital gracias a su campaña raticida, no estuvo mal.

Germán Dehesa
(v.pág.1B de Mural del 2 de junio de 2005).


Resulta un lugar común señalar que no sólo en nuestro país, los partidos políticos y los políticos, han secuestrado y se han apoderado de "lo político", de manera que los ciudadanos no tenemos acceso real o posible a la acción política, sino claudicando y cediendo nuestro derecho inalienable a las élites políticas llamadas partitocracia, así como los procesos electorales y la forma y substancia del gobierno. Esto ha provocado que la calidad de los políticos y las propias acciones de gobierno estén por los suelos, y que los políticos se dediquen a cruzar mandobles y escarceos verbales, ya sea para comprar los relojes del oponente, o para pagarle la fianza para que no ingrese a la cárcel, como en el caso AMLO. Otro resultado perverso de esta manera de manejar la política, es que quienes tienen secuestrada a la política y a los cargos públicos, no se dedican a gobernar o lo hacen de manera mediocre, pues lo que les preocupa es no perder popularidad, realizando acciones de gobierno que representan la seguridad de seguir en el pandero, y brincar al siguiente puesto público que puedan lograr. Esto es endémico y lo vivimos a todos los niveles, pues aún aquéllos que han logrado puestos en que no hay reelección, se aseguran que sus grupos o camarillas continúen, para conservar peso específico o algún tipo de control sobre ese grupo.

Ya es tiempo por lo tanto, que los ciudadanos logremos rescatar de manos de estos políticos, que han renegado de la noble tarea de dedicarse a la "cosa pública", para devolver a la "política" el sentido prístino y auténtico, que ya se definía desde la Grecia clásica, donde nació la democracia, como lo que pertenece y es propio de la "ciudad", es decir, de todos los ciudadanos.

En la actualidad los políticos han traicionado a tan noble actividad, y quienes controlan a los partidos políticos la han banalizado y tergiversado al grado máximo.

El error de nuestras sociedades, es que han separado totalmente el ámbito de lo político del resto de las actividades sociales, de manera que ha quedado como un nicho exclusivo de los políticos, que se han apoderado de la política y la han instrumentalizado en su provecho personal. Raro es encontrar un político en funciones al que podamos atribuirle altruismo, entrega a la causa pública, y un elevado sentido de la moral y de la ética política, si es que existe alguno en nuestro país.

Es ya tiempo de superar esta distorsión histórica y real del ámbito político, y de recuperarlo para los ciudadanos y sus preocupaciones públicas. Ha llegado ya el hartazgo de los ciudadanos al punto en que es imperativo rescatar tan noble acción, de las camarillas y grupos herméticos que la tienen secuestrada, en perjuicio de la sociedad misma.

Sergio A.López Rivera, abogado
(v.pág.5-A del periódico El Informador del 1o.de junio de 2005).


Prioridades presionan acercando al desencanto, dando ahora espacio para el encuentro de soluciones supuestamente reales a través de personajes, cercanos aspirantes al poder, dotados de responsabilidad y sabiduría para encauzar acciones sociales, con el sustento de la población participante en el quehacer sin esperar beneficio sin esfuerzo.

Los acontecimientos del pasado en el sexenio actual han dado muchas enseñanzas respecto a la actitud impulsiva de entregar la autoridad en forma irreflexiva. Seis años después no podemos incurrir en el mismo error por colores de compromiso, simpatías banales o frases con promesas incumplibles. El voto es asunto serio por ser donde se ubica el capital político individual que da mayoría de compromiso.

La comunicación masiva ha expuesto, a través de los medios, parte de la verdad antes oculta de corrupción que no sólo comprende el abuso de dinero y prebendas, además la deshonestidad de aspirar y hasta obtener un cargo público sin la capacidad de usarlo con servicio responsable.

Carlos Cortés Vázquez, consultor en comunicación
(v.pág.5-A del periódico El Informador del 31 de mayo de 2005).


Los partidos no aceptan tener políticos débiles, todos son fuertes y en sus elecciones internas de seguro triunfará el mejor; por lo pronto han comenzado con insulsos planteamientos y tibias declaraciones. En los partidos pequeños no hay problemas de elecciones; siempre se esperan a la subasta para ver quién les paga mejor el alquiler del membrete.

Jamás hubo tantos, y según ellos, tan buenos precandidatos, como jamás, tampoco, hubo cientos de aspirantes para docenas de electores. La estampida de la enflaquecida manada echará a perder el espectáculo: nunca debe haber más actores que espectadores.

La tumultuosa competencia no es por lo honroso, sino por lo lucrativo de los cargos. Los adalides del "cambio" exigieron buena paga porque, dicen, así no roban. Se llegó a tal extremo, que ante los gritos de los hambrientos tuvieron que devolver los insultantes bonos y gratificaciones; legalmente ya no era posible exigir devolvieran parte de los inflados salarios.

El remedio todavía está lejano. En un partido nacional aprobaron gastos electorales por 350 millones de pesos, para cuatro aspirantes. Esa fortuna es para una elección interna, en la cual sólo votan los miembros del partido.

Un precandidato no quiso exponerse al linchamiento y de manera comedida pidió no se haga esa escandalosa dilapidación y se fijen montos menos cuantiosos. No sé cómo se resuelva, pero supongo que en alguna forma será atendida la petición.

El presupuesto de gastos revela que no se pretende informar y convencer a los partidarios, sino a la masa de electores. El dinero es para hacer lo que ahora se acostumbra: "vender" la imagen sonriente y su sintético mensaje televisado como si fuera jabón o golosina, incluyendo, soslayada o abiertamente, su propuesta para las elecciones constitucionales; por eso la "interna" cuesta cientos de millones de pesos.

Alberto Orozco Romero, licenciado en Derecho y exgobernador de Jalisco
(v.pág.4-A de El Informador del 30 de mayo de 2005).


Los gobernantes están obligados a hacer sólo lo que les manda la ley y ninguna norma dice que los partidos políticos representados en el Congreso se repartirán entre sí los cargos públicos.

Querer consejeros subordinados anula los principios de certeza, legalidad, independencia, imparcialidad, equidad y objetividad que manda la ley en materia electoral.

Marcos Arana Cervantes
(v."El Trilenio" en la pág.10-B de El Informador del 30 de mayo de 2005).


Nuestra [?] clase política sólo vive para el hueso que viene, porque no sólo de pan vive el hombre. Así que olvídense de promesas, porque siempre habrá una silla más grande. Y para acabarla de amolar, en año de Hidalgo. Atásquense ahora que hay modo.

Toñimáximus
(v.pág.2 del periódico Público del 29 de mayo de 2005).


En verdad López Obrador es invulnerable. Está por encima de cuestiones que hubieran socavado la popularidad de cualquiera: el sueldo de Nico, su chofer; el escándalo de su secretario de Finanzas; la caída de su principal operador político; el exquisito trato de favor que recibió su hijo luego de chocar un coche que no era precisamente un Tsuru; su alianza con algunos antiguos salinistas muy conspicuos; el descrédito del PRD; el bárbaro linchamiento de unos policías en su ciudad; el crecimiento de la deuda pública en el Distrito Federal; la falta de transparencia de su gobierno; la falta de... ¡resultados!

Román Revueltas Retes
(v.pág.3 del periódico Público del 29 de mayo de 2005).


Si leemos las cartas de los lectores en los periódicos locales observamos frecuentes asedios a los diputados. No se cree en ellos generalmente. Se les pone dentro del saco de "políticos" prescindibles y casi inútiles. Sin embargo, también se les ignora o no se les toma en cuenta. Alguna vez un político profesional me dijo que ser diputado es como ser cabo en el ejército, es decir el peldaño más bajo en la jerarquía política.

Miguel Bazdresch Parada
(v.pág.18 del periódico Público del 29 de mayo de 2005).


La Presidencia requiere de quién sepa gobernar, que meta orden primero en el sistema judicial, para luego sujetar a la fauna delincuencial que ante la falta de autoridad se ha enseñoreado en contra de los ciudadanos ordenados y pacíficos. Así que el congreso antes que dar gusto al presidente, debe proteger al pueblo y legislar estados de emergencia como el que se vive para que en caso de que un presidente o gobernador no dé el ancho; se les permita una renuncia decorosa, pues nadie nace enseñado y en ocasiones el fracaso es una realidad inevitable.

Manuel Hernández Gómez
(v.pág.4-A de El Informador del 28 de mayo de 2005).


Una de las críticas más recurrentes que enfrentan los candidatos del PRI en cualquier elección, origen de demandas ante los tribunales, es que utilizan métodos ilegítimos en cada campaña para conquistar clientelas políticas. En efecto, materiales de construcción, despensas, bicicletas o estufas han sido parte del paisaje de conquista de votos durante décadas, por lo que es casi natural que sea el PRI depositario final de tales denuncias. Es una percepción generalizada sobre las mañas priistas que, sin restarle méritos, no tiene el patrimonio nacional de la manipulación de votantes. La realidad es que todos los grandes partidos, recurren al mismo método.

Los partidos han repudiado el avance democrático, convirtiendo el voto en las urnas en un trámite, y no como el punto final del proceso electoral. Salvo las elecciones en Nuevo León en el 2003, todas las demás se han dirimido en tribunales, donde los jueces, no necesariamente la voluntad popular, determina el resultado de la elección. Tampoco se ha avanzado en la regulación del financiamiento de precampañas, en buena parte por los obstáculos impuestos por los partidos. Por supuesto. Cómo van a regularse a sí mismos. No son demócratas, pero tampoco tontos. Pensar en una regulación sobre la utilización de recursos ilegítimos, como el cemento para infraestructura, se encuentra todavía mucho más lejano. Tenemos una república orgullosamente liliputiana donde la hipocresía marca sus tiempos políticos. ¿La democracia? ¡Ah!, claro. Excelente para los discursos, pero para nada más.

Raymundo Riva Palacio
(v.pág.5-A de El Informador del 28 de mayo de 2005).


Ignoro cuánto costaron las campañas propiamente dichas -fallidas, dígase de paso- de todos los candidatos panistas a la Presidencia de la República que hubo antes de Vicente Fox, o al Gobierno de Jalisco antes de Alberto Cárdenas, o al municipal de Guadalajara antes de César Coll. Sí sé que las primeras se costeaban con cuotas de militantes y aportaciones adicionales de simpatizantes del PAN... Ya las siguientes, al igual que las famosas "precampañas", corresponden a la era del "neopanismo": se pagan con las aportaciones gubernamentales (mejor dicho: con el dinero del pueblo que el gobierno, sin molestarse en consultarlo con el propio pueblo, regatea al "bien común" -la bandera por excelencia de Efraín González Luna-, y desvía para beneficio de los vividores de la política).

Si en el desempeño, por ejemplo, del cargo de gobernador, puede aspirarse a ganar un sueldo de poco más de 100,000 pesos al mes (menos de millón y medio de pesos al año, menos de nueve millones en un sexenio), ¿cómo explicar que se gasten decenas de millones -que no van a recuperarse, incluso en el caso de que se ganaran las elecciones- en la aventura incierta de una precampaña?... Es tan ilógico como comprar el billete de lotería que puede (¡puede...!) salir premiado con un millón de pesos, en una cantidad mayor.

No se requiere demasiada perspicacia para intuir que los puestos públicos, también para los panistas actuales, han pasado a ser "vaquitas" que se nutren con aportaciones de "amigos" (como los de Fox en su momento, por ejemplo), a favor de cuya espontaneidad y desinterés uno, al menos, no apostaría -como decía la abuela- "ni las lanas del ombligo".

Jaime García Elías, columnista y conductor radiofónico
(v.pág.5-A de El Informador del 26 de mayo de 2005).


Como siempre, a más de un año para que tengan verificativo las elecciones, algunos partidos políticos ya empezaron a atosigarnos con insulsa, estulta, insufrible, baladí, abstrusa, incuriosa, intrascendente, tediosa, reduplicada, dislatada y gazmoña, pero de exhorbitante costo, propaganda.

En los citados anuncios, pregonan y ofrecen que si resultan ser beneficiados con mi voto, lucharán por cambiar algunas leyes que permitirán mejorar a nuestro país. Prometen castigar a los funcionarios corruptos. Proclaman tener la cábala para solucionar todos nuestros problemas y demás utopías por el estilo.

Deseo recordar a tales partidos, que los cargos públicos que acupan sus agremiados y coligados aún están vigentes. La actual legislatura no ha muerto. Subsiste y tiene la obligación de cumplir con su trabajo.

Quiero traer a la memoria de quienes emiten quiméricas promesas que todavía queda más de un año para que los afiliados a su partido que actualmente ostentan curules y/o puestos públicos, tengan la posibilidad y la obligación de hacer realidad todas y cada una de las promesas que pretenden vendernos con la vana ilusión de que otorguemos nuestro voto a su favor, en las futuras elecciones.

Yo voy a votar por quien estando no sólo en posibilidad, sino en obligación, de hacer realidad las cosas, muestre y demuestre que tiene la capacidad y voluntad de dar vida a lo que se promete... Mi voto será para quien predica con el ejemplo.

Exijo que cese el brutal bombardeo de inútil propaganda. Atrae más votantes mostrar cordura y mesura, que dilapidar infecundamente el erario público.

Bernardo Vázquez Rodríguez
(v.pág.6-A "Buzón de nuestros lectores" de El Informador del 26 de mayo de 2005).


La falla del derecho parlamentario -y el derecho español pone especial énfasis en esto- son estas reglas o normas imperfectas, que no sancionan a una comisión legislativa. Y el parlamento es muy vulnerable, porque puede detenerse el trabajo cuando un grupo parlamentario lo desea. Esto lo denominaron en Estados Unidos como un filibusterismo.

Juan José Rodríguez Prats, senador panista
(v.pág.10-A del periódico El Informador del 26 de mayo de 2005).


Al parecer los integrantes de los partidos políticos y de la partidocracia, embebidos en sus pequeños intereses y en sus grandes componendas, han abandonado a la sociedad embriagados por su soberbia y sus juegos inconfesables, y sus miembros no buscan, por lo general, el interés de la comunidad sino asegurar su modus vivendi y los potenciales negocios que a la sombra del poder se efectúan.

Esto en la visión de la Opción Ciudadana planteada recientemente, tendrá que desembocar en un gobierno auténticamente representativo y fuerte, que sea capaz de combatir con la fuerza de la ley y el derecho, a los intereses de grupos que hoy por hoy están apoderados del país, y que no permiten la democratización que necesitamos. Pero esto no podrá lograrse, mientras la mezquindad esté enseñoreada de los actuales partidos políticos y mientras sus dueños no sean capaces de ver con respeto a la sociedad. Es por ello que la misma sociedad, a través de sus miembros más inquietos y conscientes en lo social y lo político, han decidido poner un hasta aquí a ese secuestro y ese estado de rehén, en que han colocado a la auténtica vida política de la nación. Por ello resulta fundamental tomar nota de esta nueva opción que se brinda a la sociedad y rescatar a la vida política, que ya desde la época de los griegos era la más excelsa de las actividades y la más respetada de las virtudes de sus ciudadanos, para que con esa nueva Opción Ciudadana, logremos sacar al país de la trágica situación en que se encuentra en estos momentos.

Sergio A.López Rivera, abogado
(v.pág.5-A del periódico El Informador del 25 de mayo de 2005).


Las actuales autoridades prefieren jugar tenis político... ya declaran para que sus homólogos los entiendan... ya responden en ruedas de prensa armadas por sus expertos en imagen... ya dan "ingeniosas" salidas en entrevistas de banqueta, todo menos hacer su trabajo; todo menos unir esfuerzos y capacidades sin distingo de colores de partido, una deseada suma de trabajo de funcionarios y legisladores tan necesaria para "sólo" hacer su trabajo y contribuir a que el país salga del marasmo que amenaza con volverse un fangoso pantano que rasgue la poca cohesión social todavía existente...

Lourdes Bueno, investigadora de la Universidad de Guadalajara
(v.pág.5-A de El Informador del 25 de mayo de 2005).


Los tres grandes partidos han formado tres reinos que deben democratizarse, en los que se anteponen el cálculo y el interés parcial.

Porfirio Muñoz Ledo
(v.pág.10-A del periódico El Informador del 25 de mayo de 2005).


El presidente del PAN en Zapopan comentó que hay preocupación del panismo porque se ha registrado un crecimiento sin precedentes en materia de promoción personal hacia la figura de Arturo Zamora, ya que los anuncios que proliferan en los medios "exaltan la figura del alcalde, no hablan de la tarea del ayuntamiento".

Esto se comprueba, dijo, con el crecimiento de 25 a 31 millones de pesos del presupuesto publicitario, recursos que se tomaron de recortar 6 millones de pesos al servicio de aseo público.

(V.pág.3-B de El Informador del 25 de mayo de 2005).


Está visto que los legisladores, por más que los tilden de apátridas, no entregarán a un precandidato a la Presidencia, como es el actual secretario de Gobernación, una ley de seguridad que le sirva de ariete contra sus adversarios políticos, ¿pero qué culpa tiene el país para tener secuestrado el ejercicio de la justicia?

Editorial
(v.pág.4-A del periódico El Informador del 24 de mayo de 2005).


Ya andan señalando topes para las campañas de preselección de candidatos; en ellas se tiene previsto para un solo partido el tope de 350 millones de pesos. Faltan los otros, y con ellos el dispendio, desatado derroche, encuentro de merolicos que gritarán desde los medios de la comunicación electrónica, como en plaza de feria, los méritos de etiqueta o de marca.

Esas cantidades de dinero no lloverán del cielo; tienen que completarse con aportaciones de los miembros de cada cofradía, amigos, empresarios fuertes que no dudarán en pensar en este negocio en puerta: ellos aportarán tal o cual cantidad que luego podrán recuperar con creces, en las prebendas, canonjías, el cargo que les dará a su tiempo el candidato ganador.

Al oír hablar de los millonarios costos que tendrá el voto de cada ciudadano, hasta de 75 pesos por elector, se anticipa no sólo el dispendio aberrante de la próxima contienda, sino el carácter mercantil en que será manejada la propaganda de cada candidato que no pensará en ideales, doctrina, valores e intereses nacionales, sino en invertir más, para ganar votos.

No piensan los candidatos, a juzgar por los planes que presentan, en apelar a convicciones del electorado, difundir principios ideológicos del partido, su doctrina, visión de valores orientados al bien nacional, sino en lo que busca, quiere y pelea cada partido; lo que buscan y quieren en el Congreso de la Unión en provecho de facciones y contra intereses del país dispuestos en el presupuesto federal de origen.

Luis Sandoval Godoy
(v.pág.4-A de El Informador del 24 de mayo de 2005).


Surgen nuevos pretextos para extraer cientos de millones de pesos del erario por conducto del Instituto Federal Electoral usado como instrumento dúctil y maleable a los dictados oligárquicos.

Los candidatos están convertidos en empaques sin productos dentro. Simplemente carecen de propuestas y mucho menos aún de programas. Entonces ¿qué tienen? Simplemente marca de partido con muy amplio desprestigio cuya posesión permite acceso al dinero -billete grande y fácil- sin ganarlo ni para ganar, pues hace tiempo el traspaso del poder de Fox al PAN fue cancelado por otros factores adicionales entre los que sobresale la ineptitud.

El desasosiego evidencia el desaseo político expuesto en todos los niveles a partir de la residencia oficial donde penetra la sospecha, -ni única ni primera- denuncia y aprehensión de gente cercana al núcleo del poder -como si la Presidencia fuera cualquier cosa-. La Jefatura de Gobierno del Distrito Federal de origen perredista enfrenta la certeza de otros "cercanos" que abrieron bolsillos para recibir dinero de aún no explicado origen y mucho menos aplicación. El fracturado Revolucionario Institucional soporta el peso de un fardo etiquetado como corrupto, sin que pueda negarlo, mientras al interior tampoco cicatricen heridas expositoras de intereses de cuanto llama y puede el poder.

Temas como insatisfacción, desempleo, rezago educativo, falta de infraestructura ocupan titulares impresos y electrónicos para ciegos y sordos, enfrascados en el diálogo de aturdidos por el cinismo de llegar a "cobrar" parte del patrimonio social creado con los impuestos dilapidados en la mascarada democrática que legitima el uso de 350 millones de pesos. Realmente, ¡una vergüenza!

Carlos Cortés Vázquez, consultor en comunicación
(v.pág.5-A del periódico El Informador del 24 de mayo de 2005).


Falta de consenso entre legisladores, secuestro de decisiones por intereses partidistas, traiciones entre grupos dentro de los propios partidos, y muchos otros ejemplos de falta de civilidad política, caracterizan los tiempos democráticos que vivimos.

Lo más doloroso de todo este panorama no estriba en la pérdida de confianza que para la ciudadanía ha sufrido el ejercicio electoral, sino en el desprestigio que ha alcanzado el trabajo público, esencia de la política, en el cual el prójimo sólo tiene sentido si es para servirse de él.

El ver que los actuales gobernantes dedican una importante porción de su tiempo y de los recursos a su cargo para atender sus propios intereses electoreros, nos habla de lo bajo que ha caído nuestra democracia, pero también hace que nos cuestionemos quién ve por el futuro de nuestros municipios y de nuestro estado, si los intereses individuales de quienes los dirigen se anteponen a los de la sociedad que ha confiado su único capital político -un voto- a sus gobernantes.

En teoría, la democracia, el gobierno elegido por el pueblo, para el pueblo, debería ser el instrumento ideal para poder exigirle más a los gobernantes, ya que éstos se deben a los ciudadanos que confiaron en ellos; sin embargo, en México, la corrupción, lo corto de miras, la abundancia de intereses individuales y el encono entre grupos de poder, han venido a desvirtuar este concepto de política que debiera estar produciéndonos importantes dividendos.

Editorial
(v.pág.4-A del periódico El Informador del 23 de mayo de 2005).


La elección de consejeros electorales pasa por los congresos locales y el federal, y los legisladores han dado sobradas muestras de que en lo último que se fijan para votar por la elección de un consejero es en su buena fama, en su probidad, en su honorabilidad. La lógica de los intereses partidistas, de las "cuotas" para configurar un consejo electoral, es la implacable regla a la que se apegan éstos que primero amarran alegremente la pata de la vaca y luego se hacen los escandalizados cuando ven muerta a la res.

El caso de presunta corrupción del Edomex, exhibido por el reportero Edmundo Cancino, puede servir para detectar otros ocurridos, pero difícilmente evitará que sigan sucediendo si los diputados persisten en escoger consejeros, atenidos sólo a intereses y no a las trayectorias personales.

Víctor E. Wario Romo
(v.pág.4-A de El Informador del 23 de mayo de 2005).


La economía de nuestro país anda mal por los malos gobiernos y el que puede arreglar la economía es el gobierno. Si no se hacen las reformas necesarias que no se han hecho como la del estado, hacendaria, energética, laboral... seguiremos como estamos, en el agujero.

Cardenal Juan Sandoval Iñiguez
(v.pág.3/A de El Occidental del 22 de mayo de 2005).


Es una verdad conocida e indiscutible el hecho de que en la actualidad, la política está devaluada y ya no tienen los "politiqueros" la credibilidad que pudieron mantener en otras épocas. Creo yo que una razón básica es que ya no hay sinceridad en la actividad, tienden a la permanente simulación. La sinceridad es un requisito de credibilidad. Otra razón puede ser el que tampoco se actúa de conformidad a los cánones de la posición que guardan, o de aquella que buscan. O sea, que no hay congruencia entre lo que son y lo que "aparentan ser". Es cierto que la verdad, en política no ayuda. Es más bien un estorbo. Algunos políticos tienden a "aparentar ser alguien que en realidad no son". Intentan vender una imagen diferente a lo que son en realidad. Simulación y congruencia se contraponen.

Rubén Flores Medina, profesor e investigador en Derecho del Departamento de Estudios e Investigaciones Jurídicas de la Universidad de Guadalajara
(v.pág.6/A de El Occidental del 22 de mayo de 2005).


La presión que ejercen los partidos en los Institutos Electorales es parte de una estrategia política que daña mucho a las instituciones en las que los mexicanos hemos depositado nuestra confianza. Pero también es cierto que esas instituciones deben garantizarnos que esa confianza tiene sustento y que sus actos, tanto políticos como administrativos, están a prueba de toda sospecha y que esto lo pueden demostrar. No más dispendios ni gastos onerosos. Ninguno de estos institutos tiene derecho a tales excesos. Ningún consejero puede abusar de los recursos nacionales por cumplir apenas la necesidad de garantizar transparencia democrática.

Aurora Verdejo
(v.pág.7/B de El Occidental del 22 de mayo de 2005).


Suena raro que los partidos tengan representantes en el Instituto Electoral [del estado de Jalisco] y además designen a los consejeros como si fueran de su propiedad. Suena más raro que lo hagan sin pudor, como si fuera su derecho. Nadie habla de qué diablos quiere decir "ciudadanizado": de lo que se trata es de ver cuántos le tocan a cada partido. El PRI quiere cuatro consejeros de siete, pero se conformaría con res; el PAN quiere tres, pero aceptaría dos, y el PRD aspira a uno, y no se conformaría con ninguno.

La tremenda corte
(v.pág.2 del periódico Público del 20 de mayo de 2005).


Dos instrumentos políticos para la ampliación de la democracia en el estado fueron propuestos ayer por el diputado Mario Reyna Bustos (PAN), al sugerir una reforma integral a la Ley de Participación Ciudadana a fin de incorporar las figuras de la revocación del mandato y la consulta ciudadana. Se le ha definido [a la primera] como el derecho del pueblo, de los electores, para separar a ciertos servidores públicos de elección popular (gobernador, diputados, presidentes municipales, regidores e incluso síndicos), cuando ellos dejan de inspirarle confianza.

(V.pág.11 del periódico Público del 20 de mayo de 2005).


Algo tenemos que hacer. Es preciso detener el brutal despilfarro de recursos financieros de los políticos en campaña y, peor todavía, de los que apenas se ostentan como precandidatos y rompen lanzas con sus propios "compañeros de partido". La mercadotecnia -que cuesta mucha plata- y los poderosos de siempre amenazan con secuestrar definitivamente a nuestra democracia. No importan las ideas, los compromisos, la trayectoria personal, la honestidad, la congruencia de un candidato. Menos importan las necesidades reales de la gente, sus derechos, sus legítimas y siempre postergadas aspiraciones de bienestar, justicia y libertad. Sólo vale el dinero y éste siempre se consigue a cambio de prebendas y privilegios para unos cuantos, esos pocos que han hecho de la patria un botín.

Salvo contadas excepciones, llega al puesto quien más gasta, quien más dinero extra logra reunir, quien acapara los espacios en los medios electrónicos dejando en las arcas de los concesionarios miles de millones de pesos, quien al final más compromisos ha establecido a espaldas de aquellos que con su voto lo llevaron al poder.

Ya ha comenzado a fluir el dinero sucio a los partidos, el PAN y el PRI se disponen, como siempre, a pasar la charola. No se conforman con los centenares de millones que les otorga la autoridad electoral. Buscan más, quieren más, necesitan más. Como moneda de cambio, ofrecen el país como franquicia al mejor postor por otros seis años.

Epigmenio Ibarra
(v.pág.23 del periódico Público del 20 de mayo de 2005).


A pesar de la polémica que levantaron sus declaraciones, el coordinador Verde Ecologista, Luis Alejandro Rodríguez, no deja de tener razón al señalar que los ciudadanos que no son conocidos por los diputados y sin amarres políticos difícilmente serían consejeros electorales, admite el líder priista en el Congreso, Ramiro Hernández: "Bueno no deja de tener razón, pero creo yo que en este proceso no se trata pues de hacer una selección a partir de los cuates". El perredista Roberto López González por su cuenta reconoce: "Que sí hay intereses de grupos y hay interés de fracciones".

(V.resumen informativo de Notisistema del 19 de mayo de 2005).


No nos queda a los ciudadanos más que leer lo que va aconteciendo y llorar nuestra desgracia, esto explica el por qué es muy posible que retorne con mayor fuerza el ciclo donde los mexicanos vuelvan a ser indiferentes de quién y cómo se les roba, perdón, se les gobierna, dedicándose cada quien a vivir su vida, ocupándose sólo de su familia y defendiéndose en la forma a que de lugar, contra las imposiciones del gobierno, ya que han demostrado que sólo contemplan, como siempre, sus intereses particulares.

