Un amigo... | Un verdadero amigo... |
te manda mails que te hacen reflexionar y meditar. | te manda mails de poca madre, con chistes colorados y fotos cachondas. |
piensa que los problemas por los que te quejas son recientes. | te dice: "¡Deja de quejarte de las mismas pendejadas y haz algo al respecto de una puta vez!" |
nunca te ha visto llorar. | lleva los hombros empapados de tus lágrimas... y sabe que eres un pinche marica. |
desconoce los nombres de tus padres. | guarda sus números telefónicos en una agenda... para cuando te metan al bote. |
lleva una botella de vino a tu casa cuando hay fiesta. | llega a tu casa bien pedo, se traga todo y se ríe de los invitados. |
odia aquellas llamadas nocturnas que le haces después de que se ha dormido. | cuestiona tu tardanza en llamarle, y te dice que no estés chingando, y que te olvides de esa pinche vieja. |
busca hablar de tus problemas. | te ayuda a buscarle solución a tus problemas... mientras se toman unas chelas. |
actúa como un invitado cuando te visita. | abre tu refrigerador y se sirve él mismo, y te la hace de pedo si falta algo. |
piensa que se acaba la amistad cuando hay una discusión. | reconoce que no es una amistad hasta que no hayan discutido y se hayan agarrado a madrazos. |
espera que estés siempre a su lado. | espera siempre estar a tu lado. |
nunca te dirá PENDEJO. | te lo repetirá cada vez que sea necesario. |
te dirá: pásale este mensaje a todas las personas que verdaderamente aprecies y quieras, y todos tus deseos se harán realidad. | te dirá en su próximo e-mail: "déjate de escribir mamadas y mándame algo bueno". |
Un perro fue visto en medio de una transitada avenida cuidando a su amigo que fue atropellado por un carro. Usando la pata, el perro trataba de despertar a su amigo que ya estaba muerto.
El perro trataba de empujar a su amigo fuera de la carretera. Cuando la gente trataba de ayudar, les ladraba y ahuyentaba al que se acercara a él.
A pesar del tráfico pesado, el perro no abandonaba a su amigo.
Los testigos quedaron impresionados de cómo un perro ordinario puede ser ¡tan fiel!
Todavía existen los amigos.
En situaciones como ésta, es cuando sabemos quién es un verdadero amigo.
(Recibido por e-mail el 3 de diciembre de 2008).
Uno conoce a sus verdaderos amigos sólo cuando está envuelto en un escándalo.
Elizabeth Taylor
La amistad es más difícil y más rara que el amor. Por eso, hay que salvarla como sea.
Alberto Moravia
Hay "amigos" que solamente aparecen cuando están mal, tienen problemas con su pareja, necesitan dinero, etc. Por supuesto que como amigos queremos ayudarlos y lo haremos, pero también queremos compartir sus buenos momentos. Escucharemos sus cuitas, problemas con el jefe, hijos, marido, pleitos de pareja por supuesto, pero también es agradable que nos llamen cuando están bien y más agradable aún: que nos escuchen cuando somos nosotros quienes tenemos problemas. Sin embargo, cuando es nuestro turno, la cosa cambia. No tienen disposición para escucharnos, acompañarnos o ayudarnos.
Hay un libro de Robert Fulham que se llama Todo lo que tenía que aprender lo aprendí en el jardín de niños (All I Really Need To Know I Learned In Kindergarten). Y es cierto. Esas lecciones básicas las conocemos y sabemos desde pequeños. Además tenemos comprobado su buen funcionamiento. No entiendo por qué con el paso del tiempo los ignoramos o pensamos que debería ser diferente.
En cualquier juego que jugamos en el jardín de niños, sabíamos que había que tomar turnos. Algunas veces teníamos que sostener la cuerda para que otros saltaran y otras veces éramos nosotros los que saltábamos. Si por alguna razón esto no se cumplía. Hacíamos oír nuestros derechos con dos palabras: "Me toca". Si estos derechos a intercambiar el papel en el juego no eran respetados, entonces sentenciábamos el hecho con otras tres poderosas palabras: "No se vale". Desde luego que si esto se repite muchas veces, pues cambiaremos de compañeros de juego. Pocas cosas más aburridas que sostener siempre la cuerda y no tener la posibilidad de saltar. Nadie en su sano juicio aceptaría esto. Te buscas otros amigos para saltar a la cuerda y sansecabó.