María del Paso Reinert
(v.pág.7A de "Cartas a Mural" del periódico Mural del 19 de mayo de 2005).


Creemos que [ni] los partidos políticos ni los políticos ahorita están a la altura del reto que tiene el país. Lamentablemente sí pasamos la alternancia en paz, pero la alternancia no nos ha guiado a la transición política.

Juan Arturo Covarrubias, vicepresidente nacional de la Coparmex
(v.pág.2B de Mural del 19 de mayo de 2005).


Una reforma que la sociedad agradecería con creces, sería que también en la reforma electoral se incluyeran candados férreos para controlar el financiamiento de campañas políticas.

Pero todos los partidos políticos ahí, en ese paso, hacen como que la virgen les habla. Y nadie hace por avanzar en lo que ya es un viejo reclamo en México: La regulación del financiamiento de las campañas y de periodos de precampañas electorales.

Vicente Bello en su columna "Tren Parlamentario"
(v.pág.2-A del periódico El Informador del 18 de mayo de 2005).


Cuántos años llevamos, todos los mexicanos, padeciendo a los políticos y embarrándonos de su corrupción sin hacer mucho por quitarnos de ese lodazal y mucho menos por ayudar a limpiar el tiradero de casa -léase México- y el mugrero que hemos hecho de ella. No podremos avanzar ni siquiera un poco cuando los políticos tienen acaparadas, manipuladas y saqueadas instituciones.

Lucio Vázquez. médico
(v.pág.4-A del periódico El Informador del 18 de mayo de 2005).


En el diario "Reforma" apareció una nota relacionada con el desempeño académico de tres de los más importantes precandidatos, quienes estudiaron en la UNAM. En la escala de cero a 10 (siendo seis la calificación mínima aprobatoria), el promedio de sus calificaciones de licenciatura fueron 7.5 para Santiago Creel, 7.6 para Andrés Manuel López Obrador y 9.2 para Roberto Madrazo. Más de 30 años de experiencia en educación universitaria me han enseñado que calificaciones de 7.5 y 7.6, no necesariamente demuestran poca capacidad, pero sí son prueba de poca responsabilidad. Lo grave es que uno de ellos es el secretario de Gobernación y otro es el jefe de Gobierno del D. F. y el más probable sucesor de Fox. Qué pena. ¿Serán la excepción? o ¿se debe a los defectos de la democracia? Somos un pueblo con bajo nivel educativo y cada pueblo tiene "democráticamente" los gobernantes que se le parecen. ¿Cómo podemos convencer a los niños que para triunfar deben estudiar? Qué tristeza.

Víctor Manuel González Romero, profesor investigador y ex rector general, U. de G.
(v.pág.4-A de El Informador del 18 de mayo de 2005).


Eso sería terrible, que alguno de los consejeros [electorales] electos tenga una línea de subordinación con algún partido sería lamentable.

Antonio Gloria Morales, presidente del PAN en Jalisco
(v.pág.8-B de El Informador del 18 de mayo de 2005).


El presidente del Centro Empresarial de Jalisco, Luis Fernando Pérez Aguayo, explicó que las reformas estructurales -fiscal, energética, electoral y laboral- están y seguirán atoradas porque los legisladores ya se dejaron atrapar por los tiempos políticos y se olvidaron de su trabajo.

"Están envueltos buscando defender sus intereses, tanto de partido como personales, y ya se olvidaron de que su trabajo es el beneficio de la población".

(V.pág.8-A de El Informador del 17 de mayo de 2005).


Las tribus, las beligerantes huestes del Sol Azteca [PRD], un enjambre de personajes de escaso nivel intelectual y ambiciones de "progreso económico", carecen de proyecto y pensamientos. El Peje [López Obrador] no es el jefe, no conduce y no es respetado por una casta de individuos que están más atentos a las intrigas y a los negocios, que a la causa. Los miembros del añejo clan Cárdenas, ególatras, conspirativos y aliados al poder en turno, nunca lo acompañaron, jugaron siempre en contra. Y sus adláteres preferidos, Manuel Camacho Solís, Marcelo Ebrard y Leonel Cota Montaño, estaban muy cuestionados por su cercanía con el PRI. El primero fue uno de los cerebros de la campaña del martirologio. Hombre nacido en Irapuato, hijo de un general, tenía una sólida formación intelectual. Funcionario relevante durante el salinismo, fue el comisionado para la Paz y Reconciliación en Chiapas. Enemistado con Salinas, escribió Por un cambio sin ruptura, donde sostenía que debía continuar la nomenklatura ortodoxa en el partido. Cuando mataron a Colosio, la viuda no le permitió el ingreso a la funeraria. Marcelo Ebrard Cassaubon es el ladero fiel de Camacho. De 1978 a 1995 estuvo en el PRI y siempre acompañó a su jefe a donde lo llevara el destino.

De cara a las corruptelas de sus hombres, López Obrador respingó y fugó hacia adelante, consciente de que "no hay mejor táctica que un buen ataque".

Cuando la élite azteca utiliza el término despectivo "loco", para todos está claro que se refieren a él.

Olga Wornat
(v.pág.36 de la revista "Poder y Negocios" de abril de 2005).


Nadie puede definirlo [a López Obrador] tan exactamente como lo hizo el escritor Xavier Velasco: "Pretende tener a la vez el monopolio del poder y el monopolio de la rebeldía". Encierra una contradicción práctica y concreta. La paradoja es que sólo se representa a sí mismo. Su discurso es contestatario, va contra de las instituciones, y además es populista. Suple el problema de seguridad social dando asistencia personal a la tercera edad; atiende el voto que está en la clase que tiene automóvil y se lanza a crear el segundo piso del periférico.

Lo malo es que ese dinero lo ha tomado de un proyecto a veinte años de un acuaférico que resolvería el problema del agua. La dádiva inmediata obtiene más votos y aplausos. Pero ni siquiera representa a los habitantes del D.F. Y no es cuestión de dónde nació, sino de cuánto tiempo vivió en la ciudad de México y qué tanto conoce los temas populares.

Pedro Angel Palou, secretario de Cultura del estado de Puebla
(v.pág.107 de la revista "Poder y Negocios" de abril de 2005).


Las corrientes [del PRD] como los amalios, los chuchos, Izquierda Democrática, los Unir, todos tienen cooptados espacios de decisión y obedecen a dinámicas personales.

Alejandro Encinas Rodríguez, secretario de Gobierno del D.F.
(v.pág.113 de la revista "Poder y Negocios" de abril de 2005).


Los precandidatos a la Presidencia son peces gordos para agencias de publicidad y asesores de imagen, son presentados en sus campañas como "trabajadores infatigables, esposos devotos, ciudadanos intachables". Por lo que en el proceso electoral, "acabamos votando por perfectos desconocidos", y peor todavía: "Empezamos a conocerlos una vez que están gobernando".

Jorge Zepeda Patterson
(v.pág.2-A de El Informador del 16 de mayo de 2005).


Los partidos políticos dejaron de ser el vehículo para que el ciudadano de hoy tome decisiones o se informe. La sociedad en su conjunto y en particular los votantes no alineados disponen de medios propios para informarse. Es cierto que los partidos siguen siendo el único medio para lanzar candidatos, pero no para que el elector los apoye.

Las estadísticas electorales indican que los votos nulos deliberadamente, los votos por los candidatos no registrados y los candidatos ajenos a los tres partidos más importantes van en aumento.

Marcos Arana Cervantes
(v."El Trilenio" en la pág.9-B de El Informador del 16 de mayo de 2005).


Los diputados no representan más que sus intereses personales y de grupo (en ese orden).

Toñimáximus
(v.pág.2 del periódico Público del 15 de mayo de 2005).


Los partidos políticos no son sujetos de la Ley Federal de Transparencia y Acceso a la Información Pública. Esto quiere decir que aunque por lo menos 50% de su presupuesto proviene de los impuestos de los mexicanos, ningún ciudadano puede averiguar cómo se usa ese dinero a través del IFAI.

Existen excepciones: las leyes estatales de transparencia de 13 estados de la república (Coahuila, Colima, Jalisco, Morelos, Michoacán, Zacatecas, Querétaro, Quintana Roo, Sinaloa, Sonora, Tlaxcala y Veracruz) sí incluyen a los partidos políticos como sujetos obligados. Sin embargo, resulta prácticamente imposible hacerlo a nivel federal.

Según explica María Marván, titular del Instituto Federal de Acceso a la Información Pública, lo único que puede hacer el IFAI en cuanto al financiamiento de los partidos es funcionar como inhibidor de la corrupción. "En lo que puede trabajar es en que la administración pública federal sepa que está vigilada y que no puede hacer transferencias de su presupuesto a las campañas de los partidos políticos".

Todos los partidos dicen estar a favor de la transparencia; sin embargo, no hay intención alguna de cambiar la ley.

Hágase la transparencia en los bueyes de mi compadre, dice el dicho. Claro que quieren transparencia en la administración pública federal, en el Instituto Federal Electoral, en el poder judicial, pero habría que analizar el nivel de transparencia en el propio poder legislativo y desde luego en los partidos. No es casualidad que los partidos no sean sujetos obligados de esta ley, fue un acuerdo de los legisladores. Esta ley se iba a aprobar si y sólo si los partidos políticos no eran parte de los sujetos obligados.

(V.pág.22 del periódico Público del 15 de mayo de 2005).


La tarea que tienen los diputados locales en la selección de quienes integrarán el Instituto Electoral del Estado de Jalisco, es de la más alta trascendencia para el futuro de Jalisco.

No podrán olvidar que cualquier falla en el proceso, es decir, la elección de algún aspirante que no cumpla con los requisitos y las expectativas pero sí ofrezca ventajas a algún instituto político, será única y exclusivamente responsabilidad de los diputados, que más tarde o más temprano será cobrada por la sociedad.

Editorial
(v.pág.4-A de El Informador del 14 de mayo de 2005).


No puedo ya creer en una justicia cuyo presidente de la SCJN gana mensualmente 640,000 pesos, mientras un trabajador percibe por su diario jornal, míseros 47 pesos. No puedo creer en un simulado estado de derecho cuando la ley se negocia políticamente con descaro y cinismo, lastimando la dignidad e inteligencia de todo el pueblo. No puedo creer en un poder legislativo real, cuando la mayoría de los diputados -federales y locales- son individuos impreparados, ambiciosos, improductivos, pero lo más grave, comprometidos con su partido y divorciados del pueblo que cubre sus estratosféricos sueldos (claro, autoasignados). No puedo creer en un sistema judicial que permite que más de 97% de los ilícitos que se cometen en el país queden impunes; sistema que no sabe prevenir el delito y que en cuanto a su combate es ciego y sordo a todo clamor social, culminando su descomposición con la libertad inmediata de los pocos criminales que caen, permitiendo además que los reclusorios sean gobernados por los internos.

No puedo creer en un sistema educativo cuyos alumnos son cada vez más ignorantes, menos analíticos y poco afectos al raciocinio; donde la tecnología y el interés económico se encuentran por encima de cualquier visión humanista y nacionalista. Instituciones más cercanas al coto de poder político que a templos del saber; donde el docente tiene más interés que sus muchachos no pesquen una enfermedad sexual, en lugar de mantener el orden y poner a los alumnos a estudiar (para eso son las escuelas, no para lo otro).

Pero sobre todo, no puedo creer en un presidente que carece de visión política, que ante la ausencia total de conocimientos y experiencia para semejante responsabilidad, maneje el estado como si fuera su negocio personal o su changarro; que su estado de ánimo o su reducida mirilla política le conduzcan un día sí y otro también a decisiones que sólo hunden al país y deterioran sus instituciones.

Pero qué se puede esperar de Los Pinos. Tiene razón Olga Wornat al escribir: "...La residencia presidencial es un ‘cambalache’ en el que se mezcla la Biblia con el calefón, los negocios turbios con la brujería y donde los seres pensantes brillan por su ausencia" ("Crónicas Malditas", pág. 41). Por todas estas cosas que nos suceden, ya no puedo creer en mi país, que ¿qué propongo? Que los partidos despierten de su ebriedad política, de su aquelarre de ambiciones, y reconociendo su grave falta, rectifiquen el rumbo y vuelvan el país a la ortodoxia proponiendo a hombres con capacidad y valía, pues de no ser así, quienes ya no creemos, caeremos en el nihilismo político.

Manuel Hernández Gómez
(v.pág.4-A de El Informador del 14 de mayo de 2005).


Pobre país, donde el combate a la corrupción se reduce a vendettas entre mafiosos, a chismes de lavadero y reyertas entre rufianes.

Gustavo Monterrubio Alfaro
(v.pág.4 "correo" del periódico Público del 13 de mayo de 2005).


Lo que tampoco pueden disimular varios secretarios de estado es su perturbado afán por obtener una curul el próximo año, lo que hace al curioso respetable preguntar con mucha sorna: ¿cuál será la prisa y el interés por entrar en el selecto grupo de (analfabetas funcionales) ilustres legisladores que, además de ser muy costosos para la ciudadanía, no han mostrado, en esta pueril y microscópica legislatura, talante, ideas, propuestas ni debates trascendentes para el país?

Marcela Gómez Zalce
(v.pág.21 del periódico Público del 13 de mayo de 2005).


La mayor parte de las elecciones locales recientes registran cerrada competencia y los organismos encargados de su organización no han superado las expectativas planteadas sobre ellos. Impugnaciones frecuentes terminan por dejar al tribunal electoral estatal respectivo la calificación de las elecciones. En el origen de esos conflictos está un vicio que no cesa de reproducirse: la negociación de cuotas de poder entre los partidos con mayor votación, en la cual la intervención del ejecutivo local es decisiva. Se busca colocar en los puestos clave de los organismos electorales a operadores políticos afines; estrategia que subordina y menosprecia el carácter imparcial necesario de los consejos locales y distritales. Se va perdiendo así uno de los logros reivindicados por el llamado proceso de ciudadanización que contribuyó a la credibilidad de la que gozaron (¿gozan?) el organismo electoral federal y muchos de sus homólogos locales. Se pierde entonces el sentido de consejeros o de comisionados, responsables de la limpieza organizativa de los comicios, y en su lugar aparecen los operadores de facto de intereses partidarios y de grupos de poder local.

Jaime Preciado Coronado
(v.pág.22 del periódico Público del 13 de mayo de 2005).


No podemos vivir todo el tiempo de las controversias. El poder judicial está para mediar las disputas jurídicas, pero no la falta de oficio político, mucho menos para suplir al arte de la concertación y los consensos políticos.

Tonatiuh Bravo Padilla, vicerrector ejecutivo de la Universidad de Guadalajara
(v.pág.9A de Mural del 12 de mayo de 2005).


La república ha sido convertida por los políticos en una barandilla para dirimir sus pleitos, y en ese proceloso mar de indignidades naufraga el bien de la nación.

Armando Fuentes Aguirre, "Catón"
(v.pág.9A de Mural del 12 de mayo de 2005).


A los mexicanos nos espera un año de sangre, sudor y lágrimas en el 2006 cuando nos enfrentemos a opciones de candidatos a la Presidencia que están degradadas.

Los votantes se encontrarán el próximo año con una boleta que les pida elegir entre Roberto Madrazo, Santiago Creel y Andrés Manuel López Obrador, pero que coarta su libertad, ya que estas opciones no son satisfactorias.

Con plena, absoluta y ciudadana libertad en 2006, todo indica que vamos a poder escoger entre la lepra, la crisis convulsiva o muerte fulminante.

El país tiene una tradición por el caudillismo que actualmente está encarnada por López Obrador. La gran mayoría de los mexicanos no están preparados para la democracia. Están preparados para encumbrar a uno que les diga por donde, si les dijo mal, lo tiran desde lo más alto de una roca y dicen: no salió bueno.

Germán Dehesa
(v.pág.2B de Mural del 12 de mayo de 2005).


Los precandidatos que ostentan algún puesto, que les permita visibilidad pública, tienen ventajas sobre los demás. En la actual precampaña vemos cómo secretarios de estado, presidentes de partidos, titulares de entidades y líderes legislativos, aprovechan sus puestos para hacer campaña. Todos ellos disponen de recursos públicos para sus campañas, empezando por sus propios salarios. Pero lo más grave es que distraen su atención por sus aspiraciones y dejan de cumplir con la función que les fue encomendada. Si a ellos les sumamos a sus seguidores, colaboradores y aduladores, el problema toma una dimensión preocupante. Muchos de los que apoyan a los precandidatos también son servidores públicos que se distraen de sus funciones por buscar un hueso en la siguiente administración. Se podría decir que sacrifican el presente en aras de su futuro. El problema es que sacrifican nuestro presente por tener un mejor futuro individual. Además de la desviación de recursos públicos, el hecho de que funcionarios aspiren a puestos de elección sin dejar sus posiciones actuales es inequitativo.

Víctor Manuel González Romero, profesor investigador y ex rector general, U. de G.
(v.pág.4-A de El Informador del 11 de mayo de 2005).


La democracia, que en otros países resulta ser de solidez incuestionable y que ofrece una plataforma para el desarrollo equitativo de la población, en países como México ha tenido menos fortuna, entre otras cosas, porque los gastos generados por la inversión que cada partido realiza en la publicidad "necesaria" para las campañas al poder, rebasa, no sólo toda mesura, sino que absorbe una cantidad de recursos necesitados, en este país, para muchas otras y medulares áreas, éstas sí que incidirían en el desarrollo de la sociedad. Pero en el juego abierto por el libre mercado de la política, el partido que más dinero invierte con el mejor publicista, la más "atractiva" imagen y en el horario de más alto "raiting", resulta ser el ganador, de eso ya tuvimos una prueba en el 2000.

Y en este contexto, cuando en México faltan recursos para casi todo, especialmente para áreas sociales, cuando los recortes se dan a manos llenas y los presupuestos para educación, salud y generación de empleo se han cercenado, se abre de manera no oficial, pero sí real, el arrancadero de las campañas: López Obrador, con el PRD a cuestas... anuncia que en pocas semanas inicia su campaña... Madrazo, con un PRI dividido, viaja al extranjero para acercarse apoyos y simpatías... y, el presidente Fox habla, entre sus seguidores, de la campaña por la Presidencia, donde su partido -que quizá ya no lo que se conocía como PAN...- con quien vaya como candidato... ganará. Y los demás partidos... los menores, jugando a ver quién les ofrece más: recursos, puestos, votos... todo, excepto trabajar por el proyecto de nación que el país requiere.

Habrá un oneroso gasto, derrama económica que los mexicanos pagan y que las dos cadenas de medios electrónicos más importantes -¿únicas?- se llevarán sin dejar nada para que la población que generó los recursos puedan ver esos dineros como una inversión a largo plazo... en este caso, la nada y la desinformación como pago al ciudadano.

El Centro de Investigación y Docencia Económica señala que en México el gasto en medios electrónicos es más caro que en Estados Unidos... es decir, que en este país se invierte en semejantes campañas, de desinformación y promesas vanas, en porcentajes muy por encima que los que el país más poderoso destina al mismo efecto, con todo y los votos de Florida...

De acuerdo con el estudio realizado, en la campaña presidencial de 1994 se gastaron 414.7 millones de pesos, para la de 2000, la cifra llegó a 1,204.6 millones. Sólo hay que imaginar la cantidad para el 2006... Además, el gasto realizado va a las dos macro empresas de mensajes electrónicos y casi nada a las pequeñas emisoras locales, las pocas que todavía existen, porque la cobertura nacional, las hace muy atractivas para la "imagen" que los nuevos candidatos quieren vender...

Luego, para terminar la paradoja, la ciudadanía no sólo paga el llamado "rescate" bancario que sirve para que las mayores transnacionales hagan su agosto, sino que a través de este mecanismo de "inversión" por campañas en medios electrónicos, el electorado, entiéndase la población mayoritaria de ciudadanos, termina transfiriendo recursos públicos a dos empresas privadas… pingüe negocio para ellos, pobres, muy pobres resultados para la ciudadanía mexicana... ganancias que estas empresas protegen a toda costa con el régimen de excepción al que están cobijados: cosas de la democracia del subdesarrollo...

Lourdes Bueno, investigadora de la Universidad de Guadalajara
(v.pág.5-A de El Informador del 11 de mayo de 2005).


Las elecciones del año próximo enfrentarán el reto de disociar partidos y candidatos oportunistas y corruptos que han engrosado la nómina burocrática en niveles insultantes a la pobreza de 50 millones de mexicanos carentes de lo estricto, alejados de la opulenta vida de funcionarios, legisladores y usuarios del poder.

Otro escenario puede ser la anarquía del abstencionismo como expresión de desconfianza al resultado de las elecciones, generador de triunfos pírricos y autoridades débiles y hasta cuestionadas con decepción y con el final deterioro de las instituciones.

Carlos Cortés Vázquez, consultor en comunicación
(v.pág.5-A del periódico El Informador del 10 de mayo de 2005).


Juan Francisco Ealy Ortiz, presidente de "El Universal", alertó sobre los excesivos gastos de campaña de los partidos, en particular en los medios electrónicos.

"La competencia por el poder se ha convertido en una búsqueda desenfrenada de dinero para financiar los gastos de las campañas electorales; se ha desatado un proceso que pervierte la transición democrática, y hoy tiene más posibilidad de ganar una elección quien más gasta".

El consejero presidente del IFE, Luis Carlos Ugalde, admitió que es una realidad el fenómeno del costo creciente de la política y algunas fuentes de financiamiento que no son reportadas.

(V.pág.10-A de El Informador del 10 de mayo de 2005).


Sería muy interesante que alguna institución respetable hiciera un ejercicio de lo que perdimos los mexicanos por estar envueltos durante casi un año en un asunto en el que dos personajes de alta investidura (el presidente de la república, Vicente Fox, y el jefe de Gobierno del Distrito Federal, Andrés Manuel López Obrador), de alta responsabilidad para con los ciudadanos, jugaron a las vencidas sin importarles el deterioro que causaron a las instituciones y al tejido social. ¿Cuántos proyectos se paralizaron por la polarización de las fuerzas políticas? ¿Cuántas iniciativas de interés público se vieron frenadas porque los de un bando no querían darle la razón a los del otro? ¿Cuántas cosas productivas pudimos haber hecho sin importar de dónde surgía la idea, sólo por estar en permanente pleito?

Para desgracia de Fox, el héroe de la película no es él, sino su oponente, quien le ha concedido la gracia de asegurar elecciones "libres y en paz". De ese tamaño era la amenaza, se infiere: "o aparezco en las boletas de la elección presidencial, o sobrevendrá el caos". Una vez que ha creído tener la garantía de que será candidato presidencial, López Obrador ha vuelto a sonreír y su séquito le aplaude como el salvador de la patria.

En territorio panista hay silencio, hay pasmo: no atinan a entrar a esta comedia de enredos en su nuevo capítulo. En el perredismo todo está contagiado de gozo y buenos augurios. Sus dirigentes han dejado de vociferar en las tribunas legislativas, en las plazas y en las banquetas, para ir bien trajeaditos a tomarse la foto con un secretario de Gobernación al que han vituperado y ninguneado como interlocutor.

De la ley, ni quien se acuerde. Lo que antes era una aberración porque afectaba al precandidato hoy es apenas un arreglo político que no merece escándalo. Unos y otros se han burlado de las mayorías que no apuestan por ellos. ¡Para eso me gustaban!

Víctor E. Wario Romo
(v.pág.4-A de El Informador del 9 de mayo de 2005).


Hoy se puede comprobar, una vez más, que las locuras del poder han colocado a México en una situación de riesgo. Y en este juego sucio ha colaborado más de un partido político, tanto el PRI como el PRD, tanto el PAN como el PVEM, sin hacer a un lado a los partidos más pequeños.

México sigue siendo el juguetito de las camarillas que dentro y fuera de las estructuras públicas creen que este país les pertenece. Hoy esas auténticas mafias tienen a esta nación como rehén de sus ambiciones, de sus propósitos personalistas. Hoy juegan a la silla como si México y sus 40 millones de miserables tuvieran ánimos de verlos divertirse a sus anchas.

Hoy un político fantoche puede pisotear la ley a su antojo y los derechos ciudadanos y pedir clemencia para que no sean vulnerados los suyos. Tal parece que en esta república de fantasía una marcha pesa más que una Constitución y el grito de un millón tiene más validez que el silencio de los 105 millones restantes

Lamentable, además, es que se haya puesto en riesgo el afán de los millones de mexicanos que en el 2000 le apostaron a la transición política y al cambio de régimen. Ante esto uno se pregunta para qué tanto esfuerzo colectivo si pequeños grupos de poder han caminado -por mucho tiempo- a una velocidad y formas diferentes a las que decidió la sociedad.

Y lamentable es que nefastos personajes del submundo de la política le hayan hablado al oído a quienes toman las decisiones más importantes en este país (en el gobierno, en las cámaras, en los partidos, en las cortes), con el ánimo de detener la marcha de México.

Constantemente se olvida que la mejor voz a la que hay que escuchar es la de los gobernados, la de los ciudadanos, pues son quienes conocen de primera mano las necesidades más apremiantes que los aquejan.

Elmer Ancona
(v.pág.4-A de El Informador del 9 de mayo de 2005).


Subirse al delgado ladrillo que significa el poder trienal o sexenal trae consecuencias múltiples. Marea, hace perder la memoria, hace creer a los políticos que bajó sobre ellos el Espíritu Santo y les infundió sabiduría infinita. A muchos les hace perder la vergüenza. A no pocos les fomenta el sentimiento de superioridad sobre el resto de los mortales. En resumen, la altura del ladrillo del poder los cambia.

Marcos Arana Cervantes
(v."El Trilenio" en la pág.14-B de El Informador del 9 de mayo de 2005).


La verdad desnuda
(Publicado en el periódico El Occidental del 8 de mayo de 2005).

La sociedad mexicana y la clase política deben asumir el compromiso de revisar los esquemas de formación de nuevos cuadros al interior de estos institutos y evitar la incorporación de arribistas que intenten llegar a la esfera política como meros cabilderos en busca de la materialización de afanes particulares.

Gerardo Sosa Castelán
(v.pág.6/A de El Occidental del 8 de mayo de 2005).


La clase política es la más desprestigiada del país, afirmó la titular de la Secretaría de Desarrollo Social, Josefina Vázquez Mota.

Enfatizó que los mexicanos creen menos en los políticos que en cualquier otro personaje.

"Algo hemos hecho lo suficientemente mal para que en las familias de gente decente, cuando un hijo les dice que quiere ser político lo asuman como una tragedia y no como una gran posibilidad. Hoy el político es el peor ejemplo de lo que debería de ser el servicio social, porque hemos padecido en éste país de una clase política más preocupada por agendas personales y de partido que por el servicio social. Hemos padecido de políticos mucho más preocupados por temas de frivolidad que por los temas que le preocupan verdaderamente a los mexicanos".

(V.pág.7-A del periódico El Informador del 7 de mayo de 2005).


Desde hace once meses y en forma más intensa desde enero pasado, López Obrador está en campaña abierta y pública, utilizando en muchas ocasiones recursos públicos pero eso no parece importarle demasiado, y ahora no quiere regresar a la ardua e ingrata tarea de gobernar la ciudad: es mejor recorrer el país que hablar de la inseguridad, la contaminación o el desempleo; es mejor ofrecer un nuevo proyecto de nación que explicar porqué se triplicó la deuda de la ciudad durante los últimos años o qué sucede con la corrupción en su administración. Por eso, poco y nada veremos de López Obrador como gobernante en los próximos días pero muy rápidamente lo tendremos ya en plena campaña electoral.

Jorge Fernández Menéndez
(México Confidencial, 6 de mayo de 2005).


Con la novedad de que a Francisco Ramíres Acuña no le salen mejor las entrevistas pactadas -de las que se esperaría que fueran más pensadas- que las "banqueteras" (léase improvisadas). En las escasas apariciones que ha tenido en los medios durante las últimas semanas, luego de que tomó la decisión de ya no pelar a los preguntones y preguntonas que lo acosaban con gravadora en mano, el nativo de Jamay no se ha visto más atinado, elocuente y razonable que antes, pues sigue con su discurso desarticulado de siempre, al que no falta una buena dosis de autoritarismo. Por lo anterior, hay motivos de sobra para pensar que el problema no reside en el formato de la interview, ni en el vértigo de tener que atender a varios inquisidores a la vez, sino en el sujeto de entrevista, quien sigue viendo moros con tranchete detrás de cualquier señalamiento adverso.

Cuando no se trata de un reportero "mentiroso", es un funcionario federal que "trae ganas de echar pleito", o personas que por intereses aviesos y valiéndose de recursos "legaloides" buscan frenar "el desarrollo del estado".

Cuando al gobernador le faltaron elementos de juicio para responder a los señalamientos de la Profepa, salió con argumentos localistas, más emotivos que racionales, dignos de ¡Ay Jalisco, no te rajes!: "Le he señalado al señor procurador ambiental que Jalisco es un estado libre y soberano y hay decisión gubernamental de poder hacer estas obras". En otras palabras: voy derecho y no me quito, así tenga que llevarme de corbata a funcionarios federales que andan buscándole "patas a las gallinas", leyes ambientales y, lo más grave, el patrimonio natural de Jalisco.

Juan José Doñán
(v.pág.2 del periódico Público del 6 de mayo de 2005).


El IFE, ha resuelto satisfactoriamente los desafíos planteados por la alternancia y se acerca a cierta "normalidad democrática" para elegir a nuestros representantes, está por integrar el voto de los mexicanos residentes en el extranjero y cuenta con un marco legal para fiscalizar las finanzas y vigilar el desempeño de los partidos dentro de valores democráticos, pero no ha incorporado las formas participativas semidirectas: plebiscito, referéndum, iniciativa popular.

Frecuentemente las elecciones locales recientes han mostrado procesos desaseados que cuestionan la calidad de los organismos encargados del proceso electoral respectivo. El común denominador de esos problemas es la reiterada dependencia de los organismos electorales de las negociaciones de cuotas de poder entre los partidos y de la influencia decisiva del gobernador en turno.

Jaime Preciado Coronado
(v.pág.22 del periódico Público del 6 de mayo de 2005).


Los opositores al PRI por años nos hemos quejado del control tan terrible que significa su espíritu corporativista, controlando sindicatos y asociaciones. Ahora el PRD nos muestra una versión más peligrosa y perversa, pues pretende, con los comités ciudadanos, sindicalizar barrios, pueblos, rancherías y escuelas como lo ha dicho Andrés Manuel.

¿Por qué a los del PRI, a los comunistas y ahora a los del PRD, les molesta tanto que existamos personas que no necesitamos asociarnos ni juntarnos políticamente con nadie y que exigimos nuestra libertad de elección y de gestión? Por totalitarios.

Enrique Canales
(v.pág.8A del periódico Mural del 5 de mayo de 2005).


López Obrador es un ejemplo claro: sus logros son haber dotado a los viejitos del DF de una limosna mensual, y de un segundo piso al Periférico. ¿A qué precio? Sólo él lo sabe: decretó que hasta dentro de 10 años se sepa cuál es el estado real de las finanzas capitalinas. Y aunque recientemente se desdijo, prometiendo que ahora sí informará puntualmente de todo, es más que evidente que el DF sigue (y seguirá) siendo una nata caótica, contaminada y sobre todo insegura a un grado de terror.

El PAN no canta mal las rancheras. Su gallo está aún peor: Creel es un ejemplo de la misma ineptitud, pero empeorada, porque el hombre no tiene músculo político alguno, ni siquiera tras haber sido becado por Fox para aprender a manejar el país como secretario de Gobernación. Aparte de inepto, es tan atractivo como una agrura.

Lo bueno es que al quiPrioridades presionan acercando al desencanto, dando ahora espacio para el encuentro de soluciones supuestamente reales a través de personajes, cercanos aspirantes al poder, dotados de responsabilidad y sabiduría para encauzar acciones sociales, con el sustento de la población participante en el quehacer sin esperar beneficio sin esfuerzo.

Los acontecimientos del pasado en el sexenio actual han dado muchas enseñanzas respecto a la actitud impulsiva de entregar la autoridad en forma irreflexiva. Seis años después no podemos incurrir en el mismo error po Aquí mismo, en su estado, los destrozos de las carreteras que se construyen para comunicar a Puerto Vallarta han acabado hasta con vegetación que se propone ("se proponía", dijo el otro) como área natural protegida, ¿y qué hace la Sedeur? Sigue "investigando". Mejor pararon las obras los mismos constructores, al ver que les echaba la bolita el Gobierno del Estado, verdadero irresponsable de esto. Conste: no pararon por miedo, sino por precaución.

¿Y qué decir del PRI? Imaginen: su carta fuerte es Madrazo, el ejemplo vivo de 70 años de corrupción, mapacheo y arreglos en lo obscurito.

Ni para qué abundar: la caballada no está flaca... está pa' llorar.

Paco Navarrete
(v.pág.3B del periódico Mural del 5 de mayo de 2005).


En las recientes semanas los mexicanos hemos asistido al final de la más dramática comedia de las equivocaciones, en la que la renuncia de Macedo de la Concha fue la crónica de una renuncia anunciada y el final de la arlequinesca farsa del desafuero de López Obrador, Fox se vio obligado a dar marcha atrás ante la debilidad de los argumentos planteados y ante la evidencia de que todo el sainete no ha logrado otra cosa, sino darle una fuerza que no tenía antes AMLO y presentarlo ante la población como mártir y héroe, perseguido por un gobierno federal que ha perdido el rumbo y que únicamente está dando bandazos, como barco a la deriva en el centro de una tormenta que no sabe ni puede controlar. López Obrador ante semejante indecisión no ha hecho sino ampliar sus espacios de maniobra, preparando a sus huestes para una resistencia civil en caso que llegara a ser encarcelado. También está preparado para atacar al sistema en lo que más le duele, en el escándalo aún no cerrado de la impunidad de banqueros y empresarios con el Fobaproa y que constantemente trae a colación en sus declaraciones sobre la corrupción y los acuerdos vergonzosos que se dieron al amparo de ese sistema.

Fox ha fracasado en su intento de colocar a Derbez al frente de la OEA, no obstante que en la prensa nacional se festinaba ya ese nombramiento la misma víspera del día en que de manera por demás sorpresiva éste anunció su retiro de la contienda, alegando la búsqueda de la unidad, pero en realidad todo hace suponer que ya no es un elemento útil para EE UU, ante la avalancha de escándalos y fracasos políticos y gubernamentales del régimen foxista y ante la acusación directa de Fidel Castro de que Fox es el peor de los lacayos del imperialismo yanqui. La reciente marcha contra la persecución oficialista del jefe de Gobierno capitalino, demostró más que el apoyo a AMLO, el repudio por los métodos utilizados y lo desaseado del caso en cuestión y los ciudadanos mexicanos deberán registrar adecuadamente la falta de respeto y el desprecio de López Obrador por las instituciones judiciales del país, a las que tanto insultó pero que finalmente lo protegieron jurídicamente y gracias al cual sus derechos fueron debidamente protegidos, propiciando el retiro de la acusación después de la renuncia de Macedo. Este escándalo lo único que ha logrado es el ocultamiento de la pésima administración de López Obrador en el Distrito Federal, totalmente en bancarrota, con una inseguridad rampante, corrupción incontrolada y una manipulación de las medidas asistenciales para mexicanos de la tercera edad que tiene fines totalmente electoreros.

Este escenario que debe de aderezarse con otras situaciones de incapacidad gubernamental no han hecho sino aumentar el clima de confusión que ya priva en el país desde hace varios años, demostrando la total incapacidad para gobernar de Fox. Ciertamente ganó la democracia ante la retirada humillante del presidente en la contienda con AMLO, pero el único que la provocó y alentó durante varios años fue el propio Fox que ahora olímpicamente se desdice, a lo que ya nos tiene acostumbrados y todo lo cual no hace sino confirmar el diagnóstico de que su presidencia está en franca precipitación hacia el abismo de la ineptitud y la irresponsabilidad.

Sergio A.López Rivera, abogado
(v.pág.5-A del periódico El Informador del 4 de mayo de 2005).


Muchas de las posiciones que las cámaras [legislativas] han asumido llevan el sello de los intereses partidistas del momento. Pero esto no debe sorprender, y tampoco es ilegal, porque el sistema de partidos mexicano lo permite y lo promueve.

Nomás que a veces a los institutos políticos se les ha pasado la mano. O mejor sea dicho: a sus dirigencias. Recuérdese que los partidos políticos todos tienen sus estructuras impregnadas por el autoritarismo, y han basado su cohesión en la disciplina de sus miembros. La disciplina más irracional incluso.

Muestras de lo anterior ha habido en abundancia, recientemente.

Vicente Bello en su columna "Tren Parlamentario"
(v.pág.10-A del periódico El Informador del 4 de mayo de 2005).


Debemos asumir sólo como pueblo espectador, que los líderes políticos mexicanos viven obnubilados por alcanzar posiciones y, simultáneamente, ajenos al entorno global, pródigo en amenazas que nos afectan en el corto y largo plazos. Ahora, hasta nuestra política exterior carece del prestigio por muchos años mantenido, al menos en apariencia y sin provocar expresiones negativas, propicias para el protagonismo.

El llamado a la cordura apenas se escucha sin la armónica concordia para eludir los obstáculos del entorno global. Las historias de soborno y corrupción se volvieron cotidianas por el sensacionalismo con un mismo fin: Impunidad. Los intereses mezclaron política con legislación y legalidad, dejando en tierra de nadie la justicia. La división de poderes como factor de equilibrio quedó sólo en dicho, así como la democracia como fórmula de autoridad moral.

Rotas las normas del equilibrio, sobresale la desorientación en un proceso anulador de los esfuerzos por el bienestar de la sociedad. El respeto a las instituciones está vulnerado por la ineficacia de la autoridad en el cumplimiento de sus promesas. La desconfianza cundió entre la población y no a un sector o partido, sino a cuanto represente responsabilidad y compromiso social.

Carlos Cortés Vázquez, consultor en comunicación
(v.pág.5-A del periódico El Informador del 3 de mayo de 2005).


Coincidimos en la animadversión al PRI, al PAN y al gobierno federal. Ya son demasiados años de incompetencia, corrupción y estulticia. Estoy seguro de que la mayoría de los mexicanos anhelamos un gobierno diestro y honesto. Es obvio que Andrés Manuel López Obrados ha sido muy astuto para canalizar a su favor todo lo anterior, haciendo creer a millones de mexicanos que representa una buena alternativa, aunque hay múltiples hechos que demuestran que no es así.

Luis Armando Bayardo
(v.pág.4 "correo" del periódico Público del 29 de abril de 2005).


Cuando los ciudadanos reaccionan más rápido y mejor que el poder, cuando se crea un abismo entre una clase política torpe y un pueblo cada vez más activo y vigilante, ha llegado el momento de cambiar la política; toda ella.

Pablo Gómez
(v.pág.23 del periódico Público del 29 de abril de 2005).


Veo con pesimismo lo que a México depara una clase política mayoritariamente mediocre, empeñada en convertir al país en chiquero.

A ojo y de calle: quienes menos respetan la "institucionalidad democrática" suelen ser los perredistas, como lo demostró su orgánico apoyo al paro cegeachero de once meses en la Universidad Nacional Autónoma de México y, más recientemente, con la manipulación a modo de los reglamentos en la Asamblea Legislativa del Distrito Federal.

Carlos Marín
(v.pág.26 del periódico Público del 29 de abril de 2004).


Desde ahora se advierte en la clase política mexicana una profunda disposición al desacuerdo y al enfrentamiento que evita la sustentación firme de una estrategia al exterior.

El capital político internacional de México, logrado durante décadas de accionar en la escena internacional con una postura diplomática apegada a los principios y sustentada sobre una gran unidad externa -a pesar incluso de épocas de grandes desacuerdos internos- está en riesgo de irse por la borda ante la insistencia de la clase política mexicana -gobierno y oposición- por llevar sus desacuerdos al punto del rompimiento.

Rogelio Ríos Herrán
(v.pág.11A del periódico Mural del 28 de abril de 2005).


¿Cuál es la visión de corto, mediano y largo plazo de los presuntos precandidatos? ¿En qué punto las ambiciones de corto plazo son sólo producto de una mentalidad egoísta, frívola, mezquina, que no trasciende más allá de la simple y vulgar búsqueda del poder, con la anticipada intención de servirse de los cargos públicos, para enriquecerse, en detrimento del interés de la sociedad? ¿Cuántos de quienes presumen que pueden y deben aspirar a buscar un cargo público relevante ven más allá de sus narices alcanzan a dimensionar el futuro en una visión global e integrada? ¿Dónde están y de quiénes son las ideas generosas, nobles, innovadoras, profundas, que escudriñan el horizonte con la certeza de que se puede construir un futuro que resuelva y subsane las profundas desigualdades que taladran nuestra muy miserable y mediocre democracia?

Si pretendieran ser observados como políticos racionales, inteligentes, serios y sensatos, los principales precandidatos, que aspiran a la postulación de sus respectivos partidos, tendrían que empezar a descorrer el velo de su personalidad para mostrarle a los ciudadanos su verdadero rostro y las motivaciones reales que les impelen a buscar la gubernatura.

Con una muy buena carretada de pesos, la televisión puede contruir una imagen favorable de los políticos, posicionarlos, convertirlos en un producto aparentemente atractivo, pero la verdadera validación social de quienes presuman que están bien preparados para gobernar, sólo se concreta por el camino de las ideas claras y concisas, de los proyectos inteligentes, de la coherencia y racionalidad enre lo que se pretende y lo que razonablemente se puede llevar a la práctica.

Varios no pasarán ni siquiera la más elemental prueba... y se comprobará que están huecos, vacíos...

Pedro Mellado
(v.pág.2B del periódico Mural del 28 de abril de 2005).


La presencia de Porfirio Muñoz Ledo [en la marcha del domingo en contra del desafuero] es uno de los indicadores de que López Obrador es quien tiene más posibilidades de sustituir a Fox. El Lic.Muñoz Ledo jamás da paso sin huarache y siempre busca la mejor sombra para cobijarse.

El país se encuentra estancado en sus procesos políticos mientras nuestros "líderes" se demandan los unos a los otros (por desacato, por usurpación de funciones, por uso de información privilegiada, por escupitajos, por abandono del trabajo, por la señal de la..., etc.). No entiendo por qué se pone en riesgo la estabilidad del país, por un supuesto delito que amerita una fianza de solamente dos mil pesos. No es tema Sr.Presidente.

Víctor Manuel González Romero, profesor investigador y ex rector general, U. de G.
(v.pág.4-A de El Informador del 27 de abril de 2005).


¡Ahora resulta que los ministros deben atender un asunto político, mientras los políticos juegan en los medios de comunicación a atender asuntos legales! ¿De qué se trata? De verdad, tenemos políticos de quinta.

Juventino Castro y Castro, ministro en retiro de la Suprema Corte
(v.suplemento larevista del periódico El Informador del 26 de abril de 2005).


Parece que el empresario Alfonso Romo se hartó de apoyar a políticos y ha decidido hacer, él mismo, política. Ha anunciado que invertirá en Convergencia ("naranja, naranja") para participar directamente en la próxima contienda presidencial, pues dice que ni el PRI, el PAN o el PRD le sirven a México.

(V.pág.6-A de El Informador del 25 de abril de 2005).


¿A dónde quiere llegar Andrés Manuel López Obrador? ¿A desacreditar nuestras estrucuturas nacionales nada más porque cometió un error y no supo jugar a la política?

Errores los han cometido y los cometen todos los políticos de todos los tiempos, Desde Francisco I. Madero que era espiritista hasta Gandhi cuya vida sexual no era precisamente la de un santo.

Enemigos los han tenido y los tienen todos los políticos de todos los países del mundo y por supuesto que sus adversarios siempre están viendo cómo perjudicarlos.

Por tanto, el problema no es ni El Encino ni el complot sino que este respetable gobernante no supo navegar en aguas profundas y pretende llevarnos a todos a mar abierto.

Si así de mal le va cuando ni siquiera es candidato, ¿cómo cree usted que le vaya si llega a la silla del presidente?

Estamos de acuerdo en que Vicente Fox y sus colaboradores no son unas hermanitas de la caridad y en que los integrantes del PRI tampoco son un club de beneficiencia.

Si estamos de acuerdo, ¿qué esperaba Andrés Manuel López Obrador que sucediera mientras se congraciaba con la ciudadanía y se choteaba como lo máximo de lo máximo en las encuestas de popularidad? ¿Que sus oponentes le aplaudieran y lo felicitaran?

Esto que le pasó, que le hicieron o que él mismo permitió que le pasara no es tan ingenuo como imaginar que la división que se está dando en nuestro país terminará con una triste marcha, con un discurso bien bonito o con unas palabras del presidente.

Regresando al tema de que Don Andrés Manuel quiere ir a la cárcel. Vamos a verlo desde una perspectiva política.

¿Sí le conviene al señor López Obrador? ¿Honestamente usted cree que eso le ayudaría a ganar las elecciones de 2006? Yo estoy convencido de que no.

Meterse a un reclusorio no tiene nada que ver con demostrarle al país que uno es capaz de tomar las riendas de la nación para que las condiciones generales de todas las personas y de todas las instituciones funcionen y mejoren durante seis años completos.

A estas alturas del partido, meterse a la cárcel tampoco es un acto melodramáticamente positivo.

Si AMLO quiere meterse tras las rejas es para quemar a nuestras instituciones y llamar la atención de instancias internacionales superiores, pero no para algo bueno, sino para que les retiren su apoyo o busquen la manera de castigarlas.

Sólo que, con la pena, si esas instancias le retiran el apoyo a nuestras autoridades o las castigan, de paso, nos van a retirar su apoyo y nos van a castigar a todos nosotros.

Y después a ver quién nos levanta porque es un hecho que cuando El Peje salga de prisión tampoco lo van a apoyar a él. Mucho menos lo van a premiar. Ni que fueran tontas. Primero se esperarían a que se restableciera el orden y eso no se consigue en un sexenio.

Alvaro Cueva
(v.pág.18 del periódico Público del 24 de abril de 2005).


La percepción de impunidad ha aumentado en el país. Si le agregamos los enfrentamientos y provocaciones políticas diarias, las batallas jurídicas y hasta físicas entre los actores políticos, más y más se permea un ambiente en el que se violan las reglas no escritas de cómo deben comportarse los políticos y la misma sociedad para asegurar la pacífica convivencia en una democracia.

Tal vez lo que no han entendido ni los políticos ni los futuros líderes de este país es que la violencia es altamente contagiosa y difícil de controlar. Desafortunadamente, hay una espiral de violencia en el país, en la que ésta se vuelve la salida fácil para "resolver" conflictos entre personas, grupos políticos y entre naciones.

Quisiera hacerle un llamado de atención a Monreal y al mismo López Obrador: No se vale jugar con la paz y la estabilidad del país. Reconocer públicamente el temor de que algo pueda suceder y que no se tiene un equipo de seguridad profesional para proteger eficientemente a López Obrador es un gravísimo error. ¿Qué esperan? ¡Protéjanlo! Si no quieren aceptar la seguridad que les pueda proporcionar el gobierno (que sería entendible) usen parte del dinero recabado para las marchas y mítines para contratar un equipo de seguridad profesional. Y si tienen información de posibles amenazas a López Obrador, denúncienlas inmediatamente. Si temen por la vida de su gallo, pidan asesoría a países amigos.

Entendiendo el impacto que podría tener un atentado en contra de cualquiera de los candidatos, por razones de seguridad nacional, debemos asegurar que se tomen todos los pasos necesarios para protegerlos. Si el PRD no actúa para proteger adecuadamente a López Obrador, podremos concluir que los perredistas están dispuestos a sacrificar a su candidato para buscar alguna ventaja política y llevarse el país entre las patas. No se vale. No está en juego la vida de un candidato, o la viabilidad de un proyecto político, lo que está en juego es el futuro del país. ¡Ya basta!

Ana María Salazar, académica del ITAM
(v.pág.4-A de El Informador del 23 de abril de 2005).


Los políticos están dejando a un lado la agenda fundamental de la nación, el problema económico, la pobreza, la democracia, concentrándose en asuntos que no deberían ser tan trascendentes.

Francisco Hernández Juárez, dirigente del Sindicato de Telefonistas de la República Mexicana
(v.pág.7-A de El Informador del 23 de abril de 2005).


Los políticos, en el afán de ganarse espacios en los medios de comunicación, realizan todo tipo de declaraciones sin pensar en el sustento que éstas puedan tener. Olvidan los argumenos técnicos y sociales o el nivel de posibilidades de la propuesta que ellos realizan; lo importante es ganarse a la opinión pública con consignas, no con argumentos.

Las consignas cambian conforme cambian los contextos. De esta manera cada semana podemos encontrar nuevas declaraciones que se ajustan al momento que se está viviendo. Lo importante es decir lo que la gente, por su estado de ánimo, quiere escuchar. Esto es más fácil que diseñar una propuesta y luego buscar los argumentos para su implementación.

Este tipo de políticos aumenta cada día. Algunos de ellos se convierten en víctimas y construyen su propio martirologio y se comparan con grandes luchadores sociales; en su mesianismo se sienten víctimas de una justicia selectiva y acusan a todos de estar en su contra. Otros encuentran en las declaraciones sin sustento la oportunidad de ganarse espacios mediáticos, después pedirán disculpas o modificarán su declaración.

Olvidan que cada día los ciudadanos observan y juzgan los hechos y declaraciones de los políticos. Los instrumentos de opinión pública expresan lo que la gente piensa de ellos. Por eso algunos de ellos que creen que con sus ocurrencias pueden engañar fácilmente a los ciudadanos reciben, como balde de agua fría, los resultados de las encuestas que les dicen que equivocaron el camino.

La política de ocurrencia tiene como meta generar debates ficticios. La acción política se sustenta en la acusación sin prueba y se deshace de su dicho cuando no encuentra otra salida.

Ismael Orozco Loreto
(v.pág.9 del periódico Público del 22 de abril de 2005).


Cuando se trata de organismos públicos, los accionistas sólo tenemos voto en las elecciones, y a regañadientes nos quedamos solamente con voz, porque nuestro voto lo hemos delegado a los diputados y gobernantes que supuestamente todos elegimos para representarnos y cuidar nuestros intereses como mexicanos.

Digo supuestamente, porque muchos de los puestos de poder en los que reside la aprobación de leyes que nos afectan a todos están en manos de personas que nadie eligió.

Por ejemplo: ¿quién eligió al boxeador Kahwagi que salió en Big Brother o al "Niño Verde" para diputado y senador de la república, respectivamente? No obstante, ahí están estos personajes, votando y promoviendo reformas para beneficio de quién sabe quién.

Ricardo Elías, arquitecto y empresario
(v.pág.8A del periódico Mural del 21 de abril de 2005).


Si no puedo obligar al Congreso a que saque las reformas mecesarias para combatir con efectividad a la pobreza, al menos le podría pedir que no nos recuerde la animalidad que traemos adentro. Esas expresiones corporales de invasión, bloqueo, empujones, mentadas, golpes y escupitajos son las que ponen en peligro a nuestra democracia.

Enrique Canales
(v.pág.9A del periódico Mural del 21 de abril de 2005).


Los ciudadanos no podemos simplemente atestiguar ¡o propiciar! que se incendie nuestra única casa. Partidos contra partidos, precandidatos contra precandidatos, grupos contra grupos, familias, parejas; todos metidos a la alegre tarea de transformar en cenizas lo que con tanto esfuerzo y pasión (tan arduamente) edificamos. No seamos idiotas. Reaccionemos.

Cumplido un ciclo calendárico, nuestros antepasados destruían todo. ¿Seguiremos en las mismas? Conmigo no cuenten. A mí y a ese creciente y vigoroso México progresista lo que nos gusta es construir, inventar, proponer, salvar, rescatar, imaginar caminos nuevos y provocar futuros.

Germán Dehesa
(v.periódico a.m. del 21 de abril de 2005).


Los hechos son varios y también graves por venir de quien viene: de la autoridad máxima en el gobierno de la capital de la república que gobierna a más de 14 millones de habitantes donde todo parece que ha hecho una primera etapa de una obra civil que beneficia a la clase media y alta; un plan de seguridad que no ha mejorado si se compara con el pasado; el abandono de las estaciones y el sistema del metro (que transporta diario a más de cuatro millones de habitantes) para dejarlo decaer, cuando se supone que debería de haber sido al revés. Y todo esto tras una diarrea oral de este hombre envuelto en una capa mesiánica que se declara "indestructible" y que, en lugar de enfrentar los hechos reales y objetivos, se la pasa acusando -con un grave síntoma de paranoia-, al resto del mundo y a todos los poderes que lo acompañan para convertirse en víctima y aprovechar el sentimiento de culpa con el que la gente se podría identificar con él.

Martín Casillas de Alba
(v.pág.5-A del periódico El Informador del 19 de abril de 2005).


Que escupa un diputado porque se le acaban los argumentos (o no le funcionan los empellones) es patético. Y doloroso si pensamos que les pagamos un sueldazo para que terminen comportándose como borrachines necios en pulquería de quinta.

Toñimáximus
(v.pág.2 del periódico Público del 17 de abril de 2005).


Al desencanto, el desánimo y la apatía que ha venido acumulando el pueblo en los últimos años, todavía hay que sumar el desaliento y la indignación que genera el mal comportamiento de los diputados.

No hay nada en estos momentos, entre los legisladores y la clase política nacional, que abra un espacio para la esperanza; nada que aliente y lleve a pensar que estamos en el camino de ser un mejor país en todos los sentidos, en todos los ámbitos.

Las demandas y necesidades más sentidas de los mexicanos siguen incrementándose y no hay respuestas.

Quien primero ponga un alto con hechos y acciones, a favor de los mexicanos, lleva todas las de ganar, sin necesidad de recurrir a la manipulación, a asumir una posición de víctima o a perder la razón, llegando a enfrentamientos.

Editorial
(v.pág.4-A del periódico El Informador del 16 de abril de 2005).


Una manifestación del Partido de la Revolución Democrática dentro del salón de plenos de la Cámara de Diputados, ocasionó ayer jueves el enfrentamiento entre diputados perredistas y del Partido Acción Nacional, quienes se jalonearon, empujaron y en donde el legislador panista Francisco Isaías Lemus Muñoz Ledo le escupió a la cara al presidente de la Sección Instructora, el perredista Horacio Duarte.

(V.periódico El Informador del 15 de abril de 2005).


En San Lázaro los ilustres, decentes y finos legisladores del PAN ya perdieron su manual azul de educación política y se lanzan a salivazos contra diputados del PRD.

Marcela Gómez Zalce
(v.pág.20 del periódico Público del 15 de abril de 2005).


Lo que se vio en la Cámara de Diputados ayer, ese jaloneo infantil entre perredistas y panistas que ha sido exaltado por los medios de comunicación que hablan a gritos de una multiplicación de las crispaciones, es casi vergonzoso. En cualquier cantina decente no sólo los hubieran desaforado sino que les habrían pegado una verdadera y merecida chinga.

Jairo Calixto Albarrán
(v.pág.31 del periódico Público del 15 de abril de 2005).


La reforma electoral tiende a minimizarse una vez que entra al rejuego entre los partidos políticos. El bajo perfil que toman esas reformas es producto de acuerdos entre las cúpulas partidarias, que no quieren dejar sus negociaciones por cuotas de poder del mayor número posible de espacios públicos.

Jaime Preciado Coronado
(v.pág.22 del periódico Público del 15 de abril de 2005).


El ciudadano ha dejado de ser el protagonista de las elecciones, se ha apartado del ámbito democrático y ha permitido que los políticos se adueñen del escenario, asegura José Zarco Quintero, vocero de Sociedad en Movimiento en Colima.

(V.pág.II de la sección "Colima" del periódico Público del 15 de abril de 2005).