Teniendo esta implacable lógica aprendida desde la infancia en mente, no entiendo por qué ignoramos este sabio aprendizaje y pensamos que una relación desbalanceada puede funcionar. El desbalance cansa. Se puede aguantar por un rato, pero la verdad es que desgasta al igual que se desgasta un zapato cuando pisamos chueco y es necesario cambiar de tapas.
Los amores medio correspondidos y las amistades medio correspondidas no funcionan.
Fernanda de la Torre
(v.periódico Milenio Jalisco en línea del 12 de febrero de 2012).
Un hombre, su caballo y su perro iban por una carretera. Cuando pasaban cerca de un árbol enorme cayó un rayo y los tres murieron fulminados. Pero el hombre no se dio cuenta de que ya había abandonado este mundo, y prosiguió su camino con sus dos animales (a veces los muertos andan un cierto tiempo antes de ser conscientes de su nueva condición...).
La carretera era muy larga y colina arriba el sol era muy intenso; ellos estaban sudados y sedientos.
En una curva del camino vieron un magnífico portal de mármol, que conducía a una plaza pavimentada con adoquines de oro. El caminante se dirigió al hombre que custodiaba la entrada y entabló con él, el siguiente diálogo:
-Buenos días.
-Buenos días- respondió el guardián.
-¿Cómo se llama este lugar tan bonito?
-Esto es el cielo.
-Qué bien que hayamos llegado al Cielo, porque estamos sedientos!
-Usted puede entrar y beber tanta agua como quiera. Y el guardián señaló la fuente.
-Pero mi caballo y mi perro también tienen sed...
-Lo siento mucho -dijo el guardián-, pero aquí no se permite la entrada a los animales.
El hombre se levantó con gran disgusto, puesto que tenía muchísima sed, pero no pensaba beber solo. Dio las gracias al guardián y siguió adelante. Después de caminar un buen rato cuesta arriba, ya exhaustos los tres, llegaron a otro sitio, cuya entrada estaba marcada por una puerta vieja que daba a un camino de tierra rodeado de árboles...
A la sombra de uno de los árboles había un hombre echado, con la cabeza cubierta por un sombrero. Posiblemente dormía.
-Buenos días- dijo el caminante.
El hombre respondió con un gesto de la cabeza.
-Tenemos mucha sed, mi caballo, mi perro y yo...
-Hay una fuente entre aquellas rocas- dijo el hombre, indicando el lugar. -Podéis beber toda el agua como queráis.
El hombre, el caballo y el perro fueron a la fuente y calmaron su sed. El caminante volvió atrás para dar gracias al hombre.
-Podéis volver siempre que queráis- le respondió éste.
-A propósito ¿cómo se llama este lugar?- preguntó el hombre.
-CIELO.
-¿El Cielo? ¡Pero si el guardián del portal de mármol me ha dicho que aquello era el Cielo!
-Aquello no era el Cielo. Era el Infierno- contestó el guardián.
El caminante quedó perplejo. -¡Deberíais prohibir que utilicen vuestro nombre! ¡Esta información falsa debe provocar grandes confusiones!- advirtió el caminante.
-De ninguna manera!- increpó el hombre. -En realidad, nos hacen un gran favor, porque allí se quedan todos los que son capaces de abandonar a sus mejores amigos...
Paulo Coelho
(recibido por e-mail el 5 de septiembre de 2012).
El único amigo absolutamente abnegado que el hombre puede tener en este mundo egoísta, el cual nunca lo abandona o se le puede comprobar ser desagradecido o traicionero, es el perro. Éste besa la mano del que no tiene comida para ofrecer, lame las heridas y contusiones que entran en contacto con las asperezas del mundo. Cuando todos los otros amigos le abandonan, él sigue.
George G. Vest
Jean Fernandes, de 11 años de edad, salvó a su perro de ser atropellado por los automóviles en una calle bastante transitada de la ciudad de Itajaí; el perro atravesaba la calle cuando fue alcanzado por un automóvil, de inmediato Jean reaccionó y sin importarle nada, corrió esquivando otros vehículos y recogió a su amada mascota.
Orgullosa de tener un héroe en la casa, Rubia Liliana Rose, madre de Jean, informó que a su hijo le encantan los animales y rescata perros abandonados o maltratados por sus dueños.
La fotógrafa que capturó este heroico momento fue Rafaela Martins, quien quedó impactada por la valentía del muchacho y el amor entre perro y niño.
(V.SDPnoticias del 11 de diciembre de 2013).