Es necesaria, y urgente, la incorporación a nuestra vida nacional de figuras tales como el plebiscito, el referéndum, la consulta popular. Sucede que las grandes cuestiones del país se están resolviendo por medio de acuerdos de camarilla entre el gobierno y los caporales de los partidos políticos. Estos otorgan su voto o lo "desniegan" -como se dice sabrosamente en el potrero- sin mirar algunas veces al verdadero bien de la república, sino según la propia conveniencia, con vistas al futuro electoral o para obtener ventajas partidistas. Así, la opinión de los ciudadanos y el bien común naufragan en ese mar de politiquería. Sin anular la idea de la representación, sino antes bien para fortalecerla, deben admitirse esas formas de consulta a los ciudadanos que en otros países más democráticos que el nuestro son práctica común...

Armando Fuentes Aguirre "Catón"
(v.periódico a.m. del 14 de abril de 2005).


La mayoría de los votantes están desinformados pero saben que su voto vale. Estamos ante un electorado más existencial que ideológico, proclive a ser impresionado antes que convencido, que no entrega el voto sino que lo presta y puede oscilar entre candidatos contradictorios por los méritos del caudillismo, la telegenia o la mitología popular.

Juan Villoro
(v.pág.9A del periódico Mural del 14 de abril de 2005.)


[El empresario] Alfonso Romo ha enviado el mensaje [de] que ninguno de los tres precandidatos más visibles [a la Presidencia] cuenta con la simparía de los empresarios de Monterrey. Y ha ido más allá: asegura hablar en nombre de muchos de ellos.

Afirma que el objetivo en una primera fase es reunir algo así como 100 millones de dólares para buscar una cuarta vía que abandere a un candidato presidencial.

Un punto relevante de los análisis políticos que se presentan a los empresarios es la amenaza de transitar a una "narcodemocracia".

Darío Celis Estrada
(v.pág.2A de la sección "Negocios" del periódico Mural del 14 de abril de 2005.)


El senador Demetrio Sodi insiste en que "la ciudadanía se ha divorciado de la política nacional, no sólo en lo que se refiere a elecciones", pero lo cierto es que quienes realmente se han divorciado de la democracia no son los ciudadanos en general, sino los políticos que él mismo llama "electoreros", es decir, diputados, senadores y funcionarios interesados únicamente en el poder por el poder.

Lo que realmente está desacreditado en nuestro país no es el compromiso democrático de la gente, sino el de los legisladores, partidos políticos y gobernantes, para quienes la democracia no es más que un elemento del discurso que les permite conquistar o mantener el poder público.

Es comprensible la opinión expresada por el senador perredista, en momentos en que él quisiera ver una decidida acción popular en contra del reciente desafuero de su correligionario Andrés Manuel López Obrador. A esto llamaría él una auténtica cultura democrática, pero tampoco puede esperarse una protesta generalizada contra el desafuero, cuando ni él mismo negaría que el funcionario en cuestión violó la Ley de Amparo, una de las bases jurídicas más apreciadas por la población.

A juzgar por los hechos, queda claro que mientras la cultura democrática del pueblo de México ha crecido en los últimos años, la de políticos y funcionarios revela un franco descenso.

Editorial
(v.pág.4-A del periódico El Informador del 13 de abril de 2005).


López Obrador se compara con Luther King y con Gandhi, cuando la comparación que más se acomoda a su caso es con el presidente de Venezuela. La ambición de poder de Hugo Chávez ha podido más que su proyecto de nación. Para mantener la presidencia de su país, Chávez ha polarizado a los venezolanos usando el discurso de clases. Los mensajes de Luther King y Gandhi eran de unidad nacional en torno a una causa, el mensaje de López Obrador es de división.

Genaro Lozano
(v.pág.4-A del periódico El Informador del 13 de abril de 2005).


Sin profundizar en la procedencia del desafuero y sus consecuencias, está la torpeza y la incapacidad de sus detractores de este polémico que lo han hecho mártir y héroe cuando lo más que se le puede "elogiar" es su astucia, populismo y actitud demagógica. Como aspirante a la presidencia del país no ha planteado un proyecto claro e incluyente que contenga su pensamiento político y su visión del país y desde sus inicios como político su actitud, como lamentablemente la del PRD en lo general, ha sido de agitación, posiciones demagógicas y desprecio por las instituciones, como lo atestiguan su récord como incendiario de pozos petroleros en Tabasco y las fatigantes marchas en el D.F., durante los sexenios de Salinas y Zedillo (curiosamente terminadas en cuanto subió al gobierno de la ciudad). Su única obra pública, el controvertido segundo piso, según expertos no resistirá el primer sismo fuerte, obra faraónica que no resuelve los problemas de movilidad urbana, pero recordemos que en las más truculentas dictaduras las obras espectaculares despiertan gran simpatía siempre.

Por otra parte para aspirar a ser presidente, es necesario parecerlo y tener estatura de estadista y visión de los problemas fundamentales del país. En este sentido la personalidad de AMLO deja mucho que desear y sus actitudes populistas y de paternalismo ya superados se antojan antediluvianos. Recordemos que Hitler llegó por vía democrática al poder en Alemania para luego acabar con ese sistema e imponer una feroz dictadura.

No sería el primer ejemplo en la historia de un político que engañara a muchos con actitudes de víctima, a lo cual se han prestado admirablemente sus detractores, para después y una vez hecho con el poder, a los primeros que rechace serían precisamente aquellos que más lo defendieron y apoyaron durante sus tribulaciones.

Es por ello que más allá de la simpatía que despierta quien se dice perseguido, los ciudadanos como seres pensantes analicen el porqué se rodeó de gente tan corrupta, pues sabiéndolo o ignorándolo tiene una gran responsabilidad en ello y cuál es en realidad, si es que lo tiene, el proyecto incluyente y propositivo de país que todos los mexicanos esperamos de quien aspira a gobernarnos durante seis años, pero que pretendiendo incendiar al país no lo logrará ciertamente.

Sergio A.López Rivera, abogado
(v.pág.5-A del periódico El Informador del 13 de abril de 2005).


La visión de México que se tiene en los tiempos que corren, resulta, sencillamente: desolador[a]. Y, el páramo resultante es extenso, porque tanto entre tiros (sic) como entre troyanos, no parece haber cabeza con seso... y los actuales acontecimientos políticos son cada vez mayores deshaceres, ya de la vida económica, ya de la social, ya de la democrática... tal pareciera que no existe derrotero alguno entre quienes dirigen el país, -si es que alguno- o que el derrotero seleccionado es una loca ruleta donde el norte se pierde, la orientación no se encuentra y en ese errático mar, sólo algunos -pocos- tienen, todavía, pingües ganancias; beneficios de un río revuelto a punto de extinción...

Los políticos... insertos en partidos, en puestos, en gabinetes, o en la banca, pero todos ahogados en el juego mediático: hacer para el reflector y hablar para y con los medios, dejando al ciudadano como el único espectador, sitio de pasividad donde todo pasa, en esta sui generis democracia, al margen, precisamente, del ciudadano...

Y está la función de los integrantes del gabinete... ésos elegidos por "head hunters" puestos de moda y pagados en dólares con dineros de una población que hoy tiene serias dificultades para lograr un ingreso que le permita subsistir… funcionarios que tienen un incumplido compromiso para con la población, pero que ya están en la carrera de galgos por lograr el "premio mayor"... galgos, sí... porque esta vez, las estaturas, a fuerza de mediocridades, también se han reducido y no llegan ni a flaca, muy flaca caballada... carrera de galgos, de todos contra todos por un hueso, por un puesto...

Y entre toda esta batahola, la ciudadanía tratando de sobrevivir; tratando de salir adelante entre ineficiencias, olvidos, golpes y la cotidiana inseguridad... y en este continuado martes de carnaval en que se ha vuelto el sexenio, mar de máscaras y muecas, la población que trata de salvar la vida entre los fustes que le da la actual economía dirigida, el creciente desempleo, los dehaceres de los políticos y los lances que le inflinge la inseguridad desembocada...

Lourdes Bueno, investigadora de la Universidad de Guadalajara
(v.pág.5-A de El Informador del 13 de abril de 2005).


Las obras públicas por hacer constituyen una serie de requerimientos sociales que, debidamente jerarquizados, deben irse resolviendo en la medida de lo posible y sin importar quién gobierne en ese momento. Qué ingenuidad, se dirá. Pero así debería ser. Las obras públicas pendientes deberían ser una lista que la población tuviera en su poder para con ella exigir a los gobernantes en turno su atención. Esta es la famosa "voluntad política" que necesitaríamos tener en el campo de la obra pública.

Juan Palomar Verea
(v.pág.13-B de El Informador del 13 de abril de 2005).


El control excesivo de los partidos políticos ha minado y disminuido la confianza en sus bases -mostrada en las elecciones- con peligrosa proclividad a la anarquía, ésta hasta ahora sofocada con prebendas cada vez menos disimuladas y sí ampliamente divulgadas por los medios de comunicación por su inocultable cuantía y falta de justificación ante una sociedad donde prevalece la desigualdad. La perniciosa costumbre da ventajas del partido en el poder con paralelo desgaste en la opinión pública.

Abundan los reproches a las autoridades: unos son evidentes de abuso de poder y otros ocultos en la ineficacia para el cumplimiento de promesas a la población. La precipitación de los procesos preelectorales, abiertos o disimulados, fracturó el débil andamiaje de respeto a los candidatos cada vez menos apegados a las normas y formas, confrontaciones que al trasladarse a las bases adquieren expresiones de violencia peligrosa y, por lo mismo, inadmisible.

La institucionalidad, que sus detractores calificaron cortesana y hasta dictatorial, ahora con el empleo de libertad excesiva ha erradicado consideraciones a la investidura. La población lo reciente y reclama legítimo aprecio a valores de dignidad y respeto, conducentes al auténtico estado de derecho.

Sobrepasar los linderos de la legalidad y el respeto a las instituciones, conduce a la anarquía e inestabilidad que abren espacios a la ruptura, el orden, propiciando el desenfreno de ambiciones contrarias a la concertación de fórmulas armónicas de seguridad.

Abundan los enfrentamientos y faltan los planteamientos serios, de fondo, que son tarea y sustento de los partidos políticos para vencer con la razón del proyecto de la nación que intentamos consolidar. La descomposición política no debe rebasar los linderos de la legalidad y el poder político tampoco atentar contra las libertades. El delicado equilibrio entre justicia y legalidad no encuentra el escenario de la concertación y está llegando a niveles de inquietud que rompe con todo propósito de sana y productiva vida en sociedad.

Carlos Cortés Vázquez, consultor en comunicación
(v.pág.5-A del periódico El Informador del 12 de abril de 2005).


El orgullo es uno de los peores enemigos del hombre y por lo tanto de los políticos, sobre todo cuando están encumbrados en el poder y son incapaces de aceptar sus errores, como si el hacerlo fuese una barbaridad y el fin de su carrera.

Martín Casillas de Alba
(v.pág.5-A del periódico El Informador del 12 de abril de 2005).


Andrés Manuel López Obrador, Roberto Madrazo y Santiago Creel quieren ocupar la silla presidencial. No sólo asumen estos tres políticos que van a ser los candidatos de sus partidos, sino que desde hace más de dos años empezaron sus campañas, desde la jefatura del Gobierno capitalino, las oficinas del PRI y desde la Secretaría de Gobernación respectivamente. Y estos tres individuos han usado su poder político, sus partidos, su plataforma ante los medios de comunicación y su acceso a recursos públicos, no para mejorar la calidad de vida de los mexicanos, sino para promover sus ambiciones políticas.

Si algo hemos aprendido de todo este proceso es lo siguiente: López, Madrazo y Creel y sus respectivos partidos, además de la Presidencia, están dispuestos a llevarse al país entre las patas si es necesario por obtener sus objetivos de ser el próximo rey del palenque. Pero a como van las cosas, el gallo ganador llegará a la Presidencia ensangrentado y picoteado, con poca capacidad para gobernar el "palenque México" abandonado, y cayéndose a pedazos.

Y aunque la metáfora parezca un poco exagerada, yo creo que nos tenemos que preguntar hasta qué extremos llegarán estos "gallos". Veamos lo que han hecho hasta el momento sin ni siquiera ser los candidatos oficiales de sus partidos. ¿Qué estarán dispuestos a realizar estos tres una vez que estén en la antesala de la residencia de Los Pinos? Imagínense, queridos lectores, cómo se comportarán López Obrador, Madrazo y Creel cuando la noche del 6 de julio de 2006 el IFE comunique que la diferencia entre el ganador de la contienda presidencial y el perdedor es, digamos, de apenas 2% del voto. ¿Estarían esos tres políticos dispuestos a aceptar la decisión de las urnas y a permitir una transición de poder pacífica y democrática?

Ante lo que hemos visto hasta la fecha no debería de sorprender a nadie que cualquiera de los tres presidenciables estuviese dispuesto a llevar al país a una guerra civil, si fuera necesario, por asegurar la silla presidencial.

El problema fundamental de los tres precandidatos es que ya nos demostraron que les falta una virtud fundamental para ser presidente: México necesita como gobernantes líderes que estén dispuestos a sacrificar sus ambiciones personales y a trabajar por el bien del país, no por el bien de ellos o de sus partidarios políticos.

Si cualquiera de estos tres resulta electo presidente llegará al poder con una profunda falta de credibilidad: si resulta electo López Obrador, será un presidente que intimidó a la sociedad con sus amenazas de violencia y se identificará como un gobernante que no está dispuesto a someterse al estado de derecho y a hacerse pasar como mártir. Y si fuera electo Madrazo o Creel, cualquiera de los dos ganaría no porque fue el mejor candidato, sino porque estuvo dispuesto a usar trampas legales y a abusar del estado de derecho para llegar al poder.

Estos tres deberían sufrir los costos políticos de su actuación y de su negligencia. Y la única forma en la que la sociedad civil puede enviar un mensaje de castigo es decir, de una forma contundente que no votará por ninguno de las tres peligrosas opciones que tenemos los mexicanos hoy.

Hay que fomentar en las encuestas y en la opinión pública y favorecer a cualquier otro candidato que no sea ni López Obrador, ni Madrazo ni Creel. Hay tiempo todavía para que los partidos políticos elijan a otros candidatos que no sea uno de los mencionados.

Hay que "desaforar" a Andrés Manuel López Obrador, a Roberto Madrazo y a Santiago Creel y buscar elegir a un candidato que demuestre que su prioridad es México, y no sus ambiciones personales.

Ana María Salazar, académica del ITAM
(v.pág.4-A de El Informador del 9 de abril de 2005).


En el futuro, el abstencionismo podría constituirse en una manifestación de inconformidad por las decisiones políticas.

Eduardo Huchim May, consejero electoral
(v.la pág.7-A de El Informador del 9 de abril de 2005).


Hasta ahora el desafuero no ha tenido la repercusión pública que esperaba López Obrador. En el Zócalo, no estuvieron ni el millón ni las cien mil personas de las que se hablaba: la plaza estaba cruzada por amplias avenidas y un escenario que ocupaban buena parte de la explanada. Lamentablemente, un alto porcentaje de los que allí estaban eran trabajadores del gobierno del DF que fueron lisa y llanamente acarreados desde sus centros de trabajo en una multitud de camiones. Otros habían sido convocados a las siete de la mañana en las zonas adyacentes, donde se les pasaba lista para justificar su asistencia, si no, no cobrarían el salario de ese día. No fue un acto diferente al de muchas campañas del pasado.

Creo que López Obrador buscó afanosamente este desenlace, buscando, paradójicamente sacar, él también, partido del mismo. Lo que me parece más terrible es que en esa lógica, el jefe de gobierno esté apostando a desacreditar todas las instituciones del país, mientras éstas no parecen saber defenderse con la reciedumbre que deberían. Ayer López Obrador perdió, dentro y fuera de San Lázaro, pero no creo que alguien haya salido ganando.

Jorge Fernández Menéndez
(México Confidencial, 8 de abril de 2005).


En Jalisco tenemos un político que hace uso de estrategias mediáticas, su consultor venezolano que lo orientó durante su campaña y lo llevó a ganar puntos en las encuestas lo que al final de dio el triunfo en la elección, lo ha metido en una serie de acciones con la intención de aumentar su presencia en los medios: disfraces, carreras callejeras, demoliciones, declaraciones espectaculares, rectificaciones, son ejemplos de lo que suele realizar el alcalde de Guadalajara con el único objetivo de mantenerse en los medios de comunicación, su estrategia aparentemente le está dando resultado, pero cada día aumentan los que consideran que la prudencia no es una característica del gobernante de Guadalajara.

Un valor esencial en la política es la credibilidad y las ocurrencias en los funcionarios no son una buena señal para los ciudadanos. La gente quiere propuestas que mejoren el entorno en el que viven, no estrategias publicitarias para aumentar puntos en las encuestas, éstas no mejoran la calidad de vida de las ciudades.

Ismael Orozco Loreto
(v.pág.17 del periódico Público del 8 de abril de 2005).


El problema radica en la habilidad de un señor [López Obrador] al manipular la ingnorancia de un pueblo ávido de caudillos, que igual le cree que él no sabía nada de lo que sus operadores político y financiero (Bejarano y Ponce) hacían con el dinero de la gente, así como hacerle creer que un acto de justicia es darles 680 pesos mensuales a los viejitos (que sí votan) y no a los niños de la calle o a los enfermos sin recursos (que no votan).

López Obrado ha logrado que el Gobierno del Distrito Federal, que tomó con una deuda de 17,000 millones de pesos, la lleve en cuatro años a 45,000 millones de pesos. Esa deuda tiene que ver en gran parte con tres cosas: dinero a viejitos (lo necesiten o no), segundos pisos del periférico y difusión en medios. Esa deuda está respaldada por las reservas del gobierno federal.

(Anónimo circulando en la internet).


Mostró enojo Andrés Manuel López Obrador por el hecho de que los medios de comunicación se ocuparan de la muerte del Papa en vez de concentrarse en informar sobre el asunto de su desafuero. Algún observador estricto diría que esa actitud demuestra soberana estupidez. Yo, que no soy censor severo ni creo mucho en las soberanías, me limito a señalar que la irritación del jefe de gobierno da la medida de su personalidad. En efecto, López Obrador tiende a la magalomanía: es rayo de esperanza, indestructible. No debe extrañar entonces que se considere figura de igual relieve que Juan Pablo, y que se moleste porque los comunicadores y la gente hayan apartado la atención de su persona.

Armando Fuentes Aguirre "Catón"
(v.pág.11A del periódico Mural del 7 de abril de 2005).


Sr. Andrés Manuel López Obrador:

Su oportuna admonición, en el sentido de que es aberrante que la prensa mexicana dedique tanta atención y obsequie tanto espacio a cosas que suceden en Roma [la agonía y la muerte de Juan Pablo II], en detrimento de la que deberían dedicar a otras que suceden aquí, y que sí son importantes para la vida de la nación, debe servirnos para que aprendamos a reconocer a los verdaderos protagonistas de la noticia; a distinguirlos de los impostores; a diferenciar la paja del grano; a separar los temas trascendentes de los irrelevantes.

Si alguna duda quedaba con respecto a sus ínfulas, a su megalomanía, a su protagonismo, a su estatura moral, en fin, ya con esto quedan despejadas todas las incógnitas.

Jaime García Elías, columnista y conductor radiofónico
(v.pág.5-A de El Informador del 6 de abril de 2005).


Parece que hacerse víctima [López Obrador], forma parte de una estrategia para hacer el caldo gordo y ganar así una exposición nacional negando, con esa actitud, la corrupción bestial de Bejarano, el juego de Ponce en las mesas con millones de dólares en Las Vegas y al recadero de Carlos Imaz que confiesa haber sido víctima del engaño.

La estrategia del complot ha confundido a la gente que no logra discernir entre la causa y el efecto, ni pueden separar lo que sería un juicio defendible en los tribunales, con la posibilidad de ser candidato y entre estas confusiones vendrá seguramente el caos que, como el mar, habrá que soportar pero que, a la hora de ir a las urnas, se tomará en cuenta sin duda alguna.

Martín Casillas de Alba
(v.pág.5-A de El Informador del 5 de abril de 2005).


El sábado 2, antes de que se produjera el fallecimiento del Papa, el político tabasqueño mostró uno de sus rasgos más lamentables, cargado de mezquindad. Ante los periodistas que le escuchan y casi le festejan todos los días cualquiera de sus expresiones, explotó en su miseria y su ansia de notoriedad: "Fueron horas y horas de comentarios y reportajes sobre el Papa... claro que hay que dar la información, pero repetían y repetían y repetían y no dejaron en el momento en el que estaba la (Sección) Instructora resolviendo, pues un pequeño espacio. Nada más: perdió López Obrador 3 a 1, como si fuese fútbol...".

Por encima de cualquier cosa, López debió lamentarse de que justo el día en que pretendía tener a todo México en vilo para conocer su suerte, el Papa le hubiese robado cámara con su agonía. Este sí que es un pobre político.

Víctor E. Wario Romo
(v.pág.4-A de El Informador del 4 de abril de 2005).


Nuestros sufridos políticos, en lugar de procurar el bien de sus gobernados, se la pasan peleando por la sucesión presidencial o viendo la forma de cómo hacerse allegar más dinero por bonos disfrazados y partidas secretas.

Luis Manuel Ramírez Ortiz
(v.pág.4 "correo" del periódico Público del 3 de abril de 2005).


¿Qué se hace con el deterioro inocultable de la clase política, tan pintorescamente representada por el perredista Alfredo Hernández Raygosa que, ante el error a propósito del desafuero cometido por su fracción en la Asamblea Legislativa del DF, se jacta de sus habilidades: "Ya corregimos una estupidez que cometimos. Si cometimos una pendejada hay que aceptarla, pero eso sí, seremos pendejos pero no traidores" (La Jornada, 31 de marzo de 2005)?

Eso es verdad, incluso si alguien, por avieso, alega que la pendejez en personas a quienes se elige y se paga por ser lúcidos, es una forma no muy cometida de traición. ¿O no cobran por ser inteligentes?

Carlos Monsiváis
(v.pág.12 del periódico Público del 3 de abril de 2005).


El señor que cobra como presidente municipal del Distrito Federal, que no sé como llegó al cargo si vivía en Tabasco, tiene como rehén al país amenazándole un día sí y otro también si le estorban en su patético berrinche de querer ser presidente. La telenovela ya la vimos. Hace seis años otro inmaduro y berrinchudo hizo lo mismo, aunque por razones de su origen (medio) burgués amenazaba con acabar, según decía, con "víboras prietas, chinches, sapos, renacuajos, turicatas, chicatanas", y sabe que tantos bichos que en su medio rural existen, lo cierto sin embargo es que de las palabras no pasó.

López Obrador lloriquea y amenaza todos los días con el trillado y enfadoso desafuero, aunque sabe bien que tal medida jurídicamente no significa nada, ya que el quitarle el fuero es sólo para que pueda ser juzgado; no que ya se le haya condenado ni que se le considere culpable desde ahora. Lo peor del caso es que su partido, que es el que domina la Asamblea Legislativa en la capital, en lugar de exigirle que se ponga a trabajar por la ciudad, pues para eso se le paga (no para que ande en campaña desde hace tres años, incluso con fondos públicos); lo cierto es que le sirve de tapadera de todos sus desmanes.

¿Alguien con materia gris puede creer en la honradez del gobierno capitalino, sobre todo luego de ver en los videos a René Bejarano metiéndose dinero hasta por la solapa, a Imaz en idéntica faena, y a su tesorero Ponce (que en las Vegas dio cátedra de buen jugador)? ¿Cómo creer en un hombre que le paga a su chofer mensualmente más de lo que vale su carro, claro, con los recursos del pueblo? Lo dicho, la cabra tira al monte, y un anarquista siempre tendrá inclinaciones propias de su carácter malformado y violento. Si le agregamos dinero al asunto el cóctel resulta explosivo. Esperemos entonces que el pueblo mexicano no caiga de nuevo en el juego de este redentor pueblerino, cuya inteligencia y visión de estadista, es tan profunda como cualquier chapoteadero infantil.

Manuel Hernández Gómez
(v.pág.4-A de El Informador del 2 de abril de 2005).


El empresario regiomontano Alfonso Romo Garza aseguró que en su intento por evitar que Andrés Manuel López Obrador sea candidato presidencial, tanto el PRI como el PAN "están lesionando el auténtico significado del autogobierno y de la libertad de elección".

También habló del PRD, del que dijo que "exhibe al jefe de gobierno como víctima de una persecución política y de paso convierte el más serio acto democrático -la elección presidencial-, en un melodrama barato".

Insistió: "los líderes del PRI, PAN y PRD deben decidir enfrentar las consecuencias de la presunta infracción de Andrés Manuel López Obrador en un momento más propicio, menos impropio".

Añadió: "Estamos haciendo un circo de nuestra elección presidencial: debates ociosos y peleas callejeras; intrigas palaciegas y manipulación populista; bravuconadas de mediocres y fabricación gratuita de mártires".

(V.pág.21 del periódico Público del 1o.de abril de 2005).


La estrategia de López Obrador de aferrarse al tema del desafuero y llevar el discurso a su máxima expresión, incluyendo la tesis del golpe de estado, políticamente fue la correcta. Lo difícil para López Obrador era quedarse en el discurso de su obra de gobierno; explicar porqué no se reducía la inseguridad; porqué aumentaba la deuda del gobierno local; porque pese a toda la publicidad, el crecimiento real del DF apenas fue del 3.9%, y se ubicó en el lugar 17 nacional, contra tasas de crecimiento de casi el 9% en Quintana Roo, y participaciones muy superiores en Baja California, Querétaro, Estado de México, Zacatecas, Nuevo León o Michoacán, entre otros estados. Es un instrumento mucho mejor hacer girar la política en torno al desafuero que explicar porqué no se abre el GDF a la transparencia y la información pública. O qué pasó realmente con la investigación del caso Ponce Meléndez, de dónde salían sus recursos, los de Bejarano, qué tanto permeó la corrupción generada por estos influyentes funcionarios. O incluso explicar porqué los servicios de energía eléctrica o de agua potable son cada día peores. O porqué se han deteriorado de tal forma los servicios de salud locales. El desafuero evitó hablar de todo ello y ubicar cualquier crítica a la gestión gubernamental del DF en el esquema del complot. Y los adversarios del jefe de gobierno, en su mayoría, terminaron participando de ese juego.

¿Habrá hoy desafuero? Por lo menos parecía probable que existiera un dictamen que lo propusiera al pleno de la cámara de diputados. Ojalá no se vote en ese sentido, que se acabe con esta coartada política que le ha servido a López Obrador para instrumentar una campaña política adelantada, en la que cualquier rendición de cuentas sobre su actual gestión de gobierno ha quedado cancelada. La estrategia de López Obrador de cara al 2006 no cambiará: seguirá en el camino de la polarización porque así puede prosperar su candidatura en esos comicios, colocando al electorado en la posición de votar a su favor o en su contra, sin mayores alternativas y sustentado sólo en un discurso que, hablando de un "nuevo proyecto de nación", en realidad, no ha mostrado más que generalidades que, en la medida en que la victimización se mantenga, no tendrá porqué abandonar. Está gastando en su campaña antidesafuero más de un millón de pesos diarios en spots de televisión y nunca ha explicado de dónde proviene ese dinero. Dejando atrás el desafuero, podría exigírsele, como a todos los demás, rendición de cuentas y, de cara al 2006, propuestas que vayan más allá de su supuesta persecución.

Jorge Fernández Menéndez
(México Confidencial, 1o.de abril de 2005).


Los políticos nos siguen manipulando, utilizando y engañando con obviedad y cinismo. Y nosotros aceptamos todo, sumisos, pensando con el hígado.

Llevamos más de un año, más de un año, pendientes de un pleito de un gobernador que no es el nuestro (Sr.López).

¿Qué sabe usted del pleito de otro gobernador (Estrada Cajigal)?

Que se les aplique la ley y qué nos importa. Allá ellos.

Pero no. El mexicano es, aparte de analfabeto político, crédulo y aborregado.

Nemesio Maisterra
(v.pág.8A del periódico Mural del 31 de marzo de 2005).


El asunto del desafuero se ha convertido en el tema más importante para la opinión pública. Nace de un uso desproporcionado de "la legalidad" por parte del Ejecutivo y que, astutamente, Andrés Manuel López Obrador lo convierte en bandera de campaña. El PRD promete movilizaciones y advierte (amenaza) que puede haber inestabilidad social ("yo no respondo chipote con sangre"). El PRI se sacó la lotería ya que tiene el poder para decidir y negociar. El PAN se encuentra "apanicado" del monstruo que crearon ("¡Ay Güey! ¿Qué hicimos?"). Los seguidores de AMLO aprovecharán el foro para mostrar fuerza, amedrentar a sus detractores políticos (fuera y dentro del PRD) y seguir con la mega campaña gratuita para la sucesión presidencial.

Víctor Manuel González Romero, profesor investigador y ex rector general, U. de G.
(v.pág.4-A de El Informador del 30 de marzo de 2005).


El gran reto que significa transformar al México de hoy no puede enfrentarse con gente improvisada, con ambiciosos vulgares, con funcionarios mediocres y ladrones.

Andrés Manuel López Obrador, jefe de Gobierno del D.F.
(v.pág.4-A del periódico El Informador del 28 de marzo de 2005).


Asuntos públicos que gozan ahora de la atención pública son ejemplos de la poca sensibilidad de políticos y gobernantes a los detalles. Quizá esa poca atención, además de propiciar fracasos, también abona a la cada vez menor credibilidad y legitimidad de los políticos y la política entre nosotros.

El voto de los mexicanos residentes en el extranjero fue motivo de una larga discusión entre los diputados, quienes al final, aprobaron reformas al código correpondiente para hacer posible tal voto. No repararon en los detalles. Se les hizo fácil no ponerle dinero suficiente. Todos sabemos que el costo de las elecciones por voto emitido en México es uno de los más caros entre las democracias emergentes y no ponerle presupuesto adecuado a una decisión que implica incrementar de golpe 20% de electores es condenar al reino de los imposibles la susodicha reforma. La forma decidida implica establecer acuerdos y convenios entre los gobiernos de ambos países mediante negociación, compleja y profesional, es decir, supone tiempo y dinero. Los diputados no entraronen detalles. Otro detalle: el padrón electoral debiera ser adecuado para el caso, es decir más dinero, más profesionales y más tiempo. Eso a los diputados no les importó.

Miguel Bazdresch Parada
(v.pág.14 del periódico Público del 27 de marzo de 2005).


Estamos ahora viviendo tiempos muy difíciles, de injusticia sobre todo, de violencia y de gobiernos que no se han empeñado a fondo, ni por el bien del pueblo ni en meter orden, castigar debidamente a los secuestradores, narcotraficantes, estafadores, a los que vacían el erario público. Todos esos encuentran mucha benignidad, mucha tolerancia por parte de las autoridades y lo lamentamos.

Cardenal Juan Sandoval Iñiguez
(v.pág.1-B del periódico El Informador del 26 de marzo de 2005).


Lo mismo da tener un régimen presidencialista que uno semipresidencial, una monarquía que una democracia, un régimen parlamentario que uno mixto. Todo lo que no es buen gobierno se convierte en dictadura. Más que una Reforma de Estado se requiere una reforma mental.

Lo importante no es qué tipo de régimen o de "reino" nos conviene más, lo ineludible es que quienes estén al frente de estos gobiernos amen profundamente a la gente, a la sociedad a la cual se deben y se entreguen con pasión a la causa política. Todo lo demás es pérdida de tiempo, es autoengaño, es fantasía, es fórmula barata. Todo lo demás, insistimos, es dictadura y termina en un gobierno mediocre y de mediocres.

Elmer Ancona
(v.pág.5-A del periódico El Informador del 24 de marzo de 2005).


Sin ofrecer una explicación precisa, la mayoría perredista en la Asamblea Legislativa del Distrito Federal dio marcha atrás a una iniciativa de reformas aprobada por ese cuerpo legislativo, que limita el fuero de diputados y jefe de gobierno cuando solicitan licencia al cargo.

(V.pág.9-A del periódico El Informador del 23 de marzo de 2005).


Hacen falta hombres y mujeres decididos a guiarse por valores más elevados que sus propias aspiraciones personales... capaces de entender que el poder sólo adquiere sentido y se convierte en virtud cuando se ejerce en beneficio de los demás.

Andrés Manuel López Obrador, jefe de Gobierno del D.F.
(v.pág.8-A del periódico El Informador del 22 de marzo de 2005).


El Centro de Estudios Económicos del Sector Privado llamó a los legisladores en la Cámara de Diputados a recapacitar sobre el costo social que implica la "lluvia" de amparos que han provocado en los últimos años las misceláneas fiscales, porque los diputados se niegan a corregir los errores cometidos en sus misceláneas fiscales de última hora.

(V.pág.8-A del periódico El Informador del 21 de marzo de 2005).


Bueno y ¿de quién es un partido? Pues, depende. Los altísimos jerarcas de la cosa pública nos hablan de democracia y de respeto a la voluntad de la "militancia" pero, en los hechos, nuestros partidos políticos han siempre aparentado ser la muy particular propiedad de alguien.

Román Revueltas Retes
(v.pág.3 del periódico Público del 20 de marzo de 2005).


Después de tanto videoescándalo, de tanta denuncia, de ver los pleitos en la Cámara de Diputados, de ver a muchas autoridades en perpetuas vacaciones y aumentándose el sueldo, y de escuchar esos pleitos y contradicciones entre jefes de gobierno y secretarios de altos vuelos nadie puede pensar nada bueno de los políticos, sean del partido que sean, tengan el cargo que tengan.

¿Resultado? Nadie se siente representado ni identificado con la cúpula en el poder, nadie siente que nuestras cabezas estén haciendo algo de provecho y nadie percibe que la realidad de la nación esté avanzando, fluyendo.

Alvaro Cueva
(v.pág.14 del periódico Público del 20 de marzo de 2005).


Trivia dominguera: ¿Por qué López Obrador no tiene programas para los niños de la calle? Respuesta: Porque no dan votos.

Francisco Garfias
(v.pág.20 del periódico Público del 20 de marzo de 2005).


A los latinoamericanos se les proveen más servicios básicos, particularmente en educación y cuidado de la salud, pero estos servicios son con frecuencia de mala calidad y mucha gente pobre no los recibe en absoluto, dice un nuevo informe del Banco Mundial.

Dice el estudio [que] es necesario que los políticos y los proveedores de servicios sean más responsables ante la ciudadanía, para reducir la ineficiencia y la persistente desigualdad de acceso a los servicios públicos.

Concluye el informe que para proveerles mejores servicios públicos a los latinoamericanos es indispensable más responsabilidad pública de parte de los gobiernos, un sistema legal vigoroso y un "diálogo bien informado".

(V.pág.4-B del periódico El Informador del 19 de marzo de 2005).


El reporte Barómetro Global de la Corrupción 2004, de Transparencia Internacional, concluyó que las instituciones más corruptas del mundo y de México son los partidos políticos; en segundo lugar están la policía y los cuerpos de seguridad. Le siguen el sistema judicial, el congreso, el sistema fiscal y aduanas. En cuanto a gobiernos locales, el informe destaca que 11 estados mexicanos incrementaron su nivel de corrupción en 2003, frente a 21 que lo disminuyeron. Destaca que el mayor descenso se registró en el Distrito Federal. Estados como Aguascalientes, Chiapas, Baja California Sur, gobernados por partidos diferentes al PRI, o Quintana Roo, Colima, Hidalgo, Coahuila y Sonora, gobernados por el tricolor, son los que presentaron menores índices de corrupción. Mientras que Guanajuato, San Luis Potosí y Nuevo León, gobernados entonces por Acción Nacional, junto con Guerrero, Durango y Puebla, gobernados por el PRI fueron los lugares donde mayor corrupción detectó Transparencia. Si se incluyeran los sobresueldos y bonos otorgados a funcionarios gubernamentales como forma de corrupción, el mapa abarcaría al conjunto del país y a todos los partidos gobernantes. Veta importante que complementaría la lucha anticorrupción.

Jaime Preciado Coronado
(v.pág.22 del periódico Público del 18 de marzo de 2005).


La comunicación dejó de ser sólo pasatiempo, entretenimiento o diversión. Los medios tienen la fuerza y el poder de magnificar o anular valores, lo que ha sido comprendido y aprovechado por los profesionales de la política y la mercadotecnia, al punto que vivimos tiempos de tecnocracia, videocracia y en algunos casos, de nacocracia, que evidencian el influyente desempeño, frecuentemente decisivo, de la comunicación indiscriminada en la actividad política.

Carlos Cortés Vázquez en su presentación ante la Sociedad Mexicana de Geografía y Estadística de Jalisco
(v.pág.4-A del periódico El Informador del 16 de marzo de 2005).


Alberto Núñez Esteva, hizo patente que uno de los principales hallazgos de la Convención Nacional de Contribuyentes llevada a cabo durante el año pasado, fue la falta de visión de largo plazo de los políticos, por estar más preocupados por conseguir algo en los siguientes procesos electorales, que en dar resultados a quienes los eligieron.

Así mismo, hizo patente el descontento que existe en todo México ante la inmovilidad legislativa y la falta de reformas que tanto le han costado al país en términos de competitividad.

Editorial
(v.pág.4-A del periódico El Informador del 16 de marzo de 2005).


Existe un gran temor de que en las precampañas donde el Instituto Federal Electoral no tiene vigilancia por ley, pueda haber recursos del narcotráfico, recursos mal habidos.

Alberto Núñez Esteva, presidente de la Confederación Patronal de la República Mexicana
(v.pág.8-A del periódico El Informador del 16 de marzo de 2005).


La vía plurinominal no es más que la de los partidos políticos, por donde éstos se han fortalecido y sobredimensionado esa gran preeminencia que tienen sobre la vida del Congreso de la Unión.

Los diputados y senadores que llegan a serlo por el camino de la representación proporcional, tienen como punto de partida haber sido considerados para estar en una lista que palomeó previamente el dirigente del partido en turno.

Los legisladores plurinominales no suelen estar más cerca que los uninominales -los que fueron elegidos por votación en sus respectivos distritos- de aquel mandato del 51 constitucional, que dice que los legisladores son de la nación.

¿A quién se debe un legislador? Es una pregunta permanente, cuya respuesta se torna siempre evasiva. Un legislador plurinominal va a responder de acuerdo a los intereses de quien lo colocó en la mentada lista.

Un diputado uninominal (los 300 que fueron votados), al deberse teóricamente a los intereses de sus electores respectivos, estaría más cercano al mandato constitucional, de que son de la nación.

Pero la historia en el congreso mexicano ha dicho que no es así.

Hay en los intersticios de la ley del congreso un serial de prolegómenos que conducen a los legisladores a someterse a los dictados de las dirigencias de los partidos.

¿Qué diputado priista hoy podría asegurar que no teme que Roberto Madrazo le afectase a su carrera política, si no se ciñera a sus conveniencias, que son manifiestas? O los panistas: ¿Quién de éstos sería capaz de respingar contra las líneas que ya anunció que tenderá el nuevo dirigente Manuel Espino, quien, tal parece, ha llegado para erigirse en personero de Fox y de su ambiciosa esposa?

La disciplina férrea que tienen los partidos sobre sus legisladores ha tenido como pilar la representación proporcional en el Congreso.

Ciertamente, la proporcionalidad coadyuvó para abrir ese ostión en que se había convertido el Partido Revolucionario Institucional en los años 70 y 80 -y de paso legitimar a un sistema político priista que ya enfrentaba críticas que lo colocaban en el sitio de los partidos propios de las dictaduras-, pero ahora ya es motivo de desencuentros entre las instituciones formales y las informales.

Vicente Bello en su columna "Tren Parlamentario"
(v.pág.10-A del periódico El Informador del 16 de marzo de 2005).


Carlos Fuentes habló de la indigencia intelectual que denotan, vía de regla, los políticos mexicanos...

La película que ya hemos visto: las guerras de lodo antes, durante y después de las campañas; los casos escandalosos de corrupción que se daban antes y que se siguen presentando después del prometido "cambio"; la impreparación y la consiguiente incompetencia para gobernar de quienes llegaron a sustituir a quienes durante siete décadas lo hicieron más mal que bien; la falta de altura y la pobreza de miras de quienes, al pasar a ser oposición, se propusieron sabotear a los nuevos gobiernos, y apostaron su capital político -"y moral", dicen ellos- al fracaso, pensando menos en el bien común que en desplazar de la ubre del presupuesto a los recién llegados, para reinstalarse ellos.

Fuentes hizo un diagnóstico de la ideología de los partidos. De los tres que merecen ese nombre, uno parece un tanto retrógrado; otro, de tan incluyente que pretende ser, termina por ser indefinido; el otro, por lo agresivo de su discurso y lo primario de sus procedimientos, "un poco cavernícola", en palabras del mismo Fuentes.

Y lo peor del caso: que no se ve en el horizonte, capaz de salvarnos de este apuro, a ningún émulo del "Chapulín Colorado"...

Jaime García Elías, columnista y conductor radiofónico
(v.pág.5-A de El Informador del 15 de marzo de 2005).


Está el PRI que, según su historia y modelo, equivale a la corrupción y al cochupo. Con varias excepciones notables, la gente cree que ése es su modus vivendi, pues esta generación ha visto cómo creaban sus empresas que ponían a trabajar para pavimentar, abrir y readaptar obras en las principales ciudades, ya fuese en la capital con los ejes viales o en Jalisco donde el tren subterráneo les quedó chico o había que hacer una nueva entrada a Guadalajara desde el aeropuerto o cuando se les olvidó asegurar el crédito que los defendería de las devaluaciones.

Así que ahora, ¿cómo vamos a votar por alguien que le ha tomado el pelo a la sociedad tanto tiempo e impunemente? A pesar de ser liberales, buenos políticos y mejores negociadores, la gente cree que no hay manera, pues todavía hay resquemor.

Luego está el PAN. Un partido con etiqueta de mojigato, que se niega a promover la cultura y se la ha pasado entre la espada y la pared del lastre nacionalista o del neoliberalismo -que esconden tanto que ya no sabemos para dónde la gira-, incapaces de gobernar razonablemente, son excluyentes y no han sabido qué hacer cuando tienen el poder pues parace que no acaban de entender en qué consiste la "real politik" y cómo hay que hacerle para acordar con la oposición esos movimientos que se necesitan para que el país avance y no nos quedemos en buenas intenciones y promesas de campaña como fue en este sexenio de oportunidades para consolidar a un partido en el poder y que no ha podido uniformar sus criterios, ni tener la disciplina que necesita un partido que representa a un sector del abanico de personas y de ideas.

El PRD ha desperdiciado su oportunidad de oro en la capital pues su manera de operar recuerda la misma del antiguo Revolucionario, con sus acarreados y moches con los gremios manejados por buenos operadores políticos donde la corrupción -en vitrina- ha sido descarada como nunca antes habíamos visto, mientras el gran jefe los solapa y antepone estas circunstancias lamentables a la injusticia que se ejerce en su persona, sin sacar la cara por esos colaboradores que han demostrado ser abiertamente corruptos: Ponce, Bejarano e Imaz.

Por eso nos encontramos con un triángulo vicioso que, por más que lo acariciamos, no vemos podrá llevarnos a una nueva etapa en la vida económica y política, donde soñamos que un día se mejoren los niveles -como se han mejorado en un siglo, a pesar de los pesares- y se reduzca la pobreza extrema que tanto nos agobia.

Martín Casillas de Alba
(v.pág.5-A de El Informador del 15 de marzo de 2005).


Los políticos mexicanos suelen aprovechar de maravilla un defecto que acusamos como sociedad, y que casi siempre sopla como viento a su favor: la amnesia colectiva. Saben los políticos que su mediocridad, su falsedad, su actuación truculenta, generalmente se desvanecen en los ires y venires. Prometen, mienten, golpean, roban, al cabo después ya nadie se acuerda.

Es por ello que siempre será conveniente hacer ejercicios de memoria que nos permitan como sociedad identificar los engaños y hacer que los políticos se vean en su propio espejo, para que al menos reconozcan las deformidades que ellos mismos cultivan en sus rostros, en su personalidad, en su dignidad.

Víctor E. Wario Romo
(v.pág.4-A de El Informador del 14 de marzo de 2005).


El presidencialismo es al mismo tiempo una especie de cacicazgo nacional y la permanente intervención como jefe del partido del presidente de la república. El priismo vive hoy en la orfandad: "El antroposociólogo inglés Frazer llama la atención hacia la creencia entre el pueblo de que sus líderes pertenecen a un orden de humanidad más alta que ellos mismos... por lo cual sienten mucho más respeto, por lo general, que por la verdadera valía intelectual" (v. p. 104, Los partidos políticos, por Robert Michels", Amorrortu Editores, Buenos Aires, 1991).

Jorge Eugenio Ortiz Gallegos
(v.pág.4-A de El Informador del 14 de marzo de 2005).


Sr. Carlos Fuentes:

En México nos preciamos de haber accedido a la democracia porque se logró, en las pasadas elecciones federales, romper la hegemonía de un partido que se mantuvo vigente durante siete décadas, y no precisamente por conformismo de los ciudadanos o por indolencia de los electores, sino porque no se daban las condiciones para realizar elecciones creíbles; para decirlo con la frase que el actual presidente, Vicente Fox, utilizó de manera recurrente durante su campaña: para "sacar al PRI de Los Pinos". Haber acabado con "la dictadura perfecta" -como la llamó su colega Mario Vargas Llosa, en otra frase que tuvo repercusiones internacionales- pareció dar cima a las aspiraciones y a los anhelos de una generación de mexicanos.

Sin embargo, como usted advirtió, la democracia implica "debatir los temas de trascendencia nacional con altura". Es decir, exactamente lo contrario de lo que estamos haciendo. "Estamos perdiendo el tiempo en nimiedades, en ataques personales, en zancadillas", añadió.

Por lo demás, Carlos, estamos repitiendo nuestro propio modelo. Estamos siendo, para mal, "fieles a nuestro espejo diario", que diría otro colega suyo (Ramón López Velarde)... El aspecto más importante de la democracia no consiste en generar las condiciones para un proceso creíble. Tampoco consiste en concurrir de manera masiva a las urnas, para protagonizar -dicho con otro de los lugares comunes de la política mexicana- "una fiesta cívica". Lo más importante de la democracia consiste en aceptar el resultado del proceso, aunque la voluntad mayoritaria haya sido contraria a la nuestra. Y es lo que en ese "país violento" del que usted hablaba el otro día, simplemente no se da.

Por lo pronto, enhorabuena por su definición, tan certera, tan cáustica, tan punzantemente mexicana, de nuestra seudodemorcacia.

Jaime García Elías, columnista y conductor radiofónico
(v.pág.5-A de El Informador del 14 de marzo de 2005).


El vicepresidente nacional de Coparmex, Juan Arturo Covarrubias Valenzuela, advirtió que "ocho millones de votos ciudadanos pueden definir una elección para presidente de la república y para la gubernatura de un estado".

Destacó que muchos líderes sociales, como a su juicio lo es la Coparmex, consideraron que con la alternancia se podría caminar, sin embargo, ésta no ha podido culminarse porque se encontró con un sistema político anquilosado y lleno de intereses y egoísmos personales.

"El sector privado ya está cansado que lo único que le pidan sean impuestos", por tanto va a participar y a manifestar su inconformidad con el sistema político y con los políticos de izquierda que cada día evidencian retroceso y miopía.

"Nosotros no vamos a cometer el error de los empresarios de Venezuela; no le vamos a dejar el país a los políticos demagogos, este movimiento es para atorarle, para cambiar el proceso democrático del país".

(V.pág.5-B de El Informador del 14 de marzo de 2005).


El asesor jurídico de la Cámara de Diputados y también presidente del Instituto Mexicano del Amparo, Ignacio Burgoa Orihuela, señaló que la nación ya está sintiendo los efectos de ingobernabilidad, debido al poder que está en manos de los partidos políticos y no del pueblo como debe de ser, fenómeno que denominó "partidocracia".

Consideró que los inconvenientes por los que atraviesa la nación no son problemas de instituciones ni de leyes, sino de hombres, por lo que aseguró que la solución radica en que los políticos y gobernantes deben dejar de pensar en sus intereses personales o sólo para bien de su partido, con el propósito de que les permita que, a través de sus funciones públicas, se dediquen a resolver las necesidades de la población mexicana.

(V.pág.21 del periódico Público del 13 de marzo de 2005).


Cada vez son más, y más poderosos, los profesionales de la política expertos en el arte de hacerse de espacios políticos y que buscan simplemente obtener puestos y recursos; vulgarmente se les conoce como trepadores.

Esta semana los "sin ideas" han ganado un espacio más: la presidencia del Partido Acción Nacional.

Desde luego Manuel Espino no es el único político pragmático y carente de ideas, cada vez son más y están en puestos de mayor poder. ¿Quién puede decir lo que piensa Madrazo respecto a cualquier tema? Lleva años en la política nacional y ha logrado hacerlo sin que nadie sepa si tiene opiniones propias. Eso sí, y todos lo sabemos, quiere ser presidente de la república.

Mucha gente seguramente piensa que es una ingenuidad pedir algo más de los políticos, su mala reputación se basa justamente en que se les vea exclusivamente como eso, como profesionales que buscan para sí mismos y para su grupo puestos y recursos públicos. Sin embargo, hay políticos que buscando el poder son hombres y mujeres con convicciones. Ortega y Gasset, que no era ningún ingenuo, escribió en Mirabeau o el político que la dote suprema que califica al gran político y lo separa del hombre público vulgar es tener una idea clara de los que se debe hacer desde el estado en una nación. ¿De cuántos como ésos estamos rodeados? De muy pocos.

¿Qué está pasando en nuestra joven democracia que los que ganan son los "sin ideas"? ¿Por qué hoy paga el no asumir el costo de decir firmemente lo que se piensa?

Porque no son sólo Espino y Madrazo, son los perredistas en la Ciudad de México que pasan impunemente sobre sus más elementales principios con tal de conservar el poder, es Santiago Creel que se envuelve en la bandera y en el himno porque son los únicos temas no polémicos que se le ocurren, son muchos otros.

Si se imponen los "sin ideas", en poco tiempo la democracia habrá perdido cualquier legitimidad, aumentará la abstención en las elecciones y se agudizará, aún más, la crisis de legitimidad por la que atraviesan los partidos.

¿Por qué habríamos de ir a votar para legitimizar la rebatinga entre políticos sin escrúpulos y sus grupos que sueñan con los puestos y nuestro dinero sin tener ni idea de lo que hace falta para gobernar un país?

Denise Maerker
(v.pág.24 del periódico Público del 13 de marzo de 2005).


Pinche, barata... fueron algunos calificativos usados por el escritor Carlos Fuentes para juzgar la democracia actual mexicana.

El debate público está privatizado. El bien público está privatizado. La política está en manos de unos cuantos. Estas son las verdaderas privatizaciones en nuestro país. Ahí radica lo pinche de nuestra democracia. Y el cambio, no el prometido por el gobierno del cambio, sino el esperado por la mayoría de los mexicanos, pasa, no sin dolor y cambio personal, por la desprivatización del debate, los bienes y la política pública. Esa privatización es la que desalienta a los mexicanos esperanzados cada seis años en una modificación de rumbos y directrices gubernamentales. Y solamente con una radical desprivatización de lo público, el gobierno, cualquier gobierno, sin importar color, signos o modos, tendrá fuerza y capacidad para realizar ese tipo de cambios radicales necesarios hoy: sacudir el polvo de instituciones, análisis (muchos de ellos empolvados en los archivos de oficinas y universidades) y leyes.

El gobierno actual no ha tenido fuerza, por ejemplo, para castigar a los "peces gordos" del pasado inmediato. Y no la tiene porque el pueblo no se siente parte de ese tema. Fue una persecución privatizada. En ese y otros cambios no basta la publicidad. Es necesario hacer público para qué, el fin y el propósito del cambio. Alentar el debate público. Escuchar. Luego, actuar en congruencia. Así ningún mayoriteo o argucia detendrá el cambio "público" querido.

Miguel Bazdresch Parada
(v.pág.19 del periódico Público del 13 de marzo de 2005).


La zancadilla política y las puñaladas traperas definen la normalidad de la vida política mexicana.

Carlos Fuentes
(v.primera plana de El Informador del 12 de marzo de 2005).


En las próximas elecciones los mexicanos que pensamos, que trabajamos honradamente, que nos interesa el presente y el futuro del país, que somos responsables y que queremos algo mejor para nuestros hijos, no sabemos por quien votar: los corruptos del PRI y del PVEM, los ineptos y nacos del PRD (hay que aclarar que "naco" es un estado mental) o los arribistas y aprovechados del "nuevo" PAN.

Juan Lions Posada
(v.pág.4 "correo" del periódico Público del 11 de marzo de 2005).


Es penoso ver a tantos políticos mexicanos envolverse en la bandera nacional para defender una situación que tanto daño le hace a México y a los mexicanos. Cómo se ve que ellos tienen empleos bien pagados por los contribuyentes y no necesitan los que se generarían en la industria energética con una apertura vigorosa.

Pero para el 51% de los mexicanos que viven en pobreza, y para el 21% que lo hacen en pobreza extrema, el tema sí tiene urgencia. Ellos sí necesitan inversión que genere empleos y que cree una economía más competitiva. A ellos les da igual quién sea el dueño de la empresa que está extrayendo petróleo, refinando gasolina o generando electricidad. Preferirían sin duda tener los empleos y los sueldos de los canadienses o los estadounidenses aunque ello significara abandonar a los políticos mexicanos con su obsoleto concepto de nacionalismo.

Sergio Sarmiento
(v.periódico a.m. del 10 de marzo de 2005).


Los asuntos nacionales deben ser serios y profesionales. Con corbata, no con botas. Con mensajes importantes, adultos y maduros, y no con declaraciones públicas, pubertas y cursis del amor adolescente del primer mandatario a su nueva esposa. No con fotos de su presidente besándose frente al Vaticano o de rodillas frente al Papa; no con niños corruptos al frente de partidos políticos; no con senadores y diputados que argumentan su inconformidad al cambio de horario en razón de su sexo mañanero o que a costa de todos malgastan el tiempo en un reality show; no con manifestantes que con machetes impiden la construcción de un aeropuerto, y desgraciadamente tengo que poner varios etcéteras.

Ricardo Elías, arquitecto y empresario
(v.pág.8A de Mural del 10 de marzo de 2005).


Los políticos mexicanos son una subespecie de primates de lo más complejo e interesante. Mucho más que otros simios que uno imaginaría menos sofisticados, como los monos araña, o los monos aulladores. Aunque, pensándolo bien, después de asistir a una sesión en el congreso, eso de "más evolucionados" quedaría en veremos...

Definitivamente no están en vías de extinción. Al contrario, cada día son más. Y si no se van a acabar pronto, no es negocio estudiarlos, ni sacarlos en el Discovery Channel.

Vale la pena iniciar una clasificación de ellos. Primero están los luchones, un término equívoco, si consideramos que siempre van a las caiditas. El luchón es un simio oportunista y acomodaticio: no está en política por razones ideológicas, ni por ansia de poder, ni siquiera por la transa. No es especialmente corrupto, sólo se acomoda a lo que hay. Y cuando hay, "pos mengache". Está ahí para buscar un lugarcito, no muy grande para no llamar la atención, en La Nómina, mítico lugar a medio camino entre el Nirvana oriental y el Cielo de los cristianos. "Vivir fuera de La Nómina es vivir en el horror", sería su verdadera profesión de fe.

Paco Navarrete
(v.pág.3B del periódico Mural del 10 de marzo de 2005).


La mayoría de los servicios públicos se ofrecen con calidad que raya en lo indigno. Si se trata de carreteras, parece que dejan de dar mantenimiento a las libres para que se utilicen las de cuota. Las viviendas que promueve el gobierno son cada vez más pequeñas y de menor calidad. Quienes tienen recursos pagan sus propios servicios de seguridad ya que la seguridad pública es deficiente. La energía nos cuesta más cara que en los países desarrollados, a pesar de que en México la proveen empresas públicas. Y de la educación, habrá que hablar en otra ocasión ya que hay mucho que lamentar.