Dicen que el amor más puro y sin ataduras es el que le tenemos o nos tienen los amigos. Los amigos son esos personajes en la vida que te enseñan más que nadie de lealtad y de perdón. Para mí, son relaciones humanas con las que he experimentado la verdadera convivencia a largo plazo, sin necesariamente hacerse desde la cotidianidad.
El amigo, a diferencia de la pareja, no sabe qué desayunamos, no tiene la menor idea de qué cenamos, ni le interesa qué café tomamos. El amigo de vez en cuando desayuna, de vez en cuando cena y de vez en cuando toma el café con nosotros.
Es una especie de porrista profesional y crítico de nuestra vida o de nuestras decisiones. Cuando es porrista, lo hace cariñosamente y muchas veces públicamente; cuando es crítico, busca el espacio y lo hace de manera cariñosa pero en este caso desde la intimidad.
El amigo no nos dice qué hacer, no nos alecciona como lo hacen nuestros padres sobre el consumo del tabaco o sobre posibles riesgos. El amigo cuida nuestro corazón con respeto, con espacio, con interacciones cuidadosas y puntuales.
Quizá debería uno de llevarse algunas prácticas de la amistad a la pareja, pero ese es otro asunto. Los buenos, buenos, buenos amigos no nos extrañan en la vida que sucede día a día, pero están alertas de ella, son conscientes de la salud de los nuestros y al margen se hacen presentes.
Nos visitan hasta la recámara del hospital a nosotros, pero se quedan fuera si es algún familiar. Nos llevan comida, cuidan de nuestros hijos mientras nosotros trabajamos y graban al nene en particular mientras uno llora en el festival del Día de la Madre. Dejan, en resumen, que la vida vaya pasando pero nos prenden veladoras a la distancia por aquel milagrito que quisiéramos se nos cumpliera y llevan flores cuando no se logra.
Es extraño que uno teniendo buenos amigos no escoja trabajar y soñar con ellos con un mundo distinto. Es bellísimo cuando se conjuntan sueños de infancia y de adolescencia que vemos materializándose conforme pasa la vida. Escogemos trabajar con ellos por encima de cualquier profesional, ya lo decía Welles. Por los amigos y con ellos, hacemos posible desde la complicidad y cariño que la existencia cobre otro sentido.
Argelia García F.
El ser humano es incapaz de vivir sin interacción social. De ella nacen la familia, las relaciones de pareja y los amigos. Por eso saber mantener vínculos saludables es necesario para conseguir la armonía interior. Así que aquí te compartimos cuál es el principal error, según un psicólogo, que se comete en la amistad.
Los amigos son una parte fundamental en la vida de las personas y la ciencia ha demostrado que las amistades no solo aportan apoyo emocional, sino que también son clave para la salud física y mental. A lo largo de los años, diferentes investigaciones han estudiado los efectos positivos de las amistades en nuestro bienestar y han demostrado que tener una red de amigos cercanos puede prolongar la vida, reducir los niveles de estrés y mejorar la calidad de vida en general.
El psicólogo Rafael Santandreu, autor de varios libros sobre bienestar emocional, afirma con orgullo que tiene "los mejores amigos del mundo" y revela que una de las claves para construir esas amistades está en un truco simple, pero poderoso: pedir a cada amigo solo aquello que puede ofrecer.
El psicólogo explica que las personas suelen tener diferentes fortalezas y no podemos esperar que una sola amistad cubra todas nuestras necesidades emocionales. Por ejemplo, un amigo que está dispuesto a ir a tu casa a las 3 de la mañana para consolarte tal vez no se acuerde de felicitarte en tu cumpleaños y viceversa. "Cada uno de nosotros tenemos cosas buenas y no tan buenas", afirma.
El error, según Rafael Santandreu, es pedir todo a una sola persona y decepcionarnos cuando no cumple con todas nuestras expectativas. Para tener las mejores amistades, debemos apreciar lo que cada amigo puede aportar y no centrarnos en lo que les falta.
Este enfoque de la amistad subraya que la diversidad en nuestras relaciones nos enriquece y complementa, permitiéndonos tener todo lo que necesitamos a través de distintas personas.
La clave para mantener amistades fuertes y significativas radica en la aceptación y en saber reconocer las fortalezas individuales de cada persona. Los amigos no solo son compañeros de vida que nos hacen reír y nos acompañan en las aventuras, sino que también son esenciales para nuestro bienestar físico y emocional. Al dejar de lado las expectativas irreales y valorar lo que nuestros amigos pueden ofrecer, podemos crear una red de apoyo que nos acompañe en los momentos más importantes de nuestra vida.
(V.periódico El Informador en línea del 26 de octubre de 2024).