Los gobiernos de nuestro país utilizan la ley del esfuerzo mínimo para ofrecer los servicios públicos. Es cierto que el llamado "gasto social" se ha incrementado en los últimos sexenios. Pero lo malo es que el incremento ha sido en el costo no en la calidad. Han aumentado notablemente las plazas y los trámites administrativos, directos e indirectos. La ineficiencia y corrupción en la prestación de los servicios públicos han provocado que pasemos del "Estado Benefactor" al "Estado Perverso". ¿Hasta cuándo?

Víctor Manuel González Romero, profesor investigador y ex rector general, U. de G.
(v.pág.4-A de El Informador del 9 de marzo de 2005).


¿Quiere usted redondear su cuenta con los 20 centavos del cambio? -pregunta la cajera del supermercado.

-Sí -responde la cliente.

En México así, con esas limosnas redondeadas, solucionamos muchas cosas que en otros países están a cargo de sus gobiernos. Aquí hay que atender a los sueldos de los políticos y a la política misma, cosas muy caras, no queda, pues, para otras necesidades más urgentes y la caridad de los mexicanos es una solución, llámese Teletón o redondeo.

Gabriel Paz, escritora
(v.pág.5-A de El Informador del 9 de marzo de 2005).


Es inadmisible (parece que sólo en este país lo inadmisible se admite sin chistar) que un día sí y otro también estemos a expensas de una agenda informativa que se marca desde dos atriles igualmente vacuos y alimentados por la insensatez, la soberbia y la ambición de poder (del que lo tiene, sin ejercerlo; y del que lo ansía, sin merecerlo). Que un presidente y un incontenible aspirante a sucederlo acaparen los espacios públicos, los tiempos y las páginas de los medios de comunicación para enfrascarse en una sorda -y sórdida- lucha con pretextos de legalidad y legitimidad, es el colmo en un país con tan apremiantes necesidades y con temas de primer orden, siempre subordinados al griterío de un irreflexivo y un ambicioso cuyo privilegio es contar con dinero ajeno a la mano para acaparar los reflectores.

Vicente Fox sigue atendiendo a diario -como sujeto de un experimento del conductismo- a cada uno de los estímulos que le manda Andrés Manuel López al amanecer. Decenas de periodistas y no pocos medios de comunicación importantes se embelezan con el pleito y -según su posición ideológica- festejan las ocurrencias de uno u otro, a cual más egoístas e imprudentes. Quedamos entrampados: el destino del país, de cara a la sucesión presidencial, está en manos de unos cuantos que han centrado la vida pública en el caso de un gobernante local que un día decidió desafiar a la ley a ver qué pasaba (¿cumplió López con el requisito de residencia para ser elegible como jefe de Gobierno del Distrito Federal) y hoy sigue tan campante, comportándose siempre al borde de la ilegalidad.

En el colmo de la mediocridad, el PRI parece encaminarse a la recuperación de Los Pinos si se mantiene un tiempo más este espectáculo de cinismo. Porque sólo quienes se han metido de lleno a la lógica del poder como ambición única pueden creer que los mexicanos elegirán a un gobernante que en cualquier momento decide que la ley no importa si el pueblo está de su lado. Del hartazgo del PAN se han encargado Fox, Creel, Bravo Mena y los que vienen.

Víctor E. Wario Romo
(v.pág.4-A de El Informador del 7 de marzo de 2005).


Llevamos 10 años de retroceso en obra pública, y nuestros próceres desde sus palacios no dan muestra de grandeza, si acaso de ambición política. Cada día entran en circulación un promedio de 300 autos nuevos, y en aduanas se permite la entrada ilegal de vehículos -contrabando pues- saturando las calles, que lejos de aumentar en número y calidad, se achican y deterioran. Lo peor del caso es que cuando de pronto se les enciende la lámpara -que no es muy seguido-, procuran resolver con medidas costosas, inseguras e imprácticas.

Ahora el Ayuntamiento de Guadalajara pretende construir un puente elevado para cruzar la totalidad de la Colonia Chapalita. Los genios del proyecto dicen que es lo mejor pero alegan que no hay recursos, lo cual es de creerse pues con tan altísimos sueldos, bonos, prestaciones, viajes, automóviles, celulares, televisión, guaruras, trajes, edecanes, y demás, es imposible que el pueblo les pueda aguantar el paso.

Manuel Hernández Gómez
(v.pág.4-A de El Informador del 5 de marzo de 2005).


En la vida política de México, son legiones las personas que nada representan por sí mismas, porque forman parte de las infanterías enanas que simplemente se limitan a obedecer órdenes y a cumplimentar consignas.

Los funcionarios públicos ejercen la autoridad entre aplausos de los amigos ciegos y los abucheos de los enemigos sordos. Las razones de los elogios y los motivos de los reproches brillan por su ausencia. No se condenan las medidas ni se alaban las disposiciones. Se aplaude al amigo o al benefactor, y se sentencia al enemigo, o bien se reprueba la cicatería del poderoso. Las razones políticas no se hacen presentes. Quien hoy es objeto de elogios, mañana puede ser blanco de críticas. O al revés. De este modo la crítica política se pierde en desvaríos de justificación, o en devaneos de persecución condenatoria.

Flavio Romero de Velasco, licenciado en Derecho y en Filosofía y Letras y exgobernador de Jalisco
(v.pág.4-A de El Informador del 5 de marzo de 2005).


[Acción Nacional] es un partido con demasiados conflictos internos, un partido que no ve a la ciudadanía.

Germán Martinez, coordiandor adjunto de los diputados federales del PAN
(v.pág.4A del periódico Mural del 3 de marzo de 2005).


Al cerrarse a la apertura el señor López Obrador regresa al pasado, se muestra como un político obsoleto y con tendencias tiránicas, un aspirante presidencial que ignora en la práctica cuáles son y cómo se aplican universalmente en el mundo estos principios de transparencia.

Estos hechos relevantes de corte totalmente oscurantista en la mejor tradición del viejo PRI (de donde emana el señor López) le aportan al ciudadano una pista respecto a cómo actuaría el señor López si algún día llegara a la Presidencia de México.

Hablan volúmenes estas actitudes respecto a lo que realmente cree y piensa, de cómo reacciona ante las tendencias democráticas modernas y deben considerarse como un asomo por la ventana de su "otro yo": al pequeño dictador que trae adentro.

Es, precisamente, debido a este tipo de reacciones retógradas que exhibe el señor López que infunde desconfianza y temor en torno a su persona en la gran clase media. Sus seguidores, los que esperan de él dádivas como la entrega paternalista de fondos públicos a "los abuelitos", no reparan en las implicaciones de tales prácticas violatorias de los procedimientos democráticos: lo quieren elegir para ver qué les da.

Por otro lado está la pujante clase media mexicana, la que se esfuerza, labora y con sangre, sudor y lágrimas aporta los recursos que el señor López gasta a su antojo y capricho sin rendir cuentas a nadie.

A estos mexicanos les infunde pánico el comportamiento demagógico del jefe de Gobierno capitalino, intuyen que bajo su mando de posible corte dictatorial la economía nacional y la paz social pueden sufrir en detrimento de la buena marcha del país.

Promoviendo el sigilo y la opacidad el señor López no hace más que alimentar y reforzar este miedo que surge entre los pensantes ante su eventual candidatura presidencial.

Manuel J.Jáuregui
(v.pág.10A del periódico Mural del 3 de marzo de 2005).


Todos los partidos hacen y deshacen lo que les viene en gana y en sus proyectos, sus mesianismos y sus sinrazones, el concepto "nación" no significa nada y la sociedad no es otra cosa que una sexenal proveedora de votos perfectamente manipulable a través de los medios electrónicos, siempre dispuesta a condolerse de esos sufridos héroes que serían capaces hasta de ir a la cárcel con tal de defender su "proyecto de nación". Éste es un juego de secuestros escalonados: una pandilla secuestra a un partido; los partidos secuestran a la política; la política secuestra a nuestra vida pública; ésta secuestra a la nación; llega el narco y lo secuestra todo (testigos de la ceremonia: la empresa y el clero). ¿Y los ciudadanos, ésos que marchamos en demanda de seguridad?. Pues con la pena de que para fines prácticos no existimos (lo más terrible es que muchísimos están muy contentos de no existir, porque de otro modo, tendrían que crecer y que pensar).

Germán Dehesa
(v.periódico a.m. del 3 de marzo de 2005).


Queriéndolo o no, los actores políticos nos han orillado a una situación tal que ni el gobierno actual, ni ninguno otro que llegue al poder, emanado del partido político que sea, podrá dar resultados en términos de productividad y eficiencia, porque simple y llanamente los legisladores no se ponen de acuerdo en qué tipo de reformas requiere México.

Editorial
(v.pág.4-A del periódico El Informador del 1o.de marzo de 2005).


Los políticos están inmersos en la lucha por el poder y eso no es lo que le interesa a la gente, hay dos puntos vista, el de los políticos, quienes se guían por medio de las columnas periodísticas, y el de la gente que todos los días lucha por salir adelante, y la verdad ellos nos ven muy feo a los políticos y a los partidos, lo que sucede es que la política nacional se debate por el poder y no por México, no por la nación, falta rumbo; para que haya continuidad de la nación debe ponerse en el centro las necesidades de la gente, pero los políticos nos enfrascamos en el debate por el poder y naturalmente que si no vamos a ganar nosotros, preferimos que no gane el otro, y entonces esto está empantanado.

He sido crítico de la vida en Acción Nacional, yo mismo soy testigo de cómo nuestras convenciones de ser totalmente de la ciudadanía se han ido convirtiendo en convenciones de los grupos, del chambismo, algo muy mexicano que les pasa a todos los partidos, y yo en lo personal no sigo las preferencias de ningún grupo, me interesa la lucha por el interés nacional y no por el poder, eso es lo importante y no la batalla para imponer a un grupo sobre otro.

Ernesto Rufo Appel, ex gobernador panista de Baja California
(v.pág.2-A de El Informador del 28 de febrero de 2005).


La polémica por el desafuero es una "cortina de humo" tendida por el mismo Andrés Manuel López Obrador para ocultar su mal gobierno, aseguró el candidato ciudadano a la Presidencia de la República, Jorge Castañeda.

Al referirse al apoyo solicitado a los trabajadores del Gobierno del Distrito Federal dijo: "Si eso están haciendo ahora que tienen un pequeño gobierno, ¿van a hacer lo mismo si gana la Presidencia?".

(V.pág.20 del periódico Público del 27 de febrero de 2005).


Un sector de Convergencia busca negociar con el presidente Fox el respaldo a las aspiraciones presidenciales de su delfín, Santiago Creel, en caso de que el secretario de Gobernación logre la postulación del PAN, según fuentes de ese partido. Ofrecen una "coalición total" al blanquiazul y, a cambio, solicitarían tres senadurías, diez diputaciones y la renegociación de la deuda del partido naranja, que es muy alta.

Francisco Garfias
(v.pág.23 del periódico Público del 27 de febrero de 2005).


Está claro que su incapacidad para estar al frente del ejecutivo federal [Fox] y de la presidencia municipal de la capital [López Obrador] son manifiestas (pomposamente llamada "jefatura de Gobierno"). De hecho todo el país y muchos otros están apercibidos de sus limitaciones, como también de la agresividad verbal de ambos, si bien el segundo tiene antecedentes que le asemejan al grupo "Al Qaeda".

Nadie en su sano juicio puede dar crédito a lo que está sucediendo en México, donde un presidente berrinchudo y pleitero se enfrenta todos los días contra su archi-rival frente a las cámaras y micrófonos (ante el asombro del país y la comunidad internacional). Con un secretario de gobernación -así, con minúsculas- que ayuda a su jefe a lanzar pastelazos a López Obrador, quien a manera de ordeñador a cosa de las cinco o seis de la mañana, devuelve el pastelazo aderezado con la buñiga de su establo moral, dándole al ambiente político nacional un olor francamente nauseabundo.

Uno nada más es el presidente del país y el otro nada más es el presidente municipal de la capital. No son los dueños. No son reyes absolutistas. Son simples mandatarios. Su principal deber y para el cual juraron obediencia, es cumplir y hacer cumplir la ley y hasta ahora la ley es letra muerta. La marcha multitudinaria del año pasado no les dijo nada a estos gobiernos ciegos y sordos, gobiernos preocupados por la elección siguiente y por aumentarse sueldos y bonos, pero ausentes de sus deberes y de espaldas al pueblo al que deben gobernar con diligencia y entrega (haya o no votado por ellos).

Tienen derecho a no ser brillantes, tienen derecho a equivocarse en algunas acciones, pero no tienen derecho alguno a jugar con la estabilidad de la nación.

Manuel Hernández Gómez
(v.pág.4-A de El Informador del 26 de febrero de 2005).


Los mexicanos deseamos como presidente a un hombre que, como el reloj, hable solamente a sus horas y de asuntos importantes para toda la colectividad. El exceso de palabras desgasta a los hombres en el poder.

Flavio Romero de Velasco, licenciado en Derecho y en Filosofía y Letras y exgobernador de Jalisco
(v.pág.4-A de El Informador del 26 de febrero de 2005).


La revisión de las cuentas públicas tanto del gobierno del estado [de Jalisco] como de los ayuntamientos se ha convertido en un instrumento muy efectivo para la cosecha política y para la manipulación de la opinión pública.

La revisión de las cuentas pública debe ser un ejercicio que para la gente represente la garantía de que los impuestos que paga son aplicados con transparencia y legalidad y de que, en caso de que no sea así, se apliquen las sanciones correspondientes, no sólo de tipo moral o electoral (que es en realidad el motivo principal hasta este momento).

Hasta ahora, como finalmente no pasa nada con la revisión de las cuentas públicas, a los funcionarios no les importa ser prolijos en la administración de los erarios; y se enfrenta la posibilidad de que, cuando pase algo, nadie lo crea ni le dé la importancia que reclama.

Quien está manejando las cuentas públicas mal, prostituyéndolas, echándolas a perder como un producto democrático de gran valor, es el presidente en turno de la Comisión de Inspección en el Congreso del Estado [Salvador Cosío Gaona].

Laura Castro Golarte
(v.pág.5-A de El Informador del 26 de febrero de 2005).


Hay algo perfectamente claro con la clase política mexicana: es terriblemente mediocre. Esta semana, con toda la faramalla que se hizo por la aprobación de una iniciativa del presidente Vicente Fox para que los mexicanos -en Estados Unidos- tengan derecho a voto, dieron una prueba contundente de visión corta, imaginación escasa y etnocentrismo. No se han dado cuenta que esa iniciativa de ley, si pasa tranquilamente por el Senado como se espera que suceda, será lo peor que les podrán regalar a los mexicanos que viven en aquella nación, sin contar con una nueva ronda de presiones adicionales de Washington en contra del gobierno actual y muy probablemente contra el que venga en el 2006, sin importar de qué signo sea.

Los legisladores se montaron en el caballo renco de Fox y aprobaron una iniciativa que no tiene destino ni en el corto ni en el mediano plazo. Para empezar, no hay dos mil millones de pesos presupuestados para comenzar a construir el andamiaje logístico para ese voto, por lo que difícilmente podrá ser instrumentado para el 2006. Para seguir, ni siquiera se han puesto de acuerdo en el mecanismo para instalar las urnas en un total de casillas cuya cantidad no tienen todavía idea, pero que oscila entre cinco mil y ocho mil. Padrón y credencialización, tampoco hay. Los legisladores no iban a votar en contra de la iniciativa pues les dañaría con sus clientelas. Después de todo, ¿quién se opondría a una iniciativa tan políticamente correcta?

Nuestra clase política está ciega ante las múltiples señales que están llegando del norte. Una de las más importantes, que pasó desapercibida, la envió el secretario adjunto de Seguridad Territorial, el almirante James Loy, quien declaró ante una subcomisión del Congreso a mediados de mes que la información de inteligencia en Washington "sugería fuertemente" que Al Qaeda podría utilizar la frontera con México para infiltrar terroristas.

Lo que la clase política mexicana no ha entendido es que las alarmas estadounidenses están directamente relacionadas con los esfuerzos de legitimación política extraterritorial que están extendiendo con el voto a los mexicanos. No hay una relación directa per se, pero es fundamental en la construcción del clima adverso a los mexicanos que está creciendo en Estados Unidos, donde el racismo y la discriminación van creciendo aceleradamente. Esta no es una figura retórica.

El voto de los mexicanos en Estados Unidos los coloca en la lógica de una movilización de inmigrantes, grupo que ha pasado a ser visto como muy sospechoso de tener vínculos con terroristas, amparado por un gobierno extranjero. ¿No habrán pensado Fox y los legisladores que al aprobar esa ley en estos momentos, los colocan en un riesgo adicional al que ya enfrentan hoy en día, y con las diferentes agencias judiciales sobre ellos? Tienen un nada envidiable tacto de elefantes, que en el momento en que se incendia la pradera, deciden hacer un día de campo.

Raymundo Riva Palacio
(v.pág.5-A de El Informador del 26 de febrero de 2005).


Cuauhtémoc Cárdenas Solórzano negó que el Partido de la Revolución Democrática no participe en la elección presidencial de 2006 si la Cámara de Diputados decide desaforar al jefe de Gobierno del Distrito Federal, Andrés Manuel López Obrador.

(V.pág.7-A de El Informador del 26 de febrero de 2005).

(Al contrario, ruega por el desafuero ya que le quita del camino el principal obstáculo para volver a ser candidato - El webmaster)


En México, el país de las simulaciones, los políticos deben pensar que los ciudadanos somos idiotas. Peor aún, actúan en consecuencia.

El presidente Fox se queja del jefe de Gobierno del Distrito Federal, Andrés Manuel López Obrador, por crear un clima de "presión y polarización social" en el proceso de su desafuero, con una actitud, sostiene, prepotente de poder. Si bien es cierta la descripción que hace de su adversario, su reacción no parece producto de las acciones que está emprendiendo el gobernante capitalino para presionar a la Cámara de Diputados a que no vote su desafuero y lo elimine, tácitamente, de la carrera por la Presidencia, sino de un berrinche personal.

López Obrador, el PRD y todos sus líderes, llevan semanas anunciando que realizarán movilizaciones en el país. Inclusive, en un periódico del Distrito Federal que se ha convertido en la avanzada propagandística del gobernante, se ha planteado que su desafuero sería el equivalente a un golpe de Estado, y que si aún así se concretara, 10 millones de mexicanos saldrían a las calles a protestar. Si su imaginario tuviera algún anclaje en lo real, eso no sería protesta, sino el inicio de una guerra civil. No será así, y López Obrador, el PRD y sus propagandistas lo saben. De lo que se trataba era de agitar el caldo político. Pero ni Fox ni su gobierno actuaron en consecuencia o trataron de atajar en ese momento los amagos y las amenazas que lópezobradoristas; lo dejaron navegar sin dificultad.

En cambio, la reacción virulenta de Fox que leyó su vocero para las cámaras de televisión, fue sólo hasta después de que López Obrador se dio gusto el fin de semana burlándose del presidente. En un par de ocasiones dijo que Los Pinos era una casa maldita, pues todos los que la ocupaban como inquilinos quedaban mal de la cabeza. Se "azonzan", calificó. Decirle dos veces "zonzo" a Fox sí calentó la cabeza en el gobierno foxista, y junto con Los Pinos, también hubo una reacción airada de la Secretaría de Gobernación, que menos hipócrita que la Presidencia, aseguró que el jefe de gobierno capitalino no podía estar minando permanentemente a las instituciones, sugiriendo una irresponsabilidad política de su parte.

López Obrador le respondió este martes con igual virulencia: "No me van a callar". Por supuesto que no; al contrario. El jefe de gobierno sabe que en eso de la polémica, nadie en el gobierno foxista lo bate, y que tácticas de combate, menos aún.

Uno, López Obrador, está a la caza de bobos para que le crean toda su maquinación propagandista. Otro, Fox, castigando a López Obrador por una retórica que el mismo presidente no ha dejado de utilizar. Parece olvidársele la manera cómo se ha referido despreciativamente del PRD, cómo ha llamado delincuentes a los priistas, cómo se ha puesto la vestimenta de luchador por la democracia cuando lo más que se le recuerde en la época en que se estaba martillando contra el autoritarismo fue que se pusiera orejas de burro en la Cámara de Diputados, en protesta contra Salinas, que fue, por lo demás, lo más relevante de su paso por esa legislatura.

Los dos juegan con las mentiras, entre las sombras, con su cultura sibilina. ¿Pero qué se puede esperar de ellos, si no son mas que figuras mediáticas eficientes? Uno engañó a la mayoría de los mexicanos que lo hizo presidente, y hoy se arrepiente, y otro está logrando lo mismo. ¿Se arrepentirán quienes voten por él en el 2006? Eso sí no puede preverse. Lamentablemente, las quejas no modifican retroactivamente la realidad.

Raymundo Riva Palacio
(v.pág.4-A de El Informador del 24 de febrero de 2005).


Con una amplia mayoría de 391 votos a favor, 5 en contra y 22 abstenciones, la Cámara de Diputados aprobó las reformas al Código Federal de Instituciones y Procedimientos Electorales que otorgan el ejercicio del voto de los mexicanos desde el exterior.

Representantes de las seis fracciones parlamentarias coincidieron en brindar ese derecho a los connacionales que por razones diversas radican o están temporalmente fuera del país, "para consolidar la democracia mexicana".

Sorprende la facilidad con que los diputados de los diferentes partidos se pusieron de acuerdo para aprobar esta ley, cuando tienen años discutiendo otros proyectos tanto o más trascendentes que el del voto en el exterior, sin haber entrado siquiera a la vía del consenso. ¿Será que sólo se ponen de acuerdo cuando avizoran ganancia política? [¿o económica? - el webmaster].

Editorial
(v.pág.4-A del periódico El Informador del 23 de febrero de 2005).


El proceso del próximo año será de nuevo una contienda entre tres partidos. Como ya es costumbre, los llamados partidos de la chiquillada se acomodarán con quien más les convenga, en cada caso, para seguirse nutriendo de la ubre pública.

En estos momentos el proceso de desafuero es lo que impera en el ambiente de sucesión. Para Andrés Manuel López Obrador, AMLO, este proceso se está convirtiendo en una excelente campaña publicitaria. Los legisladores del PRD tratarán que el proceso de desafuero tarde lo más posible en la Cámara de Diputados y para ello cuentan con el contundente apoyo de la incapacidad política del resto de los diputados. La decisión está en manos de los diputados del PRI, quienes cada vez están más preocupados. Para los ciudadanos, no ha quedado clara la "culpabilidad" de AMLO, de tal forma que si procede el desafuero los priistas se verán como injustos verdugos. Tampoco la opinión pública comprende que el proceso de desafuero no es realmente un juicio, es simplemente la posibilidad de que haya un juicio. El PRI consideraba que si desaforaba a López Obrador se le pasaría la papa caliente al Ejecutivo (a través de la PGR) y que el efecto político sería una lucha entre el PRD y PAN. Sin embargo, con una mejor estrategia de comunicación, AMLO ha logrado que el interés se centre en el desafuero y no en un posible proceso judicial posterior.

Tanto el PRD como el PRI parecen compartir estrategias en este momento. Cada uno quiere que el otro se pelee con el PAN para que se desgaste. Lo que están haciendo es similar a lo que hacen los niños. Recordemos que cuando dos niños se retan aparece un tercero que pone su mano entre los dos y les dice que el que escupa primero gana. Por supuesto que si uno escupe, el tercero quita la mano y provoca el pleito. Mientras tanto, el PAN parece que no sabe qué hacer. Fox escupe cualquier mano que le ponen enfrente (y de no hacerlo, escupe hacia arriba). El PAN, en lugar de gozar las mieles, sufre las amarguras del poder. Han sido incapaces de operar una estrategia externa y a la vez resolver sus diferencias internas.

Víctor Manuel González Romero, profesor investigador y ex rector general, U. de G.
(v.pág.4-A de El Informador del 23 de febrero de 2005).


Ya en otras ocasiones hemos señalado nuestra postura respecto a la urgente reforma que pide a gritos la Ley Federal de Radio y Televisión; también hemos indicado que existe una sospechosa -pero no sorpresiva- alianza entre el gobierno federal y los concesionarios-empresarios de la radio y televisión nacionales para frenar tal iniciativa. Lo peor del caso es que este asunto no es nuevo: son ya muchos años los que han pasado desde que se empezó a hablar sobre la modificación a una legislación que ha provocado que la radio y la televisión de nuestro país, con sus honrosas y pocas excepciones, sea un bodrio que tenemos que padecer todos aquellos a los que Fernando Curiel ha bautizado como El Sufrido Auditorio.

Los propios diputados y senadores habían dicho que no pasaba de febrero para anunciar la nueva ley. ¿Qué ha pasado? Lo mismo de siempre: en la propia Cámara de Senadores y en la de Diputados hay intereses a favor de que no cambien las cosas, hay complicidades con los dueños de los medios de comunicación, hay alianzas que obstaculizan el camino. ¿Cuándo cambiará la cosa? Quién sabe; lo cierto es que cada vez es más cínica la burla de los mañosos y tramposos concesionarios que parecen decir "¡no contaban con mi astucia!".

David "Negro" Guerrero
(v.pág.13-B de El Informador del 23 de febrero de 2005).


La política mexicana funciona de acuerdo a los propósitos de un grupo cerrado donde el interés acciona mecanismos de acuerdo a las circunstancias. El cambio del llamado autoritarismo a la llamada democracia cuesta miles de millones de pesos y posterga inversiones, pero lo más grave es la división sustentada en la perniciosa ambición.

El presidente Vicente Fox reconoció abierta la contienda electoral para el año 2006 ante la presión interna de los tres partidos, PRI PRD PAN, que confrontan respectivas diferencias entre los candidatos Roberto Madrazo, Enrique Jackson, Arturo Montiel, Andrés Manuel López Obrador, Cuauhtémoc Cárdenas, Santiago Creel, Felipe Calderón Hinojosa, Alberto Cárdenas y otros que puedan surgir, alentados por el deseo de traspasar adeptos a cambio de alcanzar posiciones en los poderes ejecutivo y legislativo. La cifra de aspirantes supera los cuatro dígitos.

Tal atomización política provocó la aparición de nuevas organizaciones entre las que destaca Nueva Alianza Nacional, Alianza Socialdemócrata, Fuerza Ciudadana, Democracia Social, encabezadas visiblemente por la profesora Elba Esther Gordillo, Patricia Mercado, Gilberto Rincón Gallardo y el propio Cuauhtémoc Cárdenas.

Evidentemente son muchos nombres y cero programas que ni siquiera llegan a promesas básicas contundentes en beneficio de la población. Así volveremos a escuchar por todos los medios el mismo discurso, enfocado a devaluar los méritos del eventual adversario, aunado al uso de la imagen más amable del candidato a presidente, gobernador, senador, diputado o munícipe.

Las nuevas organizaciones políticas no ganarán muchos votos. Sólo buscarán el registro con el mínimo 2% con el propósito ulterior de ingresar como partidos y obtener mayores ingresos del erario como lo tienen los tres partidos principales.

De no revertirse el proceso ambicioso a corto plazo, la economía de mucha gente se manifestará en ausentismo en las elecciones y por ello perderá legitimidad el proceso de julio de 2006 como ya ha estado ocurriendo en algunos estados donde el total de votos no llega a ser mayoría de electores inscritos en el padrón y por tanto las autoridades llegan con fragilidad a ocupar el puesto con mayoría de la minoría. Ese hecho les inclina a comprar todo tipo de voluntades, posteriores productoras de inhibición para acciones de gobierno con auténtica autoridad.

Carlos Cortés Vázquez, consultor en comunicación
(v.pág.5-A de El Informador del 22 de febrero de 2005).


Escuece la perfidia de Creel, quien como candidato es un pésimo secretario de Gobernación, gracias a la complacencia presidencial.

Víctor E. Wario Romo
(v.pág.4-A de El Informador del 21 de febrero de 2005).


México es de una puerquez que nunca se acaba y, por increíble que parezca, un puñado de políticos de dudoso patriotismo se la pasa peleando por su pedacito de chiquero todo el tiempo.

Todo, absolutamente todo lo que dicen y lo que hacen es como para salir corriendo del país y no regresar.

Alvaro Cueva
(v.pág.17 del periódico Público del 20 de febrero de 2005).


López Obrador piensa que los empleados del Gobierno del D.F. son sus propios militantes del PRD. Roberto Madrazo cree que los maestros del país son un bloque del PRI que le pertenece. El "Niño Verde" confunde a su gavilla con un partido político. Medina Plascencia confunde sus méritos dentro del PAN con los méritos de un ciudadano ejemplar.

Para mí, el PAN es el úncio partido que más o menos tiene cierta formalidad en sus procesos internos, sin embargo, le tiene pavor a una democracia formal interna abierta; la cual debe ser ciega hacia las personas y muy vigilante hacia los procedimientos. Las cúpulas panistas le tienen temor a abrir el partido para lograr más militantes "desconocidos" con derecho a voto interno.

El PAN no ha podido resolver la disyuntiva clásica: si se cierran no pueden ser populares; pero si se abren mucho los dirigentes sienten que pierden el control del partido.

EL PRI, muy informal, no puede organizar elecciones internas porque no existe un padrón confiable de sus militantes. Ellos prefieren llevar un registro aproximado de las organizaciones afiliadas al partido. Así, su espíritu corporativista le exige a cada líder que organice su propio corral de modo que cada sindicato o asociación afiliada evite la democracia formal con el voto personal y secreto de sus agremiados para que los mismos líderes se eternicen en el control de las agrupaciones.

Esa formalidad echaría a perder la usurpación constante del poder que le da vida al caciquismo en ese partido deformado. Así, la búsqueda del "candidato de unidad" es la expresión de una falta de formalidad que favorece la tiranía partidista.

¿Ahora el PRD es ejemplo de un partido formal? Nada de eso. Ya estamos viendo a Andrés Manuel volviéndose fascista al utilizar a los burócratas para sus fines políticos muy personales. Ya lo verán, como lo predice Francisco Calderón, cuando los "candidatos de unidad" del PRD sean los señalados con el dedo de oro del indestructible. Por eso Cuauhtémoc Cárdenas exigirá unas elecciones internas abiertas al público como última oportunidad para no caer bajo "el capricho hecho hombre".

Los extremos políticos siempre han odiado a la democracia formal, ordenada, con votaciones que respetan el voto personal y secreto dentro de los partidos. ¿Se imaginan a un Marcos Guillén permitiendo partidos de oposición mestizos dentro de sus territorios apropiados? Imposible. El orden civil formal siempre mata a los caciques.

El Partido Verde Ecologista es otro lastimoso caso de informalidad indecente. El "Niño Verde" todavía se siente dueño de una franquicia política que le dejó su papá como regalo personal. En su segundo intento ante el IFE, insistió a puerta cerrada en modificar sus estatutos para recalcar su derecho al capricho. Ni un quinto de nuestros impuestos merece ese muchacho que no ha terminado de crecer.

Agravia que siendo nuestro dinero producto de un enorme esfuerzo, se desperdicie en organismos políticos sin forma y con muy malas entrañas.

Enrique Canales
(v.pág.8A del periódico Mural del 17 de febrero de 2005).


La realidad política no deja paso a la esperanza de un hacer maduro, cabal y honesto de los políticos de hoy, hoy, hoy.

Lourdes Bueno, investigadora de la Universidad de Guadalajara
(v.pág.5-A de El Informador del 16 de febrero de 2005).


Sin tapujos.
Paco Calderón, caricaturista(13 de febrero de 2005).

Cada funcionario, cada gobernante, tiene la ambición de dejar su huella y la arrogancia de pensar que él sabe más, que él sí sabe cómo hacer las cosas. Por eso cada tanto asistimos al lanzamiento de una nueva iniciativa, a veces maravillosa, otras irrelevante, igual en unos días o meses, con suerte años, el mentado proyecto será severamente cuestionado por el gobernante en turno o más sencillamente abandonado. Y así vivimos en un cítculo terrible de ilusión, apatía y desencanto.

Denise Maerker
(v.pág.21 del periódico Público del 13 de febrero de 2005).


Todos los dirigentes de los partidos en México "son esclavos" de los institutos políticos que integran, por lo que no pueden tomar una decisión sin su aprobación previa.

Jorge Castañeda G., candidato independiente a la Presidencia de la República
(v.pág.21 del periódico Público del 13 de febrero de 2005).


De nada servirá dar a los viejos actores papeles diferentes. Conviene reconocer que lo que ahora llamamos "clase política", es ya anacrónica y debe ser eliminada casi totalmente. No es fácil. El campo político mexicano es un desierto. El partido en el poder que durante muchos años fue instrumento para ejercer el monopolio político, ha talado el bosque. Los grandes árboles han caído y queda nada más una maleza pobre, inútil y degradada.

Flavio Romero de Velasco, licenciado en Derecho y en Filosofía y Letras y exgobernador de Jalisco
(v.pág.4-A del periódico El Informador del 12 de febrero de 2005).


Ya podemos empezar a vislumbrar cómo serán los debates entre los candidatos presidenciales. ¿Quién tendrá más autoridad moral para hablar y debatir el combate a la corrupción? El que esté libre de culpa podrá hablar sobre corrupción, la pregunta es ¿quién? Por esta razón, cuando se toque el tema de la corrupción, los candidatos de los tres partidos principales tendrán muchas dificultades de defender las estrategias propuestas por sus partidos y corren el riesgo de que si presentan propuestas concretas para combatir la corrupción, el público se pondría a reír o tal vez a llorar por el cinismo. ¿Con qué autoridad moral podrán Roberto Madrazo, Andrés Manuel López Obrador y, ahora, Santiago Creel afirmar que ellos como representantes de su partido golpearán a la corrupción?

Ana María Salazar, académica del ITAM
(v.pág.4-A de El Informador del 12 de febrero de 2005).


Cuando los perdedores de los juicios son personas poderosas, el coraje normal se traduce en acciones de venganza contra los jueces. De ahí surgen las amenazas o los juicios políticos en contra de magistrados o ministros. Los políticos siempre presentarán estos casos como intentos por reemplazar a jueces corruptos con otros más honestos. Pero la verdad es que casi siempre buscan desviar la justicia para favorecer sus propios intereses.

La decisión del Partido Verde y el PRI de iniciar juicio político en contra de cinco consejeros del IFE revela, una vez más, un intento de los políticos por intimidar a funcionarios que deben ser imparciales.

Sergio Sarmiento
(v.periódico a.m. del 10 de febrero de 2005).


El "Niño Verde" hace berrinches porque pretende dirigir a una gavilla y no a un partido político que sea tan formal como para merecer nuestro dinero.

Enrique Canales
(v.pág.10A del periódico Mural del 10 de febrero de 2005).


Las alianzas de los partidos grandes (PAN, PRD y PRI) se hacen con el mejor postor, no con quien exista afinidad ideológica. Los partidos pequeños han encontrado dos minas de oro. Una de sus minas es el dinero público que obtienen a través del IFE y los consejos estatales electorales. La otra mina es el valor de su factura política al hacer alianzas con los partidos grades. Muchos de los partidos de la "chiquillada" han logrado sobrevivir con dichas alianzas.

Víctor Manuel González Romero, profesor investigador y ex rector general, U. de G.
(v.pág.4-A de El Informador del 9 de febrero de 2005).


El infortunio es la "sordera" de la clase política, ocupada en la renovación de poderes con descalificaciones persistentes y denuncias permanentes; reproche sin respuesta por parte de sector alguno. Con acelerado ritmo nos acercamos a problemas mayúsculos, de relieve en la explotación, conducción y venta de recursos y principal rubro de ingreso nacional: petróleo.

Pemex, como fuente de ingreso para la posterior creación de infraestructura y en consecuencia empleo, atraviesa una etapa difícil por falta de mantenimiento desminuido de 30,000 millones hace nueve años a 15,000 en 2003. El resultado estamos contemplándolo con más accidentes y frecuentes daños en los más de 50,000 kilómetros de ductos con tres décadas o más de operación, la que excede de 50% de uso (20 años) con mantenimiento adecuado.

El enfoque político a corto plazo está exponiendo al país al caos irreversible. La promoción e inversiones deben cuantificarse por el beneficio social. Si en cualquier circunstancia el costo tiene el imperativo de reflejar beneficio, en estos momentos de competencia internacional es mayor la exigencia de realizar obras alejadas del protagonismo y la espectacularidad como elementos de sustento para proyección de actores inscritos en el padrón de partidos para postulación en el año 2006.

Sólo con autenticidad se logrará la reconciliación entre población y autoridades, éstas últimas dotadas de espíritu de servicio a quienes dieron la mayoría -o no- para gobernar sin prepotencia o alardes populistas de protagonismo, preámbulo de la despótica dictadura.

Carlos Cortés Vázquez, consultor en comunicación
(v.pág.5-A de El Informador del 8 de febrero de 2005).


Me apesadumbra observar que cierta tendencia de pesimismo se apodera del país; y que a veces irrumpe en críticas vitriólicas de los integrantes de un poder hacia los integrantes de otro para aniquilarse recíprocamente y desembocar en la anarquía, que es el primer peldaño a un nihilismo cavernario.

Vicente Aguinaco, ministro jubilado de la Suprema Corte de Justicia
(v.pág.10-A de El Informador del 8 de febrero de 2005).


Uno de los aspectos que enojan a los pagadores de impuestos es el excesivo gasto en propaganda, muchas veces personal, de los servidores públicos.

Marcos Arana Cervantes
(v."El Trilenio" en la pág.11-B de El Informador del 7 de febrero de 2005).


Este es un gobierno de ricos. Sobre todo de ricos nuevos. De individuos a los que la ambición ha perdido pues habiendo ofrecido "honestidad" a los cuatro vientos, en 10 años a nivel local y cuatro a nivel federal, han demostrado a la sociedad: no únicamente su incapacidad para gobernar, sino una voracidad económica nunca antes vista. ¡Y mira que los mexicanos habíamos visto mucha!

En un mes un regidor actual gana lo que antes se ganaba en un año. Igual pasa con los diputados, senadores, magistrados, jueces y demás integrantes de la casta dorada de la burocracia. Bajo el falso e injustificable argumento "para no robar", los nuevos héroes de la patria se aumentaron los sueldos de tal manera que las arcas públicas han quedado vacías, a tal punto que la obra pública es sólo recuerdo del pasado. De ese pasado que los nuevos gobernantes critican todos los días en el discurso, pero que en los hechos ha servido para medir su ineficacia y corrupción.

Gobiernos que han engrosado las elitistas filas de los ricos con nuevos integrantes, y aumentado millonariamente las filas de los pobres, aniquilando las llamadas clases medias y enviando a los pobres hacia la indigencia o la precariedad. Pero eso sí, buenos, inmejorables para maquillar cifras y acomodar estadísticas.

El campo se sume en la pobreza y el abandono, y unos cuantos aumentan sus enormes riquezas al utilizar todos los programas y apoyos oficiales. Mientras que la gente del campo ni siquiera sabe cómo obtener la mínima ayuda, abandonando sus tierras para buscar la "pesadilla" americana, o la "pesadilla" en los cinturones de miseria de las ciudades mexicanas. Ciudades donde los autos importados circulan lustrosos bajo la conducción de las nuevas comaladas de "políticos" indolentes ante tanta miseria social.

Manuel Hernández Gómez
(v.pág.4-A de El Informador del 5 de febrero de 2005).


Un fenómeno particularmente dañino para el país ha sido la irresponsabilidad de todos los partidos y los legisladores de la oposición que usan la estrategia del saboteo. Ellos piensan que el fracaso de Fox se traducirá en un posible éxito para ellos o para su partido en el 2006.

Ana María Salazar, académica del ITAM
(v.pág.4-A de El Informador del 5 de febrero de 2005).


A la actual administración [del estado] le restan dos años y lo deseable para la gente (no para los políticos) es que sean años de trabajo sin madruguetes ni cálculos políticos.
Los jaliscienses están ávidos de decisiones, están ansiosos por ser testigos de que las promesas se cumplen, de que la palabra dada se honra; de saber a ciencia cierta, sin dudas, suspicacias ni incertidumbre, que no son sólo "votos" en dos pies, es decir, quieren estar seguros de que las decisiones se toman y las acciones se llevan a cabo sin manipulación alguna; quieren que la política se use para avanzar, para destrabar, para lograr consensos con respecto a hechos concretos: obras, leyes, beneficios...

Laura Castro Golarte
(v.pág.5-A de El Informador del 5 de febrero de 2005).


Otro fenómeno que arroja un nuevo escenario para el 2006 está relacionado con el cambio político del electorado, de una relación clientelar con los partidos, a una utilitaria. Los electores le han tomado la medida a los partidos y están aprendiendo a jugar con ellos para sacar mejores réditos materiales. Varios operadores del PRI han llegado a zonas rurales de Guerrero a ofrecerles bienes de consumo a cambio de votos, y los electores están preguntándoles cuánto les van a dar porque el PRD les ha ofrecido más cosas. "Al final van a tener en sus casas despensas del PRI, del PRD y del PAN, y cuando les pregunten por quién van a votar se callarán y dirán que el voto es secreto", comentó un estratega priista.

Raymundo Riva Palacio
(v.pág.5-A de El Informador del 5 de febrero de 2005).


Desde los primeros años del salinismo la opinión pública parecía valorar más los gritos desde algunas bancadas de oposición, que la búsqueda de acuerdos entre partidos alrededor de reformas que hoy es claro que resultaron positivas.

Y así hoy, el intento de construcción de reformas a largo plazo se quiere mostrar como negociaciones en lo oscurito, mientras que etiquetar unidades deportivas o defender los privilegios de las elites del sindicalismo oficial son acciones redituables que dan aplausos, generan adhesiones partidistas, aseguran el encabezado del diario de la mañana. Esa es la clase política que gana noticias.

Así creamos un círculo vicioso en el que nuestra clase política se desprestigia día a día, mientras los políticos sólo trascienden a través del escándalo.

Eduardo Rosales Castellanos
(v.pág.15 del periódico Público del 4 de febrero de 2005).


En Quintana Roo el caso del PRD ha sido casi vergonzoso: Juan Ignacio García Zalvidea, el ex alcalde de Cancún está, se supone, a años luz de los principios perredistas. Se trata de un personaje oportunista, que en unos pocos años ha pasado de colaborar con el gobernador priista Mario Villanueva (de la mano del cual hizo buena parte de su fortuna) a ser senador por el PAN, presidente municipal por el Verde y ahora candidato por el PRD. La razón es sencilla: en los tres últimos partidos, literalmente, compró su candidatura con la irresistible oferta de que él paga su campaña. Y nadie se ha preguntado de dónde sale tanto dinero. García Zalvidea muy probablemente no ganará pero le ahorrará algunos, muchos, pesos al PRD, aunque el partido, una vez más, con candidatos tan desprestigiados no gana el legitimidad.

En Hidalgo el PRD ha cometido el mayor de sus errores al lanzar, con un pragmatismo difícil de evaluar, a José Guadarrama, quizás el más desprestigiado de los viejos operadores electorales del priismo, un viejo enemigo del PRD que colocará a ese partido en tercer lugar en esos comicios pero, como García Zalvidea, le ahorrará algunos pesos en la campaña que se financia el propio Guadarrama, al que le siguen sobrando algunos dineros, que muchos priistas suponen provienen de aquellos que se "perdieron" en el llamado pemexgate.

Jorge Fernández Menéndez
(México Confidencial, 4 de febrero de 2005).


Ya pasa de rojo el negro historial del Niño Verde. A sus trapacerías publicadas se añaden otras nuevas, como ésa de amenazar a la autoridad electoral si no cede a su pretensión de que le autoricen estatutos amañados y hechos a su medida para poder manejar a su antojo ése que los mercaderes disfrazados de ecologistas llaman "partido", y que es en verdad un burdo negocio de familia que cuesta mucho a México y nada aporta en bien de la vida nacional. La ley ha de ser justa, sí, pero no regalona. Tarde o temprano deberá hacerse una legislación electoral tendiente a evitar que México, país pobre, tenga partidos políticos ricos.

Armando Fuentes Aguirre "Catón"
(v.periódico a.m. del 3 de febrero de 2005).


Se habla en estos días del dinero que les regalaremos a esos entes angelicales, a los partidos políticos y legión que los integra.

Miles de millones tirados a la basura. Pero (siempre hay un pero) es mejor regalárselos cada año porque si no los capitales oscuros, dinero lavado y planchado, financiarían las campañas y habría corrupción.

¿Qué quiere decir esto? Muy simple: que no confiamos nada en los partidos ni tampoco en sus candidatos.

Que a la menor oportunidad serán tramposos, ventajistas y uñas largas. Y esos son los que ocuparán los más altos cargos del país.

Dicho en lenguaje llano: Tengo un hijo briboncete al que pienso dejar la dirección de mi negocio y le doy dinero gratis para sus gastos para que no asalte transeúntes.

Lógico ¿no?

¿Ladrón rico no roba?

Nemesio Maisterra
(v.pág.8A del periódico Mural del 3 de febrero de 2005).


Las dirigencias (las "burocracias", les tildaba así Emilio Zebadúa en su conferenciar) de todos los partidos políticos "no parecen estar interesadas realmente en una reforma del Estado que les implique una reducción a sus prerrogativas, que les implique mayores controles de fiscalización a sus recursos, porque no quieren perder el acceso a las prerrogativas millonarias que reciben del Instituto Federal Electoral año con año".

Vicente Bello en su columna "Tren Parlamentario"
(v.pág.3-A del periódico El Informador del 2 de febrero de 2005).


Además de los recursos federales se deben añadir los recursos públicos de carácter estatal que también se destinan para promover la partidocracia mexicana. Pero, la mayor aportación del electorado no se puede cuantificar ya que son los recursos que se sustraen indebidamente del erario público para proselitismo político. Es un negocio en el que todos los partidos y los medios de comunicación ganan a costillas del pueblo. El costo mayor es la prostitución de la democracia, que queda a merced de quien más tiene, al no existir reglas claras para las campañas, precampañas, destapes, predestapes y difusión de logros de gobiernos.

Nuestros políticos no han sido capaces de informar con transparencia el origen y destino de los recursos utilizados en sus campañas ¿Quién garantiza que no existe dinero del narcotráfico en campañas?

La función pública debe ser un excelente negocio, por eso los aspirantes a puestos de elección dedican cantidades exorbitantes de recursos para ganar. El sueldo que reciben, en caso de ganar la elección no alcanza a cubrir los gastos de campaña, ni siquiera con bonos de secretario del gobierno de Jalisco. Yo no creo que los políticos sean tontos y les guste perder dinero, ni tampoco creo que su "vocación de servicio" los lleve a endrogarse para decir que sirven. El negocio de la política reside en lo que da el poder. En un país con corrupción endémica el poder es altamente redituable. Es por ello que muchos invierten en lograr el poder ya que una vez que se tiene se puede usufructuar de diversas formas. Es difícil pensar en algún negocio si no se tiene la gracia de la "autoridad". La cantidad de trámites y requisitos para emprender cualquier actividad son parte del sistema de corrupción. El simple hecho de agilizar, o no entorpecer, algún trámite por parte de una autoridad, le da el poder de definir si dicho negocio prospera o fracasa. El negocio está en lograr usar el poder para beneficio propio.

Se dice que uno de los negocios más redituables del mundo es establecer un partido político en México. Algo debe haber de cierto en ello por la cantidad de partidos que hemos visto nacer muertos. En muchos casos se trate de los mismos actores que promovieron algún partido que ya desapareció. Tal es el caso de los dos "nuevos" partidos que este lunes se supo que también tendremos que subsidiar para las elecciones del 2006. Se trata del Partido Nueva Generación y del Partido Alternativa Socialdemócrata y Campesina. Además de lograr recursos públicos, estas organizaciones sirven de petate para quienes salen de otros partidos y de escenario para actores que no quieren dejar de estar en los reflectores. Lo más probable es que en el proceso, de aquí al 2006, traten de ganar algo de presencia y se vendan al mejor postor.

Víctor Manuel González Romero, profesor investigador y ex rector general, U. de G.
(v.pág.4-A de El Informador del 2 de febrero de 2005).


Este es el país donde la democracia de urna, que no de haceres, le cuesta al ciudadano cantidades que paradójicamente lo descobijan en su protección social... dineros que han servido para muchas más cosas que para hacerle llegar a los mexicanos una mejor forma de vida social y política.

Recursos que, si los haceres políticos fueran en certera dirección ciudadana y tuvieran mejores contenidos, no se sentiría ofensivo... porque invertir en partidos que ofrezcan la posibilidad de un crecimiento político, luego de la consolidación democrática y social, sería la mejor de las inversiones en el país del abandono de la equidad... pero lo que hasta hoy, hoy, hoy ha sido en este rubro es, precisamente, lo contrario, tirios y troyanos, de todos colores, los unos con malversada experiencia, los otros con rápidos aprendizajes ausentes de ética, se han aprovechado del alto financiamiento que la ciudadanía ha puesto a su disposición a través del que fuera uno de los mejores organismos electorales del mundo...

Lourdes Bueno, investigadora de la Universidad de Guadalajara
(v.pág.5-A de El Informador del 2 de febrero de 2005).


Expresión popular. Enero de 2005.
No se puede tapar el sol con un dedo.
Lo que es evidente se hace notar.

Resulta que según dicen las lenguas, en este gobierno [de Jalisco] se despacharon así, en ubérrimo dispendio, y tanto que todos pudieron sentir la bolsa llena, repleto el saco, cuando el mandatario quiso que todos disfrutaran de las bendiciones y canongías de su cargo.

Dicen que todo esto llena de contento a quienes van marcando el pulso político de la entidad desde la otra banqueta, y ya sueñan, ya se frotan las manos, ya se limpian las uñas, ya disponen la cartera, porque tienen por seguro que estos errores y estas descalificaciones que han hecho resonar por el ámbito nacional, les permitirán llegar otra vez al poder estatal.

Ahí están esperando; tras la puerta cuentan los días, miden los tropiezos, amplifican los errores, y con ojos de fiesta, guiños de satisfacción, tienen por cosa cierta y segura que en el próximo período retornarán ellos. Falta que los electores así lo decidan y estén dispuestos a dar media vuelta, a volver a vivir las historias que vivió el país a lo largo de 70 años.

Luis Sandoval Godoy
(v.pág.4-A de El Informador del 1o.de febrero de 2005).


Muy delicada será la labor de la Dirección de Comunicación Social [del gobierno de Jalisco] para evitar entrevistas comprometedoras a los señores secretarios por los tan mencionados bonos, gratificaciones o como quieran llamarles a los beneficios de cantidades de dinero muy por encima de los salarios y percepciones de la población, -la que aún tiene empleo- hecho calificado muy negativamente por la actitud del gobernante y subalternos.

Ni siquiera la devolución, en los pocos casos que así ha sido, convence a la ciudadanía lastimada por la ingratitud e incumplimiento de promesas de honestidad proclamadas para obtener la voluntad popular que, ingenuamente confió y creyó al votar. Sin embargo, ningún antecedente validará el reclamo ante la perspectiva de ganar adeptos para el 2006, año alucinante para los actores de la política inmersos en el propósito de lograr acomodo en las futuras filas de lo federal, estatal o municipal.

Carlos Cortés Vázquez, consultor en comunicación
(v.pág.5-A de El Informador del 1o.de febrero de 2005).


En caso de dejar las cosas como están, tampoco el próximo gobernante que lleve la banda presidencial podrá hacer que el país despegue.

¿Acaso no sería mejor que en los poco menos de dos años que quedan de este sexenio se asuman los costos políticos de las reformas para que, gane quien gane en la próxima contienda electoral federal, encuentre mejores condiciones para poner en marcha proyectos productivos?

Si la democracia llegó para quedarse, no debiera preocuparnos tanto el no dejar avanzar al gobierno actual, sino las oportunidades que le quedarán al próximo gobierno de llevar al país a una dinámica más sana para todos, sobre todo para los jóvenes cuyo panorama es hoy, en muchos casos, desolador.

Editorial
(v.pág.4-A del periódico El Informador del 31 de enero de 2005).


Valores entendidos: cuando en México se dice de alguno que es "año político", se sugiere que el de referencia será un año prácticamente perdido en materia de gobierno. Si gobernar es, por definición, "guiar y dirigir", y, en términos de política, "orientar de manera armónica los esfuerzos de la autoridad en beneficio del pueblo", en un "año político" como éste que apenas empieza a definirse, se infiere que los esfuerzos de la clase política -gobierno y oposición-, se encaminan, ante todo, a la lucha por el poder.

Primero son las contiendas internas en los partidos. Más exactamente, las pugnas en el seno de los dos únicos partidos que, en nuestro medio, cumplen -más o menos- con su función esencial. Del resto, de sobra se sabe que se limitan a ser, en mayor o menor grado, "partidos temporaleros": grupos de oportunistas de los que mal puede decirse que representan una corriente política o ideológica, ni que tienen proyecto y equipo humano para gobernar -si por algún descuido el voto popular así lo decidiera-, y cuya razón de ser se limita a buscar beneficios económicos, a partir de una legislación aberrante, generosa con los profesionales de la politiquería y avara con el pueblo; espléndida con los "gastos de campaña" de los partidos, y pichicata con las llamadas "obra pública" y "gasto social".

Difícilmente se repetirá, en la próxima elección local, la situación que plantea Saramago, en su "Ensayo Sobre la Lucidez": el voto en blanco de la gran mayoría de los ciudadanos, lo que generaría una crisis de gobernabilidad... De cualquier manera, dado el desencanto del ciudadano por la incompetencia y el oportunismo de los gobernantes y por el desdén, una vez en el poder, hacia los compromisos que les permitieron alcanzarlo, y dado, por ende, el previsible incremento del ausentismo como elocuente manifestación tácita de repudio: ¿a quién pretende representar, en una democracia, y con qué legitimidad pretende gobernar alguien que no tiene -como quizá no lo tengan los próximos gobernantes- el respaldo tangible de los electores?

Jaime García Elías, columnista y conductor radiofónico
(v.pág.5-A de El Informador del 31 de enero de 2005).


Eso ha ocasionado que los narcotraficantes tengan mejor imagen que los diputados. No hay nada más desprestigiado que ser diputado.

Tatiana Clouthier, diputada federal del PAN, al manifestar su rechazo al aumento de sueldo de los legisladores en la Cámara de Diputados
(v.pág.6-A de El Informador del 31 de enero de 2005).


En el reciente viaje a Los Angeles California realizado por nuestros servidores públicos jaliscienses: don Francisco Ramírez Acuña, gobernador de Bonilandia, como le han apodado popularmente por andar saludando con sombrero ajeno, repartiendo a sus colaboradores dinero que no es suyo y que bien podría tener un mejor uso a favor de sus patrones, Emilio González, alcalde de la Perla Tapatía, eferma hoy de congestionamiento vial con peligro de colapso, y Arturo Zamora presidente municipal de ciudad Zapopan, famosa no hace mucho por contar con una policía ejemplar y que desde su llegada al ayuntamiento es ejemplo de corrupción y prepotencia... vieron las calles limpias y las carreteras diseñadas y construidas con gran perfección: concreto grueso y pulido, piso acanalado y visibles señalizaciones, buen declive para los derramamientos por la lluvia, bien intercomunicadas, hechas para durar. ¿Por qué nosotros no las hacemos así de bien? Escucharon en L.A. Los semáforos sonoros para los invidentes. Sintieron la preferencia que allí tienen por los peatones y el apoyo a los disminuidos en sus capacidades físicas. Rampas en toda la ciudad para las sillas de ruedas. ¿Sabrán lo difícil que es caminar por las banquetas llenas de hoyos del Antiguo Hospital Civil y en especialidades? Vieron estacionamientos en todas partes para minusválidos. Se enteraron que, en caso de un accidente, el estado apoya a los ciudadanos con fondos especiales para las víctimas. Además reciben sin costo toda la atención médica, la silla de ruedas, la caminadora, los bastones y una atención del personal especializado de primera. ¿Sabrán que en muchos centros del sector salud de Jalisco se trabaja sin lo mínimo indispensable, sin material de curación y sin el cuadro básico de medicamentos?

También en su gira se enteraron que comida, vestido y autos nuevos se consiguen más baratos que en México. Que la gente que trabaja alcanza una vida digna en poco tiempo. Los bancos cobran menos intereses. La gasolina es mucho más barata y se puede hablar por celular por 40 dólares con 1000 minutos y gratis todas las llamadas nocturnas. Por la misma cantidad aquí sólo podemos hablar 100 minutos. Por 5 dólares se puede hablar durante 8 horas en una larga distancia. Por la misma cantidad nosotros sólo podemos hablar 5 minutos.

Haciendo comparaciones, nuestros gobernantes concluyeron que en California el estado gobierna a favor de los ciudadanos y las obras se hacen para que duren, por lo que los american citizen tienen una opinión muy distinta de sus gobernantes de la que tienen muchos jaliscienses de los suyos.

Rubén Navarro Vargas
(v.pág.4 "correo" del periódico Público del 30 de enero de 2005).


¿Sabe qué es lo más dolorosa de este ir y venir de opiniones? Que los ciudadanos de Estados Unidos sí tienen unas autoridades que los previenen contra los riesgos de la violencia y la delincuencia. Nosotros no.

Nosotros que vivimos aquí no contamos con nadie que nos ponga en internet una carta que nos advierta sobre el riesgo que significa estar donde estamos.

Nosotros no contamos con una autoridad que se preocupe por nuestra seguridad, por nuestra vida, por nuestra salud ni por nada que tenga que ver con nosotros.

Nosotros sólo tenemos un puñado de gobernantes que viven en un mundo aparte, perfecto, glorioso, rico, abundante y divino o que están como drogados todo el tiempo y angustiados sólo por seguir en el poder o por dejarle el poder a alguien que le garantice seguridad a su universo de caramelo.

De veras que los mexicanos no sabemos dónde estamos parados. Oh, sí, qué ofensa tan "grande" la que nos hizo Estados Unidos, pero qué ofensa todavía más grande es la que nos hacen nuestras propias autoridades todos los días con su egoísmo, su soberbia y con esa manera tan grosera que tienen de negar lo innegable.

Alvaro Cueva
(v.pág.18 del periódico Público del 30 de enero de 2005).


Para evitar exponerse públicamente, por si no acreditaba sus conocimientos equivalentes a bachillerato, el ex gobernador de Aguascalientes Felipe González, actual subsegretario de Gobierno de la Secretaría de Gobernación, presentó el examen de la SEP en su casa el 25 de abril de 2004.

González no es el único funcionario del actual gobierno del presidente Vicente Fox que decidió presentar su examen de bachillerato, Ana Teresa Aranda, directora del DIF, también lo hizo el año pasado.

(V.pág.2A del periódico Mural del 27 de enero de 2005).


No sé por qué los políticos tienen la obsesión
de jugar a la nomenclatura, sintiendo que la ciudad es suya.

Antes Bosque, hoy Guadalupe Zuno. Sé lo que es un bosque.
Avenida del Sur, hoy González Luna. Sé lo que es el sur.
Las Torres, hoy Lázaro Cárdenas. Sé lo que son las torres.

Son atentados a la identidad y a la memoria.
Es presunción y soberbia de los políticos.
Hoy casi nadie los quiere. Al rato nadie sabe quiénes fueron.

Y ahora Acueducto, es Colosio.

Hay quien habla de sensibilidad política.
Y de sensatez, añadiría yo.

Nemesio Maisterra
(v.pág.8A del periódico Mural del 27 de enero de 2005).


...escuché a una clienta que comentaba con su amiga acerca de José Guadarrama, candidato a la gubernatura de Hidalgo por el PRD: '¿Cómo es posible que Guadarrama quiera ser gobernador? Como si no lo conociéramos... ¿Se acuerda que hace seis años, cuando era priista, quiso ser gobernador y hasta cerró carreteras? Pero ya ve, no se le hizo, a pesar de todos sus fraudes y engaños. El pobre tiene obsesión de ser gobernador, pero ya ve todo lo que dicen de él en este estado: que si mató a perredistas; que si tiene mucho dinero del Pemexgate; que si tiene quién sabe cuántas farmacias; que si tiene tres casa-chicas [...]; que si pierde otra vez va a haber violencia, ya ves que el domingo vinieron otra vez los de El Mexe y los de los machetes; ¿no viste su foto que dizque de inicio de campaña donde estaba un señor que se murió hace año y medio?; cuánto dinero no tendrá porque anda con pura gente comprada que hasta se ha traído de otros estados [...]; que si ya hasta se pintó el pelo como lo hacía Madrazo, para verse más joven; ya ves que le achacan el dizque "accidente" de un tal Jonathan desde el tiempo de Rosell; hasta perredistas han preferido renunciar antes de apoyarlo. Yo creo que el PRD lo aceptó porque en ningún otro partido lo quieren'.

Cuando salí de la tienda cuál no sería mi sorpresa al toparme con un cartel de un "rejuvenecido" o "retocado" Guadarrama. Su mirada era inconfundible, era la de un hombre turbio, chueco, miedoso, resentido, pero sobre todo muy soberbio.

Guadalupe Loaeza
(v.pág.9A del periódico Mural del 27 de enero de 2005).


Hemos permitido que se acumule tanto lodo, tanta mugre, tanta basura, tanto cochinero y desperdicio, que todo se ha vuelto un caldo repugnante donde los únicos que medran son esos monstruos deformes que se autonombran "políticos" (¿qué les parece el aumento que se asignaron, por sus purititos tompiates, nuestros legisladores?). Esos monstruos y sus narcosocios tienen secuestrado a México. Las tareas de dragado supuestamente las iba a hacer Fox (con nuestra ayuda), tal como vienen las cosas, tendremos que hacerlas nosotros sin la ayuda de Fox. Pues las hacemos. Ni que estuviéramos chimuelos.

Germán Dehesa
(v.pág.1B del periódico Mural del 27 de enero de 2005).


Los cuatro años "del cambio" se han caracterizado también por un ambiente político adverso, nuestros legisladores se han empecinado en bloquearle el camino al presidente y a las reformas que el país necesita. Todos parecen apostarle al propio futuro, no al de México.

Genaro Lozano, internacionalista por el ITAM y politólogo de la New Scool University
(v.pág.4-A de El Informador del 26 de enero de 2005).


Cuánto tiempo se llevó la construcción de la nación que fue ejemplo de haceres, de ideales, de equidades social y de crecimiento... porque este mismo país que hoy se debate en la agonía económica creció por décadas a más de 6% de PIB, este país que hoy se ve forzado a cancelar pensiones y seguridad social tuvo, no sólo la mejor constitución social del mundo, sino las sólidas instituciones que llevaron a cabo esta visión de equidad social de avanzada; y este país que hoy carece de rumbo cívico construyó en 2000 la mejor democracia, una limpia y participativa, desde luego, mucho mejor que la ejercida en los fraudes de Estados Unidos, "el país más democrático del mundo"...

Y aquellos políticos eran hombres apasionados por una ideología que tenían a México, su diversa complejidad, metido en las entrañas de una ética hoy abandonada... Mújica, González Luna, Vasconcelos, Gómez Morín, Lázaro Cárdenas, la lista no es abultada, pero sus hacerse se dejaron sentir por décadas para orgullo, presente y futuro de los mexicanos; hoy en cambio lo que los políticos de las dos décadas pasadas, incluyendo ésta, han generado un México sin identidad, abandonado desde dentro y golpeado desde fuera... un México sin presente y, desde luego, sin futuro... un México hoy habitado por entes que se autodenominan políticos... un país dejado como botín de partidos verdes, rojos, azules o amarillos... tirios y troyanos en la búsqueda de su interés pecuniario y de una desmedida ambición de poder... tirios y troyanos que tienen como rehén a la población, sociedad civil secuestrada, industria cancelada, empresa extinguida, campo sepultado, plataforma social demolida... éste es el México del cambio, el México del que el ejecutivo expresa: "va por buen rumbo".

Lourdes Bueno, investigadora de la Universidad de Guadalajara
(v.pág.5-A de El Informador del 26 de enero de 2005).


Nadie debe olvidar que el poder legislativo está estructurado para que trabaje si las cúpulas -es decir, las dirigencias de los partidos políticos- quieren.

Vicente Bello en su columna "Tren Parlamentario"
(v.pág.6-A del periódico El Informador del 26 de enero de 2005).


La actual Ley de Responsabilidades para los Servidores Públicos del Estado de Jalisco es genérica y no establece sanciones para las conductas inapropiadas por parte de los servidores públicos. Deja en manos del superior inmediato la aplicación de sanciones, lo que casi nunca ocurre, por "amiguismo" o compadrazgo.

Rocío Corona Nakamura, diputada local por el PRI
(v.pág.5-A de El Informador del 24 de enero de 2005).


Lo único que está consiguiendo Cuauhtémoc Cárdenas con su precandidatura a la Presidencia de la República es fortalecer la sensación que flota en el aire de que nada ha cambiado en México en los últimos años.

Verlo de gira artística por todos los programas de televisión que han querido recibirlo, y escucharlo hablar de lo mismo y de lo mismo de lo que siempre ha hablado puede ser enloquecedor.

¿Por qué? Porque son las mismas promesas de siempre, las mismas promesas que todo el mundo hace y que finalmente nadie cumple. ¿Será posible que alguien tenga interés en escucharlo?

Este momento es muy delicado para la democracia mexicana porque las propuestas se han individualizado, porque hay un desencanto colectivo hacia el gobierno de Vicente Fox (que en teoría iba a ser el gobierno del cambio) y porque los partidos políticos parecen todo menos partidos.

¿Qué se puede esperar de un partido que pierde gente, que recibe personas de otros partidos o que vive de las alianzas? ¿No se supone que un partido existe porque representa una postura ideológica irreconciliable con las del resto del espectro político de la nación?

¿No se supone que cada partido tiene su propio proyecto y que ese proyecto, que nadie más puede compartir, es su razón de ser?

¿Entonces por qué vemos todo el tiempo que la gente va y biene de un partido a otro y que los enemigos se alían sólo para obtener dinero y poder? ¿Cómo podemos siquiera suponer que la respuesta para nuestro negro futuro está en nuestro negrísimo pasado?

Alvaro Cueva
(v.pág.18 del periódico Público del 23 de enero de 2005).


Ser mexicano, sobre todo mexicano pensante y comprometido con el país, es oficio que duele. Posición que invita al ostracismo, al rechazo automático en una sociedad regida por improvisados, por adictos a la mercadotecnia e ignorantes de la política. Gobernantes que se avergüenzan de sus fronteras, que buscan cual hetaira las caricias y aprobación de un mal vecino, soberbio e inescrupuloso.

La verdadera democracia va más allá del voto, éste simple y sencillamente debe ser la aprobación final a la capacidad de un proyecto de gobierno con una persona visible a la cabeza. Por desgracia esto no sucedió en México y los partidos políticos no supieron responder a la necesidad y el momento que la patria vivía.

Necesitamos de un gobierno efectivo, de hombres sensatos con sueldos acordes a nuestra realidad. ¡Cuánta razón tenía el sapiente licenciado Vidriera al pronunciar su inmortal frase!: "...Oh, Corte, que alargas las esperanzas de los atrevidos pretendientes y acortas las de los virtuosos encogidos, sustentas abundantemente a los truhanes desvergonzados y matas de hambre a los discretos vergonzosos!".

Manuel Hernández Gómez
(v.pág.4-A de El Informador del 22 de enero de 2005).


A los diputados de esta legislatura [local] les falta autodisciplina, rigor, mayor exigencia con ellos mismos, primero, para hacer un trabajo profesional acorde con las necesidades de los jaliscienses en materia legislativa y, segundo, para que desquiten lo que ganan.

Con eso de que tienen asesores y un ejército de gente que sí sabe, se despreocupan y, pues, yo creo que no se trata de eso. Los jaliscienses merecemos legisladores más entregados a su trabajo, más disciplinados, más trabajadores, hasta podría decir que más inteligentes.

Por supuesto -y esta acotación es necesaria- hay honrosas excepciones; ojalá, en un ejercicio reflexivo y de autocrítica no sólo reconozcan sus carencias y deficiencias para desempeñar su trabajo como diputados sino que hagan algo para superarlas.

Es increíble que el mismísimo poder legislativo quebrante la ley por desesperación, por ignorancia, por negligencia e incluso con conocimiento de causa, eso no es posible.

Laura Castro Golarte
(v.pág.5-A de El Informador del 22 de enero de 2005).


Es una lástima que estos gobernantes sin escrúpulos no entiendan que la función principal del Estado es garantizar la paz y el orden público, la vida y los bienes de los ciudadanos.

Alfonso Partida Caballero
(v.pág.4 "correo" del periódico Público del 21 de enero de 2005).


Quizá López Obrador sea culpable del mismo populismo que Fox. Si bien todavía no está en campaña formal, su proyecto político ofrece un paraíso que sólo requiere la elección de un gobernante honesto como él. Para alcanzar la prosperidad lo único que México tiene que hacer es abandonar la economía de mercado -el "neoliberalismo"- y expulsar al PAN de Los Pinos. Pero no culpemos a Andrés Manuel, ya que sólo está aplicando una fórmula patentada por el candidato Fox.

El presidente Fox dijo este 17 de enero en Querétaro: 'Ustedes y nosotros sabemos que la única receta al crecimiento económico, la única receta al mejoramiento del ingreso, es el trabajo'. Y sin duda tiene razón. Esto es algo que deberían saber los políticos de nuestro país. Pero todos, sin excepción. De hecho, la lección habría sido pertinente para el propio Fox, que en el 2000 recorrió el país haciendo promesas imposibles de cumplir.

Sergio Sarmiento
(v.periódico a.m. del 20 de enero de 2005).


Quienes resulten electos en julio de 2006, cualquiera que sea el partido, van a recibir el país en condiciones precarias, agravadas y con una población de 106 millones agraviada por la decepción y, por consiguiente, proclive a la renuncia democrática y hasta la violencia. Quienes resulten electos ya figuran en la nómina oficial y deben propiciarse las condiciones de recepción de poder estable para gobernar sin tropiezos y peligros.

Son tantos los nombres de aspirantes mencionados para suceder en los diversos niveles, como la irreflexión acerca de la responsabilidad a que se enfrentarán al conseguir el poder ante la necesidad impostergable de allegar bienestar a la población. Las aspiraciones deambulan entre lo ridículo y la ambición.

De esa forma los electores están sujetos a elegir individuos propuestos por partidos carentes de credibilidad, donde las luchas internas han prostituido principios de doctrina y debilitado la unidad. Aun con los lesivos adelantos de fechas y acontecimientos, el trabajo deberá encauzarse por consenso a base de trabajo y capacidad demostrados en el ejercicio público. Aunque hasta ahora no hay quien se salve de acusaciones descalificadoras.

Debilidad, que no democracia, plantea el escenario político, encabezado por la aspiración presidencial y por decantación a gobernadores, diputados federales y estatales, presidentes municipales, regidores, de los que deriven secretarios, jefes, asesores y demás personas incrustables en la nómina oficial de gasto corriente, insuficiente para crear infraestructura indebidamente relegada durante los últimos años. La posibilidad de romper el círculo es aniquilar el cínico concepto de que vivir fuera del presupuesto es vivir en el error.

Carlos Cortés Vázquez, consultor en comunicación
(v.pág.5-A de El Informador del 18 de enero de 2005).


Un principio básico de la democracia es tolerar la crítica, tanto dentro de sus organismos como entre sus poderes o de los medios llamados también, en el siglo pasado, como el cuarto poder. Cuando este principio se ve sofocado, hay que tomar nota, pues todo podría parecer que estamos frente a un individuo que cree que sólo sus chicharrones truenan.

Peor aún cuando se ha caído en una paranoia asfixiante, donde ese mismo individuo cree que todo lo que haga (para bien o para mal), será cuestionado por "sus adversarios" o aquellos enemigos de clase o peor aún por el o los innombrables. Cuando este criterio se aplica también en las buenas, (porque en las malas es obvio que los que tienen la culpa son los otros), es señal de que la enfermedad ha avanzado, como decían de la ciencia en una zarzuela, "que es una barbaridad".

Martín Casillas de Alba
(v.pág.5-A de El Informador del 18 de enero de 2005).


No se puede creer que personas con un perfil tan bajo, con limitadísima capacidad intelectual y formación política, se atrevan siquiera a soñar con un cargo de semejante responsabilidad para el que es probable sobren dedos de una mano (de los mexicanos capaces de ocupar la silla).

Pero como escribiera el filósofo José Ingenieros: "...Por eso la mediocridad es moralmente peligrosa y su conjunto es nocivo en ciertos momentos de la historia: cuando reina el clima de la mediocridad. Epocas hay en que el equilibrio social se rompe en su favor. El ambiente tornase refractario y todo afán de perfección; los ideales se agotan y la dignidad se ausenta; los hombres acomodaticios tienen su primavera florida. Los estados conviértense en mediocracias; la falta de aspiraciones que mantenga alto el nivel de moral y de cultura, ahonda la ciénaga constantemente". Cualquier parecido con la era foxiana es pura y mera coincidencia.

Y precisamente por esta misma razón es que el destape de tan campirano candidato resulta tragicómico: trágico por cuanto duele ver el nivel político nacional en que nos encontramos; cómico por que el hombre acaso tiene su máxima capacidad para alguna presidencia municipal (Ciudad Guzmán, por ejemplo) pero jamás en la silla presidencial ¡Dios nos libre de semejante desatino! (con uno basta y sobra). ¿No habrá entre los clérigos que cuentan con la amistad de este pretenso prócer nacional, alguno que por amor a sus ovejas (y al país) le lea la advertencia de San Pablo que dice: "...Cada cual que está entre vosotros, que no tenga más alto concepto de sí que el que debe tener, sino que piense de sí con cordura ...No seáis sabios en vuestra propia opinión" (Rom 12:3,16). Esperamos todos que el país se salve, sí, pero de semejantes candidatos.

Manuel Hernández Gómez
(v.pág.4-A del periódico El Informador del 15 de enero de 2005).


En el transcurso de los últimos 18 meses ha crecido significativamente el tono de las críticas y quejumbrosas advertencias entre la mayoría de los analistas y comentaristas del ámbito político mexicano. Insisten, interminablemente, que la vida pública está hecha un desgarriate; que sus escándalos son tremendos espectáculos sin vergüenza; que tales secretarios de estado, en cuanto llegaron a servir, más bien se sirvieron echar andar las maquinarias de su candidatura siguiente; que tal por cual munícipe, diputado, oficial o delegado nomás escudriña su siguiente escalón; que escasea el funcionario que se dedica a su trabajo y además sea capaz de hacerlo; que las trifulcas sobre las reformas, los desafueros, las acusaciones y los presupuestos son cortina de humo distrayendo las verdaderas escenas que acontecen tras bambalinas (de las cuales mejor no hablar); que todo es como el juego de las sillas musicales, donde el objetivo está en adueñarse de algún puesto cuando la melodía encuentre su pausado silencio (y que los demás se queden parados y alborotados). Dicen pues, que la vida pública mexicana en pocas palabras está pasando por sus peores momentos.

Otros, sin embargo, aseguran que la única diferencia entre éstos y otros tiempos ya pasados y caducados es que la vida pública ahora es eso, 'pública' y que anteriormente no se divulgaba tan generosamente lo que siempre ha ocurrido entre la clase política. La novedad, dicen sin perturbarse, no es que en el fondo hayan cambiado las cosas, sino que ahora los actores políticos sí tienen al público como público.

Quizás las dos posturas sean ambas 'verdades a medias' que juntas se complementan y revelan lo que es, en lo profundo, la naturaleza humana de los engreídos en el poder. Nada nuevo bajo el sol.

Norberto Alvarez Romo, promotor de desarrollo sustentable
(v.pág.5-A del periódico El Informador del 15 de enero de 2005).


En la historia del PRI hay evidencia que respalda uno de los lemas de los priistas: "Primero ganan, luego se pelean" ( a diferencia de los perredistas, a quienes les gusta lo contrario: "Primero se pelean, aunque pierdan").

Guillermo Valdés Castellanos
(v.pág.24 del periódico Público del 14 de enero de 2005).


Los políticos normalmente tienen malos pronósticos para sus oponentes, no para ellos mismos. A un político lo que le importa son las reacciones a sus declaraciones, no la veracidad de las mismas. Debemos tener cuidado con los vaticinios que hacen los políticos para año nuevo, son simplemente propaganda electoral.

Profecías 2005

En política continuarán los pleitos de comadres y compadres. No habrá acuerdos importantes en un año de precampañas. El PRD seguirá jugando el papel de víctima. El PAN seguirá insistiendo en que son los niños buenos de la película, condenando a sus detractores y culpando a los demonios del pasado de sus incapacidades. El PRI insistirá en promover una imagen intermedia entre fundamentalismos de izquierda y derecha, y tratará de convencer que los priistas no son más corruptos que los demás, o que al menos, son más capaces.

La seguridad pública, lamentablemente, seguirá siendo zona de desastre. No hay control ni en las prisiones de máxima seguridad. Las autoridades seguirán preocupadas por encontrar chivos expiatorios materiales, intelectuales o históricos en lugar de actuar. Los responsables de la seguridad declaran ser irresponsables de lo que sucede en sus ámbitos y nos seguirán dando muestras de ello. Creo que la seguridad es el gran riesgo para México este año. A propósito, la seguridad es la principal función de un gobierno.

Víctor Manuel González Romero, profesor investigador y ex rector general, U. de G.
(v.pág.4-A de El Informador del 12 de enero de 2005).


En estas condiciones de precariedad política se advierte el vacío de poder no mitigado por declaraciones altisonantes y promesas banales sin llegar al rescate de la confianza que, a cambio, sí profundizan la decepción, sustento del descontento promotor de la inseguridad por carencia de garantías.

El ejercicio elemental de reflexión sobre los eventos publicados y la participación de los actores políticos exhiben protagonismo irresponsable, ausente de recato y abuso de recursos públicos para lucro electoral. El campo de batalla son los medios de comunicación y el rehén es la sociedad cansada de esperar...

El clima de insalubridad política contamina por igual acontecimientos y actores protagónicos: el rumor de fuga de Rafael Caro Quintero compite en espacios con el ex gobernador y secretario de Medio Ambiente y Recursos Naturales, Alberto Cárdenas, en su búsqueda por la postulación del Partido Acción Nacional a la Presidencia de la República, reclamando a Pemex por la contaminación del río Coatzacoalcos o visitando a su esposa en el recinto legislativo donde es diputada; la devolución de bonos a los secretarios de gobierno o el reclamo de gastos excesivos en la Secretaría de Educación Jalisco a cargo de Guillermo Martínez Mora. Finalmente, no pasa del escándalo populista.

La ruptura con el pasado abrió la expectativa de lucha entre mediocridades donde domina el escenario la declaración ensordecedora, sin encuentro con la voz de la sensatez conducente al enfrentamiento de los problemas reales que aquejan a millones de familias en la miseria, en espera de oportunidades y el cumplimiento de promesas.

Carlos Cortés Vázquez, consultor en comunicación
(v.pág.5-A de El Informador del 11 de enero de 2005).


Es fácil entender cómo es que el poder corrompe, porque generalmente cae en manos de quien no se lo merece. Y es que uno vota por el fulano, pero poco se sabe de sus amigos y, mucho peor, de sus recomendados, ¿o es que alguien conoce de algún gobierno sin recomendados? Esos inútiles graciosos cuya palanca es siempre más pudiente que el mérito propio. Encargo mata currículo, eso lo sabe cualquiera que haya trabajado en el gobierno.

Toñimáximus
(v.pág.2 del periódico Público del 9 de enero de 2005).


Homenaje sin par, quizá por involuntario, es el que han rendido los políticos en la semana inicial del año al fallecido maestro Manuel Rodríguez Lapuente al demostrar una vez más lo valioso del tino analítico con el cual disecaba la escena política cotidiana. "Estos políticos de ahora -decía- muy formaditos y con postgrados no sirven sino para figurar. No suceda una dificultad y no saben qué hacer; se hacen bolas, declaran sin ton ni son y acaban peor de cuando empezaron". Sin duda la joya de la semana fue aquella de "lástima que se filtrara la información". Mal político quien hace el ridículo con sus propios dichos.

Miguel Bazdresch Parada
(v.pág.15 del periódico Público del 9 de enero de 2005).


Durante los últimos cuatro años los actores políticos han previsto más su futuro particular que el de la nación, provocando un rezago expuesto en la miseria y la exasperación, de manifiesto en actos de violencia, hasta hoy enmarcados sólo en delitos del fuero común, sin considerar la incapacidad del ejercicio preventivo de seguridad que debe procurar la autoridad. Por menos que actos como los que se vivieron durante los últimos meses se ha depuesto a gobiernos y en nuestro caso sería lo peor que podría ocurrir a 18 meses de la próxima oportunidad democrática.

Las diferencias de los actores políticos, exhibidas sin recato por ambiciones con miras a posiciones ponen en riesgo la estabilidad nacional.

Carlos Cortés Vázquez, consultor en comunicación
(v.pág.5-A de El Informador del 4 de enero de 2005).


La agenda del 2005 ya entró en acción y por ahí están las fechas límites para registrar la candidatura como metas a las que hay que llegar. Cada partido tiene su propia estrategia, unos más, otros menos democrática, otros al estilo dedazo y los verdes anexándose a lo que haya en el mercado con tal de no perder su registro y los ingresos que integran a su negocio familiar directamente de nuestra bolsa de impuestos para satisfacer el deseo de la multipluralidad política, como si tuviésemos excesos para que unos más pillos que otros se burlen de esta noble Constitución y hagan de sus leyes y de sus principios lo que mejor les venga en gana, incluyendo, de pasada, la venta de influencias.

La agenda de los video escándalos también se cumplirá y mientras el trío de pillos rehuyen el careo bien entambados seguirán en proceso hasta que veamos quién fue primero si el huevo de la ambición del empresario o la gallina de la adicción al juego o la ambición del operador político mientras AMLO niega todo lazo con esas corruptelas e insiste que en todo es un "compló" para acabar con su popularidad y con sus planes para transformar a este país en algo como lo que se merecen las clases populares.

Martín Casillas de Alba
(v.pág.5-A de El Informador del 4 de enero de 2005).


Será necesario analizar entre la "grilla"que representen los partidos con vistas a los próximos comicios presidenciales. Se espera como algo orientador para la ciudadanía, que los participantes principales en la contienda política, demuestren con sus esfuerzos, no cuál es más ducho en el manejo de artimañas, violencias, movimiento de masas y retórica hueca, sino cuál representa la mejor opción en beneficio del pueblo, que tan a disgusto está con promesas incumplidas, manejos sucios en lo económico y con la incapacidad, la corrupción y los errores garrafales que han obligado a hacer movimientos de personal dirigente en diversos organismos, incluso de gobierno, militares y policiacos.

Editorial
(v.pág.4-A del periódico El Informador del 1o.de enero de 2005).


Según los chinos, el 2004 fue el año del mono. En la astrología política mexicana, nuestra clase política se comportó exactamente como eso, como chimpancés y gorilas enjaulados, que no hacían otra cosa más que payasadas y pelear. Y todos tuvimos la oportunidad de observar horrorizados el espectáculo de la fauna política.

Ana María Salazar, académica del ITAM
(v.pág.4-A de El Informador del 1o.de enero de 2005).


Uno de los cambios que representan mayor urgencia para la vida del congreso, es el de su fortalecimiento ante los partidos políticos, que a su vez están sometidos por una dirigencia que no comulga con la democracia. Y uno se refiere, por supuesto, a todos los partidos políticos.

O sólo falta que Roberto Madrazo dijese lo contrario, cuando ahora en diciembre tramposamente llevó a la Cámara de Diputados a su hijo.

La antidemocracia que priva en los partidos ha hecho que en cada legislatura -la 59a. no es la excepción- haya por ahí levantando el dedo más de una docena de juniors de la política, que presumiblemente no han tenido mayores méritos que apellidarse igual que el padre que los recomendó.

Vicente Bello en su columna "Tren Parlamentario"
(v.pág.6-A del periódico El Informador del 1o.de enero de 2005).


